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El presidente ecuatoriano [[José María Velasco Ibarra]], en [[1960]], pretendió declarar la nulidad del Protocolo de Río de Janeiro, arguyendo que "fue firmado bajo la fuerza y con amenazas", cuando las Fuerzas Peruanas "ocupaban" territorio ecuatoriano. Estas declaraciones del mandatario ecuatoriano mostraron las intenciones de Ecuador de buscar una salida a la cuenca del río Amazonas prescindiendo de lo señalado por el [[Protocolo de Río de Janeiro]].
El presidente ecuatoriano [[José María Velasco Ibarra]], en [[1960]], pretendió declarar la nulidad del Protocolo de Río de Janeiro, arguyendo que "fue firmado bajo la fuerza y con amenazas", cuando las Fuerzas Peruanas "ocupaban" territorio ecuatoriano. Estas declaraciones del mandatario ecuatoriano mostraron las intenciones de Ecuador de buscar una salida a la cuenca del río Amazonas prescindiendo de lo señalado por el [[Protocolo de Río de Janeiro]].


=== Incidente de 1981,"Paquisha" ===
=== Incidente de 1981,"Falso Paquisha" ===
El [[22 de enero]] de [[1981]], el gobierno peruano denunciaba el ataque a una de sus aeronaves cuando realizaba una misión de abastecimiento a puestos de vigilancia en el río Comaina (territorio peruano). El entonces [[Presidente del Perú]], [[Arquitecto]] [[Fernando Belaúnde Terry]], ordenó la inspección del río Comaina hasta sus nacientes en el lado oriental de la Cordillera del Cóndor, comprobándose la existencia dentro del territorio peruano de tres destacamentos militares ecuatorianos con sus respectivas instalaciones. Este hallazgo causó acciones de fuerza, logrando las fuerzas peruanas desalojar los destacamentos ecuatorianos.
El [[22 de enero]] de [[1981]], el gobierno peruano denunciaba el ataque a una de sus aeronaves cuando realizaba una misión de abastecimiento a puestos de vigilancia en el río Comaina (territorio peruano). El entonces [[Presidente del Perú]], [[Arquitecto]] [[Fernando Belaúnde Terry]], ordenó la inspección del río Comaina hasta sus nacientes en el lado oriental de la Cordillera del Cóndor, comprobándose la existencia dentro del territorio peruano de tres destacamentos militares ecuatorianos con sus respectivas instalaciones. Este hallazgo causó acciones de fuerza, logrando las fuerzas peruanas desalojar los destacamentos ecuatorianos.



Revisión del 20:22 20 may 2010

Guerra del Cenepa
Parte de conflicto limítrofe entre el Perú y el Ecuador
Fecha enero-febrero de 1995
Lugar Cordillera del Cóndor, Cuenca del Río Cenepa.
Conflicto Disputa territorial entre Perú y Ecuador
Resultado
Aplicación del Protocolo de Río de Janeiro
Declaración de Paz de Itamaraty
Acuerdo de Brasilia
Ecuador obtiene una propiedad privada de 1 km² en Tiwinza para ceremonias (pero con soberanía peruana), y acepta la libre navegación en el Amazonas ya reconocida en el Protocolo de Río de Janeiro
Beligerantes

Ecuador

Perú
Comandantes
General de División Paco Moncayo Gallegos General Nicolás Hermosa Ríos
Fuerzas en combate
Ejército del Ecuador
Fuerza Aérea del Ecuador
Ejército del Perú
Fuerza Aérea del Perú
Conflicto del Falso Paquisha Guerra del Cenepa

La Guerra del Cenepa o también conocida como Guerra de Tiwinza fue un conflicto bélico ocurrido en 1995. Sucedió en una zona que se encontraba sin demarcar de la línea fronteriza de Ecuador y Perú y, según el límite trazado por el Protocolo de Paz, Amistad y Límites de Río de Janeiro del 29 de enero de 1942 y confirmada por la Propuesta de los países garantes de dicho documento del 26 de octubre de 1998, en territorio peruano correspondiente al distrito de El Cenepa, provincia de Condorcanqui, departamento de Amazonas. Su denominación proviene del río Cenepa en cuya cabecera ocurrió el conflicto.

