La Manga del Mar Menor

Esta es una versión antigua de esta página, editada a las 17:18 2 nov 2014 por Wallace CT (discusión · contribs.). La dirección URL es un enlace permanente a esta versión, que puede ser diferente de la versión actual.
La Manga del Mar Menor
localidad
País  España
• Municipio Cartagena y San Javier
Ubicación 37°39′16″N 0°43′08″O / 37.654308674537, -0.71889956042065
• Altitud 9 m
Superficie 316,14 km²
Población 17 007 hab. (INE 2013)
• Densidad 53,8 hab./km²
Alcalde (2011) Alcaldes de Cartagena y San Javier.
La Manga ubicada en España
La Manga
La Manga
Situación de La Manga en España
Vista desde un satélite de La Manga del Mar Menor.
Encañizadas de la zona norte.

La Manga del Mar Menor es un cordón litoral situado en el sureste de la península Ibérica en la comunidad autónoma de la Región de Murcia y, tras su urbanización en la segunda mitad del siglo XX, es un centro turístico de gran importancia.

Pertenece a los municipios de Cartagena en su parte sur, hasta Calnegre y Monte Blanco, y a San Javier en su parte norte. El istmo al norte del canal del Estacio es un espacio protegido denominado salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar que da continuidad al cordón litoral y forma parte del término municipal de San Pedro del Pinatar. En 2013 su población es de 17007 habitantes.

Origen geológico

El cordón litoral que forma La Manga es una lengua de tierra que se fue estructurando desde el cuaternario por la colmatación natural de sedimentos arenosos procedentes del norte, especialmente los aportados desde la desembocadura del Río Segura, que chocaban contra el Cabo de Palos y se iban depositando sobre las elevaciones de tipo volcánico de Calnegre y Monte Blanco, así como los escollos de areniscas terciarias de los promontorios del Pedrucho, Estacio y Punta de Algas, hasta que hace unos 2.000 mil años se cerró casi por completo formando la laguna del Mar Menor.[1]

Durante estos últimos 2.000 años existieron periodos en los que el nivel del agua sufrió fluctuaciones, de ese modo se considera que en el siglo XVII su nivel sería unos veinte o treinta centímetros superior al actual.[2][3][4]

Geografía

El cordón litoral de La Manga forma una lengua de tierra que tiene 21 km de longitud y que se extiende desde el cabo de Palos hasta las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar. Con una anchura entre 100 y 1200 m separa el Mar Mediterráneo del Mar Menor.

Su máxima elevación la constituye el afloramiento volcánico de Monte Blanco con una altura de 46 msnm.

Al oeste de esta lengua de tierra queda el Mar Menor queda configurado como una laguna litoral comunicada por unos canales, denominados "golas", por medio de los cuales el agua se intercambia con el mar Mediterráneo que se encuentra al este. La gola central o de El Estacio es una ampliación artificial y proporciona acceso al puerto deportivo, sin embargo existen las golas naturales de Ventorrillo y El Charco en la zona de las encañizadas y la completamente artificial de Marchamalo (o norte) por las que se producen los intercambios entre ambos mares.[5]

La comunicación por carretera se realiza por una única vía, denominada Gran Vía, que la recorre desde Cabo de Palos hasta finalizar en la zona de las encañizadas, esta carretera se inicia al finalizar la vía rápida RM-12 y establece comunicación con las diversas urbanizaciones como Umenor, Monteblanco, el ensanchamiento de Calnegre, el Pedrucho, el Oasis que es donde se encuentra el puerto deportivo con sus embarcaderos, hasta llegar a Veneziola que es la última zona urbanizada. A continuación se encuentran los lindes del parque natural de las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar.

Valores naturales

Hasta el siglo XVI La Manga estuvo cubierta de una espesa cubierta vegetal formada por un sabinar de sabina de las dunas (Juniperus turbinata), enebro marítimo (Juniperus macrocarpa) y pino carrasco (Pinus halepensis). Este bosque litoral fue arrasado por orden del rey Felipe II para evitar que los piratas berberiscos aprovecharan su espesura para esconderse en él.

