Anexo:Tesoros litúrgicos

Europa occidental

Los tesoros litúrgicos en los distintos países de Europa Occidental comparten generalmente el mismo tipo de objetos, vinculados a los ritos y tradiciones de la cristiandad latina.

Austria

• Tesoro de la catedral de Salzburgo.
• Tesoro de la catedral de Viena (en la misma ciudad, la Schatzkammer o cámara del tesoro imperial, que incluye tesoros seculares y eclesiásticos, en el Hofburg).

República Checa

• Tesoro de San Vito de la Catedral de Praga, con más de 400 piezas, entre las que destecan el brazo de San Vito (obtenido por San Wenceslao en el año 929 y en torno al cual se fundó la catedral), la espada de San Wenceslao o la cruz de la coronación de Bohemia.

El tesoro de San Vito en una fotografía de 1903.

Reino Unido

• Tesoro de la catedral de Canterbury, que incluye un salterio de santo Tomás Becket recientemente descubierto.​
• Tesoro de la catedral de Lincoln. Fue el primer tesoro de una catedral británica abierto al público.​
• Tesoro de la Catedral de Durham, que se remonta al del monasterio de Lindisfarne, el primero en ser saqueado por los vikingos (año 793).​

Ataúd de san Cuthberto, del tesoro de la catedral de Durham. Contenía notables piezas de arte anglosajón, como la cruz pectoral de San Cuthberto (una cruz), y el Evangelio de San Cuthbert, que se conserva en el Museo Británico.

Francia

Grabado de Dom Félibien (1706) que muestra el contenido de uno de los armarios del tesoro de St-Denis. Entre otras piezas, están los aguamaniles de Leonor, de sardónice y de los pájaros, el águila y la cruz de Suger o la corona de Carlomagno.

En Francia, los objetos anteriores a 1905 pertenecen desde entonces al Estado en función de la Ley francesa de separación de la Iglesia y el Estado de 1905, pero pueden ser utilizados por el clero para las necesidades del culto. Habría 270 tesoros de orfebrería en Francia.​

• Tesoro de la catedral de Notre Dame (París), al que se incorporó el de la Sainte-Chapelle, con la Sainte Couronne (reliquia de la corona de espinas de Cristo).
• Tesoro de San Dionisio en la basílica de Saint-Denis, que tuvo su apogeo en el siglo XII bajo el abad Suger, incluyendo además de las piezas propiamente litúrgicas, las regalia (símbolos del poder de los reyes de Francia utilizados en su coronación -sacre-). En 1634 se realizó un inventario que contabilizó 445 grupos de objetos. La Revolución Francesa significó la dispersión intencionada del tesoro, muchas de cuyas piezas desaparecieron o se vendieron. Solo un centenar de piezas se preservó, en 1791 en el gabinete de medallas de la Biblioteca Nacional de Francia y en 1793 en el museo del Louvre. En la época napoleónica y la Restauración se intentó reconstruir el tesoro, restituyendo seis cálices y cinco patenas de finales del siglo XVI y comienzos del XVII, aunque varios de ellos fueron robados en 1882.​
• Tesoro de la catedral de Reims, en el palacio de Tau.
• Tesoro de Santa Fe de Conques, con piezas altomedievales entre las que destacan los relicarios, especialmente la Majestad de Santa Fe.​
• Tesoro de Saint-Jean-du-Doigt (Finistère).
• Tesoro de la iglesia Saint-Pierre de Prades.​

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  Copa de los Ptolomeos, tesoro de Saint Denis.
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  Tesoro de Saint-Jean-du-Doigt.
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  Relicario de la Sainte Couronne en el tesoro de la catedral de París.
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  Santa Fe de Conques.

