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MANDOBLE (Sección dentro de Espada)[editar]

Mandoble (de "mano" y "doble") es un término ambiguo para describir una amplia variedad de espadas medievales europeas, a menudo siendo estas armas de dos manos o de mano y media.

No aparece etimológicamente hasta 1569, y para referirse o bien a un ataque con arma de tajo, o a un tipo de ataque específico hecho de revés y dos manos. "Mandoble" puede ser empleado para cualquier espada a dos manos, pero solo se le empezó a dar tal significado de manera generalizada en el siglo XIX. Hasta 1860 no hay apenas referencias a mandoble en su acepción de espada. A partir del siglo XX (1956) se reconoce en el diccionario como familia de la voz "espada" para referirse coloquialmente a una espada grande.

FIN DEL APARTADO

MONTANTE[editar]

El montante es una espada ancha de gavilanes muy largos, que manejan los maestros de armas con ambas manos para separar las batallas en la esgrima. Tomóse su forma y nombre de las espadas antiguas, que se blandían a dos manos.[1]

Conforme al Viaje del Parnaso de Miguel de Cervantes, los montantes eran espadas largas que se usaban con las dos manos.[2]

El mandoble parte de la espada larga del período medieval tardío; Su creación viene de una tendencia europea a incrementar el tamaño y peso de las espadas con el propósito de fácilmente manipular e incluso cortar las picas del enemigo. Su uso se popularizó principalmente en el Sacro Imperio Romano (hoy en día Alemania, Austria, Bélgica, Eslovenia, Francia, Italia, Liechtenstein, Luxemburgo, Polonia, República Checa, y Suiza), siendo portada comúnmente por mercenarios suizos y lansquenetes alemanes durante el renacimiento, particularmente a finales del siglo XV y a través del siglo XVI.

Con la proliferación de las primeras armas de fuego la manera de hacer la guerra cambió drásticamente: los fusiles con bayoneta suplantaron a las picas y se hizo preferible mayor movilidad antes que más armadura, pues ya no era protección eficiente contra las armas de fuego, con lo que el papel del mandoble se hizo innecesario. Probablemente la práctica desaparición de este tipo de armas de los campos de batalla coincidiera con la difusión del término mandoble como nombre genérico para espadas a dos manos. [cita requerida] Se empleó en combate en los siglos XV y XVI por la infantería, pensada para atacar eficazmente las armaduras de placas y cotas de malla, przeovocando en ocasiones fracturas o hematomas graves sin necesidad de perforar la armadura. Sin embargo, su objetivo principal consistía en romper las filas de piqueros acorazados para permitir una ofensiva mayor, como las cargas de caballería.

La empuñadura de los mandobles medía aproximadamente una quinta o cuarta parte del total del arma, estaban dotados de guardia de largos gavilanes en cruz y solían estar rematadas por un pomo esférico o redondo, con lo que la muñeca izquierda podía rotar encima, lo cual permitía asestar rápidos golpes y estocadas a una distancia más que respetable. Estas espadas se podían esgrimir también con una mano en la empuñadura y otra sobre el primer tercio que no tenía filo, de forma que permitía un manejo correcto a corta distancia. Con el fin de potenciar este posible uso, o minimizar sus contrapartidas, se solían dotar también de púas en el inicio del filo, a modo de falsaguarda, para mejorar el agarre, evitar que la mano se deslizara hasta el filo y para prevenir que fuera la espada del adversario la que se deslizara por el filo hasta alcanzarle la mano.

Algunos tenían la hoja serpenteante, aparentemente para potenciar la capacidad de corte-tajo, debido a su peso y al impedir que esta se deslizara libremente, frenado por la forma de S de la hoja, si bien es probable que se trate de una simple concesión al arte. [cita requerida]

Si bien a muchas espadas de mano y media se las ha llamado mandobles, como también se les ha atribuido demás nombres genéricos (espada larga, montante, espada bastarda, espadón), parece ser que hubo un tipo de espada de este tipo, de grandes dimensiones, surgida en Europa por el siglo XV que fue conocido con el nombre de mandoble.


