Diferencia entre revisiones de «Historia de la Unión Soviética (1985-1991)»

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La '''Historia de la [[URSS]] desde 1985 hasta 1991''' es la historia de su desaparición como Estado. El colapso de la Unión Soviética, que le llevó a desmembrarse en una multitud de Estados, comenzó a principios de 1985. Tras décadas de desarrollo militar soviético conseguido en detrimento del desarrollo de la economía doméstica, el crecimiento económico se encontraba en un punto muerto. Los fallidos intentos de reforma, una economía estancada y la [[Invasión soviética de Afganistán|guerra de Afganistán]] habían llevado a un sentimiento general de descontento, especialmente en las [[Repúblicas Bálticas]] y en la [[Europa del Este]]. Las reformas políticas y sociales más profundas, llevadas a cabo por el último líder de la Unión Soviética, [[Mijaíl Gorbachov]], y denominadas [[perestroika]] y [[glásnost]], crearon una atmósfera de crítica abierta al régimen de [[Moscú]]. La dramática caída del precio del petróleo en 1985 y 1986, y la consecuente falta de divisas que debían utilizarse en la compra de grano en los siguientes años influyó profundamente en la actuación de los líderes soviéticos.
La '''Historia de la [[URSS]] desde 1985 hasta 1991''' es la historia de su desaparición como Estado. El colapso de la Unión Soviética, que le llevó a desmembrarse en una multitud de Estados, comenzó a principios de 1985. Tras décadas de desarrollo militar soviético conseguido en detrimento del desarrollo de la economía doméstica, el crecimiento económico se encontraba en un punto muerto. Los fallidos intentos de reforma, una economía estancada y la [[Invasión soviética de Afganistán|guerra de Afganistán]] habían llevado a un sentimiento general de descontento, especialmente en las [[Repúblicas Bálticas]] y en la [[Europa del Este]]. Las reformas políticas y sociales más profundas, llevadas a cabo por el último líder de la Unión Soviética, [[Mijaíl Gorbachov]], y denominadas [[perestroika]] y [[glásnost]], crearon una atmósfera de crítica abierta al régimen de [[Moscú]]. La dramática caída del precio del petróleo en 1985 y 1986, y la consecuente falta de divisas que debían utilizarse en la compra de grano en los siguientes años influyó profundamente en la actuación de los líderes soviéticos.

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Mijaíl Gorbachov, último líder del Partido Comunista Soviético (PCUS).

La Historia de la URSS desde 1985 hasta 1991 es la historia de su desaparición como Estado. El colapso de la Unión Soviética, que le llevó a desmembrarse en una multitud de Estados, comenzó a principios de 1985. Tras décadas de desarrollo militar soviético conseguido en detrimento del desarrollo de la economía doméstica, el crecimiento económico se encontraba en un punto muerto. Los fallidos intentos de reforma, una economía estancada y la guerra de Afganistán habían llevado a un sentimiento general de descontento, especialmente en las Repúblicas Bálticas y en la Europa del Este. Las reformas políticas y sociales más profundas, llevadas a cabo por el último líder de la Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov, y denominadas perestroika y glásnost, crearon una atmósfera de crítica abierta al régimen de Moscú. La dramática caída del precio del petróleo en 1985 y 1986, y la consecuente falta de divisas que debían utilizarse en la compra de grano en los siguientes años influyó profundamente en la actuación de los líderes soviéticos.

Algunas Repúblicas Socialistas Soviéticas empezaron a resistirse al poder central de Moscú, y el incremento de la democratización llevó a su debilitamiento. El déficit comercial vaciaba progresivamente las arcas de la Unión, acercándose ésta a una posible situación de quiebra. La Unión Soviética acabaría colapsando en 1991, con la llegada de Borís Yeltsin al poder tras un fallido golpe de estado que trataba de derrocar a Gorbachov y dar marcha atrás a sus reformas.

El ascenso de Gorbachov

Mijaíl Gorbachov y Ronald Reagan firman el Tratado de eliminación Fuerzas Nucleares Intermedias (NIF) en 1987.

Después de años de estancamiento de las reformas en la URSS, entre 1969 y 1987, "el nuevo pensamiento" de los apparatchiks comunistas más jóvenes comenzó a tomar importancia. Tras la muerte de Konstantín Chernenko, el Politburó eligió a Mijaíl Gorbachov para el puesto de Secretario General de la Unión Soviética en marzo de 1985, marcando la subida de una nueva generación al poder. Bajo Gorbachov, los tecnócratas relativamente jóvenes, favorables a la reforma, y que habían comenzado sus carreras en el auge de la "desestalinización" bajo Nikita Jrushchov (1953–1964), rápidamente consolidaron su poder dentro del PCUS. Así, proporcionaron el nuevo ímpetu necesario para la liberalización política y económica, así como para que se cultivasen relaciones más cálidas y comerciales con el Oeste.

Jimmy Carter había terminado oficialmente la política de détente, ayudando militarmente al presidente de Pakistán, Muhammad Zia-ul-Haq, quien por su parte financiaba el movimiento Mujaidín antisoviético en el país vecino de Afganistán, después de la intervención soviética en aquel país. Las tensas relaciones entre ambas superpotencias se agravaron cuando Carter decidió embargar comercialmente a la URSS declarando que la invasión de Afganistán era "la amenaza más seria para la paz desde la Segunda Guerra Mundial". La tensión siguió aumentado durante el primer período del mandato del presidente estadounidense Ronald Reagan (1981–1985), alcanzando niveles no vistos desde la Crisis de los misiles de Cuba. Reagan tomó una postura de línea dura contra la Unión Soviética, etiquetándola como un "imperio del mal," que sería relegado "al montón de ceniza de la historia." Amenazó con desarrollar un sistema de defensa contra misiles balísticos (también conocido como "Guerra de las Galaxias") contra el que los soviéticos no serían capaces de competir.

