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Orden 66

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La orden 66 es el nombre de la resolución del universo de ficción Star Wars dictada por el Canciller Palpatine casi al final de la Guerras Clon, y antes de nombrarse el Emperador del Imperio Galáctico, en el tercer episodio de la saga.


El Canciller expuso ante el Senado Galáctico que los Jedi habían iniciado una revuelta, para hacerse él mismo con el poder. Gracias a ello obtuvo el respaldo de dicha institución y dio la orden de eliminar a todos y cada uno de los Jedi, puesto que eran considerados enemigos de la República Galáctica. Por ello, todos los soldados clon, que estaban creados genéticamente para obedecer sin cuestionamiento alguno las órdenes del supremo líder de la República, eliminaron a los Jedi que los dirigían.

Entre los Jedi más conocidos que fueron asesinados por la orden 66 hallamos a: Aayla Secura, Barriss Offee, Ki-Adi-Mundi, Luminara Unduli, Plo Koon & Stass Allie. En total se calcula que unos 5.000 Jedi cayeron en combate.

Texto de la Orden 66

"En caso de que los oficiales Jedi actúen en contra de los intereses de la República, y después de haber recibido órdenes específicas verificadas del Comandante Supremo (Canciller Supremo), los comandantes clones eliminarán a estos oficiales a partir de fuerza letal, y éstos, luego, se dirigirán al Comandante Supremo hasta que una nueva estructura de mando sea establecida."

Razones de la Orden 66

Las verdaderas razones de esta orden eran mucho más siniestras, debido a que el Emperador Palpatine había organizado este plan meticulosamente, en una operación muy bien orquestada contra los Jedi.

Para dispersar las fuerzas de los Jedi los había mandado a guerras lejanas, y separadas.

La Orden, enviada a los comandantes clon por toda la Galaxia, determinaba que todos los Jedi debían ser asesinados. Miles de tropas se volvieron en contra de sus Generales Jedi, empezando así la Purga Jedi.

Este extracto muestra la visión de la República:

"Ciudadanos de la República, una terrible verdad ha sido revelada, la Orden Jedi con la tarea de llevar a cabo las Guerras Clónicas por estos tres últimos años, ha sido ocultado un terrible secreto. Ellos han transgredido los principios de la República, centrando el poder en ellos mismos en una pugna por debilitar nuestras menguadas instituciones. ¡Los Jedi son traidores! ¡Han tratado de asesinar al Canciller! ¡Son enemigos de la República!

Afortunadamente, los soldados bajo su mando han actuado con incuestionable lealtad e integridad. Tras la ejecución de la orden de nuestro Canciller, han trazado el camino correcto para liberarnos de esta amenaza. Los Jedi supervivientes serán cazados y ajusticiados. Con las ineficiencias y elementos truculentos de la República estuvimos ciegos durante mucho tiempo, la Nueva Orden, el Primer Imperio Galáctico nos brindará una sociedad segura y podremos vivir en paz.”''

Ataque al Templo Jedi

Darth Vader se unió a Palpatine ayudándolo y comandando un grupo de Clones destinados a Operaciones especiales (soldados arc), o también Legión 501.

Los clones usaron una táctica de rodear y disparar permanentemente lo cual causaba que fueran inapuntables, debido a que sabían que los Jedi no podían deflectar los disparos desde múltiples direcciones (es el único punto débil Jedi).

Entre las muertes destacables de esta operación encontramos al Guardián Jedi Jurokk, Whie Malreaux, Mitzy Swan, Bene, Cin Drallig, Zett Jukassa, Jocasta Nu y los miembros del Clan del Oso (los niños adiestrados por Yoda, y el futuro de la Orden Jedi).

Supervivientes de la Orden 66

Los supervivientes luego fueron perseguidos y algunos ejecutados por órdenes de Darth Sidious (sin ser ésta la Orden 66).

Dos supervivientes destacados de esta masacre son Obi-Wan y Yoda.