Sobre las diferencias entre montante, mandoble y espadón[editar]

Una de las dudas no salvadas por los especialistas de forma categórica es la diferenciación de las voces que se refieren a las grandes espadas de dos manos en España. Baste por ello que en la importante obra de Gregorio Mayans, en el Siglo XVIII, cite lo siguiente:[3]

Porque una vez que distingamos las principales especies de espada, como espadín, alfange, estoque, cimitarra, montante y pocas más, ¿de qué sirve mayor número, pudiéndose explicar las otras diferencias por adjetivos, cuyo significado sabe qualquiera? Yo comparo esta abundancia a la de los sinónimos que, dado que los haya rigurosamente tales, sólo sirven para la variedad y armonía del decir, y aumentan el número de las voces, pero no de los vocablos. Y concediendo que la lengua arábiga sea la más copiosa de quantas hay, la española, que tanto ha tomado de ella, por fuerza ha de ser muy abundante.

Por ello, los términos modernos como mandoble –que etimológicamente no aparece hasta 1569, y para referirse a un tipo de ataque, hecho de revés y dos manos– no siempre se refieren a un tipo o clasificación concreta y/o correcta. Por lo tanto, montante, mandoble y espadón pueden y eran empleados para cualquier espada a dos manos, pero estos últimos se comenzaron a usar en el siglo XIX y siglo XX. Pero, además de que montante fue el primer vocablo directo para referirse a esas armas de doble filo, largas y a dos manos de esa época, la propia definición de «espadón» del primer Diccionario de Autoridades decía: «Espada muy grande que corresponde al montante».

Dentro de la comunidad de estudiosos y practicantes de la esgrima histórica, especialmente de la comunidad angloparlante (donde la disciplina se conoce como H.E.M.A. : Historical European Martial Arts, es decir Artes Marciales Europeas Históricas), el término montante es usado a la par de Greatsword o Two-handed Sword en inglés (el primer término esta cayendo en desuso por referirse a otro tipo de espada históricamente anterior al montante), Zweihander/ Schlachtschwerter en alemán ( [espada] de a dos manos/ espada de batalla, curiosamente el uso del primer término está siendo muy favorecido por los angloparlantes encima de los de su propia lengua), y Spadone en italiano (de similar raíz lingüística al término espadón, términos probablemente relacionados) para referirse a este tipo de espada de a dos manos de grandes dimensiones, superiores a las que se conoce como espadas largas o de mano y media. Dadas sus características físicas y morfológicas, el montante se usaba de manera distinta a las llamadas espadas largas, si bien se podían aplicar varios principios del uso de la segunda arma, tal es así que en el mundo ibérico maestros portugueses como Domingo Luis Godinho o Diogo Gomes de Figueyredo (este último dedicando un manual completo solo al montante), o españoles como Pablo de Paredes ( escritas en las memorias del belga Jehan L'Hermite) y otros anónimos que escribieron reglas para el montante (manuscritos "Sobre el arte de la esgrima (MS II/1579(2))" y "Las reglas del montante (CCPB000152417-8)" ), amén de maestros italianos (quienes en su caso se referían al arma como Spadone, aunque cabe aclarar que la versión italiana del arma podía ser de dimensiones un poco menores al del montante ibérico) que también escribieron técnicas exclusivas este tipo de arma, entre ellos Achille Marozzo, Giacomo di Grassi y Francesco Fernando Alfieri. Queda pues patente que esta arma, si bien también se usaba a dos manos, era distinta en su uso y manipulación a la llamada espada larga o de mano y media y requería sus propias reglas y técnicas distintas a las de estas últimas, aunque guardando ciertos principios esgrimísticos similares. Finalmente puede considerarse que el montante es simplemente la variante ibérica de un arma en boga desde fines del siglo XV, una espada de a dos manos de grandes dimensiones usada tanto en el campo de batalla como en el civil (arma de guardaespaldas, contención de disturbios) cuyas características la diferencian tanto en sus proporciones como en su uso respecto a la espada larga o de mano y media, de la cual es a la vez evolución y variante.

Cronología etimológica de las armas a dos manos en España[editar]

Cronológicamente, los términos a los que nos referimos vendrían de la siguiente guisa: (Fuente: Corpus del Español)

  • Montante - Término de uso generalizado en los siglos XVI, XVII y XIX. Aparece en textos escritos a partir del siglo XIV. Aparece cinco veces más que mandoble y seis que espadón en el corpus del español.
  • Espadón - Término de uso generalizado en el siglo XIX. Aparece en el siglo XVII, pero como sinónimo de castrado u hombre de alta jerarquía. Al ser aumentativo de espada, también era una forma coloquial de llamar a los montantes de una forma más hiperbólica, además de que el uso de "montante" requería mayor conocimiento de la lengua.

