Úlcera

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Úlcera

Eritema nodoso - Úlceras que aparecen en la piel de algunos pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal
Especialidad dermatología
cirugía

Una úlcera o llaga (del latín ulcus) es toda lesión abierta de la piel o membrana mucosa con pérdida de sustancia. Las úlceras pueden tener origen y localización muy variada. Las más frecuentes son las que afectan a la pared del estómago o duodeno, llamadas úlceras pépticas.

Tipos de úlcera

Úlcera péptica

Afecta a la mucosa estomacal (úlcera gástrica) o duodeno (úlcera duodenal). A veces se producen también úlceras de esófago en pacientes afectados por esófago de Barrett. La mayoría de las úlceras ocurren en la primera capa del revestimiento interior. Al orificio que atraviesa por completo el estómago o el duodeno se le llama perforación y es una urgencia. Es verdaderamente incomodo para mucha gente.

Úlceras cutáneas

La úlcera cutánea es una lesión de la piel que implica pérdida de la epidermis, parte de la dermis, e incluso de la hipodermis; puede tratarse de una herida únicamente superficial o de una afectación más profunda. Afectan a la piel y pueden llegar a ser muy profundas. Se distinguen varios tipos según su origen: por fricción, por presión o mixtas. Existen distintos orígenes y en muchos casos acostumbran a tener una evolución crónica.

Ulcera por presión en escapula

Úlceras por presión

Úlcera sacra

Las úlceras por presión (UPP) es una lesión de origen isquémico localizada en la piel y/o tejido subyacente, constituyen un tipo especial de lesiones causadas por la mala irrigación sanguínea y nutrición tisular, producida por la acción combinada de factores extrínsecos, entre los que destacan las fueras de presión, fricción y cizallamiento, siendo determinante la relación presión-tiempo.

Las UPP son un problema evitable en un 95% de los casos, constituyen la complicación más prevenible y tratable que puede presentar cualquier paciente con movilidad reducida. Se presentan principalmente en pacientes postrados, ya sea por obesidad, con apoyo ventilatorio, rigidez ósea, etc. 

Mécanismos.

La integridad de la piel se puede ver alterada por cuatro factores:

Presión: Fuerza que actúa perpendicular a la piel, provoca un aplastamiento tisular entre dos planos, uno perteneciente al paciente y otro extremo a él (sillón, cama, sondas, etc.)

Fricción: Fuerza tangencia que actúa paralelamente a la piel, produciendo roces por movimientos o arrastres.

Cizallamiento: Combina los efectos de presión y fricción. 

Humedad: Un control ineficaz de la humedad provoca la aparición de problemas cutáneos como la maceración. 

La incontinencia mixta, sudoración profusa, mal secado de la piel tras la higiene y el exudado de las heridas producen deterioro de la piel y edema, disminuyendo su resistencia haciéndola predispuesta a la erosión y ulceración.

Clasificación de las ulceras por presión.

Estadio I: Piel integra no blanqueable, piel eritematosa que al ejercer presión no blanquea. En pieles obscuras se presentan tonos rojos, azulados o morados.

Estadio II: Ulcera superficial que afecta la epidermis y dermis visible en forma de abrasión o flictena.

Estadio III: Pérdida del grosor de la piel que afecta el tejido subcutáneo y músculo.

Estadio IV: Pérdida espesor parcial de la piel afecta tejido subcutáneo, musculo, tendones  y llega hasta el hueso.

Medidas preventivas en pacientes de alto riesgo.

Mantener piel limpia, seca.

Valoración del estado del paciente por medio de la escala de Braden

Uso de ácidos grasos hiperoxigenados en piel.

Movilización cada 2 o 3 Horas.[1]

Sabanas de la cama sin arrugas. 

Elevación de la cama a no más de 30°.

Uso de almohadas que liberen la presión del cuerpo. 

Colchones de presión alterna. 

Uso de apositos hidrocelulares en prominencias óseas.[2]

Úlcera genital

Situadas en la región genital, en muchas ocasiones están causadas por enfermedades de transmisión sexual, como la sífilis, el chancroide y el linfogranuloma venéreo.[1]

Úlcera corneal

Este tipo de úlceras tiene lugar en la córnea. Puede ser consecuencia de infecciones, queratitis o traumatismos sobre el ojo y en ocasiones provocan secuelas consistentes en déficit de visión. Una de las úlceras corneales más frecuentes es la producida por el virus del herpes simple, llamada úlcera dendrítica por su forma ramificada.[2]

Úlcera bucal

Las úlceras bucales son lesiones abiertas ocasionadas por diferentes factores:

La sintomatología es dolor bucal, lesiones visibles en la boca y pérdida de apetito. El tratamiento más eficaz son los colutorios de Labardini, constituidos por melox, xilocaína 2%, difenhidramina, nistatina, agua destilada y agua oxigenada.

Referencias

  1. Campbell-Walsh: Urología, 9ª edición. Editorial médica panamericana S.A., ISBN 978-050-06-8267-1. Consultado el 17 de mayo de 2012.
  2. Diccionario Oxford-Complutense: Medicina. Editorial Complutense, 2001, ISBN 978-84-7491-601-0. Consultado el 17 de mayo de 2012