Diferencia entre revisiones de «Platón»

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En la filosofía es Platón referencia para el [[racionalismo]] y el [[idealismo]].
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No obstante, para los que lo necesiten para la asignatura de filosofía, aquí están desarrolladas sus nociones y temas:
A. TEMAS.
1.- Teoría de las ideas y dualismo ontológico.
La reflexión sobre los interrogantes planteados por los presocráticos y los sofistas le llevó a Platón a desarrollar la Teoría de las ideas , piedra angular de su filosofía. Ésta dice que, no hay una sola realidad, sino dos mundos distintos: el sensible y el suprasensible o eidético. Por un lado, el sensible se caracteriza porque es aquel que experimentamos, sentimos- de ahí su nombre.- , donde predomina un conocimiento de opinión ( en griego, doxa; por lo que también es conocido como mundo dóxico), la pluralidad y el cambio defendidos por Heráclito, es decir, lo contingente.
Mientras que el otro mundo es el eidético, en alusión a sus componentes básicos: las ideas. En primer lugar, hay que señalar que, a diferencia del otro mundo, el sensible, éste está caracterizado por contener lo universal, inmutable y necesario, es decir, las ideas; (Al igual que el sensible llegamos por los sentidos, al eidético lo hacemos por medio de la razón.) Lo que supone el desmoronamiento del hilo argumental de los sofistas, quienes decían que no hay ni bien ni mal, todo es relativo; pues Platón lo refuta alegando que no es relativo; verdades como el bien y el mal están en el mundo eidético, libres de relativismo alguno.
Aunque los dos mundos parecen totalmente antagónicos, realmente tienen cosas en común, más específicamente tres:
A.- El mundo sensible participa del mundo suprasensible.( Participación) : Es decir, para Platón para cada cosa en el mundo sensible, donde todo es cambiante, hay otra en el eidético( idea), donde todo es inmutable. Así pues, la oveja es oveja porque participa de la idea de oveja, y lo mismo para el perro, o el árbol. Pero pese a que las cosas participen de las ideas, éstas siguen sin pertenecer al mundo sensible.
B.- El mundo sensible es una copia imperfecta del eidético.( Copia): Es decir, nosotros por ejemplo, copiamos las ideas de manera semejante a como la sombra de un objeto copia imperfectamente dicho objeto, siendo la sombra lo perteneciente al mundo sensible, y el objeto al suprasensible.
C.-

Sin embargo, es importante remarcar las características de los componentes de las ideas, y en qué consisten exactamente las mismas: Según Platón, los conceptos universales, es decir, las ideas, se alcanzan a través de la razón, quien las descubre del interior del alma. El motivo por el que las ideas estén en el alma es que, cuando el alma, estaba en el mundo eidético, lo supo todo, pero se le olvidó al bajar a un cuerpo, siendo éste para Platón una cárcel para la misma.
Esto es, las ideas no existen en las cosas, la mente o en las definiciones, sino que ya de por sí mismas, son una realidad. Por ejemplo, la idea de “cuadrado” no está en ninguna definición o en una cosa de forma cuadrada, sino que existe por sí misma; por lo tanto, la idea de cuadrado es una realidad independiente del mundo sensible o de nuestro pensamiento.
Sus propiedades son básicamente, 6:
1. Son eternas, pues no han comenzado a existir ni dejarán de hacerlo;
2. Son inmutables, pues no cambian ni pueden cambiar;
3. Son únicas , pues sólo hay una para cada tipo de realidad sensible;
4. Son inteligibles, pues se pueden pensar o conocer, pero no alcanzables por medio de los sentidos;
5. Son perfectas, pues no pueden añadírsele algo para mejorarlas;
6. Son causas y modelos de lo sensible, pues las cosas sensibles participan de ellas y las imitan.
Además de esto, Platón sostuvo ciertos puntos:
 Que las ideas se encuentran ordenadas jerárquicamente , por grados de importancia;
 Que con ello, análogamente a una figura piramidal, en la base estarían las más elementales, en relación a las cosas más materiales; y en la cúspide, la Idea suprema, que es aquella de la que participan el resto de las ideas.
A lo largo de su filosofía, Platón cambió de opinión acerca de cuál es esa Idea Suprema;
En La República, la idea suprema era la del Bien; es decir, para conocer realmente al hombre, primero debemos conocer el hombre bueno, lo que implica primero, la idea de Bien.
En Parménides, Platón señala que la Idea Suprema es ahora, la de Uno, donde, para evitar verse allegado al ser único de Parménides y negar la pluralidad de las ideas, afirma que la idea de Uno requiere de lo múltiple , de igual modo que lo múltiple no puede existir sin el Uno.
En Sofista presenta varias ideas supremas, como Ser, Reposo, Lo Idéntico y lo Diverso.. etc, para combatir el inmovilismo de Parménides .
2.- Educación Platónica. Polis Ideal.
Para la Platón, la finalidad de la sociedad es facilitar a los hombres una vida virtuosa y feliz por medio de la educación. En vista de los problemas políticos de su época, se planteó una Polis Ideal, que fuera modelo del resto de las Polis, donde si los individuos que la componen son buenos y justos, ésta lo será, y viceversa.
Platón afirma que dicha polis debe estar compuesta por tres clases, grupos de ciudadanos, en paralelo a las partes del alma: Racional, Irascible y Apetitiva o Concupiscible. Así pues, son:
1. el más reducido, formado por los filósofos, quienes se dedican al gobierno de la misma, y son educados en la virtud de la sabiduría(Sofía), propia del alma Racional.
2. Más numerosos, los guardianes, quienes se encargan de velar por la paz social interna y externa, con su correspondiente virtud de la fortaleza(Andreía), propia del alma Irascible.
3. La más numerosa: los Productores, quienes son fundamentalmente, campesinos, artesanos y comerciantes; han de trabajar no sólo para sí mismos, sino también para el resto, que está ocupado en otras tareas. Su virtud es la moderación(Sofrosine), propia del alma Concupiscible.
4. En conjunto, las tres partes constituyen la última virtud: Justicia(Díke), pues lo justo es que todos cumplan con su deber.
Por otro lado, según Platón, el procedimiento adecuado para saber cuál es el grupo al que va a pertenecer un individuo, se lleva a cabo un proceso de selección, tras una específica educación, que abarca varias etapas:
 Enseñanzas de Música, Gimnasia, Matemáticas y Geometría hasta los 30 años.
 Los que la superen, se dedicarán al estudio de la Dialéctica durante 5 años.
 A continuación, servirán a la administración del Estado, tanto como militar como civil, por 15 años.
 Los que logren superarlo, serán destinados al gobierno de la polis.