Morfología[editar]

Los montantes son espadas con hojas que no necesariamente excedían siempre del metro y que como máximo llegarían a unos 120-140 cm, rectas de doble filo para uso solo cortante –en su inicio–, y cuya empuñadura, habilitada para ambas manos podía sobrepasar fácilmente el tercio de la longitud de la hoja para la buena esgrima a dos manos. Sus gavilanes (los "brazos" metálicos de la cruz que sobresalen del ancho de la hoja) totalmente rectos y perpendiculares a la hoja serían los más comunes de ver en sus primeros diseños, pasando a curvarse hacia el filo a medida que ganaban longitud total llegado el Renacimiento. El pomo, grande y pesado, servía junto a la empuñadura para contrapesar y dar mejor equilibrio al arma. Normalmente estas armas solían pesar menos de 2 kg, y al emplearse a dos manos eran muy ágiles. Véase este párrafo del siglo XVI:[4]

Orígenes[editar]

El mayal militar es un arma "oportunista" de las levas, por ello su uso no fue generalizado, ni tampoco fue representada artísticamente como otras armas.

proviene de la herramienta campesina que, , servía para desgranar cereales.

Este tipo de armas suelen aparecer en todas las épocas en las que se tiene o tuvo que movilizar al "pueblo" para la defensa nacional. Por ello se recuerdan más sus posteriores desarrollos "específicamente" militares.

En el caso del mayal de armas, su evolución y voz española directa de mayal de armas es el mangual.

El mangual de Galloway[5]​ es un ejemplo de un mangual legendario.


Esgrima antigua. Sitio oficial de la Asociación Española de Esgrima Antigua

Referencias[editar]

  1. RAE Academia Autoridades (1764). Cuando la RAE se refiere a espadas anchas lo hace en contraposición a las espadas de uso en la época del diccionario. Por tanto cualquier arma suele ser "ancha" comparándola con espadas roperas y estoques. Además, el hecho de que montante sea según la RAE "el arma para separar combates de esgrima", denota que en su último uso era un arma de parada de clases de esgrima, o sea que no hace referencia al "montante" histórico. Además, es el único término en castellano que hace referencia a espadas con gavilanes grandes -característica que solo las grandes espadas largas a dos manos poseen-, dejando "espada grande" -a secas- para las demás formas coloquiales modernas.
  2. Parnaso de Cervantes (1614); '1452' montantes; V. Donaires I, 35.
  3. Gregorio Mayans; Orígenes de la lengua española 1737.
  4. La Araucana (1564): Ercilla, Alonso de. (1533-1594)
  5. Robinson, Nathan. «Galloway Flail». myArmoury.com (en inglés). Consultado el 10 de enero de 2022. 


Dos masáis usando lanzas para cazar.

La lanza es un arma de asta con un extremo acabado en punta que puede además estar afilado.

Historia, uso y construcción[editar]

Detalle de Schweizerschlacht (Masacre suiza), de Hans Holbein el Joven, en pluma con tinta (siglo XVI). Albertina.[1]​ Batalla cuerpo a cuerpo con lanzas entre Reisläufer (mercenarios suizos) y Landsknecht (mercenarios alemanes).

Fue usada desde la Prehistoria para cazar; es una de las armas que perduró durante milenios en las batallas y batidas de todas las culturas.

Se ha estudiado la posibilidad de que fragmentos de piedra tallada encontrados en África, con una antigüedad de 500000 años, hubieran sido usados como puntas de lanza.[2]

Los ejemplares de lanza completos más antiguos de Europa son de hace unos 300000 a 400000 años; es un conjunto de ocho lanzas de madera encontradas en una turbera en Alemania, probablemente usadas por Homo heidelbergensis.

Todavía en el Paleolítico, se añadieron bifaces en la punta de las lanzas. En el Neolítico se usaron además piedras pulidas[cita requerida].

Durante la Edad de los Metales, la Antigüedad y la Edad Media estuvo compuesta normalmente de una moharra metálica y un asta de madera. Fue el arma principal de los soldados hasta la llegada de las armas de fuego. Era conocida como «arma reina de las batallas»[cita requerida].

