ANTES DE QUE VAYAS A LEER TODO EL ROLLO QUE SIGUE, LEE ESTAS DOS LÍNEAS: ESTUVE PARTICIPANDO EN WIKIPEDIA HACE MUCHO TIEMPO, HASTA 2009, APROXIMADAMENTE. AHORA ESTOY INTENTANDO REGRESAR Y VER CÓMO COLABORO UN POCO CON ESTE HERMOSO PROYECTO. BENDICIONES A TODOS! (OJO, LA MAYORÍA DE LOS DATOS QUE VIENEN A CONTINUACIÓN ESTÁN DESACTUALIZADOS).
Soy cristiano católico, cubano. Me gustaría compartir criterios acerca de la Religión Cristiana con todos aquellos que se interesen en el estudio de la Teología.
Algunos datos sobre mi persona
En el 2004 choqué con Aquel que hoy es el Primero en mi vida. Desde entonces nada es igual y mi vida no carece de sentido, sino que ahora toda mi felicidad se la debo a Aquel que me amó y se entregó por mí. A Él la gloria!
Soy cubano y me siento orgulloso de serlo y amo mi patria con gratitud. Detesto las discusiones sobre política, sin embargo no me escondo a la hora de defender la verdad, ella debería ser la meta de todo ser humano.
Hoy día estudio en el Seminario de San Carlos y San Ambrosio de la Arquidiócesis de La Habana como estudiante de la Congregación de la Misión.
Me intereso también por el estudio del inglés, latín y quisiera acercarme también al griego.
Las Artes Plásticas han sido mi atracción desde siempre, y de vez en cuando pinto algún cuadro o dibujo, o simplemente incursiono en algo nuevo.
Siempre busco amigos y estoy dispuesto a servirte en todo lo bueno, justo y loable.
Un obsequio para ti que me visitas
Dios es. Él es estricta y rigurosamente hablando la verdad absoluta y por excelencia. Sin embargo, esta convicción sólo podemos tenerla por medio de la fe, y esta misma fe es un don de Dios.
Gracias a la fe es que podemos percibir la realidad de la existencia de Dios como una verdad incuestionable, que se impone por sí misma en nuestra concepción intelectual de la vida en general.
Cuando el hombre encuentra a Dios y le reconoce como el Dios personal que es, perfecto en sus atributos, Sumo Bien, insuperable en el amor; entonces, halla que su vida tiene un sentido. El objetivo de su vida está orientado hacia una realidad trascendente, que no perece ni se limita a esta vida terrena y material. Toda su cosmovisión es transmutada a una concepción del universo nueva y liberadora. Todo adquiere un nuevo sentido, el sentido auténtico que tanto buscaba para por fin enfocar su vida con seguridad y sólido fundamento. El hombre encuentra su razón de existir, su propósito lógico y cierto, la clave exacta para comprenderse a sí mismo y al mundo que le rodea. Todo esto ocurre cuando encontramos a Dios y permitimos con docilidad que Él obre en nuestras vidas.
Cuando el hombre reconoce y acepta a Dios recibiéndolo humilde y confiadamente en su vida, entonces, es que puede notar inalteradamente la causa y naturaleza de su dignidad como persona y criatura de Dios. Sólo entonces es que puede sentirse pleno y feliz; se reconoce poseedor de una bienaventuranza que no está sometida a cambios, su felicidad no depende absolutamente de sus emociones, sino que se fundamenta en el conocimiento que ahora posee de Dios que ha matizado de verdadera alegría su vivir.
Su convicción y su confianza inquebrantable en Dios es el fundamento en que se apoya. El hombre encuentra su alma redimida del caótico sinsabor en que se debate el mundo que no conoce a Dios o lo concibe con una imagen desfigurada y por tanto incierta de la verdadera esencia divina. El hombre se ha liberado del absurdo y de la enajenación estresante que cunde en el mundo ciego. Dios lo ha rescatado, lo ha liberado. Dios le ha dado ojos nuevos para que pueda contemplar la vida desde una nueva dimensión antes para él desconocida.
El hombre descubre su capacidad de obrar el bien, de manera que se siente realizado. Descubre en su interior la semilla del amor, aunque bastante maltratada, pero aún así es animado y movido por Dios para que en cada acción tienda y se acerque más a Él. En él hay una moción que lo lleva a procurar la mayor intimidad con Dios.
La comunión entre ambos resulta en una cada vez más grande sintonía entre la criatura y su Creador, que se manifiesta en el esfuerzo del hombre por agradar e imitar al Bien amado.
Ahora el hombre no es solo un animal que piensa, ya es un hombre que cree, ya tiene la Fe. Es un hombre que no se afana desesperadamente ahogándose en el incierto, sino que confiado labora y espera, ya tiene la Esperanza. Y sobre todas las cosas, ya no es un hombre que se cree el resultado del azar o la casualidad caprichosa del universo inconsciente, sino que se siente importante porque ciertamente lo es, se siente amado y esto lo hace feliz, pero su felicidad no se encierra en sí mismo de manera egoísta, sino que el amor lo colma y se precipita, le es imposible ocultar lo que ha conocido, se hace testigo del amor de Dios. Entonces el hombre sobre todas las cosas ama. Ahora el hombre tiene el Amor. Éste es el hombre con Dios.
¡ATENCIÓN!
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Para RubensCatholicus por sus excelentes aportes en el articulo Sucesión Apostólica y por servir a Dios en todo momento, siempre procurando dar a conocer su Iglesia en Wikipedia.