Mientras Gorbachov lideraba el proceso que conduciría al desmantelamiento de la economía estatalista soviética a través de sus programas de glásnost (apertura política), perestroika (reestructuración económica), y uskoréniye (aceleramiento del desarrollo económico) anunciados en 1986, la economía soviética sufrió tanto de inflación oculta como de una creciente escasez de suministros. La situación se agravaba por la existencia de un mercado negro cada vez más abierto, que minaba la economía oficial. Además, los gastos propios de ser una superpotencia — gastos militares, KGB, subvenciones a estados adheridos — sobrepasaban la capacidad económica soviética. La nueva era de la industrialización basada en las tecnologías de la información dejaría a la Unión Soviética sin acceso a la tecnología occidental y necesitada de créditos con los que poder responder y sobreponerse a su creciente atraso. A todo ello además se unieron la invasión de Afganistán, señalada habitualmente como el Vietnam de la URSS, y el desastre de Chernobyl en 1986, que supondría un grave golpe para el prestigio soviético, además de una tragedia humanitaria de proporciones colosales.

Reformas

La Ley sobre Cooperativas decretada en mayo de 1988 fue quizás la reforma económica más radical durante la primera parte de la era Gorbachov. Por primera vez desde la Nueva Política Económica de Vladimir Lenin la ley permitió la propiedad privada de negocios en los servicios, la industria y sectores del comercio exterior. Aunque inicialmente imponía altos impuestos y restricciones al empleo, más tarde fue revisada a fin de evitar desalentar las actividades del sector privado. Bajo esta nueva perspectiva los restaurantes, las tiendas y las fábricas cooperativas privadas fueron convirtiéndose en parte de la escena soviética.

Una conferencia convocada en 1987 por el economista soviético Leonid Abalkin, consejero de Gorbachov, concluía: "las transformaciones profundas en la dirección de la economía no pueden ser realizadas sin los correspondientes cambios en el sistema político."[1]​ Es por tanto probable que el objetivo principal de Gorbachov con su política de glásnost fuese presionar a los conservadores que se oponían a sus políticas de reestructuración económica, confiando simultáneamente en que a través de la apertura, el debate y la participación, el pueblo soviético en conjunto apoyara sus iniciativas de reforma.

La glasnost derivó en una mayor libertad de expresión y prensa, mucho menos controlada por el estado. Miles de presos políticos y disidentes fueron liberados. La ciencia social soviética pudo empezar a explorar y publicar libremente acerca de muchos temas que habían estado prohibidos, llevando incluso a cabo encuestas públicas de opinión. Se fundó el Centro de la Unión para la Investigación de Opinión Pública (VCIOM), la más destacada de las organizaciones de votación fundadas en este período. Los archivos estatales se hicieron más accesibles, y algunas estadísticas en temas sensibles como disparidad de ingresos, delitos, suicidios, abortos, y mortalidad infantil, que habían sido guardadas en secreto, vieron la luz. El primer centro para estudios de género fue abierto dentro del recién formado Instituto para el Estudio Socio-Ecónomico de la Población Humana.

En enero de 1987, Gorbachov llamó a la democratización: se incluyeron elementos democráticos en el proceso político, tales como las elecciones con varios candidatos. En junio de 1988, en la XIX Conferencia del PCUS, Gorbachov impulsó reformas radicales, destinadas a reducir el control del partido sobre el gobierno. En diciembre de 1988, el Soviet Supremo aprobó la fundación de un Congreso de los Diputados del Pueblo, que las enmiendas constitucionales habían establecido como nuevo cuerpo legislativo de la Unión Soviética. Las elecciones al congreso fueron celebradas en toda la URSS en marzo y abril de 1989. El 15 de marzo de 1990 Gorbachov fue elegido primer Presidente de la Unión Soviética.

Consecuencias involuntarias

Los esfuerzos de Gorbachov por dinamizar el sistema comunista, aunque prometedores, acabaron demostrando ser incontrolables y causaron una cascada de acontecimientos que finalmente concluirían con la disolución de la Unión Soviética. Al principio buscadas como instrumentos para sostener la economía soviética, las políticas de perestroika y glasnost pronto condujeron a consecuencias involuntarias.

La relajación que trajo la glasnost causó que el Partido Comunista perdiera su dominio absoluto sobre los medios. En poco tiempo, y para vergüenza de las autoridades, los medios comenzaron a exponer problemas sociales y económicos graves que el gobierno soviético había negado largo tiempo, e incluso había activamente ocultado. Entre los que suscitaban mayor atención se incluían el alojamiento pobre, el alcoholismo, el consumo de drogas, la contaminación, las fábricas anticuadas de la era de Stalin y la corrupción de pequeña a larga escala. Todos esos problemas no habían estado en el discurso de los medios oficiales durante décadas. Los informes de los medios también expusieron delitos cometidos por el propio Stalin y por el régimen soviético, como los gulags, los tratados con Adolf Hitler, y las Grandes Purgas. Además, la guerra en curso en Afganistán, y el mal manejo del desastre de Chernobyl de 1986 dañaron la credibilidad del gobierno.

En total, la visión positiva de la vida soviética que había sido presentada al público por los medios oficiales durante décadas estaba siendo rápidamente desmontada, y los aspectos negativos de la vida en la Unión Soviética aparecían en el discurso público. Esto minó la fe del público en el sistema soviético, y erosionó la base social del Partido Comunista, amenazando la identidad y la integridad de la misma Unión.