Su fabricación era relativamente fácil; requería de menos entrenamiento para ser usada eficazmente; podía ser blandida a pie o a caballo; era arrojadiza; y permitía su uso con una mano para sujetar un escudo en la otra, o con ambas para dar más potencia a las lanzadas y hacer palanca en los golpes.

Tipos[editar]

  • Azagaya: arma arrojadiza ligera de la era paleolítica con la punta hecha con un fragmento aguzado de asta de cérvido.
  • Azcón o azcona: arma arrojadiza, como dardo, usada antiguamente. Coincide con el término en vascuence.
  • Dardo: llámeseles así a las lanzas cortas arrojadizas cual jabalinas.
  • Dory o doru: lanza típica del soldado hoplita.
  • Estradiota: de tres metros, usada por los estradiotes.
  • Falárica: de madera, con la moharra metálica. Se lanzaba prendida.
  • Hasta (en plural hastae): lanza utilizada para ensartar. Los primeros legionarios estaban equipados con hastae y era esta arma el que daba el nombre a los soldados conocidos como hastati. Más adelante fue sustituida por el pilum.
  • Jabalina: lanza arrojadiza por excelencia. Se le denominaba dardo en España a todas sus familias.
  • Kontos: lanza larga de caballería de unos 3-4 m de longitud desarrollada por los sármatas, un pueblo nómada de las estepas rusas.
  • Lanzón: lanza corta de moharra ancha y fuerte.
  • Media pica: variante menor de la pica, moharra lanceolada, con asta de la altura de un hombre alto. Se le llama también «lanza de armas».
  • Pilum: arma básica, junto con la espada (gladius), del soldado legionario romano.
  • Pica: lanza muy larga para formaciones militares cuya asta mide más de 4 m de norma, llegando incluso a medir 6 m.
  • Sarissa: pica de la falange macedonia, medía de 5 a 7 m de largo.
  • Venablo: arma arrojadiza, a modo de dardo o de pequeña lanza.
  • Verutum: jabalina corta usada por los ejércitos romanos.
  • Xyston: lanza larga, de hasta 4,25 metros, usada por los griegos. Debió requerir las dos manos para su manejo.
  • Yari: lanza larga japonesa parecida a una pica, de hoja recta.

Véase también[editar]

Referencias[editar]

  1. (En alemán.) Ficha. Albertina. Consultado el 12 de septiembre de 2017.
  2. «Miguelón ya fabricaba lanzas con empuñadura hace 500.000 años». Servicio de información de noticias científicas (SINC). 15 de noviembre de 2012. Consultado el 1 de agosto de 2013. 

Enlaces externos[editar]


[[Categoría:Lanzas]]

Un spjót de la exposición en el Museo de Armagh.

El spjót (del nórdico antiguo: lanza;[1]IPA: [spjɔut]) si no fue posiblemente el arma de guerra más popular, sí fue bastante común entre los vikingos, posiblemente porque el acero para su fundición era de una calidad inferior a la usada en hachas (öx) y espadas, por lo tanto mucho más asequibles. Eran lanzas con cabezas de metal de cuchilla y un eje hueco, que se montaban en varas de madera de fresno de dos a tres metros de longitud. Las cabezas de metal, según las sagas nórdicas se sujetaban con un pasador que a veces era retirado para que el enemigo no pudiera reutilizarlas inadecuadamente.

Etimología[editar]

La palabra procede del proto-germánico *speutan.

Características[editar]

La popularidad del spjót era cultural y religiosa, al ser gungnir el arma preferida del dios Odín, fue indispensable en el arsenal de los guerreros durante la Era vikinga.

Existían diversos tipos de spjót, pero su uso se puede reducir a dos tipos: lanza arrojadiza y lanza de choque.

Normalmente la lanza arrojadiza estaba menos decorada, mientras que la lanza de choque era más ostentosa, algunas con inscrustaciones de plata. Los arqueólogos creen que tales diferencias obedecían simplemente a que una lanza arrojadiza era más fácil que se perdiese en el campo de batalla.[2]

Tipos de spjót[editar]

Krókspjót

El krókspjót o «lanza de puntas». Tenían una especie de topes o alitas en la base de metal, quizás para usar como enganche o freno al empuje. Es una de las armas que usó Grettir Ásmundarson, capaz de atravesar a un hombre de un solo golpe.[3]

Spjótsprika

El spjótsprika o «lanza menor» (en nórdico antiguo, literalmente quiere decir «insignificante»). En la saga de Laxdœla (cap. 64) se menciona que Hráppur Sumarlíðason siempre la llevaba consigo.