Éste forma parte de una larga disputa territorial entre Perú y Ecuador, que ha ocasionado diversos incidentes bélicos con pérdidas humanas para ambos países, siendo el más importante de todos el conflicto de julio de 1941.

Antecedentes

Disputas entre Perú y la Gran Colombia

La reclamación por parte de Ecuador de un acceso con soberanía a la cuenca del Amazonas se remonta a 1827, cuando Simón Bolívar, gobernante de la Gran Colombia, de la que Ecuador formó parte hasta 1830, reclamó como territorios que le correspondían a su país los de Tumbes, Jaén (Cajamarca) y Maynas (entendiéndose por Maynas el territorio conformado por los actuales departamentos peruanos de Loreto y Amazonas).

La Gran Colombia reclamaba esa comarca como compensación por las deudas de la campaña emancipadora y por los "reemplazos" (el costo de reponer con nuevos efectivos las bajas sufridas en las tropas de apoyo a la guerra independentista peruana). En respuesta, el 17 de mayo de 1828, el Congreso de la República del Perú rechazó tales pretensiones por considerar que dejaban de lado el principio del Uti possidetis que implicaba tomar como punto de partida el territorio tradicionalmente ocupado por cada país al año 1810. En consecuencia, autorizó al presidente José de La Mar a tomar las medidas militares del caso. En virtud de ello, tropas peruanas invadieron la ciudad de Guayaquil pero fueron rechazadas por las tropas al mando del general Antonio José de Sucre.

Ese enfrentamiento concluyó en la batalla de Tarqui (o Portete de Tarqui) que motivó el armisticio del 10 de julio de 1829 y el Tratado Larrea-Gual del 22 de septiembre del mismo año. Este tratado, también conocido como Tratado de Guayaquil estableció que el límite entre la Gran Colombia y el Perú sería el mismo que existió entre los virreynatos de Nueva Granada y el del Perú, descartando en forma meridiana cualquier discusión sobre presuntos derechos al sur de la línea de frontera determinada por el río Zarumilla.

Disputas entre Perú y Ecuador

Cuando se constituye el Estado ecuatoriano, se suscribieron diversos acuerdos y tratados con la finalidad de trazar la frontera entre ambos países, sobre todo en la parte amazónica. Ecuador señala la existencia del Protocolo Pedemonte-Mosquera que, firmado en 1830 fue una continuación del Tratado Larrea-Gual. Perú cuestiona la validez de ese tratado, llegando a afirmar que nunca se firmó, debido a que jamás se encontró el documento original.

Durante 1859 y 1860, ambos países libraron una guerra sobre un territorio cercano al río Amazonas. Sin embargo, Ecuador ingresó a una guerra civil que impidió las relaciones diplomáticas con el resto de Latinoamérica, incluyendo al Presidente del Perú Ramón Castilla, ya que no existía un gobierno reconocido en Ecuador con el cual tratar. Igualmente, entre 1879 y 1883 el Perú participó en la Guerra del Pacífico contra Chile y no pudo atender otros asuntos diplomáticos.

En 1887, un tratado suscrito por ambas naciones estableció que el Rey de España actuaría como árbitro. Se pensó que ese Tratado, denominado Herrera-García, resolvería permanentemente el conflicto. Sin embargo, el Congreso de la República del Perú señaló que ratificaría el tratado sólo luego de que se introdujeran algunas modificaciones por cuanto lo consideraba poco favorable para su país. Ante ello, Ecuador se retiró del proceso en protesta de las modificaciones peruanas y el Rey se abstuvo de proponer una decisión.

En el siglo XX Ecuador se enfrentó nuevamente a Perú. Se dieron nuevos incidentes limítrofes. El más importante de esos conflictos fue el que se dio en el año de 1911. En 1922 hubo otra disputa referida a la firma del Tratado Salomón Lozano entre Perú y Colombia, que resultó favorable a esta última nación. Este tratado causó malestar tanto en Perú (donde se señala que el presidente Augusto B. Leguía lo suscribió bajo presión de los Estados Unidos) como en Ecuador que se veía, de esa forma, limitando con Perú por el este. Sin embargo, el reconocimiento colombiano respecto a las aspiraciones territoriales del Perú señalándolas como legítimas ayudaron a este país.

