Diferencia entre revisiones de «Incidente de la isla de Perejil»

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== Preliminares ==
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Los dirigentes españoles llevaban estudiando emprender una operación militar tras varios incidentes en la isla Perejil, con la ocupación del islote por parte de gendarmes [[Marruecos|marroquíes]] (quienes no dudaron en expulsar a punta de fusil a los guardias civiles españoles que, habiéndose percatado de los hechos, se habían aproximado para advertir a los marroquíes de que debían desalojar el islote<ref>"Operación Romeo-Sierra: recuperar Perejil", ''FAM-Fuerzas militares del mundo'' nº1, septiembre de 2002</ref>), la colocación de dos banderas de esa nacionalidad, el cambio de aquellos por [[Infantería de marina|infantes de marina]], la intención de levantar estructuras estables y, el día 16 de julio, la convocación de la prensa internacional a una visita al islote.
Los dirigentes españoles llevaban estudiando emprender una operación militar tras varios incidentes en la isla Perejil, con la ocupación del islote por parte de gendarmes [[Marruecos|marroquíes]], la colocación de dos banderas de esa nacionalidad, el cambio de aquellos por [[Infantería de marina|infantes de marina]], la intención de levantar estructuras estables y, el día 16 de julio, la convocación de la prensa internacional a una visita al islote.


Ya desde el mismo día 11, horas después de conocerse la noticia de la ocupación, llevaban en alerta elementos del GOE (Grupo de Operaciones Especiales) III. Incluso el día 14 se ordenó preparar el asalto, pero la operación fue cancelada con todo el equipo listo en los helicópteros.
Ya desde el mismo día 11, horas después de conocerse la noticia de la ocupación, llevaban en alerta elementos del GOE (Grupo de Operaciones Especiales) III. Incluso el día 14 se ordenó preparar el asalto, pero la operación fue cancelada con todo el equipo listo en los helicópteros.

Revisión del 21:39 28 may 2009

El desalojo de la isla Perejil fue realizado mediante la Operación Romeo-Sierra y se llevó a cabo para devolver a la isla de Perejil a su estatus anterior.

El desalojo constituyó el primer incidente armado que involucró a España tras el retorno de la democracia,[1]​ la primera vez que entraron en combate fuerzas españolas después de las operaciones en la antigua Yugoslavia[2]​ y la primera intervención desde la unificación de los tres ejércitos librada en el siglo XXI.

Preliminares

Los dirigentes españoles llevaban estudiando emprender una operación militar tras varios incidentes en la isla Perejil, con la ocupación del islote por parte de gendarmes marroquíes, la colocación de dos banderas de esa nacionalidad, el cambio de aquellos por infantes de marina, la intención de levantar estructuras estables y, el día 16 de julio, la convocación de la prensa internacional a una visita al islote.

Ya desde el mismo día 11, horas después de conocerse la noticia de la ocupación, llevaban en alerta elementos del GOE (Grupo de Operaciones Especiales) III. Incluso el día 14 se ordenó preparar el asalto, pero la operación fue cancelada con todo el equipo listo en los helicópteros.

Esta ocupación militar por parte de Marruecos es difícil de entender dado que el valor estratégico de la isla ya ha desaparecido con los nuevos medios militares[1]​ y su valor económico siempre ha sido nulo. Por ello este hecho debe enmarcarse dentro de la reclamación de los territorios españoles en África por parte de Marruecos, que junto con el precedente de la ocupación marroquí del Sáhara Occidental, decidieron al Gobierno de España a emprender una medida de fuerza limitada que expulsara al ejército marroquí de la isla.

Objetivos de la operación

Fuese cual fuese la operación planificada debía cumplir cuatro objetivos:

  1. Devolver el islote al estatus anterior a la llegada de los gendarmes de una forma firme y decidida.
  2. Permitir la libertad de maniobra para el Gobierno español.
  3. Evitar una escalada de tensiones que desembocara en una crisis de alto nivel (la que requiere el uso de las armas)
  4. Ofrecer una salida honrosa al gobierno marroquí.

Tres fueron las alternativas propuestas:

  1. Continuar con la presión diplomática.
  2. Emprender una acción militar limitada seguida de una vuelta al estado actual.
  3. Responder con dureza pese a llegar a una situación de grado medio o alto.

La segunda fue la elegida, pese a la controversia existente y que continuó después.

