Joaquín Balaguer

Joaquín Balaguer
39.º Presidente de la República Dominicana
Vicepresidente	Francisco Augusto Lora† 1966-1970
Predecesor	Héctor Bienvenido Trujillo
Sucesor	Juan Bosch
1 de julio 1966-16 de agosto 1978
Vicepresidente	Carlos R. Goico Morales† 1970-1978
Predecesor	Héctor García Godoy
Sucesor	Silvestre Antonio Guzmán Fernández
16 de agosto 1986-16 de agosto 1996
Vicepresidente	Carlos Morales Troncoso 1986-1994 Jacinto Peynado† 1994-1996
Predecesor	Jacobo Majluta Azar
Sucesor	Leonel Antonio Fernández Reyna
Información personal
Nombre de nacimiento	Joaquin Antonio Balaguer Ricardo
Nacimiento	1 de septiembre de 1902 Villa Bisonó (República Dominicana)
Fallecimiento	14 de julio de 2002 Santo Domingo (República Dominicana)
Causa de muerte	Úlcera péptica
Nacionalidad	Dominicana
Religión	Iglesia católica
Educación
Educado en	Universidad Autónoma de Santo Domingo Universidad de París
Información profesional
Ocupación	Poeta, escritor, profesor universitario, abogado, diplomático, político, estadista y embajador
Partido político	Partido Reformista Social Cristiano
Distinciones	Orden de la Nube Propicia Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio (1953) Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica (1960) Collar de la Orden de Isabel la Católica (1976)

Joaquín Amparo Balaguer Ricardo (1 de septiembre 1906 Navarrete (hoy Villa Bisonó), Santiago - 14 de julio, 2002 Santo Domingo). Abogado, diplomático y escritor. Fue electo presidente de la República siete veces, superando en esto a Buenaventura Báez, que fue cinco veces elegido primer mandatario nacional. Fue presidente de la República Dominicana en los períodos 1960-1962, 1966-1978, 1986-1996.Compartió el Premio Nacional de Literatura de 1990 con su rival político Juan Bosch.

Vida inicial

Joaquín Antonio Balaguer Ricardo nació el 1 de septiembre de 1906 en Navarrete, entonces una aldea de Santiago de los Caballeros, y falleció en la ciudad de Santo Domingo el 14 de julio del 2002. Fue el único varón dentro de los 8 hijos que procreó el matrimonio Balaguer-Ricardo.

Les antecedieron sus hermanas: Lidia, Alicia Isabel, y Ana Teresa, y le sucedieron: Emma, Rosa y Carmen Celia. El nacimiento del primer hijo varón de la familia constituyó uno de los momentos de mayor alegría y felicidad para el matrimonio Balaguer-Ricardo.

Tener un hijo es uno de los deseos innatos de todo padre y madre dominicana. El hogar de la familia Balaguer-Ricardo, situado en el camino Real de Navarrete, de inmediato estuvo repleto de vecinos y amigos de la familia que acudieron a contemplar al nuevo vástago y felicitar a la orgullosa madre, al tiempo que hicieron humildes obsequios para el recién nacido.

Los padrinos de Joaquín Balaguer Ricardo fueron don Ulises Franco Bidó, fundador del periódico La Información de Santiago, y doña María Morel, distinguida dama de la región del Cibao.

Joaquín Balaguer fue un descendiente de familias distinguidas y exquisitas de la sociedad dominicana. Por su línea materna era pariente del general Ulises Heureax, presidente de la República en varios períodos a finales del siglo XIX.

Desde niño, Joaquín Balaguer Ricardo percibió que los libros son la verdadera universidad de la vida, que el pensamiento se alimenta con ideas, con lecturas, y no con carne, arroz y habichuela, como pensaban muchos hombres y mujeres de su época. Por eso, ocupó la mayor parte de su tiempo en leer grandes volúmenes de la biblioteca Amante de la Luz de la ciudad de Santiago de los Caballeros.

