Impacto social y ambiental del aceite de palma

De Wikipedia, la enciclopedia libre

El aceite de palma, producido a partir de la palma aceitera (Elaeis spp.), es una fuente básica de ingresos para muchos agricultores del sudeste asiático, África central y occidental, América central y del sur. Se utiliza localmente como aceite de cocina, se exporta para su uso en muchos alimentos comerciales y productos de cuidado personal y se convierte en biocombustible. Produce hasta 10 veces más aceite por unidad de superficie que la soja (Glycine max), la colza (Brassica napus) o el girasol (Helianthus annuus).[1]

Las palmas aceiteras producen el 38% de la producción mundial de aceite vegetal en el 6% de las tierras agrícolas de aceite vegetal del mundo.[1]​ Las plantaciones de palma aceitera, típicamente monocultivos, están bajo un escrutinio cada vez mayor por sus efectos en el medio ambiente, incluida la pérdida de tierras forestales biodiversas que secuestran carbono.[2]​ También existe preocupación por el desplazamiento y la alteración de las poblaciones humanas y animales debido al cultivo de palma aceitera.[3][4]

Estadísticas[editar]

Palma africana de aceite (Elaeis guineensis)
El fruto de la palma aceitera es uno de los cultivos primarios más producidos en el mundo.

Se estima que 1,5 millones de pequeños agricultores cultivan este cultivo en Indonesia, junto con alrededor de 500 000 personas empleadas directamente en el sector en Malasia, además de aquellas relacionadas con industrias relacionadas.[5][6]

En 2006, la superficie acumulada de plantaciones de palma aceitera era de aproximadamente 11 000 000 hectáreas.[7]​ En 2005, la Asociación de Aceite de Palma de Malasia, responsable de aproximadamente la mitad de la cosecha mundial, estimó que gestiona alrededor de 500 millones de palmeras perennes que secuestran carbono.[5]​ La demanda de aceite de palma ha ido aumentando y se espera que siga aumentando.

Entre 1967 y 2000, la superficie cultivada en Indonesia pasó de menos de 2 kilómetros cuadrados (0,8 mi²) a más de 30 kilómetros cuadrados (11,6 mi²) . La deforestación en Indonesia para obtener aceite de palma (y la tala ilegal) es tan rápida que un informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) de 2007 decía que la mayor parte de los bosques del país podrían haber sido destruidos para 2022. La tasa de pérdida de bosques ha disminuido en la última década.[1]

Se pronostica que la producción mundial alcanzará un récord de 46,9 millones de toneladas en 2010, frente a los 45,3 millones de 2009, aportando Indonesia la mayor parte del aumento.[1]

Cuestiones sociales[editar]

La palma aceitera es un cultivo económico valioso y proporciona una fuente de empleo.[8][9]​ Permite a los pequeños propietarios participar en la economía monetaria [10]​ y, a menudo, da como resultado mejoras en la infraestructura local y un mayor acceso a servicios como escuelas y centros de salud. En algunas zonas, el cultivo de palma aceitera ha reemplazado las prácticas tradicionales, a menudo debido al mayor potencial de ingresos del aceite de palma.[8][9]​ La modernización de las prácticas de cultivo ha generado problemas como la inseguridad alimentaria. Este problema surge del uso intensivo de la tierra que conduce a la degradación del suelo.[11]​ Como resultado, la capacidad de los lugareños para producir sus propios alimentos se ha reducido y tienen que buscar alimentos en otras áreas, ya que ya no pueden depender exclusivamente de sus tierras.[12]

En algunos casos, la tierra ha sido desarrollada mediante plantaciones de palma aceitera sin consultar ni compensar a los pueblos indígenas que ocupan la tierra. Esto ha ocurrido en Papúa Nueva Guinea,[13]Colombia,[14]​ e Indonesia.[15]​ En el estado de Sarawak en el Borneo malasio, se ha debatido si hubo un nivel apropiado de consulta con la comunidad de Long Teran Kanan antes del desarrollo de tierras locales para plantaciones de palma aceitera.[16]​ La apropiación de tierras nativas ha llevado a conflictos entre las plantaciones y los residentes locales en cada uno de estos países.[13][14][15][16]

Según un informe de 2008 de las ONG, entre ellas Amigos de la Tierra, las empresas de aceite de palma también habrían utilizado la fuerza para adquirir tierras de comunidades indígenas en Indonesia.[15]​ Además, algunas plantaciones de palma aceitera de Indonesia dependen de mano de obra importada o de inmigrantes indocumentados, lo que ha generado preocupación sobre las condiciones laborales y los impactos sociales de estas prácticas.[17]​ Las cuestiones relativas a la explotación del trabajo infantil también han generado una gran preocupación.[18]

Deforestación[editar]

Pérdida de hábitat[editar]

