Castillo de Buda

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Budapest, con las riberas del Danubio, el barrio del castillo de Buda y la avenida Andrássy

Patrimonio de la Humanidad de la Unesco

Vista del castillo desde la orilla Oeste del Danubio.
Localización
País Hungría Hungría
Coordenadas 47°29′46″N 19°02′23″E / 47.496111111111, 19.039722222222
Datos generales
Tipo Cultural
Criterios ii, iv
Identificación 400bis
Región Europa
Inscripción 1987 (XI sesión)
Extensión 2000
Sitio web oficial

El castillo de Buda o palacio de Buda (en húngaro:Budai Vár) es el castillo histórico de los reyes húngaros en Budapest, Hungría. En el pasado también fue llamado Palacio Real (Király-Palota) y Castillo Real (Királyi Vár).

El castillo se construyó durante el siglo XIV en el extremo sur de la colina donde se halla actualmente, cerca del Distrito del castillo (Várnegyed), que es famoso por las casas y edificios públicos medievales, barrocos y del siglo XIX. Es importante precisar, que sus rasgos arquitectónicos actuales difieren totalmente de los originales a causa de las incontables restauraciones y remodelaciones llevadas a cabo como consecuencia de numerosas batallas a lo largo de los siglos. El castillo de Buda forma parte del Patrimonio de la Humanidad de Budapest, declarado el 1987.[1]

Historia

Evolución de la relevancia de Buda

Antiguamente, en el lugar donde se halla la ciudad actual de Budapest existía el asentamiento romano conocido como Aquincum. A su alrededor comenzaron a surgir numerosos asentamientos, los cuales después fueron barridos ante la llegada de los hunos, los ávaros y posteriormente en el 985 de los húngaros. No se tiene certeza de los lugares precisos, pero tras la llegada de los húngaros a la Cuenca de los Cárpatos, se estableció el asentamiento de Buda junto a la colina de Kelenföld, al lado del Danubio.

En el momento de la cristianización de los húngaros casi un siglo después, en el año 1000, la ciudad real donde se hallaba la corte del monarca era Esztergom, el lugar de nacimiento del primer rey húngaro San Esteban I de Hungría. Sin embargo pronto la corte fue mudada tras su muerte a la ciudad de Székesfehérvár, la cual había sido fundada en el 972 por el Gran Príncipe Géza de Hungría, padre de San Esteban I.

A mediados del Siglo XIII, luego de la invasión tártara de 1241, el rey Bela IV de Hungría comenzó un proceso de reconstrucción de todas las fortalezas, reforzándolas con murallas de piedra y ordenando el levantamiento de cerca de un centenar de nuevos castillos. De esta forma en 1244 ordenó la construcción de una fortaleza en Óbuda, en una posición cercana a la actual, la que pronto se comenzó a poblar rápidamente de mucha gente.

A partir de esto, los siguientes reyes húngaros se pasarían mucho tiempo con su corte en esta nueva fortaleza, sin perder el contacto directo con Székesfehérvár. Inclusive, en el caso de Andrés III de Hungría, éste emitió documentos reales y se residenció constantemente en dicha fortaleza de Óbuda, donde falleció en 1301. De esta forma, la importancia estratégica, comercial y política de Buda continuó creciendo, hasta que durante el periodo de interregno de casi 7 años tras la muerte de Andrés III, todos los pretendientes del trono se esforzaban por residenciarse y poseer esta ciudad, junto con la de Esztergom y Székesfehérvár.

Luego de que se impusiese el pretendiente Carlos Roberto de Anjou-Sicilia, su coronación se llevó a cabo el 27 de agosto de 1310 en Széfeshérvár, durante estos acontecimientos, Buda pasó a ser la residencia oficial del monarca húngaro y su corte.

Buda, sede de la corte real

Imagen del castillo de Buda en la crónica de Núremberg a finales del siglo XV.

En las siguientes décadas, Carlos Roberto, y posteriormente tras su muerte el rey Luis I de Hungría realizaron reformas constantes al castillo de Buda. En esta ciudad se llevaron a cabo asambleas reales, justas y torneos medievales, encuentros diplomáticos, y desde ella se regía el reino húngaro y todos los estados vasallos de éste de los balcanes y la Cuenca de los Cárpatos. El nivel de lujo del castillo de Buda aumentó progresivamente y en el Siglo XIV y XV durante el reinado de Segismundo de Luxemburgo se llevaron a cabo las remodelaciones más significativas, trayendo materiales de construcción de Austria y Bohemia.

