Diferencia entre revisiones de «Seseo»

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El '''seseo''' es un fenómeno lingüístico de la [[Idioma español|lengua española]] y de la [[lengua gallega]], por el cual los [[fonema]]s representados por las [[grafía]]s "c" (ante "e" o "i"), "z" y "s" se vuelven equivalentes, asimilándose a la [[consonante fricativa alveolar sorda]] [s]. Este fenómeno, presente en la enorme mayoría de las variantes del [[idioma español]], no aparece sin embargo en el dialecto tradicionalmente considerado la referencia lingüística principal, el [[dialecto castellano]] —la denominada modalidad norteña del idioma español—, en que la "c suave" y la "z" tienen el valor de la [[consonante fricativa dental sorda]] [θ].
El '''seseo''' es un fenómeno lingüístico de la [[Idioma español|lengua española]] y de la [[lengua gallega]], por el cual los [[fonema]]s representados por las [[grafía]]s "c" (ante "e" o "i"), "z" y "s" se vuelven equivalentes, asimilándose a la [[consonante fricativa alveolar sorda]] [s]. Este fenómeno, presente en la enorme mayoría de las variantes del [[idioma español]], no aparece sin embargo en el dialecto tradicionalmente considerado la referencia lingüística principal, el [[dialecto castellano]] —la denominada modalidad norteña del idioma español—, en que la "c suave" y la "z" tienen el valor de la [[consonante fricativa dental sorda]] [θ].


Todos los dialectos americanos del castellano son seseantes; en España, el fenómeno aparece como solución mayoritaria en la zona central de [[Andalucía]] (donde se originó el fenómeno){{demostrar}} y las islas [[Canarias]]. En Canarias el seseo es general a todo el archipiélago. En [[Andalucía]] la zona fundamentalmente seseante comprende, por provincias:
La mayoría de los dialectos americanos del castellano son seseantes; en España, el fenómeno aparece como solución mayoritaria en la zona central de [[Andalucía]] (donde se originó el fenómeno){{demostrar}} y las islas [[Canarias]]. En Canarias el seseo es general a todo el archipiélago. En [[Andalucía]] la zona fundamentalmente seseante comprende, por provincias:


* En [[Provincia de Huelva|Huelva]]: el [[Andévalo]].
* En [[Provincia de Huelva|Huelva]]: el [[Andévalo]].

Revisión del 15:43 10 jun 2010

El seseo es un fenómeno lingüístico de la lengua española y de la lengua gallega, por el cual los fonemas representados por las grafías "c" (ante "e" o "i"), "z" y "s" se vuelven equivalentes, asimilándose a la consonante fricativa alveolar sorda [s]. Este fenómeno, presente en la enorme mayoría de las variantes del idioma español, no aparece sin embargo en el dialecto tradicionalmente considerado la referencia lingüística principal, el dialecto castellano —la denominada modalidad norteña del idioma español—, en que la "c suave" y la "z" tienen el valor de la consonante fricativa dental sorda [θ].

La mayoría de los dialectos americanos del castellano son seseantes; en España, el fenómeno aparece como solución mayoritaria en la zona central de Andalucía (donde se originó el fenómeno)[cita requerida] y las islas Canarias. En Canarias el seseo es general a todo el archipiélago. En Andalucía la zona fundamentalmente seseante comprende, por provincias:

  • En Huelva: el Andévalo.
  • En Cádiz: La ciudad de Cádiz y algunas otras ciudades del entorno son seseantes.
  • En Sevilla: la ciudad de Sevilla, la sierra norte y la zona de Estepa.
  • En Córdoba: todo el centro y sur de la provincia (zona de la campiña y del valle del Guadalquivir), incluida la capital.
  • En Málaga: la zona de Antequera.
  • En Jaén: zonas del valle del Guadalquivir, poblaciones fronterizas con Córdoba, algunas poblaciones aisladas más al este y Alcalá la Real.
  • En Granada: zona del extremo occidental, Montefrío y Algarinejo. Zonas aisladas más al oriente.
  • En Almería: casi desaparecido como solución mayoritaria, existe como uso minoritario en varios núcleos de población.

También se da un seseo en varias pequeñas zonas de la Comunidad Valenciana colindantes con las de lengua catalana (valenciana), donde es hablado , en las que la lengua castellana ha sustituido a la valenciana [cita requerida] pero queda, de esta última, tanto vocabulario específico como la característica del seseo, resultado de la inexistencia del fonema [θ] en la lengua catalana. Así mismo, en el Campo de Cartagena se puede oír el seseo entre las personas de edad más avanzada. No debe confundirse este seseo minoritario, propio de castellanohablantes nativos, con el de los valencianohablantes nativos cuando hablan en castellano.[1]

En el mapa pueden verse a grandes rasgos las zonas de Andalucía ceceantes, seseantes y distinguidoras. Nótese que la ciudad de Cádiz, es un área seseante aunque no esté indicada.

Existe seseo entre las generaciones gallegohablantes de edad más avanzada al hablar castellano por influencia directa de pronunciaciones dialectales del gallego. Se da este fenómeno, a grandes rasgos, en la parte más occidental del territorio gallego [1] El mapa corresponde al seseo en lengua gallega, pero se puede aplicar también al seseo en castellano, aunque en claro retroceso.

