Literatura de Honduras

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La literatura de Honduras cuenta con poetas, novelistas y narradores de notable calidad en diferentes períodos de la historia de ese país centroamericano.

A finales del siglo XIX y principios del siglo XX, descatan escritores como Froylán Turcios y el poeta modernista, Juan Ramón Molina. Lucila Gamero (1873-1964) es la novelista más relevante del romanticismo en Honduras. En tanto que, Prisión verde, de Ramón Amaya Amador, es la novela por excelencia con la que se inaugura la literatura del realismo social dentro del país. Los poetas Óscar Acosta, Roberto Sosa, Rigoberto Paredes, José Adán Castelar, Alexis Ramírez y José Luis Quesada, junto a narradores como Julio Escoto, Eduardo Bähr - libro de cuentos, El cuento de la guerra - y Ernesto Bondy Reyes - "La mujer fea y el restaurador" - entre otros y otras, son los escritores que abren nuevas perspectivas -literaria y generacionales- en el modo de hacer y enfrentar el hecho literario nacional a partir de los años 60, 70 y la actualidad.

Helen Umaña es una de las pocas escritoras hondureñas que ha enfocado su labor literaria hacia el ensayo y la crítica literaria, aparte de la historiadora Leticia de Oyuela, quien ha escrito ensayos sobre pintura y ha publicado diferentes libros sobre la historia de Honduras.

En la literatura hondureña del presente se puede hablar de poetas como Rebeca Becerra, Rubén Izaguirre y César Indiano; aunque éste último lo hace más bien, con buen suceso, como narrador y novelista. De la generación de jóvenes cabe destacar a los poetas Fabricio Estrada, Salvador Madrid, Heber Sorto, Armando Maldonado y Edgardo Florián, quienes figuran en importantes antologías hondureñas y extranjeras.

Roberto Quesada, con su novela, Los barcos, novelista y cuentista, es una de las tres figuras más descollantes de la literatura hondureña actual, junto a los dos escritores que, al igual que él, se abren paso en Estados Unidos y Europa respectivamente, como la poeta y editora Amanda Castro y el escritor y dramaturgo Javier Abril Espinoza, autor del libro Un ángel atrapado en el huracán y de Cuentos para niños y niñas. El narrador Nery Alexis Gaitán y el poeta José González, de diferentes generaciones, son otros de los escritores hondureños dignos de ser considerados, del mismo modo que no pasa inadvertido, por su fina ironía satírica, el escritor olanchitense Armando García.


En Septiembre del 2006, J. H. Bográn[1] publicó, a través de Chippewa Publishing LLC, un libro escrito enteramente en Inglés titulado Treasure Hunt. Esta novela tiene la distinción de ser la primera obra publicada en formato electrónico (e-book) por un autor hondureño.