B. NOCIONES.
1.- Los prisioneros y las sombras.:
Estas nociones se asientan en el mito de la caverna, que refleja la situación del hombre frente al conocimiento.
Consiste en que, en la caverna, hay unos prisioneros, quienes han estado encadenados desde su nacimiento, de forma que sólo pueden ver hacia adelante, hacia la pared; donde sólo pueden ver las sombras proyectadas de los objetos que portan otros individuos detrás de ellos, iluminados por una hoguera, pues no hay sol en la misma. El problema es que, los prisioneros no saben que son prisioneros, y creen que conocen la realidad al conocer las sombras, cuando en realidad, todo es opinión y confusión. Sólo con la ayuda de alguien, pueden darse cuenta de su situación que son engañados, que lo que ven no es lo real, sólo copias imperfectas de lo real, y salir de la cueva, donde brilla el Sol.
Los elementos de la caverna representan una cosa; siendo , por ejemplo, las cadenas los sentidos, pues son según Platón, nuestra fuente de confusión;
Las sombras son lo sensible, lo cambiante, la copia de lo real, que es representado por los objetos que son iluminados por la hoguera, representante del Sol, la Idea Suprema de Bien; los prisioneros son el hombre, y los individuos que transportan los objetos, conocen la realidad, y son los manipuladores de los prisioneros. Fuera de la caverna representa el mundo de las Ideas, donde reside la Idea de Bien y lo verdadero, donde no hay opinión, sino ciencia.
2.- El ascenso al mundo de arriba y el Sol.
1. En el mundo subterráneo.
Supongamos, dice Platón, que a uno de los prisioneros, se le libera y obligase a levantarse, volver hacia la luz y mirar hacia el otro lado de la caverna. El prisionero sería incapaz de percibir las cosas cuyas sombras había visto antes. Se encontraría confuso y creería que las sombras que antes percibía son más verdaderas o reales que las cosas que ahora ve. Si se le forzara a mirar hacia la luz misma le dolerían los ojos y trataría de volver su mirada hacia los objetos antes percibidos.
2. En el mundo exterior.
Si a la fuerza se le arrastrara hacia el exterior sentiría dolor y, acostumbrado a la oscuridad, no podría percibir nada. En el mundo exterior le sería más fácil mirar primero las sombras, después los reflejos de los hombres y de los objetos en el agua, luego los hombres y los objetos mismos. A continuación contemplaría de noche lo que hay en el cielo y la luz de los astros y la luna. Finalmente percibiría el sol, pero no en imágenes sino en sí y por sí. Después de esto concluiría, con respecto al sol, que es lo que produce las estaciones y los años, que gobierna todo en el ámbito visible y que de algún modo es causa de las cosas que ellos habían visto.
Al recordar su antigua morada, la sabiduría allí existente y a sus compañeros de cautiverio, se sentiría feliz y los compadecería. En el mundo subterráneo los prisioneros se dan honores y elogios unos a otros, y recompensas a aquel que percibe con más agudeza las sombras, al que mejor recuerda el orden en la sucesión de la sombras y al que es capaz de adivinar las que van a pasar. Esa vida le parecería insoportable.
La interpretación que se tiene de esto es que, la ascensión del prisionero hacia el exterior, es análogo a la progresión del alma hacia lo inteligible; se va descubriendo las cosas poco a poco; si se hiciera bruscamente, la ascensión no serviría para nada, puesto que el libertado queda cegado; de igual forma que, si a un niño de 10 años le explicamos las integrales, no se entera de nada, se confunde, luego es inútil explicarle las integrales así. Mientras que si va avanzando progresivamente en el saber matemático, cuando le enseñemos las integrales entonces, las asimilará mucho mejor y por ende, la ascensión no habrá sido en vano.