A temprana edad, siguió el consejo de Miguel de Unamuno: Leer mucho es uno de los caminos de la originalidad; uno es tanto más original y propio cuando mejor enterado está de lo que han dicho los demás. El joven Joaquín Antonio tuvo el privilegio de nacer en una aldea e iniciar sus estudios en un ambiente social donde los maestros trataban a los alumnos como si fueran sus propios hijos. Desde su llegada al mundo, recibió mucho afecto y buena educación familiar. La educación familiar es un factor determinante en el proceso de Escolaresnacimiento del liderazgo, ya que la familia es el corredor psicológico de la sociedad, el agente principal que moldea los hábitos de las gentes y sus actitudes ante la vida.

El Politico

Los acontecimientos políticos de la época, sobre todo, la ocupación del territorio dominicano por tropas del ejército de los Estados Unidos en 1916, condujeron a que Balaguer se dedicara a la política. Al estudiar a Balaguer desde sus cimientos, nos damos cuenta que en su interior, en la época de la niñez y la adolescencia estuvo inclinado por la investigación literaria, el periodismo y el magisterio. Aunque la política y la investigación literaria ocuparon la mayor parte de su tiempo, es importante señalar que Balaguer fue un educador innato. Aunque no pudo dedicarle mucho tiempo a la enseñanza en las escuelas y universidades, nos damos cuenta que en las mayorías de los libros que escribió dejó la estampa del maestro, del hombre interesado en construir una sociedad más civilizada y en ilustrar a las jóvenes generaciones para que contribuyan a la construcción de un mejor porvenir.

Balaguer inició su carrera política cuando tenía a penas 16 años de edad. Durante su adolescencia hizo causa común con los nacionalistas que abogaban por la salida del territorio dominicano de las fuerzas de ocupación de los Estados Unidos.

Siendo un joven se convirtió en uno de los dirigentes más importantes del Partido Nacionalista que dirigía el prestigioso jurista y político santiagués, don Rafael Estrella Ureña. Sobre sus hombros cayó la histórica responsabilidad de redactar el Manifiesto que depuso al Gobierno Inconstitucional de Horacio Vásquez.

Durante la Era de Trujillo ocupó importantes cargos en la administración pública. Dedicó parte de su vida al servicio diplomático, lo que le permitió estudiar en importantes universidades de Europa, y al mismo tiempo, escribir varios libros que constituyen un gran aporte a la cultura dominicana. Dentro de los cargos más importantes desempañados por Balaguer durante la tiranía de Trujillo, se encuentran: Secretario de Estado de la Presidencia, Secretario de Estado de Educación, Secretario de Relaciones Exteriores, Vicepresidente de la República y Presidente de la República. Fue Profesor de la Universidad de Santo Domingo, Diputado al Congreso Nacional y Embajador en varios países de América. La experiencia adquirida en la administración pública durante la tiranía le convirtió en el personaje más preparado para lograr la transición de la tiranía a la democracia y organizar a la sociedad dominicana en función del nuevo orden político. Realizó una labor espectacular para lograr sacar a los familiares de Trujillo del país, y así evitó que se siguieran produciendo derramamientos de sangre. Como Presidente de la República provisional después del ajusticiamiento de Trujillo, sentó las bases para la democracia, pero las intrigas y pasiones políticas del momento contribuyeron a que fuera enviado al exilio por varios años. Desde el exilio fundó al Partido Reformista, organización que lo presentó como candidato a la presidencia en 1966, certamen en el que tuvo una victoria aplastante contra su rival, el candidato del Partido Revolucionario Dominicano, profesor Juan Bosch. En 1978 fue desplazado del poder por el Partido Revolucionario Dominicano, y retornó al mando de la nación en 1986, y de inmediato inició un amplio operativo de construcción de obras que constituyen el soportepara la producción nacional.

En su retorno al poder, el 16 de agosto de 1986, permaneció al frente del Estado hasta el 16 de agosto de 1996. Fue candidato a la presidencia por última vez, el 16 de mayo del 2000, consulta electoral en la que no salió victorioso, pero evitó que su partido sucumbiera. En ese segundo mandato de diez años (1986-1996), hizo un gobierno respetuoso de las libertades públicas. Cuando volvió a la oposición, se convirtió en el principal árbitro para la gobernabilidad del país.

