Canción protesta

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La canción de protesta es el nombre con que se conoce a la canción de autor de los años 1960 y 70, que versaba sobre la situación social y política, en especial en países de habla hispana. Tenía como objetivo denunciar la situación política y social de cada país.

Historia

Es de origen español, de fuerte contenido reivindicativo, se caracterizaba por su compromiso político y social. Entre sus precursores había sindicalistas y partidistas de finales del siglo XIX, e incluso en los himnos de las revoluciones liberales. Uno de los más destacados fue el sindicalista Joe Hill , quien sería condenado a muerte y ejecutado en 1915 por asesinato en una audiencia de dos horas.

Más inmediatas son las canciones populares de la Guerra Civil Española (algunas de las cuales serían luego recuperadas por cantautores y grupos de punk o ska) y las canciones francesas de la Resistencia durante la II Guerra Mundial.


Canción protesta

La canción de protesta como tal nace entre la década de los '50 y se desarrolla en la de los '60 en países diferentes: en Estados Unidos, con Bob Dylan, el cual, según el conferencista Javier Fernández, se convirtió en un importante representante de la canción protesta después de un encuentro que tuvo en 1961 con el músico Woody Guthrie , Joan Baez, Pete Seeger, Leadbelly o Malvina Reynolds; en Latinoamérica, donde el estilo adquirió una fuerza especial a través de la nueva canción latinoamericana, contó con exponentes como Violeta Parra, Víctor Jara, Alfredo Zitarrosa, Aníbal Sampayo, Numa Moraes, Los Olimareños, Atahualpa Yupanqui, Alí Primera, Mercedes Sosa, César Isella, Gabino Palomares, Kin-Lalat, Yolocamba I Ta, o Silvio Rodríguez, por citar algunos; y en Francia, con Édith Piaf, Georges Brassens y Jacques Brel, entre otros.

La canción de protesta tomó como base en muchas ocasiones formas musicales del folclore tradicional; algunos de estos artistas, como Violeta Parra, realizaron trabajos de investigación, recopilación y difusión de músicas tradicionales y populares. En los años 60-70 alcanzó su mayor difusión y repercusión.

España

La canción de protesta en España fue particular, aunque guarda más relación con la canción francesa y latinoamericana que con la estadounidense.

Sus precursores, desde los últimos 50 y primeros 60, son Chicho Sánchez Ferlosio, con canciones muy comprometidas; Paco Ibáñez, en Francia, quien puso música a los poetas españoles de todas las épocas; Raimon, en Valencia, el primero en musicalizar a poetas catalanes, o Mikel Laboa, cantando en euskera. En algunos casos se reunieron en movimientos colectivos, como es el caso de Els Setze Jutges, en Cataluña; Ez Dok Amairu, en el País Vasco; Voces Ceibes, en Galicia, o el Manifiesto Canción del Sur, en Andalucía, con Carlos Cano como miembro más destacado.

Dejando al lado excepciones como Pau Riba o Sisa -que abogaban por una música más progresiva-, estuvo ligada al activismo antifranquista, a la denuncia de la situación de los colectivos más desfavorecidos (campesinos, obreros, emigrantes), a la reivindicación cultural popular, al rescate de poetas prohibidos por el régimen de Franco, así como a poetas regionales, y, dependiendo de la región, al rescate de lenguas y dialectos soterrados por el régimen bajo la idea de la España única.

Grupos a destacar son Los Sabandeños, Fuxan os Ventos y Nuevo Mester de Juglaría y, en cuanto a cantautores, ejemplos como Carlos Cano, Elisa Serna, Mikel Laboa, Imanol y Labordeta.

Más afrancesados son Lluís Llach, Pi de la Serra, Joan Manuel Serrat y Patxi Andión, este último también está ligado con la música tradicional regional del país. También los hay que optaron por el estilo estadounidense (Jaume Arnella) o el rock contemporáneo (Riba) e incluso el jazz (Lluís Llach) o la salsa (Caco Senante).

También, los autores de canción satírica, como Pi de la Serra, Javier Krahe o los grupos Desde Santurce a Bilbao Blues Band y La Trinca.

América Latina

En América Latina, los años 1960, 1970 y 1980 fueron también la época de mayor auge de la canción de protesta, con artistas todo el continente:

En ocasiones, algunos de estos cantantes estaban ligados a partidos políticos, llegaron a asumir casi el papel de "cantante oficial" del partido; tal es el caso de Alí Primera (ligado al Partido Comunista de Venezuela) o Víctor Jara (ligado al Partido Comunista de Chile).

Véase también

Bibliografía