En 1936, tras largos años de incidentes y negociaciones, se fijó una "línea de Status Quo", en calidad de frontera provisional mutuamente reconocida, tomando como base los territorios que de facto poseía cada país. Dentro de dicha línea provisional, en la zona correspondiente al actual departamento peruano de Amazonas, se fijaba, como frontera natural, la Cordillera del Cóndor.

Status-Quo 1936

El 11 de enero de 1941, alegando que los ecuatorianos habían realizado incursiones e incluso ocuparon territorio peruano en la provincia de Zarumilla, el presidente del Perú, Manuel Prado Ugarteche, ordenó la formación del Agrupamiento Norte, una unidad militar en cargo del Teatro de operaciones del Norte.

La posición peruana alegó en 1941 que Ecuador desconoció esa línea provisional por lo que movilizó su ejército, ingresando a territorio ecuatoriano por Tumbes (localidad de Aguas Verdes limítrofe con Huaquillas). El Perú empleó sus recursos militares haciéndose del control del espacio previamente ocupado por Ecuador los días 5, 23 y 24 de julio. y que constituía el 50% del territorio que dicho país consideraba suyo.

La Fuerza Aérea del Perú bombardeó la población ecuatoriana de Santa Rosa, en la provincia fronteriza ecuatoriana de El Oro, y amenazó con hacer lo mismo con la ciudad de Guayaquil. Tropas peruanas invadieron regiones del sur del Ecuador, y las ocuparon hasta la firma del protocolo de Río de Janeiro en 1942.

Tomando en cuenta la situación mundial en ese entonces (Segunda Guerra Mundial), los países del continente no estaban interesados en un nuevo conflicto, por lo que presionaron a Ecuador a firmar el protocolo de Río de Janeiro, del 29 de enero de 1942, garantizado por Argentina, Brasil, Chile y Estados Unidos de América. La firma del protocolo de Río de Janeiro confirma la línea del “Status Quo” de 1936 firmada en Washington por Perú y Ecuador, menos la pérdida por parte de Ecuador de tan solo 5,392 millas cuadradas.

Problema demarcatorio en la Cordillera del Cóndor

La demarcación de la línea fronteriza establecida en el procotolo mediante el levantamiento de hitos se inició en 1947. Sin embargo, ésta no fue culminada en la zona de la Cordillera del Cóndor, debido a que mediante un levantamiento aerofotogramétrico se "descubrió" la presencia del río Cenepa entre el Zamora y el Santiago. Eso implicaba que lo consignado en el protocolo no correspondía con la geografía real de la zona. El río Cenepa era un accidente geográfico conocido desde muchos años antes, tal como lo reconoce en un ensayo el ex presidente peruano Fernando Belaúnde Terry. La suspensión se basó en la posición ecuatoriana, que señalaba la inexistencia de un "Divortium Aquarum" (divisoria de aguas) entre el río Zamora y el río Santiago, como contempla el Protocolo de Río de Janeiro. En efecto, el árbitro brasileño Braz Dias de Aguiar solamente menciona que los ríos necesarios para efectos de demarcación son el Zamora y el Santiago. Este tema, añadido a otras "inconsistencias" en el texto del protocolo, según el punto de vista ecuatoriano, causó que la demarcación se suspendiera unilateralmente. Como conclusión, Ecuador señaló que el protocolo era "inejecutable".

En el plano diplomático los representantes peruanos y ecuatorianos no pudieron ponerse de acuerdo. La colocación de hitos fronterizos, convenida en el protocolo de 1942, imprescindible en una zona tan agreste, no pudo ser concluida pues se detuvo en 1950, quedando sin demarcar un espacio de 78 kilómetros lineales.

