Ir al contenido

Réquiem

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Esta es una versión antigua de esta página, editada a las 11:29 14 jul 2014 por 193.146.123.220 (discusión). La dirección URL es un enlace permanente a esta versión, que puede ser diferente de la versión actual.

El Réquiem (en latín, «descanso») o Misa de réquiem —conocido también en latín como Missa pro defunctis o Missa defunctorum— es la misa de difuntos de la religión católica, un ruego por las almas de los muertos, reproducido justo antes del entierro o en las ceremonias de conmemoración o recuerdo. Este servicio suelen observarlo también otras iglesias cristianas, como la Iglesia Anglicana y la Iglesia Ortodoxa. Su nombre proviene de las primeras palabras del «Introito»: «Requiem æternam dona eis, Domine, et lux perpetua luceat eis» («Concédeles el descanso eterno, Señor, y que brille para ellos la luz perpetua»).

Réquiem es también el nombre de más de 100 composiciones musicales utilizadas principalmente para realzar estos servicios litúrgicos, así también como piezas de concierto. Este modo de interpretación es hoy en día muy raro, con la excepción de las misas de difuntos celebradas por la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, el Instituto de Cristo Rey y las órdenes y congregaciones adscritas al Motu Proprio Summorum Pontificum.

Textos litúrgicos católicos

Las oraciones y piezas musicales de la misa tradicional como el «Introito» cambian normalmente en función del calendario litúrgico, pero el réquiem es una misa votiva, en la que el texto no cambia. Desde el punto de vista del nombre de las partes cantadas, la misa de réquiem difiere de la misa usual en el hecho de que ciertas partes gozosa son suprimidas como el «Gloria», el «Credo» y el «Aleluya» (que se remplazaba por el «Tracto») y por el hecho de la existencia de una secuencia, el «Dies Irae». Es de destacar que en canto gregoriano, el «Kyrie» y el «Sanctus» siguen una melodía propia, y el «Agnus Dei» tenía unas palabras específicas, ("Concédeles el descanso", "Dona eis requiem").

Estas descripciones siguen la misa tridentina, que desde 1969 fue parcialmente modificada: ya no existen ni el tracto ni las antífonas de ofertorio (el graduale romano las conserva en parte), la secuencia de difuntos ya no se usa en la misa de difuntos, sino que, dividida en tres partes, se usa como himno en la XXXIV semana del tiempo ordinario, etc.

Las partes tradicionales del texto del Réquiem en la liturgia católica son las que recoge el siguiente cuadro.

Partes de una Misa de Réquiem
Nombre Texto en latín Texto en español
Introito
(introitus)
Requiem æternam dona eis, Domine, et lux perpetua luceat eis.
Te decet hymnus Deus, in Sion, et tibi reddetur votum in Ierusalem.
Exaudi orationem meam; ad te omnis caro veniet.
Requiem aeternam dona eis, Domine, et lux perpetua luceat eis.
Dales Señor, el eterno descanso, y que la luz perpetua los ilumine, Señor.
En Sion cantan dignamente tus alabanzas.
En Jerusalén te ofrecen sacrificios.
Escucha mis plegarias, Tú, hacia quien van todos los mortales.
Dales Señor, el eterno descanso, y que brille para ellos la luz perpetua.
Kyrie eleison
(en la misa ordinaria Kyrie)
Kyrie eleison.
Christe eleison.
Kyrie eleison.
Señor, ten piedad.
Cristo ten piedad.
Señor ten piedad.
Gradual
(graduale)
Requiem aeternam dona eis, Domine, et lux perpetua luceat eis.
In memoria aeterna erit iustus: ab auditione mala non timebit.
Señor, dales el descanso eterno y haz brillar para ellos la luz sin fin.
El justo quedará en el recuerdo eterno, el cual no tenga
una mala reputación
Tracto Absolve, Domine, animas omnium fidelium defunctorum ab omni vínculo delictorum et gratia tua illis succurente mereantur evadere iudicium ultionis, et lucis æterne beatitudine perfrui. Absuelve, Señor las almas de los fieles difuntos de las ataduras del pecado, y que socorridos por tu gracia merecen escapar al Juicio vengador y disfrutar de la felicidad de la luz eterna.
Secuencia
(sequentia)
Dies iræ, dies illa, solvet sæclum in favilla, teste David cum Sibylla ! ....