Actualmente, la presión de la fonética castellana, adoptada mayoritariamente por los medios de comunicación (incluso en Andalucía), está causando una regresión histórica del seseo en España. No obstante, en el caso de los seseos andaluz y canario, tal fenómeno goza de una extensión absolutamente dominante en sus respectivas zonas (en el caso del andaluz, en la Andalucía seseante), por lo que la posible regresión, en el caso de producirse, no afectaría de forma sustancial el carácter seseante de lo hablado en dichas zonas. En el resto del mundo hispano la característica es la contraria, ya que no se pronuncia el fonema [θ] en ninguna variable estándar (existen no obstante numerosos casos de población ceceante en distintos puntos de Hispanoamérica).

Origen del seseo

Las razones del seseo se remontan a los diferentes cursos evolutivos que siguió el complejo sistema de sibilantes que poseía el español anterior al siglo XVII, y que se modificó de distintas maneras en las regiones norte y sur de España. En ese entonces, se empleaba una distinción entre cuatro fonemas que podemos resumir del modo siguiente:


Grafía Fonética (en IPA) Ejemplo
ce, ci, çe, çi africada dento-alveolar sorda /ts/ pizza (en pronunciación italiana), lots (en inglés)
z africada dento-alveolar sonora /dz/ dotze (en catalán)
ss fricativa apico-alveolar sorda /s/ sandía, así
s intervocálica fricativa apico-alveolar sonora /z/ zipper (en inglés)

Hacia fines del siglo XVI, este sistema experimentó un primer cambio, por el cual las africadas [ts] y [dz] perdieron la plosión inicial para transformarse en las correspondientes fricativas [ş] y [ý]; sin embargo, el sistema resultante era inestable, al ser la similitud fonética entre los dos pares de sonidos demasiado marcada como para hacer depender de su diferenciación los criterios fonológicos.

Proceso en Castilla
Fricativización    
  Ensordecimiento  
    Dentalización
/ts/ /ş/ /ş/ /θ/
/dz/ /ý/
/s/ /s/ /s/ /s/
/z/ /z/

La evolución que siguió a partir de este punto difirió en las regiones norte y sur de la península. En la zona de Castilla las consonantes sonoras desaparecieron, dejando sólo las sordas [ş] y [s]; la distinción entre éstas se subrayó a través del adelantamiento de la posición del ápice de la lengua en [ş], que de dento-alveolar se transformó en la dental [θ], perdiendo en el proceso la sibilancia. Como efecto colateral, el proceso que distanció ambas sibilantes afectó también a la consonante fricativa palatal sorda [∫], que correspondía a las grafías de "x", "g" y "j"; para distinguirla claramente de /s/, a la que se aproxima mucho en su forma de articulación, la consonante se desplazó hacia atrás, dando la consonante fricativa velar sorda [x]. La diferencia en la pronunciación de la "j", que en muchos dialectos americanos sigue realizándose como [ç], es otro de los rasgos que los separa del dialecto castellano.

En la zona de Andalucía, la distinción entre consonantes dento-alveolares y apico-alveolares desapareció antes de que el proceso de ensordecimiento eliminara las consonantes sonoras; de hecho, según Ralph Penny,[2]​ el andaluz nunca llegaría a oponerlas. Como resultado, la diferencia entre /s/ y /θ/ no tuvo ocasión de desarrollarse, y efectivamente el dialecto andaluz asimiló todas las grafías a un único fonema. La realización concreta de este último varió de acuerdo a las zonas; la pronunciación que llegó a América era la [s], común a otros idiomas, pero en algunas regiones se conservó la dento-alveolar [ş]. Esta última se distingue de la /θ/ castellana por ser sibilante, y de la /s/ seseante por la posición más alta de la punta de la lengua, y es casi exclusiva del dialecto andaluz entre las lenguas de Europa.

Proceso en Andalucía
Fricativización    
  Dentalización  
    Ensordecimiento
/ts/ /ş/ /s/ /s/ o /ş/
/dz/ /ý/ /z/
/s/ /s/ /s/
/z/ /z/ /z/

El predominio de los nativos de las tierras del sur peninsular entre los colonizadores del Nuevo Mundo llevaron a la mayor difusión de la pronunciación andaluza en éste, salvo en los centros administrativos de Lima y de México, en los que la presencia más o menos constante de personajes de importancia nacidos en la península conservó la distinción entre /s/ y /θ/ entre las clases superiores durante un tiempo. El sonido [θ] sobrevive en el dialecto de Cuzco (Perú) aunque sólo sea en los números "doce" y "trece".

Referencias

  1. Mapa de isoglosas de la distinción s/z en el castellano de la Península Ibérica
  2. Penny, R. (2002). A History of the Spanish Language. Cambridge: Cambridge University Press. ISBN 0-521-80587-2. 

Bibliografía

  • Zamora Vicente, Alonso, Dialectología española, segunda edición muy aumentada, Ed. Gredos, 1967 (6ª reimpresión, 1996).
  • Alvar, Manuel (director), Manual de dialectología hispánica. El español de España, Ed. Ariel, 1999.
  • Alvar, Manuel (ed.) (1996). Manual de dialectología hispánica: el español de América. Barcelona: Ariel. ISBN 84-344-8218-5. 

Véase también

Enlaces externos