Alemania

• Tesoro de la catedral de Aquisgrán (catedral de Aquisgrán), con el busto de Carlomagno, la cruz de Lotario, la pala d'oro,​ el ambón de Enrique II, el candelabro de Barbarroja o el evangelario de Liuthar, entre otras piezas.
• Tesoro de la catedral de Bamberg, en su museo diocesano.
• Tesoro de la catedral de Brunswick, posteriormente llamado tesoro de los güelfos. Pasó a la capilla de la corte de Hannover en 1671 y en su mayor parte (82 piezas) fue vendido en 1928 por el duque de Brunswik a un consorcio de tratantes de arte judíos por 7,5 de marcos. Estos a su vendieron 42 piezas en 1935 a agentes de Hermann Goering por 4,25 millones de marcos. Las restantes habían sido previamente vendidas en Estados Unidos (9 de ellas al Museo de Arte de Cleveland). Después de la Segunda Guerra Mundial los herederos de los afectados intentaron que se les restituyeran las piezas, pero dos procedimientos judiciales (en Alemania y en los Estados Unidos) no lo han permitido. Actualmente las compradas por los nazis se exhiben en el Museo Bode de Berlín.
• Tesoro de la catedral de Essen.
• Tesoro de la catedral de Halberstadt, con unas 600 piezas datables entre los siglos V y XVIII; destaca su colección textil y las obras de arte bizantino que fueron traídas del saqueo de Constantinopla durante la Cuarta Cruzada por el obispo Konrad von Krosigk (1205).
• Tesoro de la catedral de Hildesheim, en el Museo de la Catedral de Hildesheim.
• Tesoro de la catedral de Colonia, en el sótano abovedado del siglo XIII, al lado norte de la catedral. Como institución se remonta a la catedral carolingia del siglo IX, aunque conserva piezas de mayor antigüedad (del siglo IV).​
• Tesoro de la catedral de Maguncia, en el Museo Diocesano de Maguncia.
• Tesoro de la catedral de Osnabrück, en su museo diocesano.
• Tesoro de la catedral de Paderborn, en su museo arzobispal y diocesano (Erzbischöfliches Diözesanmuseum Paderborn).
• Tesoro de la catedral de Passau, en su museo catedralicio y diocesano (Domschatz und Diözesanmuseum Passau).
• Tesoro de la catedral de Espira en el museo histórico del Palatinado (Historisches Museum der Pfalz).
• Tesoro de la colegiata de San Servacio de Quedlinburg.
• Tesoro de la catedral de Ratisbona, en los museos diocesanos de Ratisbona (Kunstsammlungen des Bistums Regensburg).
• Tesoro de la catedral de Tréveris, con la reliquia de la Santa Túnica.
• Tesoro de la catedral de Wurzburgo.
• Tesoro de la Catedral de Xanten.
• Tesoro de la catedral de Bautzen.
• Tesoro de la catedral de Merseburg.
• Tesoro de la catedral de Minden.
• Tesoro de la catedral de Naumburgo, etc.

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  Busto de Carlomagno, en el tesoro de la catedral de Aquisgrán.
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  Tesoro de la catedral de Tréveris.
• 
  Broche borgoñón en esmalte ronde-bosse del tesoro de la catedral de Essen, una de las diez y seis raras piezas de joyería del siglo XIV que conserva.
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  Cruz del tesoro de los güelfos.

Italia

• Tesoro de la catedral de Bolzano, en el museo de la catedral, antigua casa del preboste. Destaca su colección de arte sacro barroco del Tirol.​
• Tesoro de la catedral de Bressanone, en su museo diocesano.​
• Tesoro de la catedral de Monza, con la corona de hierro de Lombardía, el Díptico de Estilicón, y varias pequeñas ampollas de Monza (Monza ampullae, cantimploras de peregrino en metal del siglo VI).
• Tesoro de la catedral de Troia, en el antiguo seminario episcopal. Entre otras piezas, conserva estatuas de plata del siglo XVII secolo, candelabros del XV, un tabernáculo del XVII, un pastorale del XVI, bronces dorados, paramentos sagrados, marfiles (datados entre los siglos XII y XVIII) y pergaminos miniados entre los que destacan tres rollos litúrgicos del Exultet (datados entre los siglos XII y XIII).​
• Tesoro de la catedral de Monreale, en el museo diocesano.
• Tesoro de la catedral de Palermo, con la corona de la emperatriz Constanza de Aragón (1179-1222).
• Tesoro de la basílica de San Marcos de Venecia, con piezas importantes del arte bizantino.​
• Tesoro de la basílica de San Pedro del Vaticano, con piezas distribuidas por otras iglesias de Roma. En la propia basílica se han musealizado desde 1909 dos salas, ampliadas en 1940 y 1975 (con la denominación Museo del Tesoro de la Basílica de San Pedro) donde se exhiben objetos litúrgicos.​
• Tesoro de la catedral de Nápoles, en la Capilla Real del Tesoro di San Gennaro.
• Tesoro de la catedral de Turín, con la reliquia de la Sábana Santa (en su propia capilla).

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  La Sábana Santa en su capilla de la catedral de Turín.
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  Relicario de San Genaro.
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  Corona votiva del emperador León VI, adaptada como base del Grotto de la Virgen. Tesoro de San Marcos de Venecia.

Países Bajos

• Tesoro de la Basílica de San Servacio (Maastricht).

Tesoro de la Basílica de San Servacio (Maastricht).

Bélgica

• Tesoro de la catedral de Lieja, con reliquias de San Lamberto, el relicario de Carlos el Temerario​ o el Marfil de las Tres Resurrecciones.

Tesoro de la catedral de Lieja.

Portugal

• Tesoro de la catedral de Braga, en la antigua Casa del Cabildo. Con piezas como un túmulo paleocristiano del siglo V o VI, un cofre de marfil del siglo XI, el cáliz y la patena de San Geraldo (siglo XI), la mitra y los guantes del arzobispo Gonçalo Pereira (siglo XIV), un órgano portátil del siglo XVII o los zapatos litúrgicos del arzobispo Rodrigo de Moura Teles (siglo XVIII).​

Cáliz de San Geraldo en el tesoro de la catedral de Braga.

España

Es destacable que, fuera de entornos eclesiásticos, se exhiben en museos seculares tesoros votivos localizados en excavaciones arqueológicas, destacadamente las coronas votivas visigodas (tesoro de Guarrazar, tesoro de Torredonjimeno) que en su época fueron donadas a iglesias.

En los museos diocesanos​ se han reunido obras de arte provenientes de monasterios e iglesias del territorio de cada una de las diócesis para asegurar su conservación, que en sus entornos originales suele estar comprometida.

En las catedrales españolas son especialmente importantes las colecciones de platería, destacando las custodias procesionales.​

Excediendo toda clasificación (dada su multifuncionalidad como palacio, panteón real, biblioteca, etc., además de su condición de basílica y monasterio), el más importante tesoro litúrgico de España fue el reunido por Felipe II para el Escorial ("relicario de relicarios", con más de siete mil piezas).​

Tesoros catedralicios

• Tesoro de la catedral de Oviedo, en la Cámara Santa, entre cuyas piezas están el Santo Sudario, la Cruz de la Victoria, la Cruz de los Ángeles, el Arca Santa y la Caja de las Ágatas. Además, ha musealizado ocho salas (Museo de la Iglesia de Oviedo), con tres notables dípticos (bizantino, románico y gótico) y otras piezas de escultura, orfebrería y textiles.​
• Tesoro de la catedral de Santiago de Compostela, una de cuyas partes se llama Torre del Tesoro.​ Está musealizado en varias salas, con todo tipo de objetos, entre los que destaca una colección de tapices de Rubens, David Teniers, José del Castillo y Goya.​
• Tesoro de la catedral de Mondoñedo, musealizado en el Museo Catedralicio y Diocesano de Mondoñedo, con una colección de orfebrería y textil entre la que destacan los zapatos episcopales bordados en sedas y oro (desde el siglo XVIII) y una arqueta eucarística hispano-filipina de carey y plata (siglo XVII), pintura y escultura.​
• Tesoro de la catedral de Lugo, que cuenta también con un museo diocesano.​
• Tesoro de la catedral de Orense, musealizado en el Museo Catedralicio de Orense, con piezas como el Misal Auriense​ (incunable de 1494) y el Tesoro de San Rosendo, procedente del monasterio de Celanova.​
• Tesoro de la catedral de Tuy, musealizado en la capilla de Santa Catalina como Museo Catedralicio de Tuy, entre cuyas piezas destacan dos cálices (llamados "de Coco" y "de los Evangelistas"), una custodia procesional del siglo XVII, una imagen la Virgen con el Niño (llamada "La Patrona") y el facistol del coro.​
• Tesoro de la catedral de León, musealizado en el Museo Catedralicio Diocesano de León en piezas desde la escalera capitular de Juan de Badajoz el Mozo, una notable colección de escultura románica y obras de Juan de Juni, Enrique de Arfe o Nicolás Francés. Entre las piezas más importantes destacan un armario mudéjar y un antifonario mozárabe.​
• Tesoro de la catedral de Astorga, musealizado en el Museo Catedralicio de Astorga, con el Relicario de la Vera Cruz, la Arqueta de San Genadio o el Arca del monasterio de Carrizo entre otras piezas.​
• Tesoro de la catedral de Zamora, musealizado en el Museo Catedralicio de Zamora, en el que, además de las piezas de orfebrería y pintura, destaca la colección de tapices.
• Tesoro de la catedral de Salamanca, musealizado en el Museo Catedralicio de Salamanca, con una importante colección de pintura y documentación medieval.
• Tesoro de la catedral de Palencia, musealizado en la antesala y sala capitular, con piezas como las andas de plata de San Antolín, los tapices flamencos donados por el obispo Fonseca a comienzos del siglo XVI y obras de Pedro Berruguete, El Greco, Felipe Bigarny y Alejo de Vahía, además de un retrato anamórfico de Carlos V atribuido con poca seguridad a Lucas Cranach el Viejo.​​
• Tesoro de la catedral de Valladolid, en el Museo Diocesano y Catedralicio de Valladolid.
• Tesoro de la catedral de Burgos, musealizado en el Museo Catedralicio de Burgos, con una importante colección de pintura flamenca e hispano-flamenca (Ambrosius Benson, retablo de las reliquias de Alonso de Sedano y el Maestro de los Balbases), cruces de los siglos XII y XIII, los tres relicarios de plata sobredorada de San Pedro, San Pablo y Santiago, el conjunto litúrgico de la Capilla de la Purificación o de los Condestables (un cáliz gótico de oro con engastes de perlas, piedras preciosas y esmaltes, portapaz con la Virgen sedente y el Niño, un altar portátil portugués en marfil del siglo XVI), tapices flamencos del siglo XVI o la custodia de Granda (1927).​
• Tesoro de las concatedrales de Soria y de Osma, musealizado como Museo Catedralicio y Diocesano de Osma.​ Se prevé la realización de un "Museo Diocesano-Catedralicio" en Soria.​
• Tesoro de la catedral de Segovia, musealizado en varias salas (capilla de Santa Catalina -con tapices, orfebrería del templo y las vestimentas del Infante don Pedro-, sala capitular, sala de pintura bajo el claustro, y sala de tapices y ornamentos litúrgicos).​ Es destacable que en la catedral se conserve el Sinodal de Aguilafuente, primer libro impreso en España (1472).
• Tesoro de la catedral de Ávila, musealizado en varias salas (la capilla del Cardenal -con una custodia de Juan de Arfe, seis crucificados de marfil, de los siglos XII al XVIII y otras esculturas y pinturas-, la sala capitular -con casullas pontificales, capas pluviales y dalmáticas-, la de la Pasión -con pinturas y esculturas-, la de cantorales -seis cantorales miniados del siglo XV, de Juan de Carrión - y las vitrinas del claustro -con cruces procesionales y obras de orfebrería entre las que destaca el cáliz de San Segundo, de 1320-).​
• Tesoro de la catedral de Toledo, con piezas como la Custodia de la Catedral de Toledo o la Biblia de San Luis.​ Es destacable que El Expolio, de El Greco, se mantenga en su lugar original, la sacristía mayor.
• Tesoro de la catedral de Sigüenza, musealizado en el Museo Diocesano de Sigüenza-Guadalajara (la diócesis cuenta también con la concatedral de Guadalajara).​
• Tesoro de la catedral de Cuenca, con el icono-relicario de los déspotas de Epiro​ y obras de El Greco y Juan de Borgoña.​ Se musealizó por Gustavo Torner en el Palacio Episcopal de Cuenca, con más de doscientas piezas.​
• Tesoro de la catedral de Alcalá de Henares (antes Magistral), musealizado en las estancias del claustro, con el portapaz y el cáliz del Cardenal Cisneros, un tríptico del Maestro de la Santa Sangre, el sepulcro del obispo Alfonso Carrillo de Acuña y restos de la escalera de mármol de Alonso de Covarrubias.​
• Tesoro de las catedrales de Plasencia, musealizado en la catedral vieja, con obras de pintura y escultura (Luis de Morales, Pompeyo Leoni), vestiduras litúrgicas y otras piezas de mayor antigüedad.​
• Tesoro de la catedral de Cáceres (concatedral de su diócesis junto con la catedral de Coria), musealizado en el Museo Catedralicio de Cáceres; ​ también hay un Museo Catedralicio de Coria.​
• Tesoro de la catedral de Badajoz (concatedral de su diócesis junto con la catedral de Mérida), musealizado en el Museo Metropolitano de la Catedral de Badajoz.
• Tesoro de la catedral de Sevilla, que cuenta, entre otras piezas, con unas tres mil vestimentas, unos trescientos libros de coro, cientos de esculturas y pinturas (de maestros como Zurbarán, Murillo, Herrera o Pacheco), la espada de San Fernando, la custodia de Juan de Arfe, un tenebrario de siete metros de altura o la patena usada en la primera misa celebrada en México.
• Tesoro de la catedral de Huelva, en dependencias anexas de su edificio.
• Tesoro de la catedral de Cádiz, musealizado en el Museo Catedralicio de Cádiz, en varias casas en torno a la torre de la catedral vieja (Casa de la Contaduría, Casa del canónigo Termineli, Casa del deán Rejón con su patio mudéjar).​ Se dice que su tesoro es "el tercero más rico de España". Entre otras piezas, está la Custodia del Millón​ (llamada así por la cantidad de piedras preciosas), además de ornamentos de culto y obras de pintura y escultura.​
• Tesoro de la catedral de Córdoba, en la capilla de Santa Teresa o del Cardenal, con piezas como la Custodia del Corpus de Enrique de Arfe o la Cruz del obispo Fitero.​
• Tesoro de la catedral de Jaén, con la Santa Faz, musealizado en el Museo Catedralicio de Jaén.
• Tesoro de la catedral de Guadix, musealizado en el Museo Catedralicio de Guadix, denominado Donum Fidei, con las reliquias de san Torcuato y piezas de orfebrería, pintura y escultura (particularmente importantes las de la segunda etapa de la escuela granadina -siglo XVIII-: José de Mora, Torcuato Ruiz del Peral y José Risueño).​
• Tesoro de la catedral de Granada, diferenciado del de la Capilla Real de Granada, musealizado en su sacristía.​
• Tesoro de la catedral de Málaga, musealizado como Museo Catedralicio de Málaga en la antigua sala capitular, con obras de platería, textiles, pinturas y esculturas de maestros como Pedro de Mena y José Ribera.​
• Tesoro de la catedral de Almería, musealizado como Museo Catedralicio de Cádiz, con piezas como una custodia procesional neobarroca, una Inmaculada atribuida a Murillo o a José Risueño y la Biblia de Gustave Doré.​
• Tesoro de la catedral de Murcia, musealizado en el Museo de la Catedral de Murcia. La antigua catedral de Cartagena fue destruida en la guerra civil.
• Tesoro de la catedral de Pamplona, musealizado en el antiguo refectorio, con piezas de pintura escultura y artes decorativas, entre las que destacan reliquias góticas que pertenecieron a los reyes de Navarra. Incluye una exposición de organología medieval (historia de los instrumentos musicales).​
• Tesoro de la catedral de Tudela, musealizado en el Museo de Tudela​
• Tesoro de la catedral de Vitoria, musealizado en la girola de la catedral nueva como Museo Diocesano de Arte Sacro de Vitoria, con una importante colección de pintura (obras de El Greco, José de Ribera y Alonso Cano) y piezas litúrgicas como la Cruz de Santa María del Yermo (Llodio), del platero Pedro de Garay (gótica, finales del XV o comienzos del XVI) o el Gradual de la propia catedral (un cantoral del siglo XVII).​
• Tesoro de la catedral de Bilbao, que cuenta con la capilla-relicario de Nuestra Señora de los Remedios, en la que se conserva el baúl del inquisidor Martín de Olloqui y Ugarte (1590), que según su donación contenía "el mayor tesoro que en tan poco lugar se hallara en Castilla, ni aún en toda España" (el cuerpo de San Fructuoso, las cabezas de San Bonifacio, San Euleterio, San Tarsicio, San Lucio, San Antero y San Nemesio y diversas reliquias de San An­tonio, San Alejandro, Santa Águeda, Santa Apolonia, San Benedicto, San Blas, Santa Beatriz, Santa Cecilia, San Calixto, San Cornelio, los san­tos Cosme y Damián, San Cristó­bal, San Dionisio, San Fabián, San Faustino, San Jorge, San Genesio, San Laureano, Santa Lucía, Santa Lucina, San Lucas evangelista, San Julián San Jerónimo, San Hermete, San Marcelo, Santa Margarita, San Marcelino, San Pancracio, Santa Susana, San Silvestre, San Sebas­tián, San Saturnino, San Soterio, San Tiburcio, San Valeriano, San Vicente Mártir, San Cenón, San Minucio, San Máximo, San Gabi­no, San Ceferino, San Saturnino, San Quirino, Sal Melquíades papa y otros).​
