Petricor

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Esta es una versión antigua de esta página, editada a las 02:34 22 oct 2020 por Xarucoponce (discusión · contribs.). La dirección URL es un enlace permanente a esta versión, que puede ser diferente de la versión actual.
Lluvia sobre un camino de Cornualles, Inglaterra.

Petricor es un nombre dado al olor que se produce al caer la lluvia en los suelos secos, equivalente al popular «tierra mojada», «olor a lluvia» o también llamado «Tarabañá» en algunas regiones de Argentina. Se define como «el distintivo aroma que acompaña a la primera lluvia tras un largo período de sequía».

Etimología

Formada a partir del πέτρος pétros, ‘piedra’ e ἰχώρ icór, ‘icor, sangre de los dioses homéricos’. En la mitología griega se dice que el icor es la esencia que corre por las venas de los dioses en lugar de sangre.[1]

Invención del término

El término petricor, petrichor en inglés, fue creado en 1964 por dos geólogos australianos, Isabel Joy Bear y R. G. Thomas. Apareció por primera vez en la revista Nature (993/2).[2][3]​ En su artículo, los autores lo describieron como «el olor que deriva de un aceite exudado por ciertas plantas durante periodos de sequía». Este aceite queda absorbido en la superficie de las rocas, principalmente las sedimentarias, como las arcillosas, y al entrar en contacto con la lluvia es liberado en el aire junto con otro compuesto, la geosmina.[4]​ La geosmina es un producto metabólico de ciertas actinobacterias. La emisión de estos compuestos es lo que produce el distintivo aroma,[5]​ al que se puede sumar el del ozono si adicionalmente hay actividad eléctrica.[6]

En un trabajo posterior, Bear y Thomas (1965) demostraron que estos aceites aromáticos retardan la germinación de las semillas y el crecimiento de las plantas.[4]​ Esto podría indicar que las plantas exudan estos aceites con la finalidad de proteger a las semillas, evitando que germinen en épocas de sequía. Después de periodos de sequía en zonas desérticas, el olor es mucho más perceptible y penetrante cuando llega el periodo de lluvias. Por su compleja composición (más de cincuenta sustancias), el petricor no ha podido ser sintetizado.

Mecanismo

En 2015, científicos del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) utilizaron cámaras de alta velocidad para mostrar cómo este olor se introduce en el aire.[7]​ Para esto filmaron gotas de lluvia cayendo en dieciséis superficies diferentes, variando la intensidad y altura de la caída. Descubrieron que, al golpear una superficie porosa, se crean pequeñas burbujas dentro de la gota. Estas aumentan de tamaño y flotan hacia arriba. Al alcanzar la superficie, se rompen y liberan una «efervescencia de aerosoles» en el aire, los cuales transportan el aroma.[8]

Referencias

  1. Iliada V 339-340: ῥέε δ᾽ ἄμβροτον αἷμα θεοῖο / ἰχώρ, οἷός πέρ τε ῥέει μακάρεσσι θεοῖσιν. «Brotó la sangre divina, o por mejor decir, el icor; que tal es lo que tienen los bienaventurados dioses». Trad. Luis Segalá, en Wikisource.
  2. Bear, I.J.; R.G. Thomas (marzo de 1964). «Nature of argillaceous odour». Nature 201 (4923): 993-995. doi:10.1038/201993a0. 
  3. Garg, Anu (2007). The Dord, the Diglot, and an Avocado Or Two: The Hidden Lives and Strange Origins of Words. Penguin. p. 399. ISBN 9780452288614. 
  4. a b Bear, I.J.; R.G. Thomas (septiembre de 1965). «Petrichor and plant growth». Nature 207 (5005): 1415-1416. doi:10.1038/2071415a0. 
  5. «Petricor». Archivado desde el original el 20 de junio de 2015. Consultado el 20 de junio de 2015. 
  6. Daisy Yuhas (18 de julio de 2012). «Storm Scents: It's True, You Can Smell Oncoming Summer Rain: Researchers have teased out the aromas associated with a rainstorm and deciphered the olfactory messages they convey». Scientific American. Consultado el 20 de julio de 2012. 
  7. «Puede que no sepas qué es el petricor, pero seguro que te gusta (VÍDEO)». El Huffington Post. Consultado el 3 de diciembre de 2015. 
  8. Video en YouTube.

Enlaces externos