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=== Administración hospitalaria ===
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El procedimiento inicial en el hospital es la pericardiocentesis<ref name=Gwinnutt />, que involucra la inserción de una aguja a través de la [[piel]] y al [[pericardio]], para aspirar líquido. A menudo, se deja una [[cánula]] temporalmente durante la resucitación después del drenaje inicial para que el procedimiento pueda realizarse nuevamente si la necesidad lo amerita.
El procedimiento inicial en el hospital es la pericardiocentesis<ref name=Gwinnutt />, que involucra la inserción de una aguja a través de la [[piel]] y al [[pericardio]], para aspirar líquido. A menudo, se deja una [[cánula]] temporalmente durante la resucitación después del drenaje inicial para que el procedimiento pueda realizarse nuevamente si la necesidad lo amerita.
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de los servicios medicos de emergencia


== Referencias ==
== Referencias ==

Revisión del 20:30 7 abr 2010

Taponamiento cardíaco
Especialidad cardiología

El taponamiento cardíaco, llamado también taponamiento pericárdico es una emergencia médica, caracterizada por una elevada presión en el pericardio, generalmente por efusión pericárdica, comprimiendo al corazón, haciendo que el llenado durante la diástole disminuya y el bombeo de sangre sea ineficiente, resultando en un veloz shock y con frecuencia, la muerte.

Etiología

El taponamiento cardíaco ocurre cuando el espacio pericárdico se llena con líquido por encima de su capacidad máxima. Si la cantidad de líquido aumenta poco (tal como en el hipotiroidismo) el saco pericárdico se expande hasta contener un litro o más de líquido antes que ocurra el taponamiento. Si el llenado de líquido es rápido (como ocurre en un traumatismo o una ruptura del miocardio) una pequeña cantidad, tanto como 100 ml es suficiente para causar taponamiento cardíaco.[1]

El taponamiento cardíaco es causado por una larga y descontrolada efusión pericárdica, que es el acúmulo de líquido dentro del pericardio.[2]​ Esto ocurre como resultado de trauma al pecho,[3]cancer, uremia, pericarditis, o como resultado de cirugía del corazón[2]​ y raramente ocurre durante durante una disección aórtica[4]​ o durante terapia con anticoagulantes.[3]​ La efusión puede ocurrir rápidamente (como es el caso de un trauma) o de manera más gradual (como el cancer). El liquido puede ser un exudado, transudado, sangre o pus[2]

La ruptura del miocardio es una causa relativamente rara de taponamiento cardíaco. Típicamente ocurre como consecuencia de un infarto de miocardio, en el que el músculo infartado adelgaza y se rasga. Esto es más factible en personas ancianas, sin historia de problemas cardíacos, quienes se encuentran con un primer ataque y no se les revasculariza por medio de terapias trombolíticas, intervención coronaria percutánea, o por bypass arterial.[5]

Fisiopatología

La membrana del pericardio, en su mayor extensión, es un material fibroso[6]​ que no se estrecha con facilidad, de modo que una vez comienza a llenarse de líquido por encima de su capacidad, comienza a incrementarse la presión torácica.[2]

Si el líquido continúa acumulandose, los ventrículos, con cada sucesiva diástole, se llenan con menos cantidad de sangre. A medida que la presión aumenta, comprime el corazón y hace que el tabique interventricular se doble hacia el ventrículo izquierdo, disminuyendo el volumen de eyección.[2]​ Esto causa el desarrollo de un shock obstructivo, y si se deja sin tratamiento, puede ocurrir un paro cardíaco.

Diagnóstico

El diagnóstico inicial puede ser un desafío, por haber un número de diagnósticos diferenciales, incluyendo un neumotórax a tensión[3]​ e insuficiencia cardíaca aguda.[cita requerida]

El taponamiento cardíaco clásico presenta tres signos, conocidos como la triada de Beck, aunque la ausencia de la triada de Beck no descarta taponamiento:[7]

Otros signos de taponamiento pueden incluir pulso paradójico (una caída de a lo menos 10 mmHg en la presión arterial durante la inspiración)[2]​, y cambios en el segmento ST del electrocardiograma,[8]​, el cual puede también mostrar un complejo QRS de bajo voltaje,[1]​ así como signos y síntomas de shock:

Si el tiempo lo permitiere, el taponamiento puede ser diagnosticado radiológicamente. En el ecocardiograma se demuestra con frecuencia un pericardio engrandecido o el colapso de los ventrículos. El rayos X de tórax de un taponamiento de considerable magnitud puede mostrar un corazón globoso.[1]

Tratamiento

Cuidado pre-hospitalario

El tratamiento dado inicialmente será por lo general de soporte, por ejemplo la administración de oxígeno, y monitoreo. Es poco lo que se puede hacer para el cuidado pre-hospitalario, más allá del tratamiento general del shock.

Algunos profesionales pre-hospitalarios tienen capacidad para proveer pericardiocentesis, pero ello es por lo general ineficiente si el paciente ha sufrido un paro cardíaco antes de su llegada al hospital,[6]​ de modo que el traslado inmediato a un hospital es el curso de acción más apropiado a tomar.

Administración hospitalaria

El procedimiento inicial en el hospital es la pericardiocentesis[3]​, que involucra la inserción de una aguja a través de la piel y al pericardio, para aspirar líquido. A menudo, se deja una cánula temporalmente durante la resucitación después del drenaje inicial para que el procedimiento pueda realizarse nuevamente si la necesidad lo amerita.

Referencias

  1. a b c *Fornauer, Andrew; Narasimham L. Dasika, Joseph J. Gemmete, and Constantine Theoharis (Spring de 2003). «Pericardial Tamponade Complicating Central Venous Interventions». Journal of Vascular and Interventional Radiology. 
  2. a b c d e f Mattson Porth, Carol, ed. (November de 2005). Pathophysiology: Concepts of Altered Health States (en english) (7th edición). Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins. ISBN 978-0781749886. 
  3. a b c d Gwinnutt, C., Driscoll, P., ed. (2003). Trauma Resuscitation: The Team Approach (2 edición). Oxford: BIOS Scientific Publishers Ltd.  Error en la cita: Etiqueta <ref> no válida; el nombre «Gwinnutt» está definido varias veces con contenidos diferentes
  4. *Isselbacher, E.M.; Cigarroa, J.E., Eagle, K.A. (1994). «Cardiac tamponade complicating proximal aortic dissection. Is pericardiocentesis harmful?». Circulation. 90: 2375-2378. 
  5. *Meniconi, A; C H ATTENHOFER JOST, R JENNI (November de 2000). «How to survive myocardial rupture after myocardial infarction». Heart 84 (5). 
  6. a b Thibodeau, G.A.; Patton, K.T. (2003). Anatomy & Physiology. Missouri: Mosby. 
  7. SANCHEZ-SUEN, Kwok Ho y PADILLA-CUADRA, Juan Ignacio. Taponamiento pericárdico. Acta méd. costarric. [online]. mar. 2001, vol.43, no.1 [citado 01 septiembre de 2007], p.07-10. Disponible en la World Wide Web: [1]. ISSN 0001-6002.
  8. a b Dolan, B; Holt, L. (2000). Accident & Emergency: Theory into practice. London: Bailliere Tindall.