Höggspjót

El höggspjót o «lanza mayor». Tenía una hoja más grande que servía como lanza de choque (o empuje), aunque también de corte. Es el arma de Egil Skallagrímson que él llamaba kesja,[4]​ también de Glúmur Eyjólfsson,[5]​ y Gísli Þorbjörnsson.[6]

Blað-spjót

El Blað-spjót o «lanza de corte». Como su nombre indica, era un arma de cuchilla afilada, de origen sajón.[7]

Referencias[editar]

  1. Spjót en nórdico antiguo
  2. Foote, Peter G., and Wilson, D. M. (1970), The Viking Achievement, Sidgwick & Jackson: London, UK. ISBN 0-283-97926-7 pp. 275-76.
  3. Saga de Grettir (cap. 19)
  4. Jónsson, Grímur, ed. (1809). Egils saga. Copenhagen: Joh. Rud. Thiele. pp. 374, 378–379.
  5. Þorgilsson, Ari inn froði (1830). Guðmundsson, Þorgeir; Helgason, Þorsteinn, eds. Íslendinga sögur. Copenhagen: S.L. Möller. p. 379.
  6. Saga de Gísla Súrssonar (cap. 2)
  7. Rerum Britannicarum Medii Ævi Scriptores, Vol. 88, No. 4, Great Britain, Public Record Office, 1894, p. 315.

Bibliografía[editar]

  • Matt Doeden, Weapons of the Vikings, Capstone, 2009, ISBN 1429623357.
  • Hayward, John (2000), Encyclopaedia of the Viking Age New York: Thames & Hudson Inc. ISBN 0-500-01982-7.

,

[[Categoría:Lanzas]]

[[Categoría:Armas vikingas]]

Montante suiza de los siglos XV y XVI.


... suele jugar por gran destreza el liviano [montante] un buen maestro, hiriendo con extraña ligereza delante, atrás, a diestro y a siniestro, con más desenvoltura y más presteza...

Véase también[editar]

Referencias[editar]

Enlaces externos[editar]





Mit Montante bezeichnete man auf der iberischen Halbinsel die dortigen großen zweihändigen Schwerter, wie sie im 16./17. Jh. in Gebrauch waren. Verglichen mit den deutschen Bidenhändern der gleichen Epoche stellten sie eher schlanke und leichte Waffen dar. Die Klingen waren schmal, hatten parallele Schneiden und meist eine kurze Hohlkehle. Parierhaken waren, wenn überhaupt vorhanden, eher klein und üblicherweise nicht wie bei den deutschen Zweihändern zum Ort hin gebogen. Die Parierstangen waren ebenfalls schlichter, gerade und schnörkellos und lediglich mit zwei Parierringen versehen.

Obwohl sie zwischen Schulter- bis Scheitelhoch waren, lag ihr Gewicht meist merklich unter zweieinhalb Kilogramm. Die überlegene Reichweite ist, ebenso wie die durch das geringe Gewicht und den rund 50 cm langen Griff ermöglichte hohe Schnelligkeit dieser Waffe, elementar für die zugehörige Fechtkunst mit dem spanisch-portugiesischen Montante.

Abgrenzung zu anderen Schwertformen[editar]

Waren die deutlich kürzeren zweihändigen Schwerter der anderen europäischen Fechtbuchtraditionen auf den Zweikampf, das Duell, hin ausgerichtet, so sind die großen Zweihänder wie sie in den spanischen und portugiesischen Überlieferungen ab dem späten 16. Jh. zu finden sind, für gänzlich andere Einsatzzwecke vorgesehen. Das Montante war vielmehr eine Flächenwaffe für asymmetrische Bedrohungslagen (meist mehrere, unterschiedlich bewaffnete Gegner auf einmal) und wurde hauptsächlich von spezialisierten Profis, wie Leibgarden u. ä., eingesetzt.