El dispositivo fue levantado por miembros de los tres ejércitos:

  1. El Ejército de Tierra debía llevar a los miembros de operaciones especiales y los del Tercio de la Armada hasta el islote y tomarlo sin pérdida de vidas (tenían prohibido abrir fuego si no eran atacados directamente, por muchos disparos que oyeran).
  2. La Armada debía bloquear a todos los buques marroquíes, coordinar la operación desde el buque de mando L-52 Castilla y participar en la toma del islote.
  3. El Ejército del Aire cubriría a todos los hombres, navíos y aeronaves participantes de una posible reacción marroquí.

El diario español ABC explicaría todos estos movimientos y gestos con la frase «y todo esto por una isla que no vale ni el combustible de los helicópteros».[3]

Sin embargo, la opinión entre políticos, diplomáticos y militares no era unánime sobre la conveniencia ni el éxito de la Operación (ver más adelante).

La noche del 16 de julio, narró el entonces Ministro Federico Trillo en rueda de prensa al día siguiente, estaba reunido parte del Consejo de Ministros en el Palacio de la Moncloa. Tras exponer la situación al presidente Aznar, continuó explicando el Ministro, éste salió al balcón para reflexionar y a la vuelta dijo:[4]

Ya no se puede hacer nada más. Que Dios les ayude, que tengan mucha suerte y que vuelvan con el triunfo.

Comienza la operación

Los F-18 y los F-1 fueron desplegados para controlar el cielo de Perejil.

Se desplegaron cazabombarderos F-18 y los Mirage F-1 armados con misiles aire-aire para cubrir el espacio aéreo. Los helicópteros del escuadrón 803 llevaban equipadas ametralladoras en las puertas y dos de ellos despegan para cubrir la Operación.[5]

A las 23:43 despegan los tres helicópteros Cougar de su base en Alicante con los miembros del Equipo 31 del GOE III camino de Cádiz para recoger a los cinco miembros del Tercio de la Armada y demás infantes de marina que realizarían el control aéreo.

Poco después de las 02:00 se cierra el espacio aéreo español. Los aviones en vuelo aterrizan en los aeropuertos, los que están en tierra son retrasados y los que se aproximan aguardan autorización. De las bases de Torrejón de Ardoz, Morón, Zaragoza y Los Llanos despegan los cazas.

La flotilla la forman cuatro helicópteros Eurocopter Cougar que transportan a los miembros de operaciones especiales y tres UH-1H de menor tamaño para cubrirlos de cerca. Uno de ellos recorrería la isla emitiendo por los altavoces instalados un mensaje en árabe y en francés para los infantes de marina marroquíes, mientras los otros UH-1H artillados le cubren.

Desde el buque de asalto Castilla se dirige la operación, que permanece inmovil en el estrecho. Distintos buques de la Armada dan cobertura y protección. Entre ellos, la fragata "Navarra", de la clase Santa María.

Asalto aéreo

A las 06:17 (hora H), cuando el mando español consideraba que los centinelas estarían dormidos o cansados de hacer guardia, llegan los helicópteros a la isla y comienzan a desembarcar los hombres en la parte más oriental. El descenso por cuerda rápida es descartado y los soldados saltan a tierra desde las aeronaves, encañonan al primer grupo de infantes marroquíes y los reducen sin encontrar resistencia.

Parte de la escuadrilla continúa su vuelo hasta la parte más occidental y más elevada del islote, donde duerme el grueso de los soldados.

Mientras uno de los Cougar rodeaba la isla emitiendo varias veces su mensaje grabado en los dos idiomas y otro cubre con tiradores a bordo, el resto de las aeronaves alcanzan la zona más occidental para dejar en tierra al resto de los soldados. Nuevamente las máquinas se detienen para permitir el salto con cierta seguridad; pero el viento, de 37 nudos y de costado, zarandea uno de los helicópteros y un aspa choca contra el suelo; no obstante, el piloto logra enderezar la aeronave y evita lo que podía haber convertido la operación en un desastre. Sin embargo el fuerte viento tiene sus consecuencias: uno de los asaltantes se golpea la rodilla al saltar, aunque seguirá con la operación. Son las 6.20 cuando los comandos ponen pie en tierra en el islote.

Los infantes de marina son detenidos sin oponer resistencia y los españoles descienden a la parte más baja por si aún quedaran fuerzas marroquíes no localizadas, mientras el resto cuida de los prisioneros y se interroga al brigada marroquí al mando.

En menos de 10 minutos la posición está tomada y consolidada, pese a que las tareas para cerciorarse de que no había más efectivos se prolongaron por más tiempo.

Tras la recuperación del islote

A la mañana siguiente llegan al islote nuevos helicópteros que traen entre otras cosas una bandera española. Un soldado sube a la parte más alta de la isla y la clava en tierra (la escena fue fotografiada desde Marruecos por un fotógrafo británico que llevaba varios días esperando con su equipo de varios teleobjetivos).