Deshilacharse entre los miembros de las naciones del Pacto de Varsovia e inestabilidad de sus aliados occidentales, primero indicados por la subida de Lech Wałęsa en 1980 al mando del sindicato Solidaridad, aceleró, dejando a la Unión Soviética incapaz de depender de sus países satélites de la Europa del Este para protección como una zona parachoques. Hacia 1989, Moscú había rechazado la Doctrina Brezhnev a favor de la no intervención en los asuntos internos de sus aliados del Pacto de Varsovia. Gradualmente, cada una de las naciones de Pacto de Varsovia vio sus gobiernos comunistas caer en elecciones populares y, en el caso de Rumania, un levantamiento violento. Hacia 1991 los gobiernos comunistas de Bulgaria, Checoslovaquia, Alemania Oriental, Hungría, Polonia y Rumania, todo de los cuales había sido impuesto después de la Segunda Guerra Mundial, fueron rebajados cuando la revolución barrió Europa del Este.

La Unión Soviética también comenzó a experimentar la agitación cuando las consecuencias políticas de la glasnost reverberaron en todo el país. A pesar de esfuerzos en la contención, la agitación en Europa del Este inevitablemente se extendió a nacionalidades dentro de la URSS. En elecciones a las asambleas regionales de las repúblicas constituyentes de la Unión Soviética, los nacionalistas así como los reformadores radicales barrieron el bordo. Cuando Gorbachov había debilitado el sistema de represión política interna, la capacidad del gobierno de Moscú central de la URSS para imponer su voluntad a las repúblicas constituyentes de la URSS había sido en gran parte minada. Las protestas pacíficas masivas en las Repúblicas Bálticas como la Cadena Báltica y la Revolución Cantada llamaron la atención internacional y sostuvieron movimientos de independencia en varias otras regiones. La subida del nacionalismo bajo glasnost relaciones tensas étnicas pronto despertadas de nuevo que hierven a fuego lento en varias repúblicas soviéticas, desacreditando posteriormente el ideal de un pueblo soviético unificado. Un caso ocurrió en febrero de 1988, cuando el gobierno en Nagorno-Karabakh, una región armenia predominantemente étnica en el Azerbaiyán SSR, pasó una resolución que pide la unificación con la RSS armenia. La violencia contra azerbaijanos locales fue relatada de la televisión soviética, provocando masacres de armenios en la ciudad azerbaijana de Sumgait.

Envalentonada por la atmósfera liberalizada de la glasnost, la insatisfacción pública por condiciones económicas era mucho más abierta que alguna vez antes en el período soviético. Aunque la perestroika fuera considerada valiente en el contexto de la historia soviética, las tentativas de Gorbachov en la reforma económica no eran el bastante radical para reanudar la economía crónicamente inactiva del país a finales de los años 1980. Las reformas hicieron algunas incursiones en la descentralización, pero Gorbachov y su equipo se marcharon intactos la mayor parte de los elementos fundamentales del sistema estalinista, incluyendo el control de precios, inconvertibilidad del rublo, exclusión de la administración de la propiedad privada, y el monopolio estatal sobre la mayor parte de los medios de producción.

Hacia 1990, el gobierno soviético había perdido el control de condiciones económicas. Los gastos de gobierno aumentaron bruscamente cuando un número creciente de empresas poco rentables requirió que apoyo estatal y subvenciones de precio al consumidor siguiera. Los ingresos fiscales disminuyeron mientras la república y las administraciones municipales retuvieron ingresos fiscales del gobierno central bajo el espíritu creciente de la autonomía regional. La campaña anti−alcohol redujo ingresos fiscales también, que en 1982 explicaron aproximadamente el 12 por ciento de todos los ingresos estatales. La eliminación de control central de decisiones de producción, sobre todo en el sector de bienes de consumidor, conducido a la avería en relaciones suministrador−productor tradicionales sin contribuir a la formación de nuevos. Así, en vez de dinamizar el sistema, la descentralización de Gorbachov causó nuevos cuellos de botella de producción.

Yeltsin y la disolución de la URSS

El 7 de febrero de 1990 el Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética consintió en dejar su monopolio del poder. Durante próximas varias semanas, las 15 repúblicas constituyentes de la URSS sostuvieron sus primeras elecciones competitivas. Los reformadores y los nacionalistas étnicos ganaron muchos de los asientos.

Las repúblicas constituyentes comenzaron a afirmar su soberanía nacional sobre Moscú y comenzaron "una guerra de leyes" con el gobierno central, en el cual los gobiernos de las república constituyentes rechazaron la legislación unitaria, donde esta entró en conflicto con leyes locales, afirmando el control de sus economías locales y rechazando pagar ingresos fiscales al gobierno central de Moscú. Esta lucha causó la dislocación económica, cuando las líneas de abastecimiento en la economía estuvieron rotas, e hicieron que la economía soviética disminuyera adelante.

El movimiento pro-independencia en Lituania, Sąjūdis, establecido el 3 de junio de 1988, causó una visita por Gorbachev en enero de 1990 a la capital lituana, Vilnius, que provocó una reunión pro-independentista de alrededor de 250,000 personas. El 11 de marzo de 1990, Lituania, conducida por el presidente del Consejo Supremo Vytautas Landsbergis, declaró la independencia. Sin embargo, el ejército soviético suprimió el movimiento con tanques. La Unión Soviética inició un bloqueo económico de Lituania y guardó tropas allí "para asegurar los derechos de los rusos."

