Diferencia entre revisiones de «Lucha de clases»

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ocea que los conflicto sociales vienen desde hace tiempo porque las clases sociales no tienen los mismos gustos...

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La lucha de clases es un concepto o una teoría que intenta explicar la existencia de conflictos sociales como el resultado de un supuesto conflicto central o antagonismo inherente entre los intereses de diferentes clases sociales.

Orígenes y desarrollo del concepto

El primero en postular no solo la existencia de un conflicto central en toda sociedad organizada políticamente sino que tal conflicto tinen un poder explicativo fue Nicolás Maquiavelo, para quien tal conflicto se origina en los "tipos de vida" -vivere- que se encuentran en un Estado organizado politicamente: el del pueblo y el de "los grandes" (los que gobiernan al pueblo): "El capítulo IV del Libro I de los Discursos sobre la Primera Década de Tito Livio introduce un tópico clave para la interpretación de la obra de Maquiavelo: la división social es propia del orden político: (Maquiavelo escrive) "Yo digo que quienes condenan los tumultos entre los nobles y la plebe atacan lo que fue la causa principal de la libertad de Roma, y que se fijan más en los ruidos y gritos que nacían de esos tumultos que en los buenos efectos que produjeron. En toda República hay dos espíritus contrapuestos, el de los grandes y el del pueblo, y todas las leyes que se hacen en pro de la libertad nacen de la desunión de ambos...”[1]

Posteriormente, ese conflicto comenzó a verse como basado en clases sociales, entendidas como relaciones de propiedad. Así, por ejemplo, Jean-Jacques Rousseau argumenta: “El primer hombre al que, tras haber cercado un terreno, se le ocurrió decir ‘Esto es mío’ y encontró a gentes lo bastante simples como para hacerles caso, fue el verdadero fundador de la Sociedad Civil “.[2]​ Se ha alegado que Rousseau analiza el tránsito del hipotético estado de naturaleza al estado social como una degeneración (no un progreso) producto de las desigualdades sociales que surgen con la propiedad privada, el derecho para protegerla, y la autoridad para que se cumpla ese derecho. Las leyes establecidas en toda sociedad son siempre las leyes que defienden al poderoso, al rico y a su poder frente a los no poseedores de propiedad, a los pobres. La propiedad privada y el derecho han creado un abismo entre dos "clases" jerárquicamente diferenciadas entre sí: la clase de los propietarios, de los poderosos y de los amos, frente a la clase de los no propietarios, pobres y esclavos. Esta situación no es superable, según Rousseau, pero puede ser mitigada a través de una sana vuelta a la naturaleza y una educación que fomente el individualismo y la independencia del hombre.[3]

En esa época se consideraba obvio y natural que las clases -generalmente conocidas como estados- y entendidas como “tipo” o “clases de propiedad - aristocrática, eclesiástica; la “nueva forma de propiedad que estaba apareciendo en las ciudades o Tercer Estado” y el Pueblo llano o sin propiedad- tienen intereses que estan en conflicto. A diferencia con concepciones posteriores sin embargo, tal conflicto (o sus consecuencias) se veía generalmente como positivo, dando origen a la libertad responsable y estableciendo las bases del poder real. Así, por ejemplo, Edmund Burke aduce:

“En vuestros antiguos estados Uds. tenían esa variedad, toda esa combinación y toda esa oposición de intereses, teníais toda esa acción y reacción que, en el mundo natural y político, a partir de la lucha reciproca de poderes discordantes, extrae la harmonía del universo. Esos intereses opuestos y conflictivos, que Uds. consideran una falta grave en vuestra Constitución pasada y la presente, interpone un saludable balance a toda resolución precipitada, transformando la deliberación en una materia no de gusto sino de necesidad, hace todo cambio un asunto de compromiso que naturalmente engendra moderación... A través de la diversidad de miembros e intereses la libertad general tiene tantas seguridades como hay diferentes versiones en los varios ordenes, mientras que mantiendose bajo el control de un monarca, las partes mismás son prevenidas de desviarse y alejarse de sus posiciones correspondientes”.[4]

Partiendo de lo anterior, Burke avanza a producir una justificación política practica acerca de la necesidad de un poder real: Nadie -alega- puede ser juez en su propia causa. Por lo tanto, las clases tienen necesidad de un poder externo, superior, que pueda -si es que las clases no pueden llegar a acuerdo- adjudicar sin estar comprometida con ninguna parte. Ese poder es el rey. (Burke: op cit).