La producción de aceite de palma requiere una deforestación intensiva y esto ha llevado a una pérdida gradual de flora y fauna en las áreas donde se talan tierras para el cultivo de aceite de palma.[19]​ Las selvas tropicales de países como Malasia e Indonesia han sido los países más ideales para tener grandes plantaciones de aceite de palma, ya que proporcionan el clima más adecuado con abundantes precipitaciones y sol durante todo el año.[20]​ Entre los años 1990 y 2005, la superficie total de tierra utilizada en Malasia para el cultivo de aceite de palma aumentó en 2,4 millones de hectáreas y alcanzó los 4,2 millones de hectáreas.[21]​ Durante ese período, se perdieron más de 1,1 millones de hectáreas de selva tropical. La diversa biodiversidad que posee cada selva tropical ha ido disminuyendo a un ritmo rápido ya que la fauna suele ser muy frágil y fácilmente afectada por la deforestación.[22]​ La fauna silvestre se ha visto más afectada en zonas donde se han talado importantes extensiones de tierra, destinadas a fines comerciales de aceite de palma, para permitir la plantación de árboles.[23]​ Los animales se han visto obligados a trasladarse y han entrado cada vez más en contacto con los humanos, ya que han comenzado a deambular por las aldeas circundantes en busca de alimento.[24]​ Algunos animales no han podido adaptarse y reubicarse en otros lugares, lo que ha provocado que sus poblaciones disminuyan significativamente y esto ha alterado las relaciones simbióticas que la flora y la fauna tienen con su hábitat. La deforestación afecta negativamente a la biodiversidad cuando los bosques se convierten en plantaciones y deja una riqueza de especies relativamente baja en los bosques primarios en comparación con los bosques no perturbados.[21]​ Una especie que suscita especial preocupación es el orangután de Borneo, que se encuentra en peligro crítico de extinción. Un estudio notable de 2018 mostró que entre 1999 y 2015, más de 100 000 orangutanes se perdieron debido a la explotación insostenible de recursos naturales (incluida la industria del aceite de palma). Este número se obtuvo rastreando el número de nidos durante este período de estudio de 16 años. Los resultados muestran que los nidos disminuyeron de 22,5 nidos por kilómetro al comienzo del estudio a 10,1 nidos por kilómetro al final del estudio.[25]​ Por otro lado, el cultivo de E. guineensis también ayuda a impulsar aún más las invasiones de especies, por ejemplo de la hormiga Anoplolepis gracilipes en el sudeste asiático.[26]​ La biodiversidad sufre en casi todos los taxones: Room (1975) y Fayle et al (2010) lo encuentran en el caso de las hormigas, Danielsen y Heegaard (1995) en el caso de los murciélagos y primates, Liow et al (2001) en el de las abejas, Chung et al (2000) en el de los escarabajos, Peh et al (2006) en el de las aves, Davis y Philips (2005) para escarabajos peloteros, Hassall et al (2006) para isópodos, Glor et al (2001) para lagartos, Chang et al (1997) para mosquitos, Chey (2006) para polillas y Bernard et al (2009) para pequeños mamíferos.[27][28]​ Casi todos los taxones también sufren pérdida de abundancia, pero hay excepciones, especies que aumentan la abundancia pero aun así pierden riqueza de especies: Davis y Philips (2005) lo encuentran en los escarabajos peloteros, Hassall et al (2006) en los isópodos, Glor et al (2001) en los lagartos y Danielsen y Heegaard (1995) en murciélagos.[27][28]​ La excepción muy inusual son las abejas, que según Liow et al (2001) pierden abundancia pero ganan diversidad de especies en la palma aceitera.

Degradación de los suelos[editar]

El proceso de eliminación de la flora existente y plantación de palma aceitera es perjudicial para la calidad del suelo.[29]​ Cuando se elimina la flora existente para dar paso a las nuevas plantas, el suelo que la rodea a menudo se erosiona.[30]​ Cuando se plantan palmeras de aceite, se utilizan grandes cantidades de fertilizantes y pesticidas para asegurar un rápido crecimiento y la salud de cada árbol.[31]​ Las palmas aceiteras más jóvenes absorben los nutrientes más valiosos del suelo, lo que degrada la calidad del suelo.[32]​ A medida que los árboles jóvenes absorben los nutrientes, se produce un agotamiento de los nutrientes y, en consecuencia, hay un nivel más bajo de nutrientes restantes para otros árboles.[33]​ Este problema es también otra causa del mayor uso de fertilizantes durante el proceso de producción de aceite de palma. Las distancias entre palmeras de aceite adyacentes en las plantaciones también se han diseñado para que sean muy cercanas a fin de optimizar el uso del limitado espacio disponible.[34]​ Esto ha impactado aún más la calidad del suelo porque a medida que los árboles crecen, requieren más minerales y agua del suelo. Debido a las cortas distancias entre los árboles, existe un suministro limitado de nutrientes de los que los árboles pueden depender, lo que lleva a que los trabajadores de las plantaciones suministren a los árboles mayores cantidades de fertilizantes, pesticidas y agua.[35]​ Este proceso daña aún más el estado del suelo y dificulta la supervivencia de la flora y la fauna existentes en la zona.[36]​ Tuma et al (2019) encuentran que la sustitución de bosques por plantaciones de palma aceitera reduce el número de especies bioturbadoras, aunque no el volumen real de bioturbación realizada.[28]