El presidente ecuatoriano José María Velasco Ibarra, en 1960, pretendió declarar la nulidad del Protocolo de Río de Janeiro, arguyendo que "fue firmado bajo la fuerza y con amenazas", cuando las Fuerzas Peruanas "ocupaban" territorio ecuatoriano. Estas declaraciones del mandatario ecuatoriano mostraron las intenciones de Ecuador de buscar una salida a la cuenca del río Amazonas prescindiendo de lo señalado por el Protocolo de Río de Janeiro.

Incidente de 1981,"Falso Paquisha"

El 22 de enero de 1981, el gobierno peruano denunciaba el ataque a una de sus aeronaves cuando realizaba una misión de abastecimiento a puestos de vigilancia en el río Comaina (territorio peruano). El entonces Presidente del Perú, Arquitecto Fernando Belaúnde Terry, ordenó la inspección del río Comaina hasta sus nacientes en el lado oriental de la Cordillera del Cóndor, comprobándose la existencia dentro del territorio peruano de tres destacamentos militares ecuatorianos con sus respectivas instalaciones. Este hallazgo causó acciones de fuerza, logrando las fuerzas peruanas desalojar los destacamentos ecuatorianos.

La posición ecuatoriana señalaba que esos destacamentos correspondían a la base de "Paquisha" establecida en territorio ecuatoriano. Pero, tras la medición de las coordenadas, se comprobó que no correspondían a la mencionada Paquisha sino, como lo calificó el presidente Belaúnde, a un "falso Paquisha". Tras las escaramuzas, que motivaron la intervención de la Organización de Estados Americanos (OEA), el acta Sorrosa-Du Bois fijó las coordenadas de ubicación permitidas para las tropas fronterizas, ratificando la condición de la mencionada cordillera como límite natural entre ambos países.

En 1992, los presidente del Perú y Ecuador, Alberto Fujimori Fujimori y Rodrigo Borja Cevallos, suscriben el llamado Pacto de Caballeros en el que se comprometen a buscar soluciones pacíficas a las diferencias. Sin embargo, en el mes de diciembre de 1994 se empiezan a notar movilizacionies del ejército del Ecuador, que desde 1981 había estado preparándose para enfrentar un conflicto generalizado, desplegando sus sistemas de defensa en el área de la Cordillera del Cóndor.[1]

Posiciones

Cada uno de los países tiene un pensamiento diferente, a continuación se describe la de cada uno de ellos (ordenado alfabéticamente):

Posición ecuatoriana

La argumentación ecuatoriana señala, por su parte:

  • El Protocolo de Río de Janeiro es un tratado cuyo cumplimiento no puede ser exigido al Ecuador por cuanto fue un texto impuesto y su suscripción se realizó estando ocupado una gran parte del territorio nacional.
  • El Protocolo de Río de Janeiro señala el divisor de aguas Zamora-Santiago para distribuir equitativamente entre los dos países el espacio geográfico entre los ríos Zamora y Santiago. Sin embargo, en la realidad geográfica no existe dicha divisoria de aguas por el hecho de que el río Cenepa, que antes se pensaba era un afluente insignificante del río Marañón-Amazonas, resultó ser un sistema hidrográfico independiente y mucho más extenso interpuesto entre el Zamora y el Santiago. Al no existir la divisoria de aguas Zamora-Santiago es inaplicable el trazado de la frontera en este sector enunciado en el artículo VIII. B.1.
  • Ante esa inejecutabilidad del Protocolo, resulta indispensable establecer una línea de frontera que distribuya equitativamente entre los dos países el espacio geográfico comprendido entre los ríos Zamora y Santiago.
  • Esa distribución, no obstante, sólo puede hacerse atendiendo a los derechos de las partes y reconociendo al Ecuador el acceso que demanda al Marañón-Amazonas, en debida atención a sus supuestos derechos amazónicos y a los requerimientos de su desarrollo como país condómino en la Cuenca del Gran Río. De esa forma se abrirán amplias posibilidades para el Ecuador en proyectos de interés en la Amazonía, y para una útil y fácil comunicación de los puertos marítimos del Ecuador tanto con los accesos ecuatorianos al Amazonas y sus afluentes como con los polos de desarrollo binacional y multinacional en la región.