Die zugehörige Fechtkunst[editar]

Entsprechend dem Einsatzzweck zeigt sich auch der Aufbau der erhaltenen Lehren. In der Hochzeit der Spanischen Rapierkampfkunst „la verdadera Destreza“ ist in einigen wenigen Fällen auch die wohl auf dem älteren Escrima Vulgar/Escrima Commun basierende Kunst mit dem großen Montante niedergeschrieben worden. Diese Montanteabhandlungen zeichnen sich dadurch aus, dass sie in sogenannten „Regeln“ gegliedert sind. Eine Regel beschreibt eine Technikkombination für eine bestimmte Situation oder Gefechtslage. So gibt es eine spezielle Regel für Umzingelungssituationen in engen Gassen, eine andere Regel, um eine schutzbefohlene Dame zu verteidigen, eine Regel gegen Schildträger oder Stangenwaffenkämpfer, eine Regel zum Kämpfen auf dem schmalen Laufsteg einer Galeere usw. Darüber hinaus gibt es noch ein paar Regeln, welche nur als Übung zum Trainieren bestimmter Fähigkeiten und Bewegungsmuster gedacht sind, vergleichbar mit den Soloformen fernöstlicher Kampfkünste.

Gemein ist allen diesen Regeln, dass hier meist mehrere Gegner auf einmal angenommen werden, die jedoch eine andere Bewaffnung als man selbst aufweisen. Meist wird die Art der gegnerischen Bewaffnung nicht explizit genannt, sodass hier allgemein von leichteren Waffen (Rapiere, Seitschwerter, Messer) als man selbst ausgegangen wird, also eine asymmetrische Bedrohungslage vorherrscht. Durch Ausnutzung der überlegenen Reichweite und Masse des Montantes soll die zahlenmäßige Überlegenheit des Gegners kompensiert werden. Im Kampf gegen mehrere Gegner ist es wichtig, permanenten Druck gegen alle Angreifer gleichermaßen aufrechtzuerhalten, damit der Verteidiger nicht von dem Angreifer hinter oder neben ihm erschlagen wird, während er sich auf den Gegner vor ihm konzentriert.

Entsprechend wird das Montante häufig in durchlaufenden flachen Schwüngen geführt, die viel Raum abdecken und somit eine ganze Gegnergruppe in Schach halten können. Dabei werden keine Punktziele wie Körperteile oder Einzelpersonen angegriffen, sondern vielmehr Räume bestrichen. Das Montante ist also vielmehr eine Flächenwaffe. Jeder Hieb geht ohne Unterbrechung flüssig in den Nächsten über. Hier gleicht es entfernt dem deutschen Konzept Liechtenauers für das Zufechten, wo Vor- und Nachschlag als flüssige Einheit gefordert werden. Im Gegensatz zur Liechtenauerschen Schule wird beim Montante jedoch die Bindungsarbeit gänzlich vermieden, da eine gebundene Waffe allen anderen Gegnern Tür und Tor zum Angriff auf ungedeckten Stellen öffnet. Aus demselben Grund kommen auch Stiche recht selten und nur in ganz bestimmten Situationen vor.

Die verwendeten Hiebe sind, verglichen mit den fünf Häuen Liechtenauers, eher simpel. Die Kunst liegt mehr in der komplexen Beinarbeit, die bei diesen großen und aus dem ganzen Körper heraus geführten Waffen notwendig ist, um in ständig wechselnde Richtungen wirken zu können. So kommen des Öfteren komplette Körperdrehungen und sogar Drehsprungangriffe, z. B. gegen Stangenwaffen oder Umzingelungssituationen, vor.

Zum Vorgehen gegen schwerer bewaffnete Gegner wie Stangenwaffen- oder Schildträger existieren einige gesonderte Regeln.

In den meisten Quellen zum Montante werden auch 1–2 Regeln für den Kampf gegen ein anderes Montante beschrieben. Jedoch wird hier stets betont, dass das ein eher seltener Fall ist und das Duell nicht den originären Einsatzzweck des Montante darstellt.