En países tropicales como Malasia e Indonesia, donde se encuentran la mayoría de las plantaciones de palma aceitera,[37]​ hay lluvias continuas y exposición al sol durante todo el día. Las plantaciones de palma aceitera ubicadas geográficamente cerca de los ríos han exacerbado los impactos en las comunidades locales circundantes. Esto se debe al mayor uso de fertilizantes y pesticidas, lo que ha llevado a que las frecuentes lluvias arrastren mayores cantidades de ambos a los ríos.[38]​ Esto es un problema porque los ríos son fundamentales para la vida diaria de los aldeanos locales.[39]​ Utilizan el agua del río para consumo personal y también utilizan el río como fuente de alimento, lo que los hace vulnerables a los residuos de fertilizantes y pesticidas.[40]​ El agua no tratada a la que están expuestos los aldeanos locales puede causar efectos perjudiciales para la salud, incluidas enfermedades como el cólera, E. coli y el envenenamiento por plomo.[41][42]

Los daños causados por la erosión del suelo y su mala calidad también han afectado los medios de vida de muchos aldeanos locales que viven cerca de estas plantaciones de palma aceitera, ya que ya no pueden depender únicamente de sus tierras para el cultivo de alimentos y madera.[43]​ Los aldeanos locales ahora se inclinan a buscar nuevas fuentes de alimentos y materiales para refugiarse. Como resultado, los aldeanos locales se han visto indirectamente obligados a mudarse y reubicarse dependiendo del alcance de la pérdida de plantas y animales nativos de la zona.[44]​ Esto ha generado complicaciones económicas, ya que los gobiernos ahora necesitan reasignar sus recursos para apoyar a estas comunidades típicamente marginadas.[8]

Otros impactos ambientales[editar]

En Indonesia, la creciente demanda de aceite de palma y madera ha provocado la tala de bosques tropicales en los parques nacionales del país. Según un informe de 2007 publicado por el PNUMA, al ritmo de deforestación en ese momento, se estima que el 98 por ciento de los bosques de Indonesia serían destruidos para 2022 debido a la tala legal e ilegal, los incendios forestales y el desarrollo de plantaciones de palma aceitera.[45]

Malasia, el segundo mayor productor de aceite de palma, se ha comprometido a conservar un mínimo del 50 por ciento de su superficie total como bosques. En 2010, el 58 por ciento de Malasia estaba cubierta de bosques.[46]

El cultivo de palma aceitera ha sido criticado por:

Contaminación del agua[editar]

En algunos estados donde se establece la palma aceitera, la aplicación laxa de la legislación ambiental conduce a la invasión de plantaciones en franjas ribereñas,[56]​ y a la liberación de contaminantes como el efluente de la molienda de aceite de palma (POME, por sus siglas en inglés para Palm Oil Mill Effluent) al medio ambiente.[56]​ POME es un producto de desecho creado durante las etapas finales de la extracción del aceite de palma. El proceso de gestión de residuos puede resultar muy difícil y costoso. Como resultado, un método común de eliminación implica la descarga en depósitos de agua cercanos.[57]​ POME contiene altas concentraciones de nutrientes y puede fomentar el crecimiento de algas, que agotan los niveles de oxígeno y pueden tener implicaciones negativas para la vida acuática y, en consecuencia, alterar los ecosistemas.[58][59]

Se han desarrollado prácticas más respetuosas con el medio ambiente.[60][61]​ Entre esos enfoques se encuentra el tratamiento anaeróbico de POME, que podría permitir la producción de biogás (metano) y la generación de electricidad, pero es muy difícil mantener condiciones óptimas de crecimiento para los organismos anaeróbicos que descomponen el acetato en metano (principalmente Methanosaeta concilii, una especie de Archaea).[62]

Emisiones de gases de efecto invernadero[editar]

Se afirma que los daños a las turberas, en parte debido a la producción de aceite de palma, contribuyen a la degradación ambiental, incluido el cuatro por ciento de las emisiones globales de gases de efecto invernadero,[63]​ y el ocho por ciento de todas las emisiones globales causadas anualmente por la quema de combustibles fósiles,[64]​ debido a la limpieza de grandes áreas de selva tropical para plantaciones de palma aceitera. Muchos bosques tropicales de Indonesia y Malasia se encuentran sobre turberas que almacenan grandes cantidades de carbono. La tala de bosques y el drenaje de pantanos para dar paso a las plantaciones libera este carbono. Un estudio revela que la conversión de turberas contribuye entre el 16,6 y el 27,9 por ciento del total de emisiones de gases de efecto invernadero de Malasia e Indonesia combinadas.[65]​ El proceso de drenaje de las turberas y el crecimiento de palmeras jóvenes genera un 50 por ciento más de emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con las plantaciones maduras.[65]​ Esta es una preocupación creciente entre ecologistas y ambientalistas a medida que más turberas tropicales se están convirtiendo en plantaciones debido a la escasez de tierra, para satisfacer la creciente demanda de aceite de palma.[66]

Grupos ambientalistas como Greenpeace afirman que esta deforestación produce muchas más emisiones de las que eliminan los biocombustibles.[67][68]​ Greenpeace identificó turberas indonesias (bosques tropicales únicos cuyo denso suelo puede quemarse para liberar emisiones de carbono) que están siendo destruidas para dar paso a plantaciones de aceite de palma. Greenpeace sostiene que las turberas representan enormes sumideros de carbono y afirman que la destrucción ya representa el cuatro por ciento de las emisiones globales anuales de CO₂.[69]​ Sin embargo, según el Laboratorio de Investigación de Turba Tropical, al menos una medición ha demostrado que las plantaciones de palma aceitera son sumideros de carbono porque las palmas aceiteras convierten el dióxido de carbono en oxígeno tal como lo hacen otros árboles,[70]​ y, como se informó en la Segunda Comunicación Nacional de Malasia a Según la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, las plantaciones de palma aceitera contribuyen al sumidero neto de carbono de Malasia.[71]