Posición peruana

La argumentación peruana señala lo siguiente sobre este tema:

Desarrollo del conflicto

Nueva crisis

En 1992, se produjo en Quito un encuentro entre los presidentes de los dos países. La visita del presidente peruano, Alberto Fujimori, se proponía allanar las dificultades que impedían una solución diplomática al problema fronterizo, pero dicha reunión fue infructífera y no produjo resultados.

En la tarde del 9 de enero de 1995, cerca de las 17:30 en la zona del Cenepa, una patrulla de cuatro soldados peruanos del Batallón de Infantería de Selva "Callao" Nº 25 tuvo un encuentro con una patrulla ecuatoriana del Batallón Nº 63 "Gualaquiza". Al día siguiente las tropas peruanas son acompañadas por las ecuatorianas hasta el PV-1. El 11 de enero se produce un nuevo encuentro, de nuevo en la zona peruana del Cenepa, cerca de las 13:00, la patrulla peruana -de aproximadamente 10 soldados- es conminada por los ecuatorianos y se inicia un breve intercambio de disparos.

El Jefe ecuatoriano del teatro de Operaciones, el General de División Paco Moncayo ordenó el ataque a los peruanos que se encuentren en el Cenepa, la destrucción de todo elemento dentro de lo que consideraba como territorio del Ecuador y el control de las cabeceras del río Cenepa, así comienza el conflicto de 1995.

Las versiones políticas atribuyeron el crecimiento del enfrentamiento a la situación política que reinaba en ambos países, así mientras el presidente ecuatoriano Sixto Durán Ballén se encontraba con bajísimos niveles de aceptación popular, su homólogo peruano Alberto Fujimori preparaba el camino para su reelección. En ambos casos, la popularidad de los mandatarios se incrementó.

Argentina, siendo parte del Protocolo de Rio de Janeiro, y por lo tanto, obligadamente neutral en el conflicto, proporcionó armas a Ecuador para ser usadas en contra del Perú, hecho que se tornó en todo un escándalo internacional que incluso salpico al gobierno venezolano de aquel entonces y del que recién su Presidenta Cristina Kirchner, en ocasión de una visita oficial al Perú el 22 y 23 de marzo de 2010, pidió disculpas a nombre de su país.[2]

En total se despacharon 75 toneladas de armamento por un valor de 33 millones de dólares que comprendían 8 mil fusiles FAL, 36 cañones de 105 y 155 mm., diez mil pistolas de 9 mm., 350 morteros, 50 ametralladoras pesadas, 58 millones de municiones, 45 mil proyectiles de cañones, 9 mil granadas, y explosivos. Estas armas partieron del aeropuerto bonaerense de Ezeiza el 17, 18 y 22 de febrero con destino a Venezuela que después fueron transferidas a Ecuador.[3]