3.- El retorno a la caverna y a las tinieblas.
Si descendiera y ocupara de nuevo su asiento tendría ofuscados los ojos por las tinieblas, sería incapaz de discriminar las sombras, los demás lo harían mejor que él, se reirían de él y dirían que por haber subido hasta lo alto se le han estropeado los ojos y que no vale la pena marchar hacia arriba; pero, si intentase desatarlos y conducirlos hacia la luz se burlarían de él, lo perseguirían y lo matarían.
Aquí se quiere decir que, cuando se llega al exterior, es decir el alma alcanza lo inteligible, el mundo exterior de la caverna, se encuentra con la idea suprema de Bien, la cual es causa de todas las cosas rectas y bellas; en el mundo visible ha engendrado la luz y al sol, y en el ámbito inteligible es la productora de la verdad y de la inteligencia; es la realidad que es necesario ver para poder obrar con sabiduría tanto en lo privado como en lo público, según Platón.
C.- CONTEXTO HISTÓRICO Y FILOSÓFICO DE PLATÓN.
Platón vivió entre los siglos v y iv antes de Cristo. En su época, se inició la Guerra del Peloponeso, a mano de Pericles, quién la emprendió, la cual enfrentó a Atenas y a sus aliados, así como a Esparta y aliados. Ésta duró 30 años, tras los cuales, se rindió Atenas. Inmediatamente después, se implantó una tiranía ( Los 30 Tiranos), que sustituía al anterior sistema, democrático. Sin embargo, durante la misma, Sócrates, mentor de Platón, fue juzgado y condenado a muerte.
Es por ello por lo que Platón tendía a buscar una estructura, una polis justa, donde se le daría mucha importancia a la educación, pues es la vía de selección de los individuos para ir a un grupo social o a otro. Y que en conjunto, lograr una armonía social.
Por otro lado, a Platón le parecía erróneo que a los jóvenes se les enseñara que las leyes eran convencionales y que conceptos como el bien o el mal eran relativos, que dependían del color del cristal con el que uno mirara las cosas; así pues, los criticó duramente y combatió con la Teoría de las Ideas, por la cual señalaba que el verdadero Bien no es relativo, dado que existe una idea Suprema del Bien en sí, que no puede cambiar.
Finalmente, habría que decirse cuáles fueron las influencias de Platón y la que tuvo el mismo en la filosofía posterior a él:
Como influencias, recibió el concepto de Demiurgo , de Anaxágoras, que decía que existía una inteligencia superior que ordenó el caos inicial en el universo a partir de las Ideas; las Matemáticas y el concepto del Hombre, proveniente de los Pitagóricos. De Heráclito, recibió el cambio, la pluralidad de las cosas; y de Parménides, la división de lo sensible y lo racional, presente en su dualismo ontológico; de Sócrates, su método de enseñanza y el concepto de vida virtuosa .
Como influencia en autores posteriores, se puede destacar a Santo Tomás de Aquino, quien a través de la corriente neoplatónica generada pasada la filosofía platónica, situó a las ideas en la mente de Dios y al mismo como el Demiurgo; Así como que Dios ilumina al alma-inmortal-, para que podamos conocer las ideas eternas e inmutables.
También se puede señalar por ejemplo, a Descartes, quien es considerado Padre del Racionalismo, que sostuvo el esquema dualista de la realidad , siendo esta vez lo verdadero la Razón, el Yo… y lo falso es lo exterior; a Nietzsche, quien criticó muy duramente a Platón por sostener que existía otro mundo, cuando el real, verdadero y único es aquel en el que nos encontramos.







