Cultura misisipiana

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Esta es una versión antigua de esta página, editada a las 14:37 28 sep 2014 por Hans Topo1993 (discusión · contribs.). La dirección URL es un enlace permanente a esta versión, que puede ser diferente de la versión actual.
El sitio Parkin, en su caso la provincia de Casqui visitada por de Soto en 1541
Representación de los Héroes gemelos encontrada en Spiro Mounds.

La cultura misisipiana fue una cultura calcolítica de Norteamérica que floreció en el medio-oeste, el este y el sudeste de los actuales Estados Unidos aproximadamente entre los años 800 y 1500.

El estilo de vida misisipiano nació en el valle del río Misisipi (del cual toma su nombre). Las culturas del valle del río Ténesi pudieron asimismo empezar a desarrollar características misisipianas en esta época. Casi todos los emplazamientos misisipianos son anteriores a 1539 (cuando Hernando de Soto exploró el área), y se han descubierto muy pocos artefactos de esta cultura, lo que indica que la misma desapareció casi completamente antes de tomar contacto con los europeos.

Rasgos culturales

Una serie de rasgos culturales son reconocidos como característicos de los misisipianos. Aunque algunos de los pueblos de esta cultura no las practicaran todas, las siguientes actividades los diferenciaban de las culturas anteriores:

  1. La construcción de montículos de tierra en forma de pirámide truncada o de plataforma: de forma generalmente cuadrada o rectangular, circular en algunas ocasiones, al tope de los mismos solían levantarse otras estructuras (casas, templos, osarios, etc.).
  2. Agricultura basada en la producción de maíz: el desarrollo de la cultura misisipiana coincidió con la adopción de la agricultura intensiva y a gran escala del maíz.
  3. La utilización de conchas de ríos o marinas en la confección de cerámica.
  4. La ampliación de las redes comerciales hacia el oeste hasta las Montañas Rocosas, al norte de los Grandes Lagos, hasta el Golfo de México al sur y al Océano Atlántico al este.
  5. El desarrollo de sistemas complejos de jefatura o cacicazgo.
  6. Institucionalización de la división social.
  7. Centralización del control combinado del poder político y religioso en las manos de pocos.
  8. Comienza a establecerse una jerarquía en los asentamientos, donde un centro poblado tiene clara influencia o control sobre comunidades menores, que pueden o no poseer un número menor de montículos.
  9. La adopción del Complejo Ceremonial del Sudeste, también llamado Culto del Sur, un conjunto compartido de artefactos, iconografía, ceremonias y mitología, el sistema de creencias de la cultura misisipianos. Artefactos de este complejo ceremonial fueron encontrados desde Wisconsin (véase Parque Estatal Aztalan) hasta la Costa del Golfo, y desde Florida a Arkansas y Oklahoma.

No tenían sistema alguno de escritura, ni arquitectura en piedra, ni metalurgia (aunque trabajaban depósitos naturales de metal).

Cronología

Un sacerdote Misisipiano, con una maza ceremonial de pedernal. Artista Herb Roe, sobre la base de una placa de cobre.

La etapa misisipiano se divide generalmente en tres o más períodos. Cada uno de estos períodos históricos es una distinción arbitraria que varía de región a región. En un sitio, cada período puede considerarse que comenzar más temprano o más tarde, dependiendo de la velocidad de adopción o desarrollo de determinados rasgos misisipianos.

Los inicios de las culturas misisipianas son los que acaba de hacer la transición del periodo silvícola forma de vida (500-1000 CE). Los diferentes grupos tribales de vida abandonados para aumentar la complejidad, sedentarismo, la centralización, y la agricultura. El período misisipiano es considerado, en la mayoría de los lugares, ca. 1000-1200 a. de C.

El período misisipiano medio se considera a menudo el punto culminante de la era misisipiana era. La expansión de la gran complejo ceremonial en Cahokia, la formación de otro complejo de jefaturas, y la propagación del Complejo Ceremonial Sudeste y el desarrollo del arte y el simbolismo son característicos de este período de cambios. Los rasgos misisipianos mencionados anteriormente llegaron a ser generalizados en toda la región. En la mayoría de los lugares, este período se reconoce como ocurren c. 1200-1400 C.E.

El período misisipiano tardío, suele considerarse de c. 1400 a contacto con los europeos, se caracteriza por el aumento de la guerra, la agitación política, y los movimientos de población. La población de Cahokia dispersa a principios de este período (1350-1400), tal vez el aumento de la migración a otros centros políticos. Más a la defensiva las estructuras se ven a menudo en los sitios y, a veces, una disminución en la construcción de montículos y ceremonialismo. Aunque algunas zonas siguió una cultura esencialmente medio misisipiana hasta el primer contacto significativo con los europeos, la mayoría de las áreas dispersas o se habían experimentado graves tensiones sociales por el año 1500. Junto con el contemporáneo Anasazi, estos colapsos cultural coincidirá con el cambio climático global de la Pequeña Edad de Hielo.

Contacto con los europeos

Un mapa que muestra la ruta de De Soto a través del sureste.

En Joara, cerca de Morganton, Carolina del Norte, los Nativos Americanos de la cultura misisipiana interactuaron con los exploradores españoles de la expedición de Juan Pardo, quien construyó una base allí en 1567 llamada Fuerte San Juan. Existe documentación de la expedición y evidencia arqueológica del fuerte y la cultura nativa americana. Los soldados estuvieron en el fuerte aproximadamente 18 meses (1567-1568) antes de que los nativos los maten y destruyeran el fuerte. Artefactos españoles del siglo XVI han sido recuperados del sitio, que marcan el primer intento de colonización europea en el interior de los Estados Unidos.[1]

Expertos han estudiado los registros de la expedición de Hernando de Soto entre 1539-1543 para aprender sobre sus contactos con los misisipianos, mientras viajaba a través de sus aldeas en el sureste. Visitó muchas aldeas, en algunos casos quedándose durante un mes o más. Algunos de sus encuentros fueron violentos, mientras que otros relativamente pacíficos. En algunos casos, de Soto parece haber sido utilizado como una herramienta o un aliado en disputas entre los nativos. En un ejemplo de esto, de Soto negoció una tregua entre los Pacaha y los Casqui.

Los encuentros posteriores de de Soto dejaron aproximadamente a la mitad de los españoles y tal vez cientos de nativos muertos. Las crónicas de de Soto son de los primeros documentos escritos sobre el pueblo misisipiano, y son una fuente invaluable de información sobre sus prácticas culturales. Las crónicas de la expedición de Narváez fueron escritas antes de la expedición de de Soto.

Luego de la destrucción y desbando de la expedición de de Soto, el pueblo misisipiano continuó su estilo de vida con muy poca influencia europea directa. Sin embargo, indirectamente, introducciones europeas cambiaron drásticamente a las sociedades nativas americanas en el este de los Estados Unidos. Debido a que los nativos no tenían inmunidad a las nuevas enfermedades infecciosas, como el sarampión y la viruela, epidemias de estas causaron tantas muertes que sacudieron el orden social de muchas tribus. Algunos grupos adoptaron los caballos europeos y se volcaron al nomadismo. Las estructuras políticas colapsaron en muchos lugares.

Para cuando se comenzó a documentar más, el estilo de vida misisipiano había cambiado en forma irremediable. Algunos grupos mantuvieron la conexión a su pasado de construcción de montículos a través de la tradición oral, como los Cherokees de finales del siglo XIX.[2]​ Otros grupos nativo americanos, habiendo emigrado por cientos de kilómetros y perdido a sus ancestros debido a las enfermedades, no sabían que sus ancestros habían construido los montículos esparcidos por todo el paisaje. Esto contribuyó al mito de los constructores de montículos como un grupo diferente de nativos, el cual fue rigurosamente desacreditado por Cyrus Thomas en 1894.

Cacicazgos misisipianos conocidos

Cerámica hueca mostrando a la pantera de agua de la cultura misisipiana, encontrada en Rose Mound en Cross County, Arkansas, Estados Unidos, 1400-1600. Altura: 8 pulgadas (20 cm).
El sitio Kincaid como probablemente se haya visto en su auge.

Aunque la cultura misisipiana fue gravemente perturbada antes de que los europeos comiencen a documentar su organización política, los exploradores escribieron sobre varias unidades políticas misisipianas y otras han sido descubiertas luego de investigaciones arqueológicas. Algunos de estos sitios fueron:

Pueblos modernos relacionados

El pueblo misisipiano fue casi con certeza de donde descendieron la mayoría de las naciones indígenas americanas que viven en la región histórica. Los pueblos históricos y modernos que se cree han descendido de la cultura misisipiana extendida son: los Alabama, Apalachee, Caddo, Cherokee, Chickasaw, Choctaw, Creek, Guale, Hitchiti, Houma, Kansa, Missouri, Mobilian, Natchez, Nación Osage, Quapaw, Seminole, Tunica-Biloxi, Yamasee, y Yuchi.

Referencias

  1. Constance E. Richards, "Contact and Conflict", American Archaeologist, Spring 2004, accessed 26 Jun 2008
  2. Hudson pag. 334
  3. David Pollack (2004). Caborn-Welborn - Constructing a New Society after the Angel Chiefdom Collapse. University of Alabama Press. p. Pp. 24. ISBN 0-8173-5126-4. 
  4. «Southeastern Prehistory: Mississippian and Late Prehistoric Period». "National Park Service". Consultado el 4 de diciembre de 2007. 
  5. Hudson, Charles M. (1997). Knights of Spain, Warriors of the Sun. University of Georgia Press. 

Bibliografía

(en inglés)

  • Bense, Judith A. Archaeology of the Southeastern United States: Paleoindian to World War I. Academic Press, New York, 1994. ISBN 0-12-089060-7.
  • Cheryl Anne Cox; and David H. Dye, eds; Towns and Temples along the Mississippi University of Alabama Press 1990
  • Hudson, Charles; The Southeastern Indians. University of Tennessee Press, Knoxville, 1976. ISBN 0-87049-248-9.
  • O'Conner, Mallory McCane. Lost Cities of the Ancient Southeast. University Press of Florida, Florida A & M University, Gainesville, Fla., 1995. ISBN 0-8130-1350-X.
  • Pauketat, Timothy R.; The Ascent of Chiefs: Cahokia and Mississippian Politics in Native North America. University of Alabama Press, 1994, ISBN 978-0-8173-0728-8.
  • Pauketat, Timothy R.; “The History of the Mississippians” in North American Archaeology Blackwell Publishing Ltd., 2005.

Enlaces externos