En 1573 el alcalde mayor de Cartagena intentó tender una trampa a los corsarios emboscándose en la vegetación, pero...

«los dichos moros vinieron cubiertos con los ginebros [enebros] y çabinas [sabinas] ... hasta que dieron ençima del alcalde mayor y los demás que con él estavan... los cuales no pudieron hacer ningún efecto con los dichos caballos, que si estovieran talados [árboles y arbustos]... hizieran mucho daño a los dichos moros... que en dicho monte y pinada... dan proa... y se esconden... y por ser tan espesos los montes no se pueden hallar.». (Archivo Municipal de Cartagena).

En 1582 las autoridades pensaron en una solución radical: eliminar toda la vegetación de la Manga del Mar Menor, porque así

“se descubriría mejor la dicha Manga y podrían andar seguros... y descubrir las entradas y salidas de los enemigos, qu´están cubiertas por el dicho pinar y leña”(Archivo Municipal de Cartagena).

[6]

A pesar de perder gran parte de su cubierta vegetal originaria durante el siglo XVI, La Manga conservó una buena representación de la vegetación dunar costera hasta los años 60 del siglo XX en los que se comenzó un imparable desarrollo urbanístico que terminó con la mayor parte de sus valores naturales.

La vegetación característica de La Manga estaría compuesta por especies típicas de dunas como el barrón (Ammophila arenaria), la margarita marítima (Asteriscus maritimus), el cardo marino (Eryngium maritimum)y la azucena de mar (Pancratium maritimum). Son especialmente destacables los escasos ejemplares de la esparraguera del Mar Menor (Asparagus macrorrhizus), una especie endémica del entorno de la laguna y en peligro crítico de extinción, con la mayor parte de sus ejemplares en solares urbanizables del entorno de Veneziola, así como la zanahoria marítima (Echinophora spinosa). Además, aparecerían otras especies, no específicas de ecosistemas dunares, como el cambrón (Lycium intricatum), el lentisco (Pistacia lentiscus) e iberoafricanismos como el oroval (Withania frutescens) y el cornical (Periploca angustifolia).

Por lo que respecta a los antiguos sabinares descritos en el siglo XVI, de la sabina de las dunas (Juniperus turbinata), en peligro de extinción, sólo quedan escasos ejemplares en el Parque Natural de las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar, mientras que el enebro marítimo (Juniperus macrocarpa) se encuentra totalmente extinguido en las costas de la Región de Murcia.

En cuanto a la fauna que habitó La Manga en tiempos históricos, el libro de montería de Alfonso XI menciona en el siglo XIV la presencia de jabalíes (Sus scrofa) en Cabo de Palos y de venados (Cervus elaphus) en La Manga.[7]

"El monte de Cabo de Palos es muy buen monte de Puerco en invierno, e este monte es cerca de la mar. E cerca deste monte está una isla, que entra en la mar: e dura bien una legua, e hay en ella muchos venados". Libro de Montería de Alfonso XI. siglo XIV

Hasta la mitad del siglo XX, las tortugas bobas (Caretta caretta) venían a desovar en sus arenas [8]​ y la foca monje (Monachus monachus) habitaba sus playas. [9]

Zonas protegidas

Esta zona de tierras de sedimentación estaba formada por dunas y vegetación de matorrales que llegaron con pocos cambios hasta los años 60, década en la cual el paraje fue promocionado para el turismo y las grandes construcciones comenzaron paulatinamente a poblar el paisaje considerando su posición estratégica entre dos mares.[10]

En la actualidad, la mayor parte del espacio de La Manga es terreno urbano y sólo se conservan pequeñas manchas de lo que fue su vegetación originaria y los ciervos y jabalíes han desaparecido por completo.

Algunas áreas han sido protegidas y en ella es posible hacerse una cierta idea de lo que fueron los paisajes originarios de La Manga del Mar Menor:

Playas

Playas de la Manga del Mar Menor.
Atardecer en La Manga.