== Véase también ==
== Véase también ==

Revisión del 18:44 24 mar 2010

Plantilla:Ficha de filósofo Platón (en griego: Πλάτων) (c. 427 a. C./428 a. C. – 347 a. C.) fue un filósofo griego, alumno de Sócrates y maestro de Aristóteles, de familia nobilísima y de la más alta aristocracia. Platón (junto a Aristóteles) es quién determinó gran parte del corpus de creencias centrales tanto del pensamiento occidental como del hombre corriente (aquello que hoy denominamos "sentido común" del hombre occidental) y pruebas de ello son la noción de "Verdad" y la división entre "doxa" (opinión) & "episteme" (ciencia). Demostró (o creó, según la perspectiva desde donde se le analice) y popularizó una serie de ideas comunes para muchas personas, pero enfrentadas a la línea de gran parte de los filósofos presocráticos y al de los sofistas (muy populares en la antigua Grecia) y que debido a los caminos que tomó la historia de la Metafísica, en diversas versiones y reelaboraciones, se han consolidado. Su influencia como autor y sistematizador ha sido incalculable en toda la historia de la filosofía, de la que se ha dicho con frecuencia que alcanzó identidad como disciplina gracias a sus trabajos. Alfred North Whitehead llegó a comentar:

La caracterización general más segura de la tradición filosófica europea es que consiste en una serie de notas al pie a Platón.
Alfred North Whitehead, Process and Reality, 1929

Entre sus obras más importantes se cuentan: La República (en griego Πολιτεια, politeia, "forma de gobernar - ciudad"), en la cual elabora la filosofía política de un estado ideal; el Fedro, en el que desarrolla una compleja e influyente teoría psicológica; el Timeo, un influyente ensayo de cosmogonía, cosmología racional, física y escatología, influido por las matemáticas pitagóricas; y el Teeteto, el primer estudio conocido sobre filosofía de la ciencia.

Fue fundador de la Academia de Atenas, donde estudió Aristóteles. Participó activamente en la enseñanza de la Academia y escribió sobre diversos temas filosóficos, especialmente los que trataban de la política, ética, metafísica y epistemología. El conjunto de las obras más famosas de Platón se han denominado Diálogos, debido a su estructura dramática de debate entre interlocutores, si bien varios epigramas y cartas suyos también han perdurado.

Biografía

Platón, que realmente se llamó Aristotóteles Podros, y cuyo seudónimo Platón significa el de la gran gracia ancha, -debido a que en su juventud había sido atleta- era hijo de una familia que pertenecía a la aristocracia ateniense, concretamente a la familia denominada Glaucón. Su nacimiento habría ocurrido en el séptimo día del mes Targelión, equivalente a nuestro actual 7 de mayo[cita requerida]. Su padre se llamaba Aristón, descendiente de Codro, último Rey de Atenas, y su madre Perictione, descendiente del legislador Solón y prima de Critias. Durante su juventud luchó como soldado en las guerras del Peloponeso de las cuales Atenas salió derrotada, y el poder y la economía que ostentaba sobre el mundo griego cayó en las manos de Esparta; así vivió las consecuencias de dicha guerra. A los 21 años pasó a formar parte del círculo de Sócrates, el cual produjo un gran cambio en sus orientaciones filosóficas. Tras la muerte de Sócrates en el 399 a. C., Platón se refugió en Megara durante un breve espacio de tiempo, donde comenzó a escribir sus diálogos filosóficos.

Sus conocimientos y habilidades eran tales que los griegos lo consideraban como hijo de Apolo y decían que en su infancia las abejas habían anidado en sus labios como profecía de las palabras melosas que salían de ellos.

Platón fue discípulo de Sócrates en su juventud y de acuerdo a sus propias palabras, estuvo presente durante su juicio, pero no en su ejecución. El trato que Atenas dio a Sócrates afectó profundamente a Platón y mucho de sus primeros trabajos registran la memoria de su maestro. Se dice que muchos de sus escritos sobre la ética estaban dirigidos a evitar que injusticias como la sufrida por Sócrates volvieran a ocurrir. Después de la muerte de Sócrates, Platón viajó extensamente por Italia, Sicilia, Egipto y Cirene en busca de conocimientos.

En el 396 a. C. emprendió un viaje de diez años por Egipto y diferentes lugares de África e Italia. En Cirene conoció a Arístipo y al matemático Teodoro de Cirene. En Magna Grecia se hizo amigo de Arquitas de Tarento y conoció las ideas de los seguidores de Parménides de Elea.

En el 388 a. C. viajó a Sicilia y en Siracusa, donde quiso influir en la política de Dionisio I y aprendió mucho de las formas de gobierno que plasmaría después en La República (en griego politeia que significa ciudadanía o forma de gobierno). Sus manifestaciones políticas, que en algunos casos eran irreverentes con la clase dominante, lo llevaron a prisión. De regreso a Grecia, su barco se detiene en Egina, que estaba en guerra contra Atenas, en donde él es vendido como esclavo, sin embargo Aníceris de Cirene reconoció a Platón en la venta de esclavos y le compró para devolverle la libertad.

En el 361 a. C., tras recobrar su libertad, Platón compró una finca en las afueras de Atenas, donde fundó un centro especializado en la actividad filosófica y cultural, al cual llamó Academia. El nombre procede de que en dicha finca existía un templo dedicado al antiguo héroe llamado Academo y dicha academia funcionó ininterrumpidamente hasta su clausura por Justiniano I en el 529 dc, pues veía en esta una amenaza para la propagación del cristianismo. Muchos filósofos e intelectuales estudiaron en esta academia, incluyendo a Aristóteles.