El Renacimiento y la ocupación turca otomana

Grabado del castillo de Buda en el siglo XVI.

Fue durante la época del Renacimiento en el Siglo XV, que Buda alcanzó su esplendor, cuando el rey húngaro Matías Corvino mejoró la obra de Segismundo de Luxemburgo y decoró las fachadas externas y los muros internos con detalles renacentistas. La Iglesia de Matías fue reformada casi en su totalidad, conservando gran parte de sus rasgos góticos, pero aun así destacando entre las obras arquitectónicas contemporáneas. El castillo se llenó de incontables músicos, escritores, pintores, astrónomos y toda clase de personalidades propias del momento histórico del Renacimiento, y de esta manera, pasó a ser uno de los puntos de encuentro más importantes de toda Europa Central y Oriental.

Tras la muerte de Matías continuó manteniendo su misma significancia, hasta que la historia húngara se vio modificada en 1526, cuando los turcos otomanos derrotaron sus ejércitos en la batalla de Mohács, y el rey Luis II de Hungría fue asesinado en combate. La corona húngara fue disputada por el voivoda de Transilvania, el conde húngaro Juan I Szapolyai y por el príncipe germánico Fernando I de Habsburgo, haciéndose coronar los dos como reyes de Hungría.

Posteriormente, luego de realizar un pacto secreto, donde Szapolyai heredaba tras su muerte el reino a Fernando, fueron descubiertos por el sultán turco Solimán el Magnífico. Molesto, ordenó en 1541 que los ejércitos otomanos barriesen con toda resistencia húngara y tomasen el castillo de Buda. La fortaleza se mantuvo entonces durante casi 160 años en manos de los turcos, quienes ocuparon la región central de Hungría, y mantenían al Principado de Transilvania como un Estado vasallo de ellos.

Luego de que el sultán intentase fallidamente tomar Viena en 1683, los ejércitos germánicos enviados por Leopoldo I de Habsburgo, rey húngaro y emperador germánico, se movilizaron sobre suelo húngaro en 1686 y lograron expulsar a los turcos del castillo de Buda. El reino húngaro se reunificó, y Buda continuó siendo la ciudad de mayor relevancia, sin embargo puesto que los gobernantes Habsburgo que tenían la corona húngara vivían en Viena, la corte del monarca continuó manteniéndose en dicha ciudad.

La época moderna

Tras la recuperación de la fortaleza y la ciudad de manos de los turcos, ésta fue reconstruida y restaurada en profundidad, puesto que numerosas murallas, edficios y torres habían sido reducidas a escombros por las balas de cañón en la Liberación de Buda. María Teresa I de Austria, Francisco José I y otros monarcas de la casa de los Habsburgo realizaron profundos cambios a través de los siglos, invirtiendo grandes cantidades de recursos y dinero en crear una residencia real en el castillo de Buda. En el Siglo XIX, las remodelaciones y restauraciones fueron planeadas y conducidas, primero, por Miklós Ybl y posteriormente por Alajos Hauszmann.

El asedio de 1944-45

El castillo de Buda fue el último reducto de las fuerzas del Eje, alemanas que habían ocupado el reino húngaro durante el asedio de Budapest en 1944-45. Las luchas con armas pesadas y el fuego de la artillería convirtieron el palacio una vez más en un montón de ruinas. Como último recurso, los defensores finalmente intentaron romper el bloqueo soviético, pero fracasaron completamente, dejando un 90% de sus soldados totalmente en las calles cercanas de Buda. Presuntamente los rusos conocían sus planes y se dirigieron inmediatamente con armas pesadas a las posibles vías de escape. Ésta está considerada como una de las catástrofes militares más grandes de la historia húngara por muchos historiadores, comparable a la avanzada rusa al Don en 1943.

Acceso turístico

Una de las vías de acceso más sencillas es dirigirse primero hasta la plaza Széll Kálmán (con el metró 2 /rojo o con el tranvía 4/6), y desde ahí subir al autobús 16 que parte desde la calle Várfok. Este autobús es conocido como el "várbusz", o en húngaro "el autobús del castillo" y le llevará directamente a la cima del complejo del palacio.

Referencias

Bibliografía

  • Prohászka László: Budavári szoborkalauz, bp., 1990.

Enlaces externos