Las playas de las que dispone este accidente geográfico son:[11]

En el municipio de Cartagena

En el municipio de San Javier

Islas

En ambos lados del cordón litoral existen varias islas de origen volcánico:[12]

En el Mar Menor

En el Mar Mediterráneo o Mar Mayor

Historia

Prehistoria

Yacimiento neolítico de Las Amoladeras

La presencia del hombre más antigua documentada en La Manga se remonta al periodo Eneolítico, ya que se han encontrado vestigios de un poblado de esa época en la playa de las Amoladeras. En este espacio se ha documentado y excavado un poblamiento prehistórico, del final del neolítico y la edad del cobre, datado entre el 2500 y el 1800 antes de Cristo. Dicho poblamiento, en opinión del profesor García del Toro, estaría constituido por una serie de cabañas circulares, rodeadas por un muro fortificado, similar al existente en el Cabezo del Plomo de Mazarrón. Estaría habitado por una sociedad de cazadores y recolectores, especialmente centrada en la pesca y marisqueo. Algunos objetos procedentes de las excavaciones realizadas en este espacio pueden verse en el Museo Arqueológico Municipal de Cartagena. Desde 1987 está declarado como bien de interés cultural (BIC) [13]

Poblado de la Edad del Bronce en la Cala del Pino

En 1987, una excavación arqueológica de urgencia verificó la presencia de un asentamiento prehistórico sobre el cerro de Calnegre, el promontorio que domina la Cala del Pino. Los restos cerámicos y otros materiales recogidos permitieron datar el yacimiento entre los siglos XIII y XI a. C. (Bronce tardío-final), que consistía en un poblado dotado de murallas de piedra y un bastión. En 2011, la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales adoptó una resolución dotándolo de protección jurídica, publicada en el Boletín Oficial de la Región de Murcia.[14]

Antigüedad

En la antigüedad, el cordón litoral de La Manga no cerraba completamente el paso al Mar Menor, lo cual permitía la navegabilidad de la laguna durante el periodo de las colonizaciones fenicias, griegas y romanas.[2]​ Un ejemplo de estas rutas marítimas a través de La Manga lo constituye el poblado ibérico de Los Nietos, junto al Mar Menor, descubierto en los años sesenta y que en el siglo IV a. C. ejercía el papel de base comercial de la zona en la que se intercambiaban productos derivados de la minería por mercancías procedentes de Grecia, Campania y el Mediterráneo oriental.[15]

También es conocido que las naves fenicias y romanas utilizaron El Estacio como zona de atraque, existiendo restos arqueológicos en Punta de Pudrimel, El Estacio y el Bajo de la Campana, así como restos de pecios romanos en San Ferreol.

Edad Media y Moderna

Durante la Edad Media se instalaron las primeras encañizadas para la pesca. En el siglo XIV, el libro de Montería de Alfonso XI de Castilla cita La Manga como lugar donde abundan jabalíes y venados.

Los siglos XVI y XVII están marcados por la defensa del territorio contra las incursiones de la piratería berberisca. Durante los reinado de Carlos V y Felipe II se construyeron una serie de torres de vigilancia costera para prevenir estos ataques berberiscas a lo largo de La Manga. Estas torres eran:

A finales del siglo XVI, para evitar que los piratas berberiscos utilizaran la vegetación para emboscarse, todo el sabinar de sabina de las dunas y enebro marítimo fue arrasado y La Manga quedó totalmente desprovista de su vegetación original.

Edad contemporánea

El proceso de desamortización sacó a subasta pública los terrenos el 10 de enero de 1863 y fueron adquiridos por diversos propietarios, pero la familia Maestre fue comprando las diversas zonas. En 1956 Tomás Maestre Aznar consiguió disponer de casi todo el terreno y comenzó con el proceso para su urbanización.

