Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Esta es una versión antigua de esta página, editada a las 11:19 23 oct 2014 por Isaacvp (discusión · contribs.). La dirección URL es un enlace permanente a esta versión, que puede ser diferente de la versión actual.
Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús
Siglas IAFCJ
Tipo Iglesias Pentecostales del Nombre de Jesucristo
Fundador Romana Carbajal de Valenzuela
Fundación 1 de noviembre de 1914
Lugar de fundación México México
Religiosos Más de 2 000 000 seguidores [cita requerida]
Presencia Más de 45 000 iglesias
Sitio web http://www.iafcj.org

La Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús es una iglesia pentecostal evangélica de México y una de las más antiguas, también es una de las iglesias pentecostales del nombre de Jesucristo.

Historia

La Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús (IAFCJ) tiene sus antecedentes hacia finales del siglo XIX y su conformación definitiva hacia el principio del siglo XX. El movimiento apostólico, como era conocido entonces y que fructificaría en otros movimientos, que vino a México fue muy importante para la época ya que era de los primeros movimientos de característica pentecostal, es decir, un movimiento en dónde se producía derramamiento del Espíritu Santo a la manera de la iglesia primitiva. Este movimiento era netamente unicitario, que cree que Dios es uno solamente y no más, no separando a Dios en tres personas ni dos. Es por esto las palabras que expresa el teólogo de este movimiento Manuel J. Gaxiola: "El siglo en que vivimos fue testigo desde su primer día de un fenómeno que vino a vitalizar a la iglesia cristiana y hacer que brotaran las semillas que habían estado enterradas, en algunos casos por siglos, y que ahora podían, como en los tiempos primitivos, fructificar y crecer. El derramamiento del Espíritu Santo en la ciudad de Topeka, Kansas, dio inicio al movimiento pentecostal que se ha convertido en la fuerza religiosa más extendida en nuestro tiempo, pues se inició en la dinámica del Espíritu Santo, que como lluvia tardía comenzó a derramarse en los corazones que ahora veían las señales primitivas: nuevas lenguas, señales, prodigios, sanidades, etc.”[1]

El pentecostalismo en todas sus variantes tuvo como centro principal la diáspora de la famosa "Mision de la Fe Apostólica" que tiempo después cambio su nombre a Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús de la calle Azusa en Los Ángeles, California en 1906. Aunque ya antes en Kansas, Minnesota, Carolina del Norte y Texas hubo manifestación del Espíritu Santo.[2]

Una de las características del movimiento de la calle de Azusa es su multirracialidad, pues se empezaron a congregar de toda clase de personas y de todas las razas siendo llamados por el florecimiento de un fenómeno sin precedentes hasta entonces. Entre esta mucha gentes no podían faltar los de origen mexicano que se encontraban en Estados Unidos: “También es un hecho que ya para el año de 1909 había en la zona de Los Ángeles, California, grupos que fueron la base del movimiento apostólico actual, principalmente entre los mexicanos y otras personas de habla española que, entre otras cosas, bautizaban como lo hicieron los apóstoles.”[3]

De la diáspora de la calle de Azusa se conformaron distintos centros de reunión que profesaban la redescubierta doctrina pentecostal y de una de ellas salió una mujer mexicana llamada Romana Carbajal de Valenzuela, ama de casa sin pretensiones de predicadora pero que perseveraba fervientemente en la fe. Habiendo sido bautizada en el nombre de Jesucristo del mismo modo en que lo hicieron todos los apóstoles y habiendo recibido el bautismo del Espíritu Santo deseaba que sus familiares en México también recibieran de la bendición que ella había recibido. “Con permiso de su esposo llegó a su tierra natal, Villa Aldama, Chihuahua, y comenzó a dar testimonio del evangelio a sus familiares. Al principio ella y el mensaje fueron rechazados, pero el rechazo se transformó en fe y sed de Dios, y así fue como el 1 de noviembre de 1914 doce familiares de la citada hermana fueron llenos del Espíritu Santo y hablaron en lenguas, como Dios les daba que hablasen.”[4]

La señora de Valenzuela, no pudiendo hacerse cargo del discipulado de los nuevos creyentes hizo contacto con el creyente Rubén Ortega que estaba en la ciudad de Chihuahua y logró que este creyera en el mensaje apostólico y recibiera el bautismo del Espíritu Santo, posteriormente llevó a este creyente a El Paso, Texas, el lugar más cercano dónde habían hermanos del movimiento apostólico de raza negra, para que fuera bautizado de la forma bíblica, en el nombre de Jesucristo(Hechos 2:38). Y posteriormente fuera el pastor de la iglesia en El Paso, Texas.