Desarrollo pos-revolucionarios

La Revolución Francesa marco la irrupción a órganos del poder estatal no solo de esa nueva forma de propiedad, sino también la apariciónde un nuevo actor político-social: aquellos que carecían de posesiones materiales, en la medida que empezaron a acumular poder a traves de alianzas ya sea con un sector u otro de las clases posesoras. Empezo tambien a cambiar la percepción general del resultado del conflicto a uno cuyas consecuencias no eran necesaria y universalmente positivas.

Por ejemplo Considerant alega: ".. a todos esos vicios sociales , que secan las fuentes de riqueza y prosperidad, debe agregarse la lucha, la discordia, la guerra, que en corto, y bajo muchos nombres y muchos aspectos... corresponde a la oposición radical -una antinomia con raíces profundas- entre los varios intereses. Exactamente en la misma manera que se pueden establecer clases y categorías dentro de la nación, en esa medida habrá, también, oposición de intereses y guerra interna ya sea abierta o secreta, incluso si solo considera el aparato industrial" .-[5]

Quizas el primer teórico liberal que no solo comprendio que la irrupcion de las "clases desposeidas" tendría profundas repercusiones políticas sino que las examino fríamente fue John Stuart Mill: “La discusión que ahora se requiere es una que debe ir a los principios mismos. Las doctrinas fundamentales que una ves se asumieron como incontestables por las antiguas generaciones son de nuevo puestas a juicio. Hasta el presente la institución de la propiedad, en la manera que nos ha sido legada desde el pasado, no había sido, excepto por algunos escritores especulativos, seriamente cuestionada, porque los conflictos del pasado habían sido entre clases, ambas de las cuales tenían un interés en la constitución existente de la propiedad. No será posible continuar de esta manera. Cuando la discusión incluye clases que poseen casi nada y están solo interesadas en la institución en la medida que es de interés publico, ellos no permitirán que nada sea asumido, ciertamente no el principio de propiedad privada, cuya legitimidad y utilidad es cuestionada por algunos de los pensadores que miran desde el punto de vista de las clases trabajadoras... Esas clases ciertamente demandaran que el sujeto sea examinado desde su fundación”.[6]

Esto dio origen a varias posiciones en relación al concepto.

Concepcion anarquista

Los anarquistas fueron quizás quienes se mantuvieron más cercanos a la concepcion original - tanto la de Maquiavelo como Rosseau- acerca del problema central. Para ellos, la lucha de clases es la lucha del pueblo contra el estado en particular y toda opresión en general.

Según tanto el anarquismo como el liberalismo libertario, etc, -y en general- aquellas clases que detentan el poder político o poder público, son las clases dirigentes en torno a las cuales se forman los privilegios plutocráticos, gerentocráticos y burocráticos en general.

Lo anterior no se debe confundir con estancamiento ideologico. En realidad esta vision ha dado origen a un rico desarrollo del analisis. El anarquismo habla de "clases revolucionarias", incluyendo a los obreros, artesanos, los campesinos y lo que Marx llamaba Lumpemproletariat. Por otro lado también en otros textos se habla de dos clases: la mayoría conformada por los que producen y una minoría reaccionaria conformada por los que viven del trabajo de los productores y que además gobiernan (esta visión dicotómica es una de las críticas que ha hecho a los anarquistas Karl Mannheim y que es tratada en un brillante artículo por el profesor Sharif Gemie en Counter-Community: An Aspect of Anarchist Political Culture [7]​). Los plataformistas, en especial Piotr Arshinov, hacen mucho hincapié en la lucha de clases. El actual especifismo de la FAU uruguaya también hace un fuerte énfasis en lo que, desde el punto de vista anarquista general, se concive como "clasismo". Un desarrollo paralelo ha llevado al antiestatismo del anarcocapitalismo [8]

En estas teorías el Estado es un hecho político, basado en la coacción, donde existe un grupo que por medio de la conquista institucionaliza la violencia sobre los grupos conquistados.[9]​ Este es el fundamento de la teoría de la conquista, una teoría socio-política que surge como respuesta a la teoría de la lucha de clases como basadas en el estrato economico. Esta percepcion ha llevado a la lucha

Concepcion conservadora

El primero en utilizar el termino “lucha de clases” como tal fue el influyente sociólogo alemán -considerado conservador- Lorenz von Stein, quien lo introdujo al vocabulario político moderno.

Von Stein adopta una posición muy similar a la de Burke, pero es más sistemático en su exposición y conclusiones. Para el esa lucha se deriva de la división de la sociedad producida por la aparición de clases, lo que ocasiona que los individuos busquen acceder al poder político a fin de favorecer sus intereses tanto sociales como económicos y políticos. En su visión, esa lucha de clases da origen a los movimientos sociales, a través de los cuales -en sus palabras- las "clases bajas" buscan "ascender" socialmente.[10]​ Para Von Stein la revolución francesa se origino en la “colonización del Estado” por uno de esos sectores sociales (en sus palabras, la burguesía) En general, tal colonización dará origen primero a (sus palabras) “estados dictatoriales” y, como reacción, a revoluciones que solo conducirán a otros “estados dictatoriales”. La unica solución es la existencia de -de nuevo muy cerca a la posición burkeana- una “monarquía social” que debe actuar en el interés común, introduciendo las reformas necesarias para evitar desorden y confrontación social. (ver Estado Social)


Lucha de clases según Marx

Karl Marx fue posiblemente quien se mantuvo mas cerca de la concepción de la lucha entre las clases en la línea que va de Maquiavelo a Burke, pero para el ese conflicto no produce harmonía o libertad sino cambio social o progreso: La historia (escrita) de todas las sociedades existentes hasta ahora es la historia de la lucha de clases.[11]​ (esto es generalmente conocido como "la teoría de la lucha de clases como motor de la historia")

En otras palabras, el conflicto entre clases sociales ha sido la base sobre la que se produjeron los hechos que dan forma a las sociedades. Esta lucha se da principalmente entre las dos clases sociales antagónicas que -en su opinión- caracterízan cada modo de producción.

Sin embargo, esta lucha de clases se define no solo por las características inherentes a cada sector social (especialmente los antagonistas centrales) sino también a las relaciones que tales sectores tengan o establezcan entre sí: por ejemplo: las características del sistema político o de gobierno que exista en un momento histórico dado, las características de la(s) clase(s) dominante(s) y la(s) dominada(s), junto a las de otros sectores sociales, el tipo de desarrollo económico social, etc. (ver "Critica al Programa de Gotha"). Esta lucha ha acabado -en la opinión de Marx- con una transformación revolucionaria de toda la sociedad o con la ruina de las clases en lucha.

Sigue que, de acuerdo a Marx, nuestra época no ha eliminado el antagonismo de las clases; lo ha vuelto más simple ya que la sociedad se va escindiendo cada vez más en dos grandes campos enemigos: la burguesía y el proletariado.

La burguesía es la clase de los modernos capitalistas, son los propietarios de los medios de producción y los patrones de los asalariados.

El proletariado es la clase moderna de los asalariados, no son propietarios de medios de producción, se ven obligados a vender su fuerza laboral para subsistir.

El fin último de la lucha de clases se producirá, según Marx, solo cuando las clases dejen de existir. Como el mismo escribió (carta a Joseph Weydemeyer, del 5 de marzo de 1852) :

...no me cabe el mérito de haber descubierto la existencia de las clases en la sociedad moderna ni la lucha entre ellas. Mucho antes que yo, algunos historiadores burgueses habían expuesto ya el desarrollo histórico de esta lucha de clases y algunos economistas burgueses la anatomía económica de éstas. Lo que yo he aportado de nuevo ha sido demostrar: 1) que la existencia de las clases sólo va unida a determinadas fases históricas de desarrollo de la producción; 2) que la lucha de clases conduce, necesariamente, a la dictadura del proletariado; 3) que esta misma dictadura no es de por sí más que el tránsito hacia la abolición de todas las clases y hacia una sociedad sin clases...