Borís Yeltsin, en una fotografía de 1989.

El 30 de marzo de 1990, el Consejo Supremo Estonio declaró que el poder soviético en Estonia desde 1940 había sido ilegal, y había comenzado un proceso para restablecer Estonia como un estado independiente. El proceso de restauración de la independencia de Letonia comenzó el 4 de mayo de 1990, con un voto de Consejo Supremo letón que estipula un período de transición para completar la independencia.

El 13 de enero de 1991, las tropas soviéticas, junto con Spetsnaz grupo Alfa de la KGB, asaltaron la Torre de TV de Vilnius para suprimir los medios nacionalistas. Este terminó con 14 civiles lituanos desarmados muertos y cientos más heridos.

El 17 de marzo de 1991, en un referéndum en toda la Unión, el 78 % de todos los votantes votó a favor de la retención de la Unión Soviética en una forma reformada. El Báltico, Armenia, Georgia y Moldavia boicotearon el referéndum. En cada una de las otras nueve repúblicas, una mayoría de los votantes apoyó la retención de la Unión Soviética renovada. Después de resultados, Armenia indicó que esta quiso reincorporarse en la discusión de Unión.

El 12 de junio de 1991, Yeltsin ganó el 57 % del voto popular en las elecciones democráticas para el puesto de presidente de la SFSR rusa, derrotando al candidato preferido de Gorbachev, Nikolai Ryzhkov, que ganó el 16 % del voto. En su campaña electoral, Yeltsin criticó "la dictadura del centro", pero no sugirió la introducción de una economía de mercado. En cambio, él dijo que él pondría su cabeza sobre el railtrack en caso de precios aumentados. Yeltsin tomó posesión del cargo el 10 de julio.

Durante la noche del 31 de julio de 1991, el OMON ruso de Riga, la oficina central militar soviética en el Báltico, asaltó el puesto fronterizo lituano en Medininkai y mató a siete militares lituanos. Este adelante debilitó la posición de la Unión Soviética, internacionalmente y en el país.

El Golpe de Agosto

Archivo:Boris Yeltsin 19 August 1991-1.jpg
Borís Yeltsin y otros opositores al golpe, el día 19 de agosto, sobre un tanque frente a la "Casa blanca" (oficina de Yeltsin).

Afrontado con el creciente separatismo de las repúblicas, Gorbachev intentó reestructurar la Unión Soviética en un estado menos centralizado. El 20 de agosto de 1991, SFSR ruso fue programado para firmar el Nuevo Tratado de Unión, que debía convertir la Unión Soviética en una federación de repúblicas independientes con un presidente común, política exterior y militares. El nuevo tratado fue fuertemente apoyado por las repúblicas asiáticas centrales, que necesitaron el poder económico y los mercados comunes de la Unión Soviética para prosperar. Sin embargo, este significó la preservación del control del Partido Comunista de la economía y la vida social. Los reformistas más radicales estaban cada vez más convencidos que se requería una transición rápida a una economía de mercado, aun si el resultado eventual incluyera la desintegración del estado soviético. La desintegración de la URSS también concordó con el deseo de autoridades locales, como la presidencia de Yeltsin, establecer el poder lleno sobre sus territorios y deshacerse del penetrante control ideológico de Moscú. En contraste con el acercamiento tibio de los reformadores al nuevo tratado, los conservadores y los patriotas restantes de la URSS, todavía fuerte dentro del PCUS y establecimiento militar, estuvieron completamente opuestos a algo que podría contribuir al debilitamiento del estado soviético.

El 19 de agosto de 1991, el vicepresidente de Gorbachev,Gennadi Yanayev, el primer ministro Valentin Pavlov, el ministro de defensa Dmitriy Yazov, el jefe de KGB Vladimir Kryuchkov, y otros altos funcionarios actuaron para prevenir la firma del tratado de unión formando "el Comité Estatal en la Emergencia" "El Comité" puso a Gorbachev (de vacaciones en Foros, Crimea) bajo arresto domiciliario, introdujo de nuevo la censura política, e intentó restaurar el estado de unión. Los líderes golpistas rápidamente publicaron un decreto de emergencia que suspende la actividad política y prohíbe la mayor parte de los periódicos.

Mientras los organizadores del golpe esperaron un poco de apoyo popular a sus acciones, la compasión pública en ciudades grandes y en repúblicas estaba en gran parte contra ellos. El Presidente de la RSFSR rusa Borís Yeltsin fue rápido al condenar el golpe y agarrar el apoyo popular a él.

Miles de personas en Moscú salieron a defender "la Casa Blanca" (la oficina de Yeltsin), entonces el asiento simbólico de la soberanía rusa. Los organizadores intentaron, pero por último dejaron de detener a Yeltsin, que reunió oposición masiva al golpe.

Después de tres días, el 21 de agosto, el golpe sufrió un colapso, los organizadores fueron detenidos, y Gorbachev devuelto como el presidente de la Unión Soviética. Sin embargo, los poderes de Gorbachev estuvieron fatalmente comprometidos ahora cuando la unión ni las estructuras de poder rusas prestó atención a sus órdenes. Consecuencias del fallido golpe

En el otoño de 1991, el gobierno ruso asumió el gobierno de unión, ministerio por ministerio. En noviembre de 1991, Yeltsin publicó un decreto que prohíbe al PCUS en todas partes de la república rusa. Como consiguiente, muchos antiguos apparatchiks abandonaron el Partido Comunista a favor de posiciones en nuevas estructuras del gobierno.

Tanques en la Plaza Roja, durante el intento de golpe de estado.

Después del golpe, las repúblicas soviéticas aceleraron su proceso hacia la independencia, declarando su soberanía uno tras otro. Sus autoridades locales comenzaron a agarrar la propiedad localizada en su territorio. El 6 de septiembre de 1991, el gobierno soviético reconoció la independencia de los tres países del Báltico, que las potencias occidentales siempre sostenían ser soberanos. Aún, en la batalla de poder, el 18 de octubre, Gorbachev y los representantes de 8 repúblicas (excluyendo Azerbaiyán, Georgia, Moldavia, Ucrania y los Países del Báltico) firmaron un acuerdo en la formación de una nueva comunidad económica. Entonces el 1 de diciembre de 1991, Ucrania reafirmó su independencia después de un referéndum popular en donde el 90 % de votantes optó por la independencia.

Mientras tanto, la situación de la economía soviética siguió deteriorando. Hacia el diciembre de 1991, las escaseces de comida en Rusia central causaron la introducción del racionamiento de comida en el área de Moscú por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, Gorbachev, cuando el presidente de la URSS, y su gobierno todavía estaban opuestos a cualquier reforma de mercado rápida en la economía que sufre un colapso del país, como el programa económico de "los 500 Días de Yavlinsky". Para romper la oposición de Gorbachev, Yeltsin decidió disolver la Unión Soviética de acuerdo con el Tratado de la Unión de 1922 y por lo tanto remover a Gorbachev y el gobierno de la URSS del poder. Esto fue visto como una medida forzada para salvar al país de un colapso económico completo y fue entonces extensamente apoyado por la población de Rusia. El paso también fue con entusiasmo apoyado por los gobiernos de Ucrania y Bielorrusia, que eran partidos del Tratado de 1922 junto con Rusia.

Formación de la CEI y fin oficial de la URSS

El 8 de diciembre de 1991, los líderes de las repúblicas rusa, ucraniana, y bielorrusa se encontraron en Belavezhskaya Pushcha y firmaron los Acuerdos de Belavezha, que declaran la Unión Soviética disuelta y sustituida por la Comunidad de Estados Independientes (CEI). Gorbachev describió esto como un golpe inconstitucional, pero pronto se hizo claro que el desarrollo no podía ser parado.

El 12 de diciembre de 1991, la legislatura de la República Soviética Rusa formalmente aceptó la secesión de Rusia de la Unión Soviética, ratificando los Acuerdos de Belavezha y denunciando el Tratado de la creación de la Unión Soviética de 1922 . El 17 de diciembre de 1991, doce de las quince repúblicas soviéticas firmaron la Carta de Energía Europea en La Haya como si fuesen estados soberanos, junto con otros 28 países europeos, la Comunidad Europea y cuatro países no europeos.

Mapa de la actual CEI, heredera de la Comunidad de Estados Independientes cuya creación acabaría provocando la disolución de la URSS.

Las dudas permanecieron sobre las autoridades de los Acuerdos de Belavezha para efectuar la disolución de la Unión Soviética, ya que ellos fueron firmados por sólo cinco de las repúblicas soviéticas. Sin embargo, el 21 de diciembre de 1991, los representantes de todas las República soviéticas, excepto Georgia, firmaron el Protocolo de Alma Ata, confirmando la disolución de la Unión y también haciendo varias provisiones consiguientes a la extinción de la URSS.

También en aquella misma fecha, todas las antiguas república soviéticas, excepto los tres Países del Báltico, concordados para afiliarse a la CEI. Los documentos firmados en Alma Ata el 21 de diciembre también autorizaron a Rusia para lograr el ingreso de Naciones Unidas de la URSS, lo cual significó que Rusia tomaría el asiento de la URSS en el Consejo de Seguridad. El 24 de diciembre de 1991, el Embajador soviético a las Naciones Unidas entregó al Secretario General una carta por el presidente de Rusia, Boris Yeltsin, informándole que, en virtud de aquel acuerdo, Rusia era el sucesor de la URSS en la ONU. Este documento fue puesto en circulación entre los otros Estados miembros de las Naciones Unidas, y, sin haber objeción alguna, fue declarado aceptado el 31 de diciembre.

El 25 de diciembre de 1991, Gorbachev, cediendo ante lo inevitable, dimitió como presidente de la URSS, declarando la presidencia extinguida y traspasando todos los poderes todavía concedidos en ello al presidente de Rusia: Yeltsin. Durante la noche de aquel mismo día, la bandera soviética fue bajada por última vez sobre el Kremlin. Finalmente, un día más tarde, el 26 de diciembre de 1991, el Soviet Supremo reconoció la extinción de la Unión y se disolvió. Hacia el 31 de diciembre de 1991, todas las instituciones soviéticas oficiales habían cesado sus operaciones cuando las repúblicas individuales asumieron el papel del gobierno central.

La disolución de la Unión Soviética también dejó a los Estados Unidos como la única superpotencia que sobrevive actualmente en el mundo.

Sumario

Los cuatro elementos principales del viejo sistema soviético eran la jerarquía de los soviets, el federalismo étnico, el socialismo estatal, y el dominio del Partido Comunista. Los programas de Gorbachev de perestroika y glasnost produjeron efectos radicales imprevistos que rebajaron aquel sistema.

Como un medio de reanimar el estado soviético, Gorbachev repetidamente intentaba construir una coalición de líderes políticos soportantes de la reforma y creó nuevas arenas y bases del poder. Él puso en práctica estas medidas porque él quiso resolver problemas económicos serios y apatía política que claramente amenazó con poner la Unión Soviética en un estado de estancamiento a largo plazo.