Esta zona de tierras de sedimentación estaba formada por dunas y vegetación de matorrales que llegaron sin ningún cambio hasta los años 60, década en la cual el paraje fue promocionado para el turismo y las grandes construcciones comenzaron paulatinamente a poblar el paisaje considerando su posición estratégica entre dos mares.[17]​ En 1970 contaba con quince viviendas pero en 1981 habían ascendido a 4.730 lo que refleja una urbanización acelerada.[18]

A finales del siglo XX se podía considerar como el único espacio turístico especializado en la Región de Murcia que podía ofrecer más de 3.000 plazas hoteleras.[19]

Economía

La principal actividad económica es el turismo y los servicios asociados al mismo, además se trata de una actividad temporal ya que durante los meses de verano la población puede superar los 200.000 habitantes y sin embargo durante el resto del año no suele llegar a los 14.000. Se trata del destino turístico de la Región de Murcia en el que a pesar de existir un gran número de viviendas de segunda residencia el número de turistas extranjeros sobrepasa al de los procedentes de la Región.[20]

Las actividades predominantes están relacionadas con las actividades de ocio existiendo una oferta considerable de actividades y deportes náuticos, destacando los de vela por las excelentes condiciones para su práctica que reúne el Mar Menor. Además al disponer de un clima cálido se pueden visitar sus numerosas y largas playas en diversos periodos vacacionales. La promoción de la zona llevó a que se rodasen varias películas: en 1969 se rodó la película La vida sigue igual , protagonizada por Julio Iglesias y en 1970, En un lugar de La Manga, protagonizada por Manolo Escobar y Concha Velasco.

La oferta de hoteles de todas las categorías y de innumerables restaurantes convierte a la hostelería en su principal área de servicios. Pero también las galerías comerciales y mercadillos, tiendas, ferreterias, náuticas y todo tipo de comercio relacionado con la práctica de deportes náuticos, además de los chiringuitos y discotecas a pie de playa, todo se ofrecen como un atractivo que añadir.

Demografía

La Manga del Mar Menor ha experimentado un elevado ascenso de su población, debido sobre todo al turismo, llegando en temporada de verano a los 200.000 habitantes, aunque la población censada es de apenas 16.000 habitantes.

Gráfica de evolución demográfica de La Manga del Mar Menor entre 1900 y 2013

Fuente Instituto Nacional de Estadística de España - Elaboración Gráfica por Wikipedia.

Administración local

Al pertenecer a los municipios de Cartagena y San Javier la oferta de servicios y la gestión de los mismos exige cierta colaboración entre ambos aunque no siempre coinciden en el desarrollo de los mismos. Las disfunciones que se producen ha originado movimientos ciudadanos que han solicitado su segregación.

La Manga El Galán, Cartagena

Sobre la segregación

La Manga, como viene explicado en el párrafo anterior, está dividida entre dos municipios: Cartagena y San Javier. A Cartagena le corresponde desde el km 0 (límite sur de lo que sería la lengua de arena que se encuentra junto a Cabo de Palos), hasta el km 3/4 en una zona conocida como Monteblanco; desde este punto en adelante es al Ayuntamiento de San Javier al que le corresponde el mantenimiento de La Manga. Por estas curiosas circunstancias administrativas, en las que los núcleos de población distan a no menos de 30 km en el caso de Cartagena y a unos 50 km por carretera en el caso de San Javier (aunque por mar son menos de tres Km.), hacen de La Manga una entidad difícil de gestionar. Por esto los ayuntamientos de estos dos municipios colaboran conjuntamente en el mantenimiento de playas, viales, etc. conocido como El Consorcio, pero aunque la población de La Manga (cuando nos referimos a La Manga sólo es el brazo de arena, no los pueblos del litoral del Mar Menor) fluctúa a lo largo del año, ya que aumenta en periodos vacacionales de los periodos que no lo son, cada vez más personas, poco a poco, lo están convirtiendo en el lugar de residencia habitual, tanto por gente de la zona como por extranjeros. Y son estos los que han evidenciado que no hay servicios el resto del año (tan eficaces como son en verano), esto ha llevado que no sólo La Manga, como ente urbano, sino también ciertas poblaciones dependientes de Cartagena tales como Cabo de Palos, Los Belones y otras del Rincón de San Ginés hayan pedido la segregación de ésta, y la formación de otro municipio aglutinante de éstos con sede en La Manga, con el nombre de Dos Mares. Las características de la ley sobre la formación de municipios, tales como lejanía del casco de urbano del municipio dependiente o también respecto a los servicios deficientes (sólo en otoño-invierno) no han servido para que las peticiones al Estado les permitieran formarse como municipio.