Críticas a la lucha de clases

Estas críticas se pueden dividir en dos visiones generales: las que cuestionan la existencia misma de las clases sociales como tales - y consecuentemente, cualquier conflicto central a la sociedad entre ellas- y las que rechazan la función de la lucha de clases como factor determinante (motor) de la historia.

Así, por ejemplo, Ludwig von Mises cuestiona el concepto de clases, por lo menos en el sentido de la linea que va de Rosseau a Marx, como basadas o definidos por factores económicos, afirmando que lo determinante en la oposición percivida es el factor politico-ideologico, que habria creado tal oposicion.

Si se quiere aplicar el término “lucha” a los esfuerzos que hacen las personas que se enfrentan en el mercado, para asegurarse el mejor precio posible en ciertas condiciones, entonces la economía es un teatro de lucha permanente de todos contra todos, y no una lucha de clases.


Lo que ha podido agrupar a los trabajadores con fines de acción común, contra la clase burguesa, es la teoría de la oposición infranqueable de los intereses de clases. Lo que ha hecho una realidad de la lucha de clases es la conciencia de clases creada por la ideología marxista. Es la idea la que ha creado la clase y no la clase quien ha creado la idea.[12]

Por otro lado, Karl Popper estima que conceptos tales como "lucha de clases" tienen una función interpretativa de la historia (ver "Historiografía como meta-historia" en historiografía) . Como tal, son perfectamente "inobjetables". Pero es fácil caer en el error "historicista" cuando se utilizan como teorías o factores predictivos del desarrollo futuro de acontecimientos. En otras palabras, Popper hace una diferencia entre elementos que nos permitan -en una manera más o menos similar a la que las teorías cumplen en la ciencia- interpretar acontecimientos desde algún punto de vista que nos interesa (ver "El método científico como método para la eliminación de falacias y prejuicios" en método científico) y teorías científicas. Tales factores interpretativos tienen, en su opinión, una diferencia esencial con las teorías de la ciencia : no son falseables o refutables y, por lo tanto, no se puede decir que constituyen una explicación científica de la historia (en el sentido de mostrar o descubrir las leyes naturales que determinan el funcionamiento del desarrollo humano o social) sino más bien serían un focus histórico o narrativa desde un punto de vista determinado.[13]

Referencias

  1. Claudia Hilb: Maquiavelo, la república y la ‘virtù’ pagina 4
  2. Rousseau: "Discursos sobre el origen y la desigualdad entre los hombres"
  3. Elena Diez de la Cortina Montemayor: Rousseau: Semblanza filosófica]
  4. Burke: “Reflection on the Revolution in France” (1790) -Penguin Classics, 1986- pp 122 (en ingles en el original)
  5. V Considerant: "Destinée sociale" (Paris, 1834) Citado por Mill, Chapters on Socialism, p 391)
  6. John Stuart Mill: “Chapters on Socialism”. (1869) en “Principles of Political Economy” - Oxford University Press (World Classics) (1994) p 375
  7. Journal of Contemporary History
  8. Lucha de clases: análisis marxista y análisis austriaco, por Hans-Hermann Hoppe
  9. Libertarismo: ¿de izquierda o de derecha?, por Sheldon Richman
  10. Ver resumen de sus ideas en: LEARNING FROM THE LORENZ VON STEIN’S IDEA OF SOCIAL STATE (en ingles)
  11. K Marx y F. Engels: Manifiesto del Partido Comunista
  12. “El socialismo” (pág. 348) de Ludwig von Mises – Editorial Hermes SA
  13. (ver: "The Poverty of Historicism" (en ingles en el original) por Karl Raimund Popper - Capitulo 31: Situational Logic in History. Historical Interpretation: pp 150.- Routledge and Kegan Paul, reinpreso en 1974: ISBN 0 7100 4616 2)(Originally published in book form 1957)

Véase también

Enlaces externos