El Cenepa bajo fuego

  • 24 de enero: El Peru moviliza sus tropas hacia el norte mientras la FAE ya tenía lista su escuadra en bases aéreas cercanas a Tiwinsa.
  • 25 de enero: El Perú militariza la zona del Cóndor después conocida como base sur el cual era territorio peruano y donde las tropas ecuatorianas habían cavado trincheras y colocado minas desde hace meses atrás.
  • 26 de enero: Un grupo de comandos peruanos son insertados por un helicóptero detrás de las posiciones ecuatorianas, los cuales no pueden ser repelidos por el ejército ecuatoriano, provocando varias bajas ecuatorianas y la salida en desbandada del resto perdiéndose en la selva y dejando detrás munición y armamento. En este sitio luego retornaron tropas ecuatorianas creándose la Base Norte.
Un helicóptero ecuatoriano Super Puma realizando relevo de tropas durante el conflicto.
  • 27 de enero: Tanto Perú como Ecuador ordenan el despliegue general de sus tropas en la línea fronteriza y la costa del Pacifico listos para atacar en caso de una eventual guerra total. Durante toda la guerra se movilizaron alrededor 140,000 hombres.
  • 28 de enero: A las 7:45 fuerzas peruanas lanzan su primer ataque terrestre contra posiciones ecuatorianas atrincheradas en la cabecera de las aguas del Cenepa. A las 11:05 los ataques se renuevan pero esta vez con apoyo de helicópteros artillados peruanos que ofrecían cobertura a sus tropas terrestres. En este combate se reporta un helicóptero peruano alcanzado por un misil tierra-aire Igla-1E (SA-16). A las 12:05 la fuerza área ecuatoriana (FAE) hace su primera aparición en el valle del Cenepa pero decide retirarse de la zona de conflicto tras ser informada de la presencia de interceptores de la FAP (Fuerza Aérea del Perú).
  • 29 de enero: En un patrón que se repetiría constantemente los próximos días, fuerzas peruanas lanzarían múltiples y simultáneos contraataques en toda el área en un esfuerzo de debilitar las posiciones ecuatorianas. Las fuerzas ecuatorianas responden ante esta situación en Twinza, Cueva de los Tayos, Base Sur y Coangos llegando a derribar un helicóptero de la AEP de fabricación rusa Mi-8TV también se reporta el derribo de un segundo helicóptero por parte de la MANPADS de Ecuador. Al final del día el Perú anuncia que se retomaron 3 bases ecuatorianas, algo que el gobierno del Ecuador desconocería y continuaría con su política de desinformación a la población en general.
  • 31 de enero: Después de 24 horas de calma, tropas peruanas renuevan sus ataques contra Tiwinza, Coangos y Cueva de los Tayos.
  • 1 de febrero: los ataques continúan pero esta vez con el apoyo de artillería pesada. Aviones peruanos biplaza de ataque ligero A-37B hacen su aparición en el campo de guerra, bombardeando posiciones atrincheradas ecuatorianas. Incluso la base de Cóndor Mirador en la cumbre de la cordillera del Cóndor cae bajo fuego enemigo. En aquel día una patrulla peruana que se aproximaba a la Cueva de los Tayos sufrió graves bajas a causa de las minas antipersonales plantadas en aquel lugar.
  • 2 de febrero: Se realizan no menos de 12 ataques de cobertura a tierra por parte de la FAP que ofrecía apoyo a sus tropas que trataban de desalojar a los ecuatorianos de Cueva de los Tayos y Base Sur. Interceptores ecuatorianos que volaban cerca de Guayaquil (zona alejada del conflicto) llegan demasiado tarde y no encuentran ningún objetivo.
  • 3 de febrero: Strikemasters Mk 89 y bombarderos ligeros A-37B ecuatorianos, bajo cobertura aérea de interceptores de la FAE, hacen su primera aparición en el campo de batalla, bombardeando posiciones peruanas pero sin efectividad.
  • 4 de febrero: Embraer EMB 312 Tucano de la FAP realizan una salida nocturna bombardeando la posición enemiga de Tiwinza.
  • 6 de febrero: La FAP hace por primera vez uso de sus bombarderos de reacción Camberra para atacar posiciones ecuatorianas. Un Camberra se reporto como perdido debido a las malas condiciones climatológicas de la zona.
  • 7 de febrero: En un amargo recordatorio de los peligros que conllevan el vuelo a bajas altitudes de aeronaves lentas, un helicóptero Mi-25 peruano es derribado tras una sucesión de por lo menos 2 impactos de misiles antiaéreos Strela. La aviación ecuatoriana no tiene el dominio aéreo y lo demuestran en sus intervenciones.
  • 9 de febrero: La actividad aérea se intensifica en ambas bandos. La FAP lleva a cabo no menos de 16 misiones sacando su flota caza-bombarderos Sukhoi Su-22. Ahora el bombardeo con Camberras también se realiza en operaciones nocturnas, teniendo en jaque a toda tropa ecuatoriana en dicha zona.