Quellenlage zur Handhabung des Montante[editar]

Eine der ältesten und wichtigsten Quellen zum Montante stellt die Handschrift von Lois Godinho[1]​ aus dem Jahre 1599 dar. Er zeichnet sich durch besonders flüssige Kreisbewegungen aus. Seine Regeln sind stets in einer Endlosschleife „linksherum-rechtsherum“ durchführbar. Das zweite wichtige Werk zum Montante ist dasjenige des Portugiesen Dom Diego Gomez de Figueyredo[2]​ aus dem Jahre 1651. Es weist sehr große Ähnlichkeit in der Handhabung, aber auch einige Unterschiede zur Lehre Godinhos auf. So sind Figueyredos Regeln meist in einer „Vorwärts-Rückwärts“-Endlosschleife anwendbar. Gleichsam wie ein Film, denn man nach einem Durchlauf einmal wieder rückwärts laufen lässt. Figuereido beschreibt zwar mehr Regeln als Godinho, diese jedoch nicht so ausführlich und detailliert wie dieser.

Weiterhin gibt es noch einige Autoren, die dem Montante nur sehr wenige Worte widmen, zumeist in Form von heute nur noch wenig erhellenden Stichpunkten. Luis Díaz de Viedma[3]​ beschreibt in seinem Werk zur Destreza von 1639 neben einigen allgemeinen Dingen immerhin noch 3 ausführlichere Regeln zur Übung mit dem Montante.

Eine gewisse Sonderstellung nimmt das Fechtbuch von Miguel Pérez de Mendoza y Quijada von 1675 ein[4]​. Er beschreibt keinerlei konkrete Regeln, widmet jedoch jeweils ein eigenes Kapitel mit allgemeinen Anweisungen dem Montante sowie auch dem Mangual. Das Mangual, zu Deutsch schlicht „Flegel“, ist eine Kettenwaffe von etwa der gleichen Gesamtlänge wie das Montante. Der Autor lehrt, dass man mit dem Mangual dieselben Regeln wie mit dem Montante fechten könne und solle, nur die Stiche sind bei der Flegelwaffe wegzulassen.

Vergleich zum italienischen Spadone[editar]

Neben den genannten Quellen weisen die späten italienischen Quellen zum großen Zweihänder interessante Parallelen zum Montante auf. Beschreiben die Bologneser „Bidenhänder“-Fechtquellen des frühen 16. Jh. noch einen gänzlich anderen Stil mit Schwerpunkt auf dem Zweikampf Schwert gegen Schwert, so scheinen die Fechtbücher DiGrassis (1570/1594) und insbesondere Alfieris (1653) die Waffen dann nach denselben Prinzipien wie ihre iberischen Zeitgenossen zu führen.

Aus anderen Ländern sind bisher leider keine Quellen zur Handhabung der Großen Bidenhänder gefunden worden, was die hier beschriebenen Fechtbücher zu etwas Besonderem macht.



Un mayal de armas es un arma blanca contundente compuesta de dos varas de distinta longitud unidas por uno de sus extremos. Fue usada en Europa y Asia.

Jinete chino con mayal de armas largo.
Detalles de un mandoble flamígero.

queEn su versión militar occidental posee pocos cambios respecto a su "hermana" agrícola, tan sólo refuerzos metálicos, cadena en lugar de tiras para unir las varas y, en ocasiones, la vara tiene pinchos o cabeza de armas ferrada como las mazas. En las orientales, se ven mayor número de ejemplares exclusivamente militares, tanto para infantería como para caballería.

  1. http://www.spanishsword.org/files/godinho.excerpt.pdf.  Parámetro desconocido |text= ignorado (ayuda); Parámetro desconocido |wayback= ignorado (ayuda); Falta el |título= (ayuda)
  2. http://home.uchicago.edu/~advorak/Web_pictures/California/Figueiredo_Montante_Translation_Myers_and_Hick.pdf.  Parámetro desconocido |text= ignorado (ayuda); Parámetro desconocido |wayback= ignorado (ayuda); Falta el |título= (ayuda)
  3. http://spanishsword.org/files/method.of.teaching.of.masters.translation.pdf.  Parámetro desconocido |text= ignorado (ayuda); Parámetro desconocido |wayback= ignorado (ayuda); Falta el |título= (ayuda)
  4. Miguel Pérez de Mendoza y Quijada: http://books.google.co.uk/books?id=dc1RZfBkb-AC&printsec=frontcover&hl=de.  Parámetro desconocido |text= ignorado (ayuda); Parámetro desconocido |wayback= ignorado (ayuda); Falta el |título= (ayuda), 1675