Balaguer fue un político decente, deferente y respetuoso en el trato a sus adversarios. Sin lugar a dudas, Balaguer es el maestro de la política civilizada dominicana. Nos dejó la gran enseñanza de que en las luchas políticas no existían enemigos, sino más bien adversarios, que hoy están en desacuerdo, y mañana pueden estar de acuerdo. Fue un político elegante en el uso del lenguaje. No utilizó el discurso para ofender a sus adversarios, y ante las ofensas de sus contendores, por lo regular reaccionaba con el elogio o el silencio. La política fue concebida por Balaguer como un magisterio. Su meta era educar a un pueblo y servirle a un país. Su misión era construir, no destruir. Su grandeza política tuvo mucho que ver con el perfil de su personalidad. Desde niño fue trabajador, ordenado y disciplinado. A temprana edad se educó y trabajó para servirle a la causa nacional.

Fue un hombre de fe, creyente en Dios y devoto ferviente de la Virgen de la Altagracia. Al igual que el Emperador Napoleón Bonaparte se consideraba un instrumento del destino. Y no hay dudas de que Balaguer fue un hombre destinado para hacer de una aldea una República y para sembrar bienestar y progreso a lo largo y lo ancho de la geografía dominicana.

No hay dudas de que Joaquín Balaguer es el Padre de la Democracia Dominicana. Ni antes de después, ningún gobernante dominicano hará una obra de gobierno similar a la ejecutada por Joaquín Balaguer en sus 22 años de mandato. Como se permite este relajo?

El Literato

Joaquín Balaguer es uno de los dominicanos que ha hecho mayores aportes a la literatura en sentido general. A pesar de ser un político desde los pies hasta la cabeza, es autor de una rica y variada producción literaria, la cual constituye un aporte imperecedero a las presentes y futuras generaciones que deberán nutrirse de esas fuentes del saber.

Comenzó a publicar libros siendo un adolescente de a penas 14 años de edad, y en el año 2000, previo a cumplir 94 años de edad, entregó a la sociedad dominicana su último parto literario: La Raza Inglesa. Sus textos tratan sobre historia, gramática, poesía, narrativa, novelas, biografías, política, entre otras fuentes del saber.

En Joaquín Balaguer se conjugó la doble personalidad del estadista y del intelectual. Pocas veces en la historia de la humanidad se han producido fenómenos de esa naturaleza. Es imposible determinar en cual renglón Balaguer hizo mayores aportes a sus conciudadanos.

Para unos, la gran obra de Balaguer fue haber construido una infraestructura física y material que les sirve de soporte a la sociedad dominicana. Para otros, su mayor aporte es el legado intelectual, esa inmensa gama de obras literarias destinadas a enriquecer el acervo de las presentes y futuras generaciones. Por ultimo, existe una corriente de pensamiento que considera que el mayor aporte de Balaguer fue haber logrado la transición de la sociedad dominicana del caos y la anarquía a la democracia.

La verdad es que Joaquín Balaguer es inmenso desde cualquier ámbito que se le mire. Por tanto, cada dominicano lo valorará, lo evaluará y lo recordará desde su perspectiva de vida. La madre de familia que vive en una vivienda construida por Balaguer lo recuerda día y noche, y lo ve en cada pared, en cada puerta, en cada ventana, en cada persiana y en cada techo. El agricultor que recibió una parcela donde siembra los productos que les permiten obtener los recursos económicos para la manutención de su familia, ve a Balaguer en cada que fruto que cultiva. El empresario que creció y se desarrollo como consecuencia de las políticas económicas del gobierno reformista, hoy cuando es atropellado por gobiernos que solo se interesan en recaudar impuestos, añora los tiempos de bonanzas que les permitieron hacer su fortuna económica. El profesional que desde que finalizo sus estudios encontró trabajo, y con sus ingresos pudo mantener una familia de forma digna y cómoda, recuerda día y noche a Balaguer, cuando se da cuenta que el dinero que consigue no les alcanza para nada. Los pobres recuerdan a Balaguer, porque en los tiempos del reformismo la pobreza no era como la del presente. Eran pobres, pero comían, tenían empleos, educaban a sus hijos, tenían hospitales para los servicios de salud, y mantenían viva la esperanza de un porvenir mejor, porