Diferencia entre revisiones de «Literatura de México»

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La literatura de México tiene sus antecedentes en las literaturas de los pueblos indígenas de Mesoamérica. Sin embargo, con la llegada de los españoles, se dio un proceso de mestizaje que luego dio paso a una época de criollización de la literatura producida en la Nueva España. El mestizaje de la literatura novohispana es evidente en la incorporación de numerosos términos de uso corriente en el habla local del virreinato y en algunos de los temas que se tocaron en las obras del período. Durante la época virreinal, Nueva España albergó a escritores barrocos como Bernardo de Balbuena, Carlos de Sigüenza y Góngora, Juan Ruiz de Alarcón y Sor Juana Inés de la Cruz, El Fénix de América.

Hacia el final del régimen colonial, en Nueva España surgieron figuras como José Joaquín Fernández de Lizardi, cuya obra es considerada como emblema de la picaresca mexicana. Ya como nación independiente, la propia inestabilidad política durante el siglo XIX favoreció declive generalizado no sólo en la literatura, sino en todas las actividades artísticas en México. Hacia la segunda mitad de ese siglo, la literatura mexicana comienza a resurgir, con obras como Los mexicanos pintados por sí mismos, libro costumbrista que nos da una idea aproximada de cómo veían los intelectuales de la época al resto de sus coterráneos. Hacia el final del siglo, durante el Porfiriato, los escritores mexicanos se inclinan hacia las tendencias dominantes de la época. Destacan la pléyade de poetas modernistas como Amado Nervo y Manuel Gutiérrez Nájera.

La irrupción de la Revolución Mexicana favorece el desarrollo del género periodístico. Una vez concluido el conflicto civil, el tema de la Revolución apareció como tema en novelas, cuentos y obras teatrales en las plumas de Mariano Azuela o Rodolfo Usigli. Esta tendencia sería antecedente del florecimiento de una literatura nacionalista, que tomó cuerpo en la obra de escritores como Rosario Castellanos o Juan Rulfo. También aparece en escena una literatura de corte indigenista, que pretende retratar el pensamiento y la vida de los pueblos indígenas de México, aunque irónicamente, ninguno de los autores fuera indígena. Entre ellos hay que señalar a Miguel Angel Menéndez Reyes a Ricardo Pozas y a Francisco Rojas González.

De modo alterno a estas corrientes dominantes, se desarrollaron en el país otros movimientos menos conocidos por estar fuera del foco principal. Entre ellos hay que señalar a los estridentistas (década de 1920), como Arqueles Vela y Manuel Maples Arce. Otro literario de relevancia para la historia literatura del país lo constituyó el grupo de Los Contemporáneos (década de 1930), que agrupaba a figuras como el periodista Salvador Novo y los poetas Xavier Villaurrutia y José Gorostiza. Ya hacia la segunda mitad del siglo XX, la literatura mexicana se había diversificado en temáticas, estilos y géneros. En 1990, Octavio Paz se convirtió en el único mexicano hasta la fecha que ha ganado el Premio Nobel de Literatura.

Literatura de los pueblos precolombinos de México

¿Zan yuhqui nonyaz in compolihui xóchitl ah?
¿Antle notleyp yez in quenmanian?
¿Antle nitauhca yez in tlaltipac?

¡Ma nel xóchitl, ma nel cuícatl!
¿Quen conchihuas noyolo, yehuaya?
¡On nen toquizaco in tlaltipac!


¿Sólo he de irme semejante a las flores que fueron pereciendo?
¿Nada mi gloria será alguna vez?
¿Nada mi fama será en la tierra?

¡Siquiera flores, siquiera cantos!
Ay, ¿qué hará mi corazón?
¡En vano venimos a pasar sobre la tierra!

Tr. Ángel María Garibay K.[1]

A pesar de que los pueblos de Mesoamérica desarrollaron sistemas de escritura, estos no fueron empleados para conservar la literatura de esos pueblos. La mayor parte de los mitos y obras literarias de los pueblos de Mesoamérica se transmitieron por tradición oral. Se sabe, por ejemplo, que entre las actividades que tenían que dominar los novicios de sacerdotes entre los mexicas se encontraba la memorización de obras líricas o de la mitología de su pueblo. Algunas de estas producciones fueron fijadas para siempre por medio del alfabeto latino que los misioneros de Indias emplearon en el siglo XVI para transcribir la información que recibían de los indígenas. Especialistas modernos como Ángel María Garibay K. y Miguel León-Portilla han traducido estas obras que se encontraban desperdigadas en varios textos y las han reunido o reseñado en obras como Visión de los vencidos, Poesía indígena de la Altiplanicie o Historia de la literatura náhuatl.

La obra de los misioneros en el centro de México permitió conservar más fielmente la tradición oral de los pueblos de habla náhuatl, en comparación con los habitantes de otras zonas de Mesoamérica. En ese sentido resulta especial el conjunto de obras líricas atribuidas a Acolmiztli Nezahualcóyotl (1402 – 1472), tlatoani de Tetzcuco, que pasó a la posteridad con el título de Rey Poeta. Sus obras, junto con las de otros nobles de los pueblos nahutlacas del Altiplano como Ayocuan (de Chalco-Atenco) y Tecayehuatzin (de Huexotzinco), constituyen la muestra más amplia de obras líricas y filosóficas precolombinas recuperadas para la posteridad. De menores dimensiones es el acervo literario recuperado entre otros pueblos del Poscláisco, como los purépechas, los zapotecos y los mixtecos. El caso de los mixtecos es especial, puesto que se conservan cuatro códices que han permitido hacer una aproximación a la historia de ese pueblo bajo la impronta de Ocho Venado, yya (Señor) de Tilantongo y Tututepec. Por otra parte, en el Área Maya, se conservaron fragmentos de los llamados Libros de Chilam Balam. Bien conocida es, por otra parte, la literatura precolombina de los quichés, pueblo mayance que sin embargo no habitó en el actual territorio mexicano, sino en lo que hoy es Guatemala. En idioma quiché se escribió el Popol Wuj o Libro del Consejo, que incorpora dos mitos cosmogónicos mayas: la creación del mundo y el descenso de Hunahpú e Ixbalanqué a Xibalbá, el inframundo de los mayas.

Por último, fuera de Mesoamérica, Arturo Warman adelanta como hipótesis que las coplas interpretadas por los músicos yaquis y mayos durante la ejecución de la Danza del Venado tengan su origen en la época precolombina, y que hayan llegado hasta nuestros días con pocos cambios desde entonces.

Entre los pueblos prehispánicos floreció:

  • La poesía épica, que relataba la vida de personajes famoso, lo referente a Quetzalcóatl, la fundación de ciudades y peregrinaciones de tribus.
  • La poesía lírica de tipo religioso, bélico o filosófico.
  • La poesía dramática, que mezclaba elementos musicales y dancísticos, como la fiesta a Tezcatlipoca.
  • La prosa: histórica y genealogías, didáctica como los Huehuetlatolli o los proverbios.

Escritores de la colonia

En la literatura colonial de México podemos distinguir varios periodos. En el primero la literatura está vinculada con el momento histórico de la conquista, en él abundan las cartas y crónicas.


En el periodo posterior floreció el arte barroco. Muchos de los autores conocidos del siglo incursionaron con mayor o menor éxito en el terreno de los juegos literarios, con obras como anagramas, emblemas y laberintos. Hubo autores notables en la poesía la lírica, la narrativa y la dramaturgia.

  • Francisco Cervantes de Salazar (¿1514?-1575). Nacido en España, fue catedrático de retórica y luego rector en la Universidad de México, autor de una Crónica de la Nueva España y de poemas y diálogos latinos (siguiendo a Vives) de tema mexicano destinados a la enseñanza del latín.
  • Gutierre de Cetina (1520-c.1567). Nacido en España, vivió y murió en México. Su producción poética es anterior a su estancia en México, pero se ha especulado con la existencia de obra teatral novohispana luego perdida.
  • Francisco de Terrazas (¿?-¿? se sabe que estaba vivo entre 1525 y 1600). Mexicano, próximo a Cortés, alabado por Cervantes como poeta (en La Galatea). Se conservan fragmentos de su poema Conquista y Mundo Nuevo.
  • Gaspar Pérez de Villagrá (1551-c.1625). Español que participó en la conquista de Nuevo México, autor del poema Historia de la Nueva México.
  • Bernardo de Balbuena (1562-1627). Nacido en España, graduado en la Universidad de México, autor de Grandeza mexicana.
  • Juan Ruiz de Alarcón y Mendoza (1581-1639).
  • Fernando de Córdoba y Bocanegra (1565-1689). Nació en México y murió en Puebla. Se conservan dos estancias místicas, Canción al amor divino y Canción al santísimo nombre de Jesús.
  • Antonio de Saavedra Guzmán (¿?-¿? Publicó en 1599). Autor del poema El peregrino indiano, alabanza de Cortés.
  • Miguel de Guevara (c. 1586-después de 1646). Fraile agustino en Michoacán, con don de lenguas indígenas. Un manuscrito suyo de 1638 incluye, entre otros poemas, el soneto No me mueve mi Dios para quererte... por lo que forma parte del grupo de poetas a los que se ha atribuido su autoría, si bien el famoso soneto figura desde 1628 en antologías publicadas en España.
  • Carlos de Sigüenza y Góngora (1645-1700).
  • Juana Inés de la Cruz (1651-1695).


En el siglo XVIII surgieron escritores ilustrados y neoclásicos como

Escritores del México independiente (Siglo XIX)

Durante el siglo XIX hubo tres grandes corrientes literarias: el romanticismo, el realismo-naturalismo y el modernismo.

Los escritores románticos se agruparon en torno a dos asociaciones, la Academia de Letrán, fundada en 1836 (José María Lacunza, Guillermo Prieto, Manuel Carpio, Andrés Quintana Roo, José Joaquín Pesado, Ignacio Rodríguez Galván, Ignacio Ramírez) y el Liceo Hidalgo, fundado en 1850 (Ignacio Manuel Altamirano, Manuel Acuña, Manuel M. Flores).

Más tarde, durante el auge del positivismo el gusto estético cambió. Entre los escritores mexicanos realistas y naturalistas tenemos a Luis G. Inclán, Rafael Delgado, Emilio Rabasa, José Tomás de Cuellar, Federico Gamboa y Ángel de Campo.

Dentro de la corriente modernista, revolución literaria originaria de América Latina, hubo numerosas innovaciones métricas y de rima, resurgimiento de formas en desuso y, principalmente, hallazgos simbólicos. Entre 1895 y 1910 México se volvió un núcleo de actividad modernista, entre los escritores tenemos a Gutiérrez Nájera, González Martínez, Díaz Mirón y Amado Nervo.

Ensayistas

Novelistas y Cuentistas

Poetas

Escritores contemporáneos (Siglos XX y XXI)

En los años que van de 1900 a 1914 siguió predominando en la poesía el modernismo y en la prosa el realismo y naturalismo. Durante este periodo convivieron los representantes de la literatura decimonónica con los integrantes del Ateneo de la Juventud.

De 1915 a 1930 hubo tres corrientes: una renovación estilística que incorporaba influencias de las vanguardias europeas (los Contemporáneos), un grupo de escritores retomaba temas coloniales, y otros que comenzaron a publicar las llamadas "novelas de la Revolución" (la más conocida es Los de abajo de Mariano Azuela.

Hasta mediados de los años 40 hubo autores que continuaron con narrativa realista, pero también conocieron su auge la novela indigenista y las reflexiones en torno al ser y la cultura nacional. Surgieron dos nuevas generaciones poéticas, agrupadas en torno a las revistas Taller y Tierra Nueva.

Con la publicación de Al filo del agua de Agustín Yáñez en 1947 comenzó lo que llamamos "novela mexicana contemporánea", que incorporó técnicas entonces novedosas, influencias de escritores estadounidenses (William Faulkner y John Dos Passos) e influencia europea (James Joyce y Franz Kafka). Si bien durante el periodo que va de 1947 a 1961 predominaron los narradores (Arreola, Rulfo, Fuentes), surgieron entonces poetas de valía como Rubén Bonifaz Nuño y Rosario Castellanos.

Posteriormente, la narrativa de América Latina entró en un periodo llamado "el boom latinoamericano", caracterizado por su cosmopolitismo y por la experimentación en la novela, en el cual destacan cuatro grandes escritores: Cortázar, García Márquez, Vargas Llosa y el mexicano Carlos Fuentes.


Ensayistas

Novelistas y Cuentistas

Poetas

Dramaturgos


Historiadores

Notas

  1. La versión en náhuatl y la traducción aparecen en Bernal, 1996. León-Portilla (1992: 171), señala que este poema aparece en el Manuscrito de la Biblioteca Nacional de México entre los poemas de Huexotzinco (actualmente en el estado de Puebla).

Véase también

Enlaces externos