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Diferencia entre revisiones de «Depredador 2»

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Revisión del 03:17 4 sep 2016

Depredador 2 (título original, Predator 2) es una película estadounidense de acción y ciencia ficción de 1990. Es la continuación de la película de 1987 Depredador, y los protagonistas son Danny Glover y Gary Busey. Fue filmada enteramente en 1990.

Argumento

En 1997, Los Ángeles está sufriendo una ola de calor y una guerra territorial entre los fuertemente armados colombianos y los cárteles de la droga de Jamaica. El depredador mira los tiroteos entre los policías y los colombianos, observando cómo el teniente Michael Harrigan se encarga, en medio de la balacera y de un modo muy eficaz, de rescatar a dos oficiales heridos y de presionar a los pandilleros hasta llevarlos de vuelta hacia su escondite. Mientras a los hombres del teniente se les ordena que esperen a que un grupo de federales llegue a la escena, el depredador se lanza a través de un tragaluz y ataca a los narcos dentro de su mismo escondite. Harrigan y sus detectives de la policía, Leona Cantrell y Danny Archuleta, entran en contra de las órdenes y encuentran que los latinos han sido asesinados de una manera horrenda. Harrigan persigue el líder sobreviviente de la banda hasta el techo del edificio y, tras dispararle y hacerlo caer al vacío, vislumbra la silueta del depredador camuflado, pero lo confunde con un efecto visual del calor. Una vez concluido el combate, Harrigan es reprendido por sus superiores, por su desobediencia. Luego de esto se presentan ante él el agente especial Peter Keyes, líder del grupo de federales que supuestamente está investigando el caso de la guerra de los cárteles, y el detective Jerry Lambert, el nuevo miembro del equipo de Harrigan.

Más tarde, por la noche, el depredador mata a varios miembros de la banda de Jamaica, en los momentos en que éstos están asesinando, por medio de un ritual sanguinario, al capo de la droga colombiano en su propio departamento. A pesar de recibir la orden de esperar a Keyes, el teniente Harrigan y su equipo entran en el ático en donde se encuentran los cadáveres de los jamaicanos suspendidos de las vigas, desollados y mutilados, y manifiestan su asombro ante la similitud respecto de la masacre anterior del grupo de colombianos. Keyes detiene al equipo del teniente, pero Archuleta, más tarde, regresa para seguir investigando. Éste encuentra una de las armas del depredador, una punta de lanza clavada en un conducto de aire acondicionado, pero luego de recuperarla, es asesinado por el alienígena. Harrigan promete encontrar a quien mató a su amigo y compañero, Danny, creyendo aún que está lidiando con el caso de un simple asesino. La científica forense, Dra. Irene Edwards, considera que la punta de lanza recuperada por Archuleta no corresponde a ningún elemento conocido en la tabla periódica. Buscando respuestas alternativas, Harrigan logra concertar una reunión privada con el Señor de las Drogas Jamaicano, King Willie, practicante del vudú. El teniente afirma que es importante para ambos detener al asesino, puesto que éste está acabando rápidamente con los hombres de los dos grupos. Ante esto, Willie le dice que el asesino no es alguien de este mundo y que corresponde a un algo sobrenatural, y que deberá prepararse para la batalla contra aquello. Después, el policía es escoltado lejos, por miembros de la pandilla, momento durante el cual el depredador mata al líder jamaicano, llevándose su cabeza como trofeo.

Harrigan y su equipo oyen acerca de la muerte de Willie, mientras la Dra. Edwards afirma haber encontrado en un computador un archivo de un análisis de sangre obtenida del lugar en donde ocurrió la última masacre, realizado por los hombres de Keyes. La sangre no es humana y viene de animales muertos en un matadero cercano, lugar en donde el detective Lambert perdió la pista de Keyes al estar investigándolo por órdenes de Harrigan. El teniente le dice a su equipo que se reúnan en el lugar de los hechos para investigar, por lo que Cantrell y Lambert toman el metro para encontrarse con su superior.

Durante el viaje, en uno de sus vagones, Cantrell y Lambert están interviniendo en un atraco que se torna cada vez más violento. Entonces se corta la electricidad y el depredador ataca. Cantrell pone con mucha dificultad a los pasajeros a salvo, una vez el depredador comienza a masacrar a todos los que llevan consigo armas de fuego. Lambert queda solo y se enfrenta heroicamente al extraterrestre en los vagones traseros, a oscuras, siendo asesinado por éste. Luego el monstruo encuentra y está a punto de matar a Cantrell, pero la libera en cuanto su visión térmica le revela que está embarazada.