Platón también recibió influencias de otros filósofos, como Pitágoras, cuyas nociones de armonía numérica se hacen eco en la noción de Platón sobre las Formas; también Anaxágoras, quien enseñó a Sócrates y que afirmaba que la inteligencia o la razón penetra o llena todo; y Parménides, que argüía acerca de la unidad de todas las cosas y quien influyó sobre el concepto de Platón acerca del alma.

Platón murió en el 347 a. C., a los 81/82 años de edad, dedicándose en sus últimos años de vida a impartir enseñanzas en la academia de su ciudad natal.

Obra

La obra de Platón está escrita en forma de diálogos y puede dividirse en cuatro etapas:

  1. Primeros diálogos o diálogos socráticos o de juventud. Se caracterizan por sus preocupaciones éticas. Están plenamente influidos por Sócrates. Las más destacadas son: Apología, Ion, Critón, Protágoras, Laques, Trasímaco, Lisis, Cármides y Eutifrón.
  2. Época de transición. Esta fase se caracteriza también por cuestiones políticas, además, aparece un primer esbozo de la Teoría de la reminiscencia y trata sobre la filosofía del lenguaje. Destacan: Gorgias, Menón, Eutidemo, Hipias Menor, Crátilo, Hipias Mayor y Menexeno.
  3. Época de madurez o diálogos críticos. Platón introduce explícitamente la Teoría de las Ideas recién en esta fase y desarrolla con más detalle la de la reminiscencia. Igualmente se trata de distintos mitos. Destacan: El banquete, Fedón, República y Fedro.
  4. Diálogo de vejez o diálogos críticos. En esta fase revisa sus ideas anteriores e introduce temas sobre la naturaleza y la medicina. Destacan: Teeteto, Parménides, Sofista, Político, Filebo, Timeo, Critias, Leyes y Epínomis.
Papiro Oxyrhynchus, con fragmento de La República.

Los personajes de los diálogos son generalmente personajes históricos, como Sócrates, Parménides de Elea, Gorgias o Fedón de Elis, aunque a veces también aparecen algunos de los que no se tiene ningún registro histórico aparte del testimonio platónico. Cabe destacar, además, que si bien en muchos diálogos aparecen discípulos de Sócrates, Platón no aparece nunca como personaje. Solamente es nombrado en Apología de Sócrates y en Fedón, pero nunca aparece discutiendo con su maestro ni con ningún otro.

En la actualidad se cree que Platón escribió cuarenta y dos diálogos, recopilados por sus discípulos y otros escritores contemporáneos (que también escribieron sobre él). Además de los diálogos, se conservan algunas cartas que Platón supuestamente escribió en sus años de vejez. Si bien el carácter de algunas de ellas es apócrifo, otras, como la Carta Séptima, son consideradas auténticas y resultan muy importantes para reconstruir parte de la vida y el pensamiento ulterior de Platón.

Su teoría más conocida es la de las Ideas o Formas. En ella se sostiene que todos los entes del mundo sensible son imperfectos y deficientes, y participan de otros entes, perfectos y autónomos (Ideas) de carácter ontológico muy superior y de los cuales son pálida copia, que no son perceptibles mediante los sentidos. Cada Idea es única e inmutable, mientras que, las cosas del mundo sensible son múltiples y cambiantes. La contraposición entre la realidad y el conocimiento es descrita por Platón en el célebre mito de la caverna, en La República. Para Platón, la única forma de acceder a la realidad inteligible era mediante la razón y el entendimiento; el papel de los sentidos queda relegado y se considera engañoso.

Es importante resaltar que la dicotomía entre un mundo inteligible y otro mundo sensible es más bien un recurso pedagógico que suele usarse para ilustrar la diferencia ontológica entre los entes inteligibles y los sensibles. En el Timeo menciona también lo que ahora conocemos como los sólidos platónicos.

Temas

A diferencia de Sócrates, Platón escribió profusamente acerca de sus puntos de vista filosóficos, dejando un considerable número de manuscritos como legado.

En las escrituras de Platón se pueden ver conceptos sobre las formas de gobierno, incluyendo la aristocracia como la ideal; así como la timocracia, la oligarquía, la democracia y la tiranía. Un tema central de su obra es el conflicto entre la naturaleza y las creencias de la época concernientes al rol de la herencia y del medio ambiente en el desarrollo de la personalidad y la inteligencia del hombre mucho antes que el debate sobre la naturaleza y la crianza del Hombre comenzara en la época de Thomas Hobbes y John Locke.

Otro tema que trató Platón profusamente fue la dicotomía entre el saber y la opinión, que anticipaba los debates más modernos entre empirismo y racionalismo, y que posteriormente trataron los postmodernistas y sus oponentes al argüir sobre la distinción entre objetivo y subjetivo.