• Tesoro de las concatedrales de Logroño, de Calahorra y de Santo Domingo de la Calzada. En el claustro de la de Calahorra (con la denominación de Museo Diocesano de Calahorra) se exhiben piezas procedentes de los tesoros de iglesias de la diócesis (retablos, esculturas y orfebrería de los siglos XVI al XX), destacando una biblia en pergamino del siglo XII, la Custodia del Ciprés (donada por Enrique IV, siglo XV) y un fragmento de la torá judía (siglo XV).​
• Tesoro de la catedral de Jaca, musealizado en el Museo Diocesano de Jaca.
• Tesoro de la catedral de Huesca, musealizado en el Museo Diocesano de Huesca.
• Tesoro de las catedrales de Zaragoza (la Seo y la basílica de El Pilar), cuyos fondos se han reunido en el Museo Pilarista. Cuenta con el libro de horas de Santa Isabel​ y el olifante de Gastón de Bearne entre otras piezas.​
• Tesoro de las catedrales de de Albarracín y de Teruel, reunidos en el Museo de Arte Sacro de Teruel.​
• Tesoro de la catedral de Tarazona, musealizado, con piezas como obras de pintura y escultura, las reliquias de san Prudencio y otros relicarios, la custodia y templete procesional, cantorales e instrumentos musicales.​
• Tesoro de las concatedrales de Barbastro y de Monzón, musealizados en el Museo Diocesano (Barbastro).​
• Tesoro de la catedral de Urgel (Seo de Urgel), musealizado en el Museo Diocesano de Urgel.
• Tesoro de la catedral de Gerona, con el Beato de Gerona y el Tapiz de la Creación entre otras piezas.​
• Tesoro de la catedral de Barcelona, con obras de Bartolomé Bermejo, Pau Priu, Jaume Huguet y Antoni Claperós. ​ Además, en el Museo Diocesano de Barcelona se conservan miles de piezas.
• Tesoro de la catedral de Vich, musealizado en el Museo Episcopal de Vich (denominado MEV-Museo d'Art Medieval)​
• Tesoro de la catedral de Solsona, musealizado en el Museo Diocesano y Comarcal de Solsona.​
• Tesoro de la catedral de Tarragona, con su Museo Diocesano de Tarragona.
• Tesoro de la catedral de Tortosa, musealizado en la canónica de Santa María, con lápidas romanas, tapices, pergaminos, orfebrería y el retablo de la Transfiguración de Jaime Huguet.​
• Tesoro de la catedral de Lérida, que se musealizó como Museo Diocesano en 1893, cuyos fondos pasaron desde 1997 al Museo de Lérida junto con otras piezas del capítulo de la catedral y otros museos.​
• Tesoro de las concatedrales de Castellón y de Segorbe, musealizado en el Museo Catedralicio de Segorbe, con piezas de pintura del gótico internacional, hispano-flamenco y escuela valenciana del siglo XVI, destacando sobre todo las tablas del gran retablo mayor (Vicente Macip y Juan de Juanes), un relieve de la Madonna atribuido a Donatello, la sillería del coro de principios del siglo XVIII, rejería y mobiliario, destacando la puerta dorada en el claustro bajo o la urna-relicario de San Félix.​
• Tesoro de la catedral de Valencia, con el Santo Cáliz y una rica colección textil,​ entre otras piezas. La mayor parte de la gran cantidad de relicarios que contenía el tesoro fueron trasladados a Mallorca en 1808, durante la Guerra de Independencia, y fundida su plata para convertirla en monedas. Otras piezas desaparecieron durante el saqueo e incendio del 21 de julio de 1936, al comienzo de la Guerra Civil. Las reliquias que se han conservado se mantienen en la llamada "capilla de las reliquias" de la Sala Capitular (un brazo de San Vicente, una espina de la Corona -donada por San Luis con motivo de la reconquista de Valencia-, un diente de San Esteban, una saeta de San Sebastián, un tobillo de San Matías, un retrato de la Virgen atribuido a San Lucas, dos monedas de Judas Iscariote, la esponja con la que le dieron de beber vinagre a Jesús, una piedra del portal de Belén, un pañal y una camisita del Niño Jesús y fragmentos de la faja de la Virgen María y la capa de San José).​
• Tesoro de las concatedrales de Alicante y de Orihuela, musealizado en el Museo Diocesano de Arte Sacro de Orihuela, con una importante colección de pintura en la que destaca la Tentación de Santo Tomás de Aquino de Velázquez y obras de Sánchez Coello, Jerónimo de Córdoba, Matías Stom, Pedro Orrente y otros, una colección de escultura con obras de Francisco Salzillo y una colección de orfebrería con el cáliz del cardenal Despuig y la custodia de la parroquia de Santiago de Orihuela, una Casulla del siglo XVI, manuscritos e incunables (como Crónicas de Nuremberg de 1493).​
• Tesoro de la catedral de Palma, musealizado en la planta baja del campanario y las dos salas capitulares, con piezas de escultura, pintura y platería góticas, y de escultura y platería barrocas.​
• Tesoro de la catedral de Ciudadela, musealizado en las sacristías y la exposición de arte sacro. En el seminario (antiguo convento de San Agustín) se aloja el Museo Diocesano de Menorca, cuyos fondos son principalmente arqueológicos.​
• Tesoro de la catedral de Ceuta, musealizado en el Museo Catedralicio de Ceuta, con ornamentos litúrgicos, relicarios y piezas de orfebrería. Destaca una colección de documentos (bulas pontificias, el libro verde de los Estatutos de la Catedral) y biblias, entre ellas la Biblia Políglota de Arias Montano (siglo XVI), y notables piezas de escultura.​
• Tesoro de la catedral de Canarias, musealizado en el Museo Diocesano de Arte Sacro de Las Palmas de Gran Canaria.
• Tesoro de la catedral de La Laguna, en una capilla lateral.​