Minutos más tarde, al llegar a la escena, Harrigan persigue al alienígena, pero es detenido una vez más por Keyes, quien al fin le revela que el asesino es en realidad un extraterrestre que caza con visión de infrarrojos y que utiliza un avanzado y efectivo camuflaje permanente; además, le informa sobre el interés del depredador por cazar seres humanos a modo de deporte, en el contexto de conflictos bélicos o de violencia, así como de la reciente referencia sobre los acontecimientos anteriores en América Central, en donde otro de estos alienígenas, al ser derrotado, se auto-destruyó utilizando una potentísima bomba que arrasó una extensa área de selva a su alrededor.

Keyes y su equipo han tendido una trampa al alienígena con el objetivo de capturarlo vivo para estudiarlo. La trampa es armada dentro de un frigorífico de carnes cercano al matadero, lugar en donde el depredador suele aparecer para alimentarse. El grupo planea explotar su visión térmica y su pobre termorregulación como puntos débiles, usando trajes de aislamiento térmico que los harán invisibles a la vista del depredador, y armas de nitrógeno con las cuales planean debilitarlo. Sin embargo, el depredador es capaz de advertir la trampa, y tras recalibrar el visor de su máscara, logra ver el haz de luz de las linternas que usan Keyes y sus hombres, pudiendo así tenderles una emboscada y asesinar al equipo completo. Harrigan logra esquivar a los hombres de Keyes que lo tienen temporalmente cautivo observando la operación a través de cámaras ocultas dentro del frigorífico. El teniente se arma fuertemente para intentar impedir la masacre, pero no llega a tiempo, por lo cual se ve forzado a enfrentase cara a cara con el depredador, a quien deja temporalmente fuera de combate luego de vaciarle a quemarropa una escopeta y varias armas de alto poder, situación que le permite quitarle la máscara y observar su horrible rostro. Aún con vida, el depredador se recompone y ataca al policía, quien queda a su merced hasta que el último sobreviviente del equipo, el propio Keyes, interviene para protegerlo; pero el federal es asesinado por la criatura con un afiladísimo disco de lanzamiento mientras hacía un último intento por congelarlo. Luego de partirlo en dos con el disco, Harrigan escapa por la azotea del edificio, preseguido por el depredador.

La criatura lo ataca con una lanza, pero Harrigan la esquiva. Éste se aprovecha del estado de debilidad del depredador y lo embiste empujándolo hacia el vacío ayudándose con la misma lanza que logra recuperar y con la cual fuera atacado. Al empujarlo, ambos acaban colgando del edificio. El alienígena pende con su enorme peso de uno de los brazos del teniente y, al verse acorralado, intenta activar el dispositivo de autodestrucción equipado en su antebrazo. Pero Harrigan se apodera del disco de lanzamiento y rebana la bomba cortando también el antebrazo de su enemigo. El depredador cae al vacío para terminar atravesando una de las ventanas del edificio, llegando hasta el baño de uno de los departamentos. Ahí utiliza un kit médico para cauterizar su brazo amputado y los disparos recibidos; luego huye a través del edificio. Harrigan lo sigue por una entrada secreta que el depredador había hecho bajo el ascensor. Ahí el teniente encuentra una nave espacial oculta al interior de una gran cámara subterránea. Dentro de la nave, los dos se enfrentan en el duelo final: una batalla directa y sin armas de fuego. Harrigan, finalmente, y luego de un esfuerzo titánico, mata al depredador, apuñalando su estómago con el disco de lanzamiento.

Luego de que el extraterrestre cayera muerto, se hacen visibles otros depredadores que observaban la pelea camuflados. Éstos recogen el cadáver de su compañero, pero en contra de lo que el detective pudiera pensar, ninguno intenta agredirlo. Una de las critaturas, aparentemente de mayor rango, le entrega a Harrigan, a modo de reconocimiento por sus logros en combate, una antigua pistola de procedencia humana con una etiqueta en la que se puede leer "Raphael Adolini, 1715". Justo antes del despegue de la nave, Harrigan logra escapar a punto de morir quemado por los propulsores de la misma. El teniente alcanza la superficie, al mismo tiempo en que el resto del equipo de Keyes llega a lugar de los acontecimientos, enfurecidos al no haber sido capaces de capturar al alienígena. Pero Harrigan ahora sabe que las criaturas han estado en la Tierra desde hace muchísimo tiempo, por lo que sospecha que pronto volverán.

Reparto

Recepción

Depredador 2 fue el número uno en taquilla en el fin de semana de acción de gracias de su estreno, recaudando doce millones de dólares. En total recaudó en Estados Unidos $30.669.413 y en el resto del mundo $57,120.318.[cita requerida]