Por otra parte, la historia de la ciudad y la isla (o quizá península o delta de un gran río, del griego nēsos, νησος) pérdida de la Atlántida nos llegó como una «Historia Verdadera» a través de sus obras Timeo y Critias, pues el mismo Platón usa la expresión griega «Alêthinon Logon», que en aquellos tiempos se usaba para denominar a una «historia que era verdadera», y como tal es traducida en todas las versiones latinas de dichos diálogos, o sea, veram historiam, en franca contraposición al mito (del griego μῦθος, mythos, «cuento») o cuento fabulado.

Estilo literario

Platón escribió principalmente en forma de diálogo. En sus primeras obras, diferentes personajes discuten un tema haciéndose preguntas. Sócrates figura como personaje prominente, y por eso se denominan "Diálogos Socráticos".

La naturaleza de estos diálogos cambió sustancialmente en el curso de la vida de Platón. Es reconocido generalmente que las primeras obras de Platón estaban basadas en el pensamiento de Sócrates, mientras que las posteriores se van alejando de las ideas de su antiguo maestro. En los últimos diálogos, que más bien tienen la forma de tratados, Sócrates está callado o ausente, mientras que en los inmediatamente anteriores es la figura principal y los interlocutores se limitan a responder “sí”, “por supuesto” y “muy cierto”. Se estima que si bien los primeros diálogos están basados en conversaciones reales con Sócrates, los posteriores son ya la obra e ideas de Platón.

La ostensible puesta en escena de un diálogo distancia a Platón de sus lectores de la filosofía que se está discutiendo; uno puede elegir dos opciones de percepción; una es participar en el diálogo y las ideas que se discuten, o simplemente leer las respuestas de las personalidades que intervienen en el diálogo.

La estructura en forma de diálogo permitió a Platón expresar opiniones impopulares en boca de personajes antipáticos, tales como Trasímaco en La República.

Platón en su alusión al Mundo de las ideas.

Filosofía

Teología

Es posible que el pensamiento platónico tuviese una amplia gama de elementos teológicos o religiosos. Estos elementos podrían ser la base de sus planteamientos ontológicos, gnoseológicos, políticos y epistemológicos. Incluso, en el diálogo Timeo Platón presenta una teoría cosmogónica y religiosa.

Esta religión fue seguramente adoptada de Sócrates y debe tener relación con el juicio (debido a que en la exposición de motivos al castigo se encuentran el corromper a la juventud y la asebeia -traer nuevos dioses y negar los ya existentes-). Probablemente contenía elementos monoteistas (presentes en la "Verdad" máxima o el "Bien" máximo que se encuentra en sus teorías ontológicas y políticas) y órficos (debido a la reencarnación del alma).

Las teorías teológicas de Platón posiblemente eran esotéricas (secretas). Incluso en la Carta VII Platón afirma:

"No hay ni habrá nunca una obra mía que trate estos temas [...] Cualquier persona seria se guardaría mucho de confiar por escrito cuestiones serias, exponiéndolas a la malevolencia de la gente" (341c). Estos comentarios de Platón hacen pensar que aquello que dejó en escrito no es, para él, suficientemente "serio". Según confesiones de Aristóteles en Sobre el bien, el estarigita no tenía acceso a estas doctrinas, a diferencia de Epeusipo y Jenócrates -lo cual daría una idea de porqué Aristóteles no adoptó la Academia.

Ontología y Gnoseología

Se ha interpretado tradicionalmente el Platonismo como una forma de dualismo metafísico, a veces referido como Realismo Platónico o Exagerado. De acuerdo a esto, la metafísica de Platón divide al mundo en dos distintos aspectos; el mundo inteligible —el mundo del auténtico ser—, y el mundo que vemos alrededor nuestro en forma perceptiva —el mundo de la mera apariencia—. El mundo perceptible consiste en una copia de las formas inteligibles o Ideas. Estas formas no cambian y sólo son comprensibles a través del intelecto o entendimiento – es decir, la capacidad de pensar las cosas abstrayéndolas de como se nos dan a los sentidos. En los Libros VI y VII de la República, Platón utiliza diversas metáforas para explicar sus ideas metafísicas y epistemológicas:las metáforas del sol, la muy conocida "alegoría de la caverna" y, la más explícita, la de la línea dividida.

En su conjunto, estas metáforas transmiten teorías complejas y difíciles; está, por ejemplo, la Idea del Bien, a la que tiene como principio de todo ser y de todo conocer. La Idea de Bien realiza esto en la manera similar que el sol emana luz y permite la visión de las cosas y la generación de éstas en el mundo perceptivo (ver la alegoría del sol).

En el mundo perceptivo, las cosas que vemos a nuestro alrededor no son sino una ligera resemblanza con las formas más reales y fundamentales que representa el mundo inteligible de Platón. Es como si viéramos una sombra de las cosas, sin ver las cosas mismas; estas sombras son una representación de la realidad, pero no la realidad misma (ver mito de la caverna en "La República", libro VII).