• 
  Cámara Santa de la catedral de Oviedo.
• 
  Olifante de Gastón de Bearne, procedente del tesoro de la catedral de Zaragoza.
• 
  Torre del Tesoro de la catedral de Santiago de Compostela.
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  Sacristía mayor de la catedral de Toledo.
• 
  Custodia de Juan de Arfe, tesoro de la catedral de Sevilla.​
• 
  La oración del huerto (El Greco, Cuenca).
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  Tentación de Santo Tomás de Aquino (Velázquez, Orihuela).

Tesoros de otras instituciones del clero secular

• Tesoro de la basílica de San Isidoro de León, musealizado, con piezas como la Arqueta de San Isidoro, el Portapaz de San Isidoro de León, el Pendón de San Isidoro, el Arca de los Marfiles, el Cáliz de doña Urraca. Otras se han dispersado, como el Crucifijo de don Fernando y doña Sancha o el Arca de las Bienaventuranzas (ambos en el Museo Arqueológico Nacional).
• Tesoro de la basílica de Nuestra Señora de Begoña, robado u ocultado durante la guerra civil española.​ Actualmente se custodian en una cámara acorazada de la sacristía "«materiales nobles», entre los que figuran una corona del siglo XVIII, cálices bañados en oro y joyas donadas por feligreses".​
• Tesoro de la basílica de la Vera Cruz (Caravaca), musealizado en el Museo de la Vera Cruz, con colecciones pintura (Hernando de los Llanos, Rafael Tegeo), orfebrería (custodia-ostensorio de principios del siglo XVI) y textiles (la casulla de Chirinos -adaptado a partir de un tiraz musulmán).​
• Tesoro de la basílica menor de Santa María (Elche), junto con el Museo de la Virgen (Elche).​
• Tesoro de la colegiata de Toro, sala a los pies de la torre, con esculturas, relicarios y objetos litúrgicos de orfebrería.​
• Tesoro de la colegiata de Covarrubias, musealizado en cuatro salas, con orfebrería (piezas del maestro de Calahorra, y otras, como un Lignum Crucis en plata repujada del siglo XIV -que la tradición hace remontar a Fernán González-), ornamentos litúrgicos (terno de los condestables), relicarios (como el de san García) y obras de escultura (Gil de Siloé) y pintura (Pedro Berruguete, Diego de la Cruz, Alonso de Sedano).
• Tesoro de la colegiata de Roncesvalles, con piezas de orfebrería, escultura, pintura, libros y manuscritos desde el siglo XI.​
• Tesoro de la iglesia de San Miguel (Sevilla), con el ajuar de la patrona, documentos, textiles e imaginería.​
• Tesoro de la iglesia de Santa Ana (Elda)​
• Tesoro de la iglesia de San Lorenzo (Pamplona), con el tesoro de san Fermín (piezas de platería, joyería y ornamentos desde el siglo XVI hasta el XX).​
• Tesoro de la iglesia de San Sebastián (Agüimes), que reúne los de la antigua iglesia parroquial, el convento dominico de Nuestra Señora de las Nieves y la ermita de San Antonio Abad.​
• Museo de Arte Sacro El Tesoro de la Concepción (de una parroquia de La Orotava, Tenerife).

• 
  Ajedrez de Carlomagno, en el museo de la colegiata de Roncesvalles.​
• 
  Cáliz de doña Urraca, San Isidoro de León
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  Virgen de la mosca, en la sacristía de la colegiata de Toro.

Tesoros monásticos

La desamortización de Mendizábal supuso el cierre y dispersión del patrimonio de la mayor parte de los monasterios y conventos españoles, por lo que, incluso aunque su arquitectura se haya mantenido, ya no están en su lugar las piezas de la mayor parte de ellos, que deberían ser muy destacables (Sobrado, Silos, San Millán de la Cogolla, Fitero, San Juan de la Peña, Veruela, Santa María de Huerta, Celanova, etc.) El caso de los establecimientos jesuitas es incluso más agitado, puesto que la orden fue expulsada de España durante el reinado de Carlos III (1767). En cuanto a las órdenes militares españolas, fueron suprimidas durante la invasión napoleónica (1808) y restauradas durante el reinado de Fernando VII.