  • 10 de febrero: La actividad aérea, que se ha intensificado, continua en la zona de batalla. Durante la mañana bombarderos A-37B y Su-22M son enviados por la FAP para atacar posiciones ecuatorianas. A las 12:45 la FAE reacciona enviando 4 interceptores (2 Mirage F.1JAs y 2 IAI Kfir C.2s) tras haber detectado en sus radares 5 aeronaves aproximándose a 400km/h para ejecutar otra ronda de bombardeos. En la sucesión de hechos un IAI Kfir C.2 derriba un A-37B peruano y un Su-22 peruano es abatido por 2 Mirage F.1; los cuales, al detectar por control de tierra a 2 Mirage-2000 FAP que se aproximaban a la zona, emprenden pronto escape con rumbo norte no pudiendo ser alcanzados.
  • 11 de febrero: A medida que el conflicto terrestre toma fuerza, la actividad aérea en el área se incrementa principalmente de la FAP. preocupados por los eventos de días anteriores, A-37B ecuatorianos lanzan un ataque sobre posiciones recuperadas peruanas. Un A-37B ecuatoriano es alcanzado por un misil de la MANPAD peruana, la tripulación consigue sobrevivir.
  • 13 de febrero: Un grupo de tanques refuerza la brigada 7 Loja ecuatoriana en temor que se repitiera lo del '42, mientras que el Perú lanza fuertes ataques con cobertura aérea en contra de las posiciones ecuatorianas de Coangos y Tiwinza. Un helicóptero Mi-8TV y un Mi-17 peruano son derribados por fuego ecuatoriano(Información más tarde catalogada por los garantes como “información falsa”), ambas bajas son negadas por parte del Perú. Esa misma noche el presidente peruano Alberto Fujimori aparece delante de las cámaras declarando la toma de Tiwinza y por consiguiente la victoria total por parte del Perú.
  • 14-16 de febreo: Los combates continúan a lo largo de toda el área de conflicto. El miércoles 15 de febrero un grupo de periodistas internacionales arriban a Tiwinza tras una invitación del ejército ecuatoriano que con brújulas GPS demuestran las coordenadas exactas de Tiwinza (3° 27' 57.18" Sur, 78° 15'; 8.72" Oeste), hechas públicas a principios de febrero de 1995. Desmintiendo así las declaraciones del presidente peruano Alberto Fujimori, hechas 2 días atrás públicamente. [4]​ - Posteriormente se dá a conocer que dichas coordenadas pertenecían al denominado "Falso Paquisha" (nombre con el que se conocía a las bases "clonadas" por el Ecuador).
  • 17 de febrero: En presencia de 4 países garantes del Protocolo de Rio (Los Estados Unidos de Norte America, Brasil, Chile, Argentina), el vice-ministro ecuatoriano de asuntos exteriores, Marcelo Fernández de Córdoba y el vice-ministro peruano de asuntos exteriores, Eduardo Ponce, firman en Brasil la Declaración de Paz de Itamaraty, confirmando un alto al fuego inmediato y el establecimiento de un grupo de paz MOMEP (Military Observer Mission, Ecuador Peru), encargado de supervisar el cumplimiento del alto al fuego, a través de la puesta a cargo por parte de la MOMEP de las bases de Tiwinza y Base Sur, y el establecimiento de los limites de una zona desmilitarizada.Ecuador y Perú se comprometen a emprender la conversaciones en torno a las causas pendientes de ambos países.
  • 21 de febrero: Los primeros observadores de la MOMEP arriban a la base ecuatoriana de Patuca, pero al notar movimiento ecuatoriano retomando posiciones en territorio peruano se suceden enfrentamientos a lo largo de todo el día que impiden que los observadores alcancen el área de conflicto. Ecuador reclama que helicópteros peruanos sobrevuelan constantemente sobre "posiciones ecuatorianas", violando así el alto al fuego pero corroborando la supremacía aérea en la zona tomada por Ecuador.
  • 22 de febrero: Cinco días después de la firma de la Declaración de Paz de Itamaraty. Ecuador denuncia un nuevo "ataque masivo" peruano, incluso con el "uso de lanzallamas y armas químicas" lo cual fue desmentido por el Perú por no contar con armas químicas. Ese 22 de febrero de 1995 pasó a conocerse en Ecuador como el "Miércoles negro", al perder en una sola jornada de combates el mismo número de soldados que hasta entonces había sumado, tras casi un mes de conflicto armado, en total fueron, según fuentes ecuatorianas, 24 las bajas mortales sumadas en aquel día (cifras extremadamente bajas dado el índice de cadáveres encontrados y ratificados por el ejército del Perú, los cuales ascendían a no menos de 200). El revés militar ecuatoriano es corroborado y reconocido por el Canciller Ecuatoriano Heinz Moeller, en aquel entonces Presidente del Congreso del Ecuador y miembro del Consejo de Seguridad de dicho país, quien sostuvo que en los combates del 22 de febrero de 1995 se habían presentado grandes bajas, calificándolo de el "peor sufrido hasta ahora".
  • 28 de febrero: En los días siguientes las fuerzas armadas peruanas, Comandos del Ejército del Perú y tropa regular, toman Tiwinza sin sufrir grandes pérdidas. Sólo la presión de los garantes, básicamente los EE.UU. logró que el Ecuador respetara el cese del fuego y se estableciera una zona desmilitarizada. De esta manera se firma en Montevideo la declaración de “Reiteración del compromiso a proceder a un inmediato y efectivo cese al fuego”. Si bien incidentes menores se dan a lo largo de los siguientes meses, la Guerra del Cenepa ha terminado oficialmente.[5]