Del grupo original de los doce surgió un ministro llamado Miguel García, quien se trasladó a la región llamada La Laguna y formó las primeras iglesias apostólicas en Gómez Palacio, Durango, y Torreón, Coahuila. Simultáneamente se comenzaban a formar iglesias apostólicas en Baja California, Sinaloa, y otros lugares. Desde su conformación iniciaron con un mensaje que impactaba a la comunidad y lograron crecer no sin contrariedades y dificultades pues en todo el país estaba concluyendo la revolución mexicana.

A partir de 1932 la IAFCJ empieza a recibir impulso estableciendo su sistema de trabajo misionero y definiendo su doctrina. “Gradualmente la iglesia se va extendiendo por todo el país, y actualmente cuenta con iglesias en toda la República Mexicana. En 1949, bajo el impulso de Maclovio Gaxiola López, la iglesia admite que el mandato de ir por todo el mundo y predicar el evangelio a toda criatura también es para ella, y así se constituye en una de las pocas iglesias evangélicas mexicanas que tienen un programa misionero en el extranjero. Comenzó entonces a enviar misioneros que han establecido iglesias pujantes en Guatemala, El Salvador y Nicaragua. Recientemente se estableció obra también en Canadá, Estados Unidos, Belice, Colombia, Sudamérica y España. La iglesia hermana en Estados Unidos, también acudió al auxilio de sus semejantes de habla castellana, y así se logró que en todo Centro América, en Argentina, Uruguay, Chile, España, Italia y Pakistán se cuente con iglesias como las nuestras.”

Creación del Culto

Creada alrededor de 1906 en la ciudad de Aldama, Chihuahua, con el bautizo de un grupo de 12 personas, que según su tradición recibierón el "Bautismo del Espíritu Santo", con "señales sobrenaturales", entre ellas, hablar en "nuevas lenguas"

Posteriormente una de los participantes Romana Carbajal de Valenzuela habló interpretando el evangelio del nuevo testamento y motivó a los asistentes a orar para buscar la revelación de Dios sobre sus vidas. Romana había residido en los EE. UU. donde había adoptado el culto cristiano evangélico en uno de los "Movimientos de la Fe Apostólica" de corte pentecostal con mayoría de hispanohablantes (llamados latinos).

Doctrina básica

El culto adoptado por la Sra. Romana en los EE. UU. era el denominado doctrina de la Unicidad de Dios, que sostiene la unicidad de Dios en contra del tridentino, pero "manifestado a la humanidad" en muchas formas entre las cuales se destacan las tres principales formas en las que se ha revelado al hombre: Padre en la Creación, Hijo en la redención del hombre y como Espíritu Santo derramado en los corazones.

Como particularidad de La Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús, también conocida por el acrónimo IAFCJ, considera que su principal fundamento es la palabra de Jesús el Cristo presentada en el Nuevo Testamento y promulgada por sus pastores, por lo que el bautismo debe hacerse en el nombre de Jesucristo, para perdón y remisión de pecados, mediante inmersión total en agua, ya sea que se realice en una pila bautismal o cuerpo grande de agua, como el mar, río o estanque.

Unicidad divina

La Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús se consideró Unitarista durante mucho tiempo, pero cuando se le identificó como una denominación del Unitarismo universalista, optó por identificarse claramente como una organización de los cristianos pentecostales del nombre de Jesucristo haciendo más clara su doctrina a la Unicidad de Dios y evitando ser confundida con el "unitarismo" de Arrio que fue condenado en el Primer Concilio de Nicea del año 325.

Considera que Dios se ha manifestado al mundo de muchas formas revelándose como Padre en la Creación del universo, como Hijo en la redención de la humanidad y como Espíritu Santo derramado en los corazones de los creyentes. Considera que Dios es el creador de todo lo que existe y que posee una divinidad absoluta e indivisible, infinito en su inmensidad, inconcebible en su modo de ser e indescriptible en su esencia y sustentan esto con los pasajes bíblicos sostenidos en Deuteronomios 6:4; Marcos 12:29; 1 Corintios 8:5,6.

Jesucristo

Jesucristo nació de la virgen María, por obra del Espíritu Santo y que al mismo tiempo es el único y verdadero Dios(Romanos 9:5; 1 Juan 5:20). Sustentan que el mismo Dios del Antiguo Testamento tomó forma humana(Isaías 60:1-3). "Y aquel verbo fue hecho carne y habitó entre nosotros..."(Juan 1:14).

Espíritu Santo

Creen en el bautismo del Espíritu Santo que fue prometido por Dios en el Antiguo Testamento (Joel 2:28) y derramado después de la glorificación de Jesucristo (Juan 7:37-39; 14:16-26; Hechos 2:1-4).