Pero usando reformas estructurales para ensanchar oportunidades de líderes y movimientos populares en las repúblicas de la unión para ganar influencia, Gorbachev también lo hizo posible para las fuerzas nacionalistas, comunistas ortodoxos, y populistas para oponerse a sus tentativas de liberalizar y revivificar el comunismo soviético. Aunque algunos nuevos movimientos aspiraran a sustituir el sistema soviético totalmente por un democrático liberal, los otros exigieron la independencia por las república nacionales. Todavía los otros insistieron en la restauración de los viejos caminos soviéticos. Por último, Gorbachev no pudo forjar un compromiso entre estas fuerzas y la consecuencia fue el colapso de la Unión Soviética.

Reestructuración post-soviética

A fin de reestructurar el sistema de orden administrativo soviético y transición de instrumento a una economía basada en el mercado, el programa de choque de Yeltsin fue empleado unos días después de la disolución de la Unión Soviética. Las subvenciones a las granjas e industrias que perdían dinero fueron cortadas, controles de precio abolidos, el rublo se movió hacia la convertibilidad. Las nuevas oportunidades del círculo de Yeltsin y otros empresarios para agarrar la antigua propiedad estatal fueron creadas así reestructurando la antigua economía poseída por el Estado. Después de obtener el poder, la gran mayoría de reformadores "idealistas" ganó posesiones enormes de la propiedad estatal usando sus posiciones en el gobierno y se hicieron oligarcas comerciales en una manera que pareció antiética a una democracia emergente. Las instituciones existentes fueron claramente abandonadas antes del establecimiento de nuevas estructuras legales de la economía de mercado como aquellos gobernando la propiedad privada, supervisando mercados financieros, y haciendo cumplir impuestos. Los economistas de mercado creyeron que el desmontaje del sistema de orden administrativo en Rusia levantaría el PBI y el nivel de vida asignando recursos más eficazmente.

También pensaban que el colapso crearía nuevas posibilidades de producción eliminando la planificación central, la substitución de un sistema de mercado descentralizado, eliminación de la deformación macroeconómica y estructural enorme por liberalización, y suministro de incentivos por la privatización.

Desde el colapso de la URSS, Rusia ha afrontado muchos problemas que los defensores de libre mercado en 1992 no esperaron: entre otras cosas, el 25 % de la población ahora vive debajo del umbral de la pobreza, la esperanza de vida se ha caído, los índices de natalidad son bajos, y el PBI ha partido por la mitad.

Estos problemas condujeron a una serie de crisis en los años 1990, que casi condujeron a la elección del rival comunista de Yeltsin, Gennadi Ziugánov, en la elección presidencial de 1996.

Prehistoria

La URSS heredó el territorio y la estructura multinacional del Imperio Ruso. Finlandia y Polonia recibieron la independencia. En 1918—1921 algunos territorios occidentales eran perdidos, pero en 1939—1946 fueron juntado de nuevo.

Después de la terminación de la Segunda Guerra Mundial URSS disponía del territorio enorme en Europa y Ásia que tienía el acceso a los mares y los océanos, los recursos naturales enormes, la economía desarrollada del tipo socialista fundado en la especialización regional y las relaciones económicas interregionales. Además, la dirección «de los países socialistas» se encontraba bajo el control parcial de los poderes de la URSS.

En 70—80 años los conflictos internacionales (los Desórdenes de 1972 en Kaunas, los acontecimientos diciembres de 1986 en Kazajstán) [1] eran insignificantes, la ideología soviética subrayaba que la URSS — la familia unida de los pueblos fraternales. La URSS era encabezada por los representantes de las nacionalidades distintas (el georgiano Yósif Stalin, los ucranianos de N.S.Khrushchev, L.I.Brezhnev,Chernenko). Los rusos, el pueblo más numeroso, vivían no sólo en el territorio de la RSFSR, sino también en todas otras repúblicas. Cada uno de las repúblicas de la Unión Soviética tenía su himno y su dirección de partido (excepto RSFSR).

La dirección del estado multinacional fue centralizada — el país era encabezado por los órganos centrales del Partido Comunista de la Unión Soviética que controlaban toda la jerarquía de los órganos del poder. Los dirigentes de las repúblicas de la unión se confirmaban por la dirección central. Este estado real de los asuntos se distinguía poco de la construcción idealizada descrita en la Constitución de la URSS. Algunas repúblicas de la unión como Republica Ucraniana y Republica Bielorrusa por los resultados de los acuerdos, alcanzados a la conferencia enYalta, tenían los representantes en la ONU del momento de su fundamento. Algunas repúblicas de la unión como Republica Ucraniana y Republica Bielorrusa , según los resultados de los acuerdos, alcanzados a las conferencias De Yalta, tenían los representantes en la ONU del momento de su razón.

Después de la muerte de Stalin tenía lugar alguna descentralización del poder. En particular, se hacía la regla estricta, al puesto del primer secretario en las repúblicas fijar al representante de la nación portada de la república correspondiente. El segundo secretario de la partida en las repúblicas era un representante del Comité Central. Eso llevó a lo que los dirigentes locales poseían la independencia determinada y la fuerza incondicional en las regiones. Después de la descomposión de la URSS muchos de estos dirigentes se transformaban en los dictadores. Sin embargo, en los tiempos soviéticos su destino dependía de la dirección central. Si en 1956 — 82 años (es decir, el deshielo de Khrushchev y la dirección de Brezhnev) es posible encontrar el florecimiento de la URSS, después de la muerte de Brezhnev la URRS comenzó a balancearse. No hay opinión única de lo que era la causa principal de la descomposión de la URSS, también sobre, si él era inevitable o prevenido. Entre las causas posibles llaman los siguientes:

