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Tiahuanaco

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Hola, te doy la bienvenida. He borrado dos veces tu afirmación de que en Tiahuanaco se hablaba aimara (central) porque es un punto de vista minoritario y que carece de pruebas. La evidencia lingüística muestra que el aimara y el quechua proceden de lugares al noroeste del área en que hoy predomina el aimara, porque existen también el idioma cauqui y el idioma jacaru en el centro del Perú y hay residuos de otra y otras lenguas aimaras en puntos intermedios. No sé en qué se basa la obra que usaste para afirmar que el aimara actual pueda proceder del sur. Saludos. Lin linao ¿dime? 01:01 1 abr 2020 (UTC)[responder]

En primer lugar hola,respecto al idioma aymara me he informado y resulta que sí el aymara y el quechua se originaron en la region costa-sierra del Perú,así que in perdon por la modificación.

Respecto a tiwanaku o tiahuanaco, es verdad, existe un estudio antropologico que desvarataria la teoria pukinista acerca de tiwanaku es un libro llamado "tiwanaku y su idioma" en el que explica detalladamente que el idioma de tiwanaku no pudo ser otro más que el aymara.

Pero ¿cómo llegan a eso? No hay registros escritos y la evidencia lingüística apunta al puquina, sin ser algo que se pueda demostrar del todo. Sería interesante conocer lo que expone ese libro, por favor, cuéntalo (sin copiar textualmente) en Discusión:Idioma aimara Saludos. Lin linao ¿dime? 01:42 1 abr 2020 (UTC)[responder]

Aqui esta el resumen del libro,el libro esta escrito por Julio Avendaño,antropologo y lingüista paceño, que despues de 40 años de investigacion llego a esta conclusion. PRINCIPALES ARGUMENTOS

Entre sus principales argumentos señala que el cronista Reginaldo de Lizárraga cometió un error de redacción al describir al pueblo pukina como pastor y agricultor, dando así paso a la supuestamente equivocada teoría pukina, de la que afirma que fue el idioma de los tiwanacotas.

Sin embargo, otros cronistas e historiadores, como Guaman Poma de Ayala, Capoche, Molina, Brinton y la Grasserie, entre otros, señalan que los pukinas eran un pueblo muy pobre, al grado que estaba prohibido por los inkas asistir a sus ceremonias religiosas, debido a su miserable ropaje y condición.

ENALTECE A LOS INKAS

El autor también explica que Garcilaso de la Vega enalteció sólo a sus antepasados: los inkas, restando así importancia a los demás pueblos precolombinos, como los tiwanakotas.

Apoyado en la lingüística de Samuel Lafone Quevedo y otros, Avendaño busca demostrar que una pieza tan importante como el “cantar” de las mujeres y los niños de Hantunqolla era aymara, al igual que el discurso del soberano del lugar, evidencias de que la gente de Hatunqolla era kollla y su idioma el aymara.

El autor también pone de ejemplo a la gramática de Ludovico Bertonio, escrita en 1603, en la que señala a los kollas como una de las naciones aymaras, junto a los canchis, canas qollaguas, lupakas, pacasas, carangas y charcas, entre otros.

EL AYMARA COPIOSO

Igualmente, Martín de Murúa, en su tercer libro, expone que “Del Cusco para arriba: Collao, Chucuito, Chuquiapu y Charcas, la lengua aymara, era también copiosa en vocablos y pulideza”. Con la cual demuestra que al sur del Cusco no había otra lengua importante.

Además, el autor presenta otras citas sobre el ingreso de Tiwanaku a las selvas amazónicas del departamento de La Paz, donde esa civilización dejó una considerable cantidad de vocablos aymaras en el lenguaje con las diferencias amazónicas Carlos barquez (discusión) 01:57 1 abr 2020 (UTC)[responder]


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