Greenpeace registró la destrucción de turberas en la provincia indonesia de Riau, en la isla de Sumatra, donde se encuentra el 25 por ciento de las plantaciones de palma aceitera de Indonesia. Greenpeace afirma que esto tendría consecuencias devastadoras para las turberas de Riau, que ya han sido degradadas por el desarrollo industrial y almacenan la enorme cantidad de 14 600 millones de toneladas de carbono, aproximadamente las emisiones de gases de efecto invernadero de un año.[72][73][74]

Se ha pedido a ambientalistas y conservacionistas que se asocien con compañías de aceite de palma para comprar pequeñas extensiones de plantaciones de palma existentes, de modo que puedan utilizar las ganancias para crear reservas naturales de propiedad privada.[75]​ Se ha sugerido que se trata de una estrategia más productiva que el actual enfoque de confrontación que amenaza los medios de vida de millones de pequeños agricultores.[75][76]

Niebla con humo[editar]

La niebla con humo, una forma de contaminación del aire, es un importante problema recurrente en todo el Sudeste Asiático, en parte relacionada con la quema de selvas tropicales y bosques pantanosos de turbera para despejar tierras para plantaciones de palma aceitera.[77]

Aumento de la demanda[editar]

Las empresas de alimentos y cosméticos, incluidas ADM, Unilever, Cargill, Procter & Gamble, Nestlé, Kraft y Burger King, están impulsando la demanda de nuevos suministros de aceite de palma,[78]​ la demanda fue impulsada en parte por la necesidad de reemplazar el aceite con alto contenido de grasas trans. aceites de contenido.[79]

Aunque el aceite de palma se utiliza en la producción de biocombustibles y se han hecho propuestas para usarlo en grandes instalaciones,[80]​ un informe de 2012 del Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias concluyó que el aumento en la producción de aceite de palma está relacionado con la demanda de alimentos, no demandas de biocombustibles.[81]

Biodiésel[editar]

El biodiesel elaborado a partir de aceite de palma cultivado en tierras no forestales sostenibles y en plantaciones establecidas reduce las emisiones de gases de efecto invernadero.[82]​ Según Greenpeace, la tala de turberas para plantar palmas aceiteras libera grandes cantidades de gases de efecto invernadero, y el biodiesel producido a partir de palmas aceiteras cultivadas en estas tierras puede no resultar en una reducción neta de las emisiones de gases de efecto invernadero.[83]​ Sin embargo, una investigación realizada por la Unidad de Investigación de Turba Tropical de Malasia ha descubierto que las plantaciones de palma aceitera desarrolladas en turberas producen menores emisiones de dióxido de carbono que las turberas forestales. Sin embargo, se ha sugerido que esta unidad de investigación fue encargada por políticos que tienen intereses en la industria del aceite de palma.[84]

En 2011, ocho de las plantaciones de la Autoridad Federal de Desarrollo de Tierras (FELDA) de Malasia fueron certificadas bajo el Sistema Internacional de Certificación de Carbono y Sostenibilidad (ISCC), convirtiéndose en parte de la primera cadena de suministro y producción de biodiesel de palma certificada por ISCC en Asia. Este sistema de certificación cumplía con la Directiva de Energías Renovables (RED) de la Unión Europea.[85]

En 2012, la Comisión Europea aprobó el sistema de certificación de biocombustibles de la RSPO que permitía la venta en Europa de biocombustibles de aceite de palma sostenible certificado. No obstante, el sistema no fue renovado y expiró el 30 de junio de 2021. Los Estados miembros podrán utilizar (e importar) biocombustibles a base de aceite de palma, pero no podrán incluir estos volúmenes al calcular en qué medida han cumplido sus objetivos de energías renovables.[86]

Véase también[editar]

Referencias[editar]