(Dies Irae)

Día de la ira, aquel día en que los siglos se reduzcan a cenizas; como testigos el rey David y la Sibila ....
Ofertorio
(offertorium)
Domine, Iesu Christe, Rex gloriæ, libera animas omnium fidelium defunctorum de poenis inferni et de profundo lacu.

Libera eas de ore leonis, ne absorbeat eas tartarus, ne cadant in obscurum; sed signifer sanctus Michael repræsentet eas in lucem sanctam, quam olim Abrahæ promisisti et semini eius.
Hostias et preces tibi, Domine, laudis offerimus; tu suscipe pro animabus illis, quarum hodie memoriam facimus.
Fac eas, Domine, de morte transire ad vitam; quam olim Abrahæ promisisti et semini eius.

Señor, Jesucristo, Rey de gloria, liberad las almas de los fieles difuntos de las llamas del Infierno y del Abismo sin fondo.

Liberadlos de la boca del león para que el abismo horrible no los engulla y no caigan en los lazos de las tinieblas. Que san Miguel, portador del estandarte, los introduzca en la santa luz; como le prometiste a Abrahán y a su descendencia.
Súplicas y alabanzas, Señor, te ofrecemos en sacrificio. Acéptalas en nombre de las almas en cuya memoria hoy las hacemos.
Hazlas pasar, Señor, de la muerte a la vida, como antaño prometiste a Abraham y a su descendencia.

Santo
(Sanctus en la misa ordinaria)
Sanctus, Sanctus, Sanctus, Domine Deus Sabaoth!;
pleni sunt coeli et terra gloria tua.
Hosanna in excelsis.
Benedictus qui venit in nomine Domini.
Hosanna in excelsis.
Santo, Santo, Santo es el Señor; Dios de las fuerzas celestiales.
Llenos están el cielo y la tierra de vuestra gloria.
Hosanna en las alturas.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
Hosanna en las alturas.
Agnus Dei
(agnus Dei).
Es el agnus dei de la misa ordinaria cambiando miserere nobis por dona eis requiem, y dona nobis pacem por dona eis requiem sempiternam.
Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, dona eis requiem,
Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, dona eis requiem,
Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, dona eis requiem sempiternam.
Cordero de Dios, que quitáis el pecado del mundo, dadles el descanso.
Cordero de Dios, que quitáis el pecado del mundo, dadles el descanso.
Cordero de Dios, que quitáis el pecado del mundo, dadles el eterno descanso.
Comunión
(Communio)
Lux æterna luceat eis, Domine, cum sanctis tuis in æternum, quia pius es.
Requiem æternam dona eis, Domine, et lux perpetua luceat eis.
Cum sanctis tuis in æternum, quia pius es.
Que la luz eterna brille para ellos, Señor, en medio de vuestros Santos porque sois misericordioso.
Señor, dadles el reposo eterno y haz brillar la luz para ellos sin fin
.
Entre vuestros santos para siempre, pues sois misericordioso.

Composiciones musicales

Durante muchos siglos, los textos del réquiem fueron cantados en canto gregoriano. La primera versión polifónica conocida ha sido compuesta por Johannes Ockeghem hacia 1460; su Réquiem está considerado como una copia de un compositor más antiguo, Guillaume Dufay.[1]​ Los primeros réquiems utilizaban diferentes textos de varias liturgias europeas, hasta que el Concilio de Trento adoptó el texto anterior. El Réquiem de Antoine Brumel, hacia 1500, fue el primero que incluyó el «Dies Irae».