Los soldados marroquíes son llevados a Ceuta y entregados a la Guardia Civil, quienes siguieron las órdenes de tratarlos como inmigrantes ilegales. Mientras, los miembros de operaciones especiales son relevados por soldados de la Legión Española. Estos permanecen en la posición algunos días, impidiendo que nadie desembarcase, y levantan un puesto de telecomunicaciones con piedras obtenidas del propio enclave.

Llegado a un acuerdo entre los gobiernos español y marroquí, la isla es abandonada y Marruecos lo anuncia como una victoria.

Incógnitas

  • ¿Qué significa el nombre?

RS o su deletreo en el Alfabeto fonético de la OTAN como Romeo-Sierra no fue explicado a qué palabras sustituía. Se ha postulado «Restaurar Soberanía»; pero el Gobierno no lo aclaró. Otras hipótesis señalan que podrían ser las iniciales de «Respuesta Segura».

  • ¿Qué mensaje emitía uno de los helicópteros?

El texto, las traducciones y la grabación de dicho mensaje fue materia clasificada desde el comienzo.

  • ¿Era necesaria una operación conjunta empleando tantos efectivos para desalojar a 12 soldados?

El Gobierno afirmó que la seguridad de sus hombres era lo fundamental; además la Operación constituía una ocasión para probar la coordinación entre los ejércitos, pero desde fuentes militares se mantiene que tantos riesgos y esfuerzos de coordinación resultaban innecesarios o incluso indeseables.[6]

  • ¿Por qué decidió Marruecos emprender una acción de ese tipo?

Nuevamente no existen certezas sobre las razones para lanzar a una acción tan arriesgada, que finalmente le fue perjudicial desde la perspectiva internacional. Se postula la necesidad del nuevo rey Mohamed VI en acallar las críticas sobre su desentendimiento de la política nacional (retrasó su incorporación a las tareas de gobierno para continuar esquiando en los Alpes, por ejemplo), para lo que acudió a sus viejas reivindicaciones nacionalistas que tantos éxitos les depararon a sus antecesores. También se mantiene la posibilidad de que no fuera el Rey quien ordenara iniciar la acción, sino partes de su gobierno deseosas de desgastarlo.

Conclusiones

La Operación RS o Romeo Sierra representó, desde sus comienzos hasta su ejecución, un acto principalmente simbólico.[1]​ El gobierno español quería demostrar su disposición a emplear todos los medios a su alcance, incluida la fuerza armada, para detener las acciones marroquíes en materia territorial. Además de reafirmar su decisión, no iba a ceder, como había sucedido en los años 60 con el enclave de Ifni y en los setenta con el Sáhara Español. En lo territorial, no habría ni cesión ni negociación.

El ministro Trillo, explicó toda la operación renunciando a siglas militares y utilizando un lenguaje más prosaico que comenzaba con «al alba y con 37 nudos de viento». Estas palabras fueron empleadas por distintos líderes políticos, como Rodríguez Zapatero, que se refirió a la Operación como «los sucesos ocurridos al alba».

Tras la Operación, el respaldo político no fue unánime. El PSOE saludó la acción del Gobierno, IU estuvo en contra y los nacionalistas vascos y catalanes manifestaron su indiferencia por el tema.

Por su parte, fuentes militares afirmaron que, si bien la Operación demostró que los tres ejércitos podían trabajar conjuntamente, no había ninguna necesidad de ello, pues los miembros del grupo de Operaciones Especiales del Tercio de la Armada se encontraban en el lugar y contaban con los medios y la capacitación para desalojar a los infantes de marina marroquíes, como lo demostró días después la detención del buque So Sam.

Véase también

Bibliografía

  1. a b c Felipe Sahagún, Las razones de la Discordia, nº 50 de La aventura de la Historia, Arlanza Ediciones, Madrid, diciembre de 2002
  2. Varios, Bautizado en combate, nº 287 de Avión Revue, Motor Press Ibérica, Madrid, 2006
  3. Editorial, ABC, Grupo Vocento, Madrid, 19 de julio de 2002
  4. El País Digital, Grupo Prisa, Madrid, 18 de julio de 2002
  5. Julio Maíz, 803 Escuadrón del Ejército del Aire, nº 287 de Avión Revue, Motor Press Ibérica, Madrid, mayo de 2006
  6. Gil José, Estrategia y operaciones conjuntas, Boletín del EIM, enero de 2003, http://www.revistanaval.com/blimdanet/historias/actualidad/perejil.htm, última visita 18 de enero de 2007

Enlaces externos