  1. a b c d «The other oil spill». The Economist. ISSN 0013-0613. Consultado el 17 de marzo de 2024. 
  2. «Stanford researchers show oil palm plantations are clearing carbon-rich tropical forests in Borneo». EurekAlert! (en inglés). Consultado el 17 de marzo de 2024. 
  3. Joe, Coroneo-Seaman (22 de febrero de 2023). «Restoring wildlife to oil palm landscapes». China Dialogue (en inglés). Consultado el 17 de marzo de 2024. 
  4. «Oro Landowners' Declaration on Large-Scale Commercial Extraction of Natural Resources and the Expansion of Oil Palm Nucleus Estates». WRM English (en inglés estadounidense). Forest Peoples Programme. 24 de mayo de 2014. Consultado el 17 de marzo de 2024. 
  5. a b «MPOA and sustainable palm oil». Malaysian Palm Oil Association. 2005. 
  6. Nor Aini Bt Kamarul Zaman, Kamar (16 de diciembre de 2007). «Malaysian government not concerned with rising palm oil prices – minister». Forbes Magazine. AFX News. Archivado desde el original el 7 de diciembre de 2022. Consultado el 17 de marzo de 2020. 
  7. «Palm oil plantations already estimated at occupying 11 million hectares». WWF (Panda.org). Archivado desde el original el 14 de octubre de 2007. Consultado el 29 de septiembre de 2007. 
  8. a b c Budidarsono, Suseno. «Socio-Economic Impact Assessment of Palm Oil Production». World Agroforestry Centre. Consultado el 15 de enero de 2013. 
  9. a b Norwana, Awang Ali Bema Dayang (2011). «The local impacts of oil palm expansion in Malaysia». cifor.org. Center for International Forestry Research. Consultado el 15 de enero de 2013. 
  10. The Report: Malaysia 2011. Oxford Business Group. 2011. p. 295. ISBN 9781907065460. Consultado el 24 de agosto de 2012. 
  11. Guillaume, Thomas; Holtkamp, Anna Mareike; Damris, Muhammad; Brümmer, Bernhard; Kuzyakov, Yakov (16 de septiembre de 2016). «Soil degradation in oil palm and rubber plantations under land resource scarcity». Agriculture, Ecosystems & Environment (en inglés) 232: 110-118. ISSN 0167-8809. doi:10.1016/j.agee.2016.07.002. 
  12. Rist, Lucy; Feintrenie, Laurène; Levang, Patrice (1 de abril de 2010). «The livelihood impacts of oil palm: smallholders in Indonesia». Biodiversity and Conservation (en inglés) 19 (4): 1009-1024. ISSN 1572-9710. doi:10.1007/s10531-010-9815-z. 
  13. a b «Oro Landowners' Declaration on Large-Scale Commercial Extraction of Natural Resources and the Expansion of Oil Palm Nucleus Estates». Forest Peoples Programme. Archivado desde el original el 24 de mayo de 2014. Consultado el 29 de noviembre de 2007. 
  14. a b «Palm oil cultivation for biofuel blocks return of displaced people in Colombia». iDMC. Archivado desde el original el 27 de noviembre de 2007. Consultado el 29 de noviembre de 2007. 
  15. a b c «"Losing Ground" - report on indigenous communities and oil palm development from LifeMosaic, Sawit Watch and Friends of the Earth». Forest Peoples Programme. 28 de febrero de 2008. Consultado el 4 de enero de 2013. 
  16. a b Colchester, Marcus (2 de octubre de 2012). «Free, Prior and Informed Consent in the Palm Oil Sector - Sarawak: IOI-Pelita and the community of Long Teran Kanan». Forest Peoples Program. Consultado el 4 de enero de 2013. 
  17. «Ghosts on our Own Land: Indonesian Oil Palm Smallholders and the Roundtable on Sustainable Palm». Forest Peoples Programme. Archivado desde el original el 12 de julio de 2010. Consultado el 20 de octubre de 2012. 
  18. «'We gave our sweat and blood': Palm oil workers cite child labour, slavery and rape». Global News (en inglés estadounidense). Consultado el 16 de febrero de 2021. 
  19. Wilcove, David S.; Koh, Lian Pin (2010-04). «Addressing the threats to biodiversity from oil-palm agriculture». Biodiversity and Conservation (en inglés) 19 (4): 999-1007. ISSN 0960-3115. doi:10.1007/s10531-009-9760-x. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  20. Chow, C.S. (1992). «The effects of season, rainfall and cycle on oil palm yield in Malaysia». Elaeis 4 (1): 32-43. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  21. a b Fitzherbert, E; Struebig, M; Morel, A; Danielsen, F; Bruhl, C; Donald, P; Phalan, B (2008-10). «How will oil palm expansion affect biodiversity?». Trends in Ecology & Evolution (en inglés) 23 (10): 538-545. doi:10.1016/j.tree.2008.06.012. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  22. Koh, Lian Pin; Wilcove, David S. (2008-06). «Is oil palm agriculture really destroying tropical biodiversity?». Conservation Letters (en inglés) 1 (2): 60-64. ISSN 1755-263X. doi:10.1111/j.1755-263X.2008.00011.x. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  23. Edwards, David P.; Hodgson, Jenny A.; Hamer, Keith C.; Mitchell, Simon L.; Ahmad, Abdul H.; Cornell, Stephen J.; Wilcove, David S. (2010-08). «Wildlife‐friendly oil palm plantations fail to protect biodiversity effectively». Conservation Letters (en inglés) 3 (4): 236-242. ISSN 1755-263X. doi:10.1111/j.1755-263X.2010.00107.x. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  24. «Palm oil and biodiversity». www.iucn.org (en inglés). Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  25. Voigt, Maria; Wich, Serge A.; Ancrenaz, Marc; Meijaard, Erik; Abram, Nicola; Banes, Graham L.; Campbell-Smith, Gail; d’Arcy, Laura J. et al. (2018-03). «Global Demand for Natural Resources Eliminated More Than 100,000 Bornean Orangutans». Current Biology (en inglés) 28 (5): 761-769.e5. doi:10.1016/j.cub.2018.01.053. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  26. Malhi, Yadvinder; Gardner, Toby A.; Goldsmith, Gregory R.; Silman, Miles R.; Zelazowski, Przemyslaw (17 de octubre de 2014). «Tropical Forests in the Anthropocene». Annual Review of Environment and Resources (en inglés) 39 (1): 125-159. ISSN 1543-5938. doi:10.1146/annurev-environ-030713-155141. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  27. a b Foster, William A.; Snaddon, Jake L.; Turner, Edgar C.; Fayle, Tom M.; Cockerill, Timothy D.; Ellwood, M. D. Farnon; Broad, Gavin R.; Chung, Arthur Y. C. et al. (27 de noviembre de 2011). «Establishing the evidence base for maintaining biodiversity and ecosystem function in the oil palm landscapes of South East Asia». Philosophical Transactions of the Royal Society B: Biological Sciences (en inglés) 366 (1582): 3277-3291. ISSN 0962-8436. PMC 3179631. PMID 22006968. doi:10.1098/rstb.2011.0041. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  28. a b c Eggleton, Paul (17 de octubre de 2020). «The State of the World's Insects». Annual Review of Environment and Resources (en inglés) 45 (1): 61-82. ISSN 1543-5938. doi:10.1146/annurev-environ-012420-050035. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  29. Khatun, Rahima; Reza, Mohammad Imam Hasan; Moniruzzaman, M.; Yaakob, Zahira (2017-09). «Sustainable oil palm industry: The possibilities». Renewable and Sustainable Energy Reviews (en inglés) 76: 608-619. doi:10.1016/j.rser.2017.03.077. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  30. Hartemink, Alfred E. "Soil Erosion: Perennial Crop Plantations". ISRIC–World Soil Information, Wageningen, the Netherlands.
  31. Moser, Stefan; Mußhoff, Oliver (2016-02). «Ex‐ante Evaluation of Policy Measures: Effects of Reward and Punishment for Fertiliser Reduction in Palm Oil Production». Journal of Agricultural Economics (en inglés) 67 (1): 84-104. ISSN 0021-857X. doi:10.1111/1477-9552.12114. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  32. Nkongho, Raymond N.; Feintrenie, Laurène; Levang, Patrice (2014-03). «Strengths and weaknesses of the smallholder oil palm sector in Cameroon». OCL 21 (2): D208. ISSN 2257-6614. doi:10.1051/ocl/2013043. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  33. Soil nutrient changes in Ultisols under oil palm in Johor, Malaysia | Kah Joo Goh | Journal of Oil Palm, Environment and Health (JOPEH) (en inglés). 5 de marzo de 2012. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  34. McCarthy, John F (2012-11). «Certifying in Contested Spaces: private regulation in Indonesian forestry and palm oil». Third World Quarterly (en inglés) 33 (10): 1871-1888. ISSN 0143-6597. doi:10.1080/01436597.2012.729721. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  35. Foong, Steve Z.Y.; Goh, Carmen K.M.; Supramaniam, Christina V.; Ng, Denny K.S. (2019-01). «Input–output optimisation model for sustainable oil palm plantation development». Sustainable Production and Consumption (en inglés) 17: 31-46. doi:10.1016/j.spc.2018.08.010. Consultado el 18 de marzo de 2024. 
  36. Tarmizi, A M; Mohd Tayeb, D. "Nutrient Demands Of Tenera Oil Palm Planted On Inland Soils Of Malaysia". Journal of Oil Palm Research. 18: 204–209. S2CID 73527301.
  37. «GreenPalm :: Which countries grow and produce palm oil?». web.archive.org. 10 de marzo de 2022. Consultado el 19 de marzo de 2024. 
  38. Rulli, Maria Cristina; Casirati, Stefano; Dell’Angelo, Jampel; Davis, Kyle Frankel; Passera, Corrado; D’Odorico, Paolo (2019-05). «Interdependencies and telecoupling of oil palm expansion at the expense of Indonesian rainforest». Renewable and Sustainable Energy Reviews (en inglés) 105: 499-512. doi:10.1016/j.rser.2018.12.050. Consultado el 19 de marzo de 2024. 
  39. Tømte, Aksel (11 de septiembre de 2019). «The human cost of palm oil development». The Conversation (en inglés estadounidense). Consultado el 19 de marzo de 2024. 