A la fecha, se han compuesto más de 2000 réquiems. Las versiones del Renacimiento son en principio a cappella (es decir, sin acompañamiento instrumental) y casi 1,600 compositores han preferido utilizar instrumentos para acompañar al coro y utilizan igualmente cantantes solistas.

La mayoría de los compositores omiten partes de la liturgia, en general el Gradual y el Tracto. Gabriel Fauré y Maurice Duruflé no han incluido el «Dies Irae» (está incluido en el Libera me en el Réquiem, de Fauré), mientras que este texto lo han usado a menudo compositores franceses como obra independiente.

Réquiems de concierto

A veces, los compositores dividen una parte de la liturgia en uno o dos movimientos a causa de la longitud del texto. El «Dies Irae» es el que con más frecuencia ha sido dividido en varias partes (como ocurre en el Réquiem, de Wolfgang Amadeus Mozart). El «Introito» y el «Kyrie», que eran consecutivos en la antigua liturgia católica de San Pío V, también suelen agruparse en un único movimiento.

Desde inicios del siglo XIII hasta el siglo XIX, muchos compositores han escrito réquiems tan largos o utilizaban tantos músicos que no podían ser tocados durante un servicio fúnebre habitual. Los réquiems de Gossec, Héctor Berlioz, Giuseppe Verdi y Antonín Dvořák son oratorios. Una contra-reacción a esta tendencia vino del movimiento ceciliano que recomendaba un acompañamiento restringido para la música litúrgica y veía de mal gusto la utilización de solistas vocales. Johannes Brahms compuso su Requiem Alemán ("Ein Deutsches Requiem", Op. 45) utilizando solamente textos de las Escrituras, dejando de lado la liturgia. Brahms buscó expresar el duelo y la consolación desde el punto de vista del doliente.

Desarrollo en el siglo XX

El réquiem ha evolucionado en nuevas direcciones en el último siglo. El género «Réquiem de guerra», que consiste en obras dedicadas a la memoria de personas muertas en tiempos de guerra, es seguramente la más destacada. Este género incluye a menudo poemas no litúrgicos o pacifistas; por ejemplo el War-Requiem, de Benjamin Britten, yuxtapone el texto latino con poesías de Wilfred Owen, y el Mass in Black, de Robert Steadman, entremezcla la poesía ecologista y las profecías de Nostradamus.

El siglo XX ha visto además el desarrollo de réquiems profanos, escritos para ser tocados sin relación con la religión (por ejemplo el Réquiem de Dmitri Kabalevski con los poemas de Robert Rozhdestvensky), y algunos compositores han escrito obras puramente instrumentales que titulan réquiem como la Sinfonia da Requiem, del mismo Britten.

Obra escrita en 2011 es La carne de los muertos (Requiem), del doctor Tsanoff Hristo, DM.

Movimientos añadidos

Ciertos arreglos contienen textos adicionales, como el motete «Pie Jesu» (Dvořák, Fauré, Duruflé, Andrew Lloyd Webber y Carlos Aznárez; Faur lo ha situado para soprano solo en el centro). El «Libera me» (proveniente de la «Absolución») y el «In paradisum» (proveniente del enterramiento que, en el caso de los funerales, sigue a la misa) terminan ciertas composiciones. También se han compuesto otros movimientos, como los salmos ingleses «Out of the Deep» y «The Lord is My Shepherd», incluidos en el Requiem de John Rutter.