A pesar de muchas críticas sobre su supuesto 'dualismo', Platón se refiere a un único universo. A modo pedagógico desdobla el universo en dos y, como quien saca una foto de un paisaje, describe una realidad compleja en dos dimensiones: su línea donde asienta la parte del universo que el ser humano puede percibir por los sentidos y la parte del universo que actúa como causa del anterior y que el ser humano puede aprehender por medio de la hipótesis de la hipótesis superior. Así, quien mira el paisaje se dará cuenta que es imposible que el paisaje 'sea' meramente lo que la fotografía muestra.

En el primer segmento de esta línea asienta los objetos que son perceptibles por los sentidos y a la vez los divide en dos clases y refiere para cada tipo de objeto una forma (u operación) en que el alma conoce estos objetos. La primera son las imágenes o sombras que se desprenden de los objetos físicos imágenes de las que se puede obtener un conocimiento casi nulo, por tanto, el ser humano imagina qué pueden ser estas sombras. En la segunda división de este primer segmento asienta a los objetos físicos que tienen una doble papel, son generados por lo que llamará seres inteligibles inferiores y superiores a la vez que con otros elementos (i.e. la luz) generan las sombras. A estos corresponde la operación de la creencia porque al estar en constante cambio por estar sujetos al tiempo y al espacio nunca 'son'.

En el segundo segmento de la línea Platón asienta los objetos que sin poderse percibir por los sentidos son percibidos por el alma y son los generadores de los que se encontraban en el primer segmento de la línea y también la divide en dos. En la primera parte de este segundo segmento asienta los seres inteligibles inferiores, los principios matemáticos y geométricos. Estos entes todavía guardan algún tipo de relación con la parte del universo sensible porque se los puede representar (i.e. un cuadrado, el número 4, lo impar respecto de lo par, etc.); la operación que realiza el alma para aprehender estos conceptos es el entendimiento. En la última parte, asienta los seres inteligibles superiores, aquellas ideas que solo pueden ser definidas por otras y que de ninguna manera pueden ser representadas para la percepción sensorial (i.e. la justicia, la virtud, el valor, etc.); para comprenderlos el alma se dispone hacia ellos utilizando la inteligencia.

Así para la primera sección Platón entendió que la imaginación y la creencia, es decir, la mera descripción de lo que se percibe, puede dar como resultado una opinión. Sin embargo el entendimiento y la inteligencia son para Platón aquellas operaciones de las que se obtiene el conocimiento.

La metafísica de Platón, y particularmente el dualismo entre lo inteligible y lo perceptivo, inspiró posteriormente a los pensadores Neoplatónicos, tales como Plotino y Gnostis, y a otros realistas metafísicos. Padres del cristianismo, como Agustín de Hipona, también fueron muy influenciados por su filosofía.

Si bien las interpretaciones de las escrituras de Platón (particularmente la "República") han tenido una inmensa popularidad en la larga historia de la filosofía occidental, también es posible interpretar sus ideas en una forma más conservadora que favorece la lectura desde un punto de vista epistemológico más que metafísico como sería el caso de la metáfora de la Cueva y la Línea Dividida (ahora bien, también hay autores importantes que hablan de la necesidad de realizar una interpretación fenomenológica sobre Platón para lograr ver al autor más allá de las capas históricas que lo incubren debido a sus otras interpretaciones menos afortunadas). Existen obvios paralelos entre la alegoría de la Cueva y la vida del maestro de Platón, Sócrates, quien fue ejecutado en su intención de abrir los ojos a los atenienses. Este ejemplo revela la dramática complejidad que frecuentemente se encuentra bajo la superficie de los escritos de Platón (no hay que olvidar que en la República, quien narra la historia es Sócrates).

Epistemología

Las opiniones de Platón también tuvieron mucha influencia en la naturaleza del conocimiento y la enseñanza las cuales propuso en el Menón, el cual comienza con la pregunta acerca de si la virtud puede ser enseñada y procede a exponer los conceptos de la memoria y el aprendizaje como un descubrimiento de conocimientos previos y opiniones correctas que son correctas pero no tienen una clara justificación.

Platón afirmaba que el conocimiento estaba basado esencialmente en creencias verdaderas justificadas; una creencia influyente que llevó al desarrollo más adelante de la epistemología. En el Theaetetus, Platón distingue entre la creencia y el conocimiento por medio de la justificación. Muchos años después. Edmund Gettier demostraría los problemas de las creencias verdaderas justificadas en el contexto del conocimiento.

Filosofía política: el Estado ideal

Las ideas filosóficas de Platón tuvieron muchas implicaciones sociales, particularmente en cuanto al estado o gobierno ideal. Hay discrepancias entre sus ideas iniciales y las que expuso posteriormente. Algunas de sus más famosa doctrinas están expuestas en la República. Sin embargo, con los estudios filológicos modernos se ha llegado a implicar que sus diálogos tardíos (Político y Las Leyes) presentan una fuerte crítica ante sus consideraciones previas, esta crítica surgirá a raíz de la enorme decepción de Platón con sus ideas y a la depresión mostrada en la Carta VII.