  40. A.A.B.D., Norwana; R., Kunjappan; M., Chin; G., Schoneveld; L., Potter; R., Andriani (2012). The local impacts of oil palm expansion in Malaysia: An assessment based on a case study in Sabah State. Center for International Forestry Research (CIFOR). doi:10.17528/cifor/003771. Consultado el 19 de marzo de 2024. 
  41. Walter, A; Wagai, Samuel; Arama, Peter; Ogur, Joseph (2011). "Antibacterial activity of Moringa oleifera and Moringa stenopetala methanol and n-hexane seed extracts on bacteria implicated in water borne diseases". African Journal of Microbiology Research. S2CID 53500935.
  42. «Heavy Metals in Fertilizers - MN Dept. of Health». www.health.state.mn.us. Consultado el 19 de marzo de 2024. 
  43. Afandi, A M; Zuraidah, Y; Nurzuhaili, H A Z A; Zulkifli, H; Yaqin (2018). "Managing Soil Deterioration and Erosion under Oil Palm". Oil Palm Bulletin. 75: 1–10. S2CID 195177630.
  44. McElwee, Pamela D. (2006). "Displacement and Relocation Redux: Stories from Southeast Asia". Conservation and Society. 4 (3): 396–403. ISSN 0972-4923. JSTOR 26396616.
  45. a b Nelleman, Christian, ed. (6 de febrero de 2007). The Last Stand of The Orangutan. United Nations Environment Programme. Consultado el 20 de marzo de 2024. 
  46. Morales, Alex (18 de noviembre de 2010). «Malaysia Has Little Room for Expanding Palm-Oil Production, Minister Says». Bloomberg. Consultado el 20 de marzo de 2024. 
  47. Doom, Justin (21 de junio de 2012). «Deforestation Emissions May Be a Third of Prior Estimates». www.bloomberg.com. Consultado el 20 de marzo de 2024. 
  48. Hakim, Zakki (2 de marzo de 2009). «Indonesian tiger catchers race against time». San Diego Union-Tribune (en inglés estadounidense). Consultado el 20 de marzo de 2024. 
  49. IUCN (8 de febrero de 2016). Pongo pygmaeus: Ancrenaz, M., Gumal, M., Marshall, A.J., Meijaard, E., Wich , S.A. & Husson, S.: The IUCN Red List of Threatened Species 2023: e.T17975A247631797 (en inglés). International Union for Conservation of Nature. doi:10.2305/iucn.uk.2023-1.rlts.t17975a247631797.en. Consultado el 20 de marzo de 2024. 
  50. a b Brown, Ellie; Jacobson, Michael F. (May 2005). "Cruel Oil. How Palm oil Harms Health, Rainforest & Wildlife" (PDF). Center for Science in the Public Interest.. Consultado el 20 de marzo de 2024. 
  51. Human Development Report 2007 – 2008, Chapter III: Avoiding dangerous climate change: strategies for mitigation United Nations Development Program
  52. «Biodiversity Hotspots». Consultado el 25 de marzo de 2024. 
  53. «Land is life: Land rights and oil palm development in Sarawak». 2007. Consultado el 25 de marzo de 2024. 
  54. «Indigenous community forcibly evicted for palm oil in Indonesian Borneo». Mongabay Environmental News (en inglés estadounidense). 1 de noviembre de 2011. Consultado el 25 de marzo de 2024. 
  55. Morand, Serge; Lajaunie, Claire (24 de marzo de 2021). «Outbreaks of Vector-Borne and Zoonotic Diseases Are Associated With Changes in Forest Cover and Oil Palm Expansion at Global Scale». Frontiers in Veterinary Science 8. ISSN 2297-1769. PMC 8024476. PMID 33842581. doi:10.3389/fvets.2021.661063. Consultado el 25 de marzo de 2024. 
  56. a b «Cut Down Oil Palm on River Banks, Plantations Warned». Redorbit (en inglés estadounidense). 15 de julio de 2007. Consultado el 26 de marzo de 2024. 
  57. Osman, Nurul Atiqah; Ujang, Farhana Aziz; Roslan, Ahmad Muhaimin; Ibrahim, Mohamad Faizal; Hassan, Mohd Ali (20 de abril de 2020). «The effect of Palm Oil Mill Effluent Final Discharge on the Characteristics of Pennisetum purpureum». Scientific Reports (en inglés) 10 (1). ISSN 2045-2322. PMC 7171106. PMID 32313095. doi:10.1038/s41598-020-62815-0. Consultado el 26 de marzo de 2024. 
  58. Todd, Peter A.; Ong, Xueyuan; Chou, Loke Ming (2010-04). «Impacts of pollution on marine life in Southeast Asia». Biodiversity and Conservation (en inglés) 19 (4): 1063-1082. ISSN 0960-3115. doi:10.1007/s10531-010-9778-0. Consultado el 26 de marzo de 2024. 
  59. Nur, Muhamad Maulana Azimatun; Swaminathan, Manasveni Kilnagar; Boelen, P.; Buma, A. G. J. (2019-08). «Sulfated exopolysaccharide production and nutrient removal by the marine diatom Phaeodactylum tricornutum growing on palm oil mill effluent». Journal of Applied Phycology (en inglés) 31 (4): 2335-2348. ISSN 0921-8971. doi:10.1007/s10811-019-01780-2. Consultado el 26 de marzo de 2024. 
  60. Environmental Impact Assessment (EIA) Guidelines for Oil Palm Plantation Development (PDF). Archivado desde el original (PDF) en 2008-02-27. Recuperado en 2007-11-29.
  61. «Roundtable on Sustainable Palm Oil (RSPO)». web.archive.org. 6 de julio de 2007. Consultado el 26 de marzo de 2024. 