• Tesoro del monasterio de Santo Toribio de Liébana, con el Lignum Crucis.​
• Tesoro del monasterio de San Martín Pinario (Santiago de Compostela), musealizado, con obas de pintura, escultura, orfebrería, restos arqueológicos y la imprenta, botica y gabinete de historia natural del monasterio.​
• Tesoro del monasterio de Oseira. De entre las piezas que conserva destaca una custodia del siglo XVIII, el relicario del beato Arnaiz y varias procedentes del monasterio de Monfero (un cáliz del XVII y el báculo abacial del XVIII).​
• Tesoro del monasterio de San Pedro de Cardeña, musealizado en la sala capitular del siglo XII, con un Apostolado de José de Ribera, y El Redentor, de Juan de Juanes.​
• Tesoro del monasterio de Oña, musealizado en el Museo de Arte Sacro de Oña.​
• Tesoro del monasterio de las Huelgas (Burgos), con el Museo de Ricas Telas, entre cuyas piezas está el Pendón de las Navas de Tolosa.​
• Tesoro del monasterio de San Joaquín y Santa Ana (Valladolid), musealizado en el Museo del Monasterio de San Joaquín y Santa Ana.
• Tesoro del convento de San Esteban (Salamanca), musealizado en el Museo del Convento de San Esteban.​
• Tesoro del convento de Santo Domingo el Antiguo (Toledo), musealizado.​
• Tesoro del monasterio de las Descalzas Reales (Madrid), musealizado.​
• Tesoro del monasterio de la Encarnación (Madrid), musealizado.​
• Tesoro de la cartuja de El Paular, dispersado desde la invasión napoleónica y la desamortización, pasando parte de sus obras al Museo del Prado. Se recuperó para su lugar original una serie de 54 cuadros de Vicente Carducho.​
• Tesoro del monasterio de Guadalupe, musealizado en distintas salas.​
• Tesoro del monasterio de Santa Paula (Sevilla), musealizado, con el relicario de la cabeza de San Juan (siglo XVII, donado por la reina Margarita de Austria), belenes napolitanos y piezas de pintura y escultura.​
• Tesoro del monasterio de Nájera, musealizado en la residencia del abad (edificio del siglo XVIII) como Museo Najerillense.
• Tesoro del monasterio de Poblet, musealizado, con obras de pintura, escultura y orfebrería, entre las que destacan un crucifijo de marfil del siglo XVII y una lipsanoteca del XV.​
• Tesoro del monasterio de San Juan de las Abadesas, musealizado, de entre cuyas piezas destacan dos biblias, un frontal de altar, una arqueta de reliquias, dos cruces del siglo XII y piezas textiles.​
• Tesoro del monasterio de Pedralbes, musealizado en el antiguo dormitorio, con obras de arte, mobiliario y objetos litúrgicos y seculares.​
• Tesoro del monasterio de Montserrat, musealizado en el Museo de Montserrat.​

• 
  El Lignum Crucis de Santo Toribio de Liébana.
• 
  Libro de horas del prior, monasterio de Guadalupe.
• 
  Saya de Fernando de la Cerda, Museo de Ricas Telas del Monasterio de las Huelgas.

Suiza

• Tesoro de la catedral de Basilea, que en su mayor parte se conserva en el Museo histórico de Basilea (Musée historique de Bâle), aunque piezas destacadas, como la Rosa de Oro y el Antependium de la catedral de Basilea pasaron al Musée de Cluny (París).
• Tesoro de la abadía de San Mauricio (Agaune), con el vaso de San Martín de Tours (sardónice tallada en el siglo I, montada en orfebrería en los siglos V y XII), el relicario de Teuderico (en forma de sarcófago de plata, decorado con profusión con sellos antiguos, siglo VII), el llamado "aguamanil de Carlomagno" (compuesto de piezas de distintos orígenes, con esmaltes bizantinos de mediados del siglo IX), el relicario de san Segismundo y sus hijos (del propio taller de la abadía, hacia 1100) o el relicario de san Nantelmo (del propio taller de la abadía, hacia 1250).​

Antependium de Basilea.

Croacia

• Tesoro de la Catedral de Dubrovnik, con reliquias de 132 santos (destacando las de San Blas, cuyo relicario es una obra de orfebrería de los siglos XI y XII).​

Relicario de San Lorenzo, tesoro de la catedral de Dubrovnik.

Hungría

• Tesoro de la catedral de Budapest, con la Santa Diestra (la mano de San Esteban).

El relicario de la Santa Diestra.

Polonia

• Tesoro de la catedral de Cracovia, con reliquias como la lanza de San Mauricio. Su musealización fue impulsada por el obispo Karol Wojtila, que fue papa con el nombre de Juan Pablo II (y posteriormente santificado); el museo también conserva piezas relacionadas con él.​

Suecia

• Tesoro de la catedral de Upsala (Skattkammaren), en la torre norte, con vestimentas litúrgicas, el vestido dorado de la reina Margarita, la ropa de los Sture, objetos funerarios de los Vasa y objetos litúrgicos en plata.​