  • Las tendencias centrífugas, inherentes a cada país multinacional.
  • Los intentos fallados de la reforma del sistema soviético, que llevaron al estancamiento, y luego a la desorganización de la economía que trajo consigo la desorganización del sistema político
  • El descenso de los precios mundiales del petróleo, que tambaleó la economía de la URSS.
  • La incapacidad de la URSS de sostener la carrera de los armamentos, la victoria de «Reaganomia» en esta carrera.
  • La actividad ineficaz de los gobernadores — Brezhnev y sus sucesores, cuya actividad reformadora devastó la economía y estropeó los mecanismos del poder centralizado.
  • El interés de los estados occidentales en el debilitamiento de la URSS, la actividad de explosión de los servicios especiales occidentales.
  • La falta de principios de los poderes centrales y republicanos deshacido la URSS por las ambiciones políticas, la lucha por el poder.
  • El deseo de la parte de la élite política y económica robar el país por partes
  • Las contradicciones internacionales, el deseo de los pueblos separados desarrollar independientemente su cultura y economía.
  • Los antiguos ciudadanos de los países socialistas que escondian al Occidente. Algunos de ellos hicieron por el sentido de la vida la explosión cultural e ideológica del régimen comunista.

Desde 1985 el Secretario general del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética M.S.Gorbachov y sus partidarios comenzaron la política de la reconstrucción, creció bruscamente la actividad política del pueblo, se formaron los movimientos y las organizaciones de masas, incluso nacionales. Las tentativas de la reforma del sistema soviético llevaron al ahondamiento de la crisis en el país. En la arena política esta crisis se expresó como la oposición del Presidente de la URSS Gorbachov y el Presidente de la RSFSR Eltsin. Eltsin hacía propaganda activamente de la consigna sobre la necesidad de la soberanía de la RSFSR.

La crisis general

La descomposión de la URSS pasaba en el fondo del comienzo de la crisis general económica, de política exterior y demográfica. En 1989 por primera vez es oficialmente declarado el comienzo de la crisis económica en la URSS (el crecimiento de la economía se cambia por la caída).

Durante 1989—1991 llega al máximo el problema principal de la economía soviética — el déficit crónico mercantil; de la venta libre desaparecen prácticamente todas las mercancías básicas, excepto el pan. Por todo el país introduce el racionamiento a modo de los talones.

Desde 1991 por primera vez fue fijado la crisis demográfica (el exceso de la mortalidad sobre la natalidad).

La denegación de la intervención en los asuntos interiores de otros países lleva tras de sí la caída de los regímenes masas prosovieticas comunistas en Europa Oriental en 1989. En Polonia llega al poder el antiguo líder de sindicato "Solidariedad" Leh Valensa (el 9 de diciembre 1990), en Checoslovaquia — un antiguo disidente Vatslav Gavel (el 29 de diciembre 1989). En Rumanía, a diferencia de otros países de Europa Oriental, los comunistas eran desplazados por la fuerza, y el presidente-dictador Chaushesku junto con la mujer fue fusilado por la sentencia del tribunal. Así, hay un colapso real del medio ambiente soviético.

En el territorio de la URSS se enciende una serie de los conflictos internacionales.

Por la primera manifestación de la tensión durante la Reconstrucción se pusieron los acontecimientos en Kazajstán. El 16 de diciembre 1986 en Alma-Ata tenía lugar la manifestación de la protesta después de que Moscú trataba de imponer al puesto del primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de la Republica Kazajstán su protegido Kolbina V. G que trabajaba antes el primer secretario del Comité regional De Ulyanovsk del Partido Comunista de la Unión Soviética y que no tenía a Kazajstán ninguna relación. Esta manifestación era aplastada por el ejército interior. Sus algunos participantes "desaparecieron sin dejar rastro", o han caído en el encarcelamiento. Estos acontecimientos conocidos bajo el nombre «Zeltoskan ».

De la agudeza más grande se distinguía el conflicto Karabahsky, que comenzó en 1988. Hay unas matanzas de masas como los armenios, y los azerbayanos. En 1989 el Consejo superior de la republica sovietica de Armenia declara la asociación Montañoso Karabah, la republica sovietica de Azerbayan comienza el bloqueo. En abril 1991 en realidad entre dos repúblicas soviéticas comienza la guerra. En 1990 empiezan los desórdenes en el valle De Fergana, que sobre todo era la mezcla de algunas nacionalidades del Asia Central. La decisión de la rehabilitación de los pueblos deportados por Stalin lleva al aumento de la tensión en una serie de las regiones, en particular, en la Crimea — entre los tártaros de Crimea y los rusos, en la región Suburbana de Ossetia Norte — entre los osetios y los inguches.

En el fondo de la crisis general crece la popularidad de los demócratas radicales al frente de Boris Eltsinym; llega al máximo en dos ciudades mayores — Moscú y Leningrad(ahora San-Petersburgo). Los movimientos en las repúblicas por la salida de la composición de la URSS y «la parada de las soberanías»

En ninguna de las repúblicas de la unión del Asia Central no había movimientos organizados o las partidas, que perseguían el objetivo el logro de la independencia. Entre las repúblicas musulmanas, a excepción del Frente popular azerbayano, el movimiento por la independencia existía sólo en una de las repúblicas autónomas de Povolzch`e— partida "Ittifak" Fauzii Bajramovoj en Tatarstán, que desde 1989 apoyaba la transformación de Tatarstán en el estado independiente.