  62. «PCR-Based DGGE and FISH Analysis of Methanogens in Anaerobic Closed Digester Tank Treating Palm Oil Mill Effluent. Archived 2017-08-08 at the Wayback Machine Meisam Tabatabaei, Mohd Rafein Zakaria, Raha Abdul Rahim, André-Denis G. Wright, Yoshihito Shirai, Norhani Abdullah, Kenji Sakai, Shinya Ikeno, Masatsugu Mori, Nakamura Kazunori, Alawi Sulaiman and Mohd Ali Hassan, 2009, Electronic Journal of Biotechnology, Vol.12 No.3, Issue of 15 July 2009, ISSN 0717-3458». Wayback Machine. Consultado el 26 de marzo de 2024. 
  63. «Palm oil: Cooking the Climate | Greenpeace International». web.archive.org. 10 de abril de 2010. Consultado el 10 de abril de 2024. 
  64. «Once a Dream Fuel, Palm Oil May Be an Eco-Nightmare | YaleGlobal Online». archive-yaleglobal.yale.edu. Consultado el 10 de abril de 2024. 
  65. a b Cooper, Hannah V.; Evers, Stephanie; Aplin, Paul; Crout, Neil; Dahalan, Mohd Puat Bin; Sjogersten, Sofie (21 de enero de 2020). «Greenhouse gas emissions resulting from conversion of peat swamp forest to oil palm plantation». Nature Communications (en inglés) 11 (1). ISSN 2041-1723. PMC 6972824. PMID 31964892. doi:10.1038/s41467-020-14298-w. Consultado el 10 de abril de 2024. 
  66. Mutsaers, Hjw (2019-09). «The challenge of the oil palm: Using degraded land for its cultivation». Outlook on Agriculture (en inglés) 48 (3): 190-197. ISSN 0030-7270. doi:10.1177/0030727019858720. Consultado el 10 de abril de 2024. 
  67. Fargione, Joseph; Hill, Jason; Tilman, David; Polasky, Stephen; Hawthorne, Peter (29 de febrero de 2008). «Land Clearing and the Biofuel Carbon Debt». Science (en inglés) 319 (5867): 1235-1238. ISSN 0036-8075. doi:10.1126/science.1152747. Consultado el 11 de abril de 2024. 
  68. «Palm oil: Cooking the Climate | Greenpeace International». web.archive.org. 10 de noviembre de 2007. Consultado el 11 de abril de 2024. 
  69. How the palm oil industry is - cooking the climate. Greenpace. 2018. Consultado el 11 de abril de 2024. 
  70. «The truth about oil palms and carbon sinks - New Straits Times | HighBeam Research». web.archive.org. 11 de mayo de 2013. Consultado el 11 de abril de 2024. 
  71. Malaysia: Second National Communication to the UNFCCC (PDF) (Report). Ministry of Natural Resources and Environment Malaysia. Consultado el 11 de abril de 2024.
  72. «Greenpeace - Forest Defenders Camp in Indonesia». media.greenpeace.org. Consultado el 12 de abril de 2024. 
  73. «Environmental Group Camps to Protect Indonesia's Forests». Voice of America (en inglés). 1 de noviembre de 2009. Consultado el 12 de abril de 2024. 
  74. «NEW DEAL OFFERS HOPE FOR INDONESIAN FOREST PROTECTION - Greenpeace USA» (en inglés estadounidense). 7 de junio de 2010. Consultado el 12 de abril de 2024. 
  75. a b Koh, Lian Pin; Wilcove, David S. (2007-08). «Cashing in palm oil for conservation». Nature (en inglés) 448 (7157): 993-994. ISSN 0028-0836. doi:10.1038/448993a. Consultado el 12 de abril de 2024. 
  76. «NGOs should use palm oil to drive conservation». Mongabay Environmental News (en inglés estadounidense). 29 de agosto de 2007. Consultado el 12 de abril de 2024. 
  77. Mayberry, Kate (7 de octubre de 2019). «Southeast Asia struggles to tackle haze despite long-term dangers». www.aljazeera.com (en inglés). Consultado el 24 de abril de 2024. 
  78. «How the palm oil industry is Cooking the Climate - Greenpeace USA» (en inglés estadounidense). 21 de noviembre de 2007. Consultado el 24 de abril de 2024. 
  79. «US soyoil, low in trans fat, faces palm oil threat». 9 de agosto de 2007. Consultado el 24 de abril de 2024. 
  80. «Burning palm oil fuels climate change». Friends of the Earth. 23 de agosto de 2006. 
  81. Saunders, Daniel J.; Balagtas, Joseph V.; Gruere, Guillaume (March 2012). Revisiting the Palm Oil Boom in Southeast Asia (PDF) (Report). International Food Policy Research Institute. Retrieved 11 October 2012.
  82. Tom Beer, Tim Grant and Peter K Campbell (2007). The greenhouse and air quality emissions of biodiesel blends in Australia. Report Number KS54C/1/F2.27. Consultado el 27 de abril de 2024. 
  83. «FAQ: Palm oil, forests and climate change | Greenpeace UK». web.archive.org. 24 de junio de 2017. Consultado el 28 de abril de 2024. 
  84. «Malaysia Business & Finance News, Stock Updates | The Star». www.thestar.com.my (en inglés). Consultado el 28 de abril de 2024. 
  85. «Mission achieves ISCC certification, loses contract with Chevron | Biodiesel Magazine». biodieselmagazine.com. Consultado el 28 de abril de 2024. 
  86. «RSPO-RED SCHEME NOT TO BE RENEWED». Roundtable on Sustainable Palm Oil (RSPO) (en inglés británico). 24 de marzo de 2020. Consultado el 28 de abril de 2024. 

Enlaces externos[editar]