Canal del Estacio, con el puente levadizo al fondo.


Referencias

  1. Sánchez, J.A. (1983). «Paleo-edafología de la parte meridional de la Manga del Mar Menor». Cadernos do Laboratorio Xeolóxico de Laxe, 5 (La Coruña: Universidad de La Coruña): 232. ISBN 84-7492-198-8. 
  2. a b Pérez-Rufaza, A.; Marcos, C.;Pérez-Ruzafa, I.M. y Ros, J.D. (1987). «Evolución de las características ambientales y de los poblamientos del Mar Menor». Anales de Biología, 12 (Murcia: Editum): 56. ISSN 0213-4004. 
  3. Ficha Informativa de los Humedales de Ramsar (FIR): El Mar Menor. Dirección General del Medio Natural de la Region de Murcia
  4. http://www.ecoespuna.com/download/25/ Guía de itinerarios didácticos por los espacios naturales de la Región de Murcia: El Mar Menor
  5. Lillo Carpio, M. (1978). «Geomorfología litoral del Mar Menor». Papeles del Departamento de Geografía, Nº 8 (Murcia: Editum): 9-48. ISSN 0210-5241. 
  6. M.Carmen Zamora. «RECONSTRUCCIÓN DE LA VEGETACIÓN POTENCIAL DEL CAMPO DE CARTAGENA A LA LUZ DE LA DOCUMENTACIÓN DE SU ARCHIVO MUNICIPAL». Consultado el 2 de febrero de 2014. 
  7. Consejería de Medio Ambiente de la Región de Murcia., ed. (febrero de 2005). «"El libro de montería de Alfonso XI".». Revista Murcia Enclave Ambiental. ISBN 1695-7741 |isbn= incorrecto (ayuda). 
  8. APUNTES HISTÓRICOS "Cuando las tortugas desovaban en La Manga"
  9. LA EXTINCION DE LA FOCA MONJE (MONACHUS MONACHUS) EN LAS COSTAS MEDITERRANEAS DE LA PENINSULA IBERICA
  10. Andrés Sarasa, J.L. (1995). «La gente es consumidora de mitos ... El mito turístico del Mar Menor». Papeles de Geografía, 22: 6. ISSN 0213-1781. 
  11. «Naturaleza. Playas del Mar Menor.». Región de Murcia Digital. Consultado el 25 de julio de 2010. 
  12. «Naturaleza. Mar Menor. Playas e islas del Mar Menor.». Región de Murcia Digital. Consultado el 25 de julio de 2010. 
  13. Los hábitats neo-eneolíticos de las amoladeras y Calblanque treinta años después.
  14. «Resolución de 27 de abril de 2011 de la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales por la que se declara bien catalogado por su relevancia cultural el yacimiento arqueológico Cala del Pino, en Cartagena (Murcia)» (pdf). Ayuntamiento de Cartagena. 4 de mayo de 2011. 
  15. García Cano, Carlos (1996). «Informe sobre el poblado ibérico de la Loma del Escorial (Los Nietos) Cartagena». Memorias de Arqueología de la Región de Murcia nº 5. Editora Regional de Murcia. ISBN 84-7564-177-6. 
  16. La piratería berberisca en el Reino de Murcia: torres costeras.
  17. Andrés Sarasa, J.L. (1995). «La gente es consumidora de mitos ... El mito turístico del Mar Menor». Papeles de Geografía, 22: 6. ISSN 0213-1781. 
  18. Millán Escriche, M. (1998). «Proceso de urbanización y cambio en el litoral murciano (1960-1991)». Cuadernos de turismo, 2: 129. 
  19. Vera Rebollo, J. F. (1992). «El turismo». Atlas de la Región de Murcia. Murcia: La Opinión de Murcia, S.A. p. 308. ISBN 84-87759-10-6. 
  20. García Sánchez, A.; Artal Tur, A. y Ramos Parreño, J.M. (2002). «El turismo del Mar Menor: predominio de la segunda residencia». Cuadernos de turismo, 8: 38. ISSN 1139-7861. 

Enlaces externos