Para Platón lo más importante en la ciudad y en el hombre sería la Justicia. Por tanto su Estado estará basado en una necesidad ética de justicia. La justicia se conseguirá a partir de la armonía entre las clases sociales y, para los individuos, en las partes del alma de cada uno.

Platón decía que las sociedades debieran tener una estructura tripartita de clases la cual respondía a una estructura según el apetito, espíritu y razón del alma de cada individuo:

  • Artesanos o labradores – Los trabajadores correspondían a la parte de “apetito” del alma.
  • Guerreros o guardianes – Los guerreros aventureros, fuertes, valientes y que formaban el “espíritu” del alma.
  • Gobernantes o filósofos – Aquellos que eran inteligentes, racionales, apropiados para tomar decisiones para la comunidad. Estos formaban la “razón” del alma.

De acuerdo con este modelo, los principios de la democracia ateniense, como existía en aquella época, eran rechazados en esta idea y muy pocos estaban en capacidad de gobernar. Este desprecio a la democracia podría deberse a su rechazo frente al juicio a Sócrates. En lugar de retórica y persuasión, Platón dice que la razón y la sabiduría (episteme) son las que deben gobernar. Esto no equivale a tiranía, despotismo u oligarquía. Como Platón decía:

Hasta que los filósofos gobiernen como reyes o, aquellos que ahora son llamados reyes y los dirigentes o líderes, puedan filosofar debidamente, es decir, hasta tanto el poder político y el filosófico concuerden, mientras que las diferentes naturalezas busquen solo uno solo de estos poderes exclusivamente, las ciudades no tendrán paz, ni tampoco la raza humana en general.

Platón describe a estos “reyes filósofos” como aquellos que “aman ver la verdad esté donde esté con los medios que se disponen” y soporta su idea con la analogía de un capitán y su navío o un médico y su medicina. Navegar y curar no son prácticas que todo el mundo esté calificado para hacerlas por naturaleza. Gran parte de La República está dedicada a indicar el proceso educacional necesario para producir estos “filósofos reyes”, de hecho el Estado ideal platónico será en gran medida un ente dedicado a la educación.

Se debe mencionar, sin embargo, que la idea de la ciudad que se describe en La República la califica Platón como una ciudad ideal, la cual se examina para determinar la forma como la injusticia y la justicia se desarrollan en una ciudad. De acuerdo a Platón, la ciudad “verdadera” y “sana” es la que se describe en el libro II de La República, que contiene trabajadores, pero no tiene los reyes-filósofos, ni poetas ni guerreros.

En todo caso, para Platón el Estado ideal (Monarquía) devendrá en una corrupción triste pero necesaria. Así establece Platón las categorías de los diferentes estados en un orden de mejor a peor:

  • Aristocracia
  • Timocracia
  • Oligarquía
  • Democracia
  • Tiranía

La aristocracia o monarquía corresponde al Estado ideal con su división de clases tripartita (Filósofos-Guardianes-Trabajadores).

Influencia posterior

Respecto a la influencia histórica de Platón no es difícil exagerar sus logros. El trabajo platónico siembra las semillas de la filosofía, política, psicología, ética, estética o epistemología. Al abarcar esta materia hay que considerar también a su alumno, Aristóteles, que postula los inicios de la lógica y la ciencia moderna.

La teoría política de Cicerón tiene a Platón como referencia, y no es muy diferente a los primeros cristianos. De hecho, el cristianismo encuentra en Platón una estructura racional para sus dogmas con San Agustín.

Sin embargo, pese a que su influencia sea enorme no por ello ha sido considerada siempre positiva. Karl Popper criticaba a Platón por ser el precursor ideológico de los totalitarismos. Pero, definitivamente, odiado o amado, Platón es hasta la fecha un punto de partida para las ciencias y la filosofía de las ciencias. Cada época ha interpretado con sus propios valores su obra -no muy diferente a lo sucedido con Roma, Aristóteles o tantos otros autores. Platón propone el comunismo (no confundir con el comunismo marxista) y la monarquía, pero a su vez terminó defendiendo las leyes como sistema de gobierno -más como sometimiento a las circunstancias que por una verdadera preferencia. Igualmente, es quizás el primero en defender la igualdad de género, a diferencia de su discípulo Aristóteles.

En la filosofía es Platón referencia para el racionalismo y el idealismo.

Véase también

Bibliografía

Obra completa
Bibliografía analítica
  • Guthrie, William Keith Chambers. Historia de la Filosofía Griega. Madrid: Editorial Gredos. ISBN 978-84-249-0947-5. 
    • Volumen IV: Platón, el hombre y sus diálogos, primera época. Madrid: Editorial Gredos. 1998. ISBN 978-84-249-1440-0. 
    • Volumen V: Platón, segunda época y la Academia. Madrid: Editorial Gredos. 1992. ISBN 978-84-249-1500-1. 

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