El 7 de febrero 1990 Comités Centrales del Partido Comunista de la Unión Soviética declaró del debilitamiento del monopolio en el poder, durante de algunas semanas fueron las primeras elecciones competitivas. Muchos lugares en las repúblicas de la unión recibieron los liberales y los nacionalistas.

Durante 1990—1991 había ósea «La parada de las soberanías», en el curso de cuyo todas republicas aliadas (incluso RSFSR un de primero) y muchos de repúblicas autónomas aceptaron la Declaración de la soberanía, en que impugnaron la prioridad de las leyes de toda la Unión Soviética sobre republicano que comenzó «la guerra de las leyes». También por ellos eran emprendidas las acciones por el control sobre las economías locales, incluso las denegaciónes de pagar los impuestos en los presupuestos rusos aliados y federales. Estos conflictos cortaban muchas relaciones económicas que aún más agravó la posición económica en la URSS.

El primer territorio de la URSS que declaró la independencia en enero 1990 en respuesta a acontecimiento de Bakú, era la Republica Sovietica autónoma Nahichevansky . Luego declararon la independencia dos repúblicas de la unión (Lituania y Georgia) y cuatro (Estonia, Letonia, la Moldavia, Arménia).

Justamente después de los acontecimientos proclamaron la independencia casi todas las repúblicas de la unión que se quedaban, también algunas autónomas fuera de Rusia, la parte de cuyas luego se pusieron llamarse como los estados desconocidos.

La separación de Ucrania

En septiembre de 1989 fue fundado el movimiento de los ucranianos nacional-demócratas “Narodniy Ruj” (Movimiento Popular) de Ucrania, que participaba en las elecciones el 30 de marzo de 1990 en la Rada (Consejo Supremo) de Ucrania, y recibió en ella la influencia considerable.

En la marcha de los acontecimientos golpistas del CEE (Comité Estatal de Emergencia), el 24 de agosto 1991 el Consejo Supremo de Ucrania (Rada) aceptó la declaración de la independencia, que era reforzada por los resultados del referéndum del 1 de diciembre 1991.

Después en Crimea, gracias a la mayoría de la población rusa que no eseaba de la separación de Rusia, al tiempo corto era proclamada la soberanía de la República (Autónoma) de Crimea.

El referéndum de 1991 sobre la conservación de la URSS

En marzo de 1991 tenía lugar el referéndum, sobre que la mayoría aplastante de la población en cada uno de las repúblicas votó por la conservación de la URSS.

En seis repúblicas de la unión (Lituania, Estonia, Letonia, Georgia, Moldavia, Armenia), que declararon antes la independencia o sobre el traspaso a la independencia, el referéndum de toda la Unión Soviética no era pasado en realidad (por los poderes de estas repúblicas no eran formadas las comisiones electorales Centrales, no realizaban las elecciones generales de la población) a excepción de algunos territorios (Abjasia, la Osetia del Sur, Transnistria), pero en otro tiempo fueron efectuadas los referéndums sobre la independencia.

En pie a la concepción del referéndum se suponía la conclusión el 20 de agosto 1991 de las nuevas uniones — Los Uniones de los Estados Soberanos como a la federación suave.

Sin embargo, aunque en el referéndum la mayoría inmensa de las voces fue dada por la conservación de la integridad de la URSS, él tenía la influencia fuerte psicológica, habiendo puesto bajo la duda la misma idea a "la inalterabilidad de la unión".

Proclamación de independencia de las repúblicas URSS

  • 1990:
    • 19 de enero — República Autónoma Socialista Soviética Nahichevanskaya
    • 11 de marzo — República Socialista Soviética Lituana
    • 30 de agosto — República Autónoma Socialista Soviética Tártara
    • 27 de noviembre — República Autónoma Socialista Soviética Chechena-inguche
  • 1991:
    • 9 de abril — República Socialista Soviética Georgiana
    • 8 de junio — República Autónoma Socialista Soviética la parte de Chechena-inguche
    • 20 de agosto — República Socialista Soviética de Estonia
    • 21 de agosto — República Socialista Soviética de Letonia
    • 24 de agosto — República Socialista Soviética de Ucrania
    • 25 de agosto — República Socialista Soviética de Belarus
    • 27 de agosto — República Socialista Soviética de Moldavia
    • 30 de agosto — República Socialista Soviética de Azerbaidzhán
    • 31 de agosto — República Socialista Soviética de Kirguizia
    • 1 de septiembre — República Socialista Soviética de Uzbekistán
    • 9 de septiembre — República Socialista Soviética de Tadzhikistán
    • 23 de septiembre — República Socialista Soviética de Armenia
    • 27 de octubre — República Socialista Soviética de Turkmenia
    • 16 de diciembre — República Socialista Soviética de Kasakstán

Ninguna de las repúblicas no cumplió todos los procedimientos prescritos por la ley de la URSS del 3 de abril de 1990. El Consejo estatal de la URSS el 1991 (creado el 5 de septiembre que consiste de los jefes de las repúblicas de la unión bajo la presidencia del Presidente de la URSS) reconoció formal la independencia sólo de tres repúblicas bálticas. El 4 de noviembre V.I.Iljuhin instruyó una causa contra Gorbachov por el artículo 64 Código Penal de la RSFSR (la traición a la Patria) en relación a las decisiones decididas del Consejo del estado. En opinión de Iljuhin, Gorbachov, habiéndolos firmados, violó el juramento y la Constitución de la URSS y inferiorizó de la inviolabilidad territorial y la seguridad de estado de la URSS. Después de esto Iljuhin fue despedido del ministerio público de la URSS.

Referencias

  1. Voprosy Ekonomiki (Moscú), núm. 2 (1988), p. 79.

Véase también