Nombre Texto en latín Texto en español
Libera me Libera me, Domine, de morte æterna, in die illa tremenda, quando coeli movendi sunt et terra.
Dum veneris judicare sæculum per ignem.
Tremens factus sum ego et timeo, dum discussio venerit atque ventura ira.Dies iræ, dies illa, calamitatis et miseriæ, dies magna et amara valde.
Requiem æternam dona eis, Domine: et lux perpetua luceat eis.
Líbrame, Señor, de la muerte eterna, en aquel tremendo día, Cuando tiemblen los cielos y la tierra.
cuando vengas a juzgar al mundo con el fuego.
Temblando estoy y temo, mientras llega el juicio y la ira venidera.
Día aquel, día de ira, de calamidad y miseria, día grande y amargo.
Dales, Señor, el descanso eterno, y brille ante sus ojos la luz perpetua.
In paradisum In paradisum deducant te Angeli; in tuo adventu suscipiant te martyres, et perducant te in civitatem sanctam Ierusalem.
Chorus angelorum te suscipiat, et cum Lazaro quondam paupere æternam habeas requiem.
Al paraíso te conduzcan los Ángeles; a tu llegada te reciban los mártires, y te conduzcan a la ciudad santa de Jerusalén. El coro de los ángeles te reciba, y con Lázaro otrora pobre tengas el eterno descanso.
Pie Jesu

(combina y parfrasea los versos finales del «Dies Irae» y del «Agnus Dei».)

Pie Iesu Domine, dona eis requiem.
Dona eis requiem sempiternam.
Señor Jesús Piadoso, dáles el descanso.
Dáles el descanso eterno.