Resurrección de Jesucristo

Creen en la resurrección literal de Jesucristo al tercer día de su muerte como lo relatan los evangelios y que había sido anunciada por los profetas en Isaías 53:12 y que es necesaria para la esperanza y justificación del creyente(Romanos 4:25: 1 Corintios15:20).

Bautismo

Creen en el bautismo en agua, por inmersión y en el nombre de Jesucristo, el cual debe ser administrado por un ministro ordenado. El bautismo debe ser por inmersión porque así se representa la muerte del hombre al pecado, semejante a la muerte de Cristo (Romanos 6:1-5). Y en el nombre de Jesucristo porque esta es la forma en que los apóstoles y ministros bautizaron en la era primitiva de la iglesia (Hechos 2:38; 8:16; 10:48; 19:5; 22:16).

Sanidad divina

Creen que aún en la actualidad Dios tiene el poder para sanar todas las enfermedades, si así es su voluntad, y que la sanidad divina es el resultado del sacrificio de Cristo (Isaías 53:4; Marcos 16:18).

Santidad

Creen que todos los miembros del Cuerpo de Cristo deben ser santos, es decir, apartados del pecado y consagrados al servicio de Dios. Por esta razón los creyentes deben abstenerse de practicar toda clase de diversiones malsanas e inmundicias de carne y de espíritu (Levítico 19:2; 2 Corintios 7:1; Efesios 5:26, 27; 1 Tesalonicenses 4:3, 4; 2 Timoteo 2:21; Hebreos 12:14; 1 Pedro 1:16).

Sin embargo, en la práctica de la santidad, creen que debe evitarse toda clase de extremismos, ascetismos y privaciones que tienen “…cierta reputación de sabiduría en culto voluntario, en humildad y en duro trato de la carne; …la cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo" (Colosenses 2:23, 17). En lo que respecta a alimentos, sabiendo que “todo lo que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias” (1 Timoteo 4:4).

Resurrección de justos e injustos

Creen que habrá una resurrección literal de los muertos en el Señor, en la cual serán revestidos con un cuerpo glorificado y espiritual, con el cual vivirán para siempre en la presencia del Señor (Job 19:25-27; Salmos 17:15; Juan 5:29; Hechos 24:15; 1 Corintios 15:35-54; 1 Tesalonicenses 4:16).

Creen, también, que habrá resurrección de injustos, pero éstos despertarán del sueño de la tumba para ser juzgados y oír la sentencia que los harán herederos del fuego eterno (Daniel 12:2; Mateo 25:26; Marcos 9:44; Juan 5:29; Apocalipsis 20:12-15).

Recogimiento de la iglesia y el milenio

Creen que la Iglesia, compuesta de los muertos en el Señor y los fieles que estén sobre la tierra en el momento del rapto, será levantada para ir a encontrar a su Señor en los aires y participar en las bodas del Cordero. Después vendrá con el Señor a la tierra para hacer el juicio de las naciones y reinar con Cristo mil años. Este período será precedido por la Gran Tribulación y la batalla de Armagedón, a la cual dará fin el Señor cuando descienda sobre el monte de los Olivos con todos sus santos (Isaías 65:17-25; Daniel 7:27: Miqueas 4:1-3; Zacarías 14:1-6; Mateo 5:5; Romanos 11:25-27; 1 Corintios 15:51-54; Filipenses 3:20, 21; 1 Tesalonicenses 4:13-17; Apocalipsis 20:1-5).

Juicio final

Creen que hay un juicio preparado en el cual participarán todos los hombres que hayan muerto sin Cristo y los que estén sobre la tierra en el tiempo de su verificación. Este juicio se efectuará al final del Milenio, y también se conoce con el nombre de Juicio del Trono Blanco. La Iglesia no será juzgada en esta ocasión, sino que ella misma intervendrá en el juicio que se haga a todos los hombres de acuerdo con lo que está escrito en los libros que Dios tiene preparados. Al terminarse este juicio, los cielos y la tierra que hoy existen serán renovados por fuego, y los fieles habitarán en la Nueva Jerusalén.

La dispensación cristiana habrá terminado y entonces Dios volverá a hacer todas las cosas en todos (Daniel 7:8-10, 14-18; 1 Corintios 6:2, 3; Romanos 2:16; 14:10; Apocalipsis 20:11-15; 21:1-6).

Referencias

  1. Constitución de la Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús
  2. (cGee, Gary. «William J. Seymour and the Azusa Street Revival». Enrichment Journal. Consultado el 17-05-2007.
  3. Constitución de la Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús
  4. Gaxiola López, Maclovio. Historia de la Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús

Referencias externas

Historia

Doctrina

Enlaces externos