Término del conflicto

Declaración de Paz de Itamaraty

El 17 de febrero de 1995, se firma la Declaración de Paz de Itamaraty, en Brasil, que determina el retiro de las tropas de ambos países.


Periódistas peruanos llegan junto al Presidente de la República Alberto Fujimori al izamiento de la bandera nacional del Perú en Cueva de los Tayos.

En la actualidad aún existe la controversia y la duda acerca de cuál fue el resultado de la guerra ya que ambos lados aseguran ser los vencedores del conflicto. Esto ocurre por la campaña de desinformación por parte del Gobierno Ecuatoriano, que se realizó durante todo el conflicto. Dicha campaña hizo creer a su población que iban ganando el conflicto para que hubiera mas enlistados y no se repare en la cantidad de muertos que tenían hasta entonces, siendo así, el número de efectivos ecuatorianos no bajaba mucho, algo muy distinto a la realidad.

Acuerdo de Brasilia

Observadores de los países garantes del Protocolo de Río de Janeiro se desplazan hasta la zona del conflicto. El 2 de marzo, tras cinco semanas en enfrentamientos y escaramuzas, terminan los combates. Hay numerosos heridos y muertos por ambos lados.

Una nueva ronda de negociaciones conduce al acuerdo de Brasilia, el 24 de octubre de 1998, firmado por el presidente peruano Alberto Fujimori y su colega ecuatoriano Jamil Mahuad.

Los países garantes (Argentina, Brasil, Chile y Estados Unidos de América) resolvieron que la demarcación de la frontera sigue siendo, como lo estableció el tratado de Río de Janeiro de 1942, la que señalan las altas cumbres de la cordillera del Cóndor y que la región de Tiwinza, de 20 Km², pertenece al Perú, aunque se "presta" 1 km² de la frontera del Cóndor a Ecuador para enterrar a sus muertos "sin nombre" y realizar actos conmemorativos binacionales y no militares. A todo aquel que nazca en Tiwinza, se le considerará peruano.

El Ecuador aceptó el fallo de NO transitar por el río Amazonas ni sus afluentes septentrionales; aceptó lo establecido en el Protocolo de Paz, Amistad y Límites de Río de Janeiro del 29 de enero de 1942, conocido como Acuerdo de Brasilia.

Un parque binacional ecológico, aún por implementar, sería la representación de la paz entre ambos países hermanos. También se establecieron los nuevos hitos en Cusumasa-Bumbuiza y Yaupi-Santiago (vecinos de Tiwinza) en el departamento de Loreto, en el sector de Lagartococha y el Güeppi.

En mayo de 1999, finalmente se colocó el último hito en la frontera. Con esta demarcación definitiva, Ecuador no obtuvo su pretensión histórica de anexionarse Tumbes, Jaén y Maynas ni de su pretensión amazónica pues se reconoció que estos territorios son peruanos, como quedó zanjado con la colocación definitiva de los hitos. [cita requerida]

Bibliografía

Véase también

Notas

Enlaces externos