Réquiems célebres

Requiems célebres
Año Título Compositor Notas
Missa pro defunctis Johannes Ockeghem El primer réquiem que se conserva.
1544 Missa pro defunctis a5 Cristóbal de Morales Tiene otro Réquiem a4 (a cuatro voces)
1580 Missa Pro Defunctis Orlando di Lasso
1590 Missa Pro Defunctis Eustache du Caurroy
1591 'Missa pro defunctis à cinq voix. Giovanni Pierluigi da Palestrina
1603 Officium Defunctorum Tomás Luis de Victoria a 6 (a seis voces) fue creado para los funerales de la Emperatriz María, viuda de Maximiliano II.
1605 Requiem in A (c. 1690) Heinrich Ignaz Biber También compuso otro Réquiem en fa menor (c. 1692)
1695 Messe de Morts André Campra
1705 Messe de Morts Jean Gilles
1731 Réquiem en do menor ZWV 48 Jan Dismas Zelenka Compuso otros tres réquiems: ZWV 45, 46 (1733) y 49 (antes de 1730).
1760 Missa pro defunctis (a veces llamado Grande messe des morts) François-Joseph Gossec
1771 Andrea Luchesi Compuesto para los funerales solemnes del embajador de España en Venecia.
1771 Réquiem Solemne en Do menor Michael Haydn Este réquiem fue escrito en 1771 para el arzobispo de Salzburgo, Sigismundo.
1791 Réquiem Wolfgang Amadeus Mozart Última obra de Mozart, compuesta en su lecho de muerte. El Introitus se interpretó algunos días después de la muerte de su autor, en un concierto celebrado en su memoria. El réquiem completo se ha interpretado en los funerales de los compositores Ludwig van Beethoven y Fryderyk Chopin, y en el de Napoleón Bonaparte.
1804 "Piccolo Requiem composto da me, e per me, Ant. Salieri, piccolissima creatura" Antonio Salieri Dirigido por Franz Schubert en el funeral de Salieri.
1817 Réquiem en do menor Luigi Cherubini Compuesto para el aniversario de la muerte de Luis XVI.
1836 Requiem pour chœur d’hommes et orchestre en ré majeur Luigi Cherubini
1835-37 Grande Messe des Morts Hector Berlioz Estrenado en Los Inválidos el 5 de diciembre de 1837 para las exequias del general Charles-Marie Denys de Damrémont.
1848 Réquiem Anton Bruckner
Requiem für Mignon opus 98b Robert Schumann
1852 Requiem Opus 148 Robert Schumann Primera versión de abril de 1852, orquestada entre el 16 de mayo y el 23 de mayo de 1852.
1867-68 Requiem Franz Liszt Compuesto en memoria de su madre y sus hijos Daniel y Blandine.[2]
1869 Un Réquiem alemán («Ein deutsches Requiem») Johannes Brahms Réquiem luterano.
1874-75 Messe de Requiem Giuseppe Verdi Compuesto para el aniversario de la muerte de Alessandro Manzoni. Comenzado a varias manos para Gioacchino Rossini, fue abandonado antes de ser retomado por Verdi. Fue estrenado en Milán, el 22 de mayo de 1874, en el ámbito de los actos recordatorios del primer aniversario de la muerte de Manzoni, en la Iglesia de San Marcos, bajo la dirección del autor.
1877-79 Messe de Requiem Gabriel Fauré Existen tres versiones, y la última, de 1900, es una versión orquestal.
1893 Requiem en do Majeur Charles Gounod
1890 Requiem Antonín Dvořák
1918-1921 A World Requiem op. 60 John Foulds Homenaje a los muertos de la Primera Guerra Mundial. Utiliza textos litúrgicos, no litúrgicos y poemas.
1922-1923 Messa di requiem Ildebrando Pizzetti Lenguaje diatónico herencia de Palestrina, en línea con el neoclasicismo, del siglo XX.
1927 Requiem Cyrillus Kreek (en estonio original: Reekviem c-moll.
1947 Requiem Maurice Duruflé Escrito para coro, gran orquesta y órgano, es la misma línea musical que el de Fauré. Duruflé hizo una versión para órgano solo, y en 1961 una versión para coro, órgano y pequeña orquesta de cuerda.
1952-53 Missa da Requiem Heinrich Sutermeister
1961 War-Requiem Benjamin Britten Escrito en reacción a la II Guerra mundial, usa poemas de Wilfred Owen. Fue estrenado el 30 de mayo de 1962 en la catedral reconstruida de Coventry. Britten dirigió el estreno con los solistas Peter Pears, Dietrich Fischer-Dieskau y Heather Harper. Esta obra debía tener un carácter unificador y pacifista. Por ello, estaba previsto que cantantes alemanes, rusos, americanos e ingleses interpretasen la obra, dirigidos por el mismo Britten. Sin embargo, en el contexto de la Guerra fría, la URSS rehusó enviar sus solistas.
1963-65 Requiem György Ligeti
1966 Réquiem canticles Ígor Stravinski
1972-75 Requiem Alfred Schnittke
1974 Requiem pour les temps atomiques Jean Daetwyler Escrito por el compositor suizo después de una visita a Auschwitz.
1984 Requiem Mass Andrew Lloyd Webber Compuesto a la memoria de su padre, apoyándose en el texto latino tradicional.
1985 Requiem John Rutter
1989 Requiem Sandro Gorli Compuesto para coro mixto a cappella, por encargo del ministerio francés de cultura y estrenado por la Chapelle Royale bajo la dirección de Philippe Herreweghe. Está dedicado a la memoria de Nathalie Méfano.
1990 Requiem: a la memòria de Salvador Espriu Xavier Benguerel Con el texto canónico latino y algunos poemas en catalán de Salvador Espriu, es un homenaje al poeta, muerto en 1985; para cinco solistas, coro y orquesta.
1990-93 Réquiem Polaco Krzysztof Penderecki
1998 Requiem for my friend Zbigniew Preisner Compuesto en memoria del director de cine Krzysztof Kieslowsi
2005 Requiem Mass Karl Jenkins Dedicado al padre de Jenkins, mezcla varios estilos musicales, incluido el ritmo hip-hop en el dies irae, y poemas haiku junto con textos en latín.2♙2♙

2007 Requiem In memoriam Carlos Aznárez Dedicado al Papa Juan Pablo II. Compuesto para orquesta, coro y solistas (soprano, mezzo y tenor)

1995 Requiem Opeth Del disco Orchid

2014 Requiem Germán Campagno Continuación de Requiem de Opeth. En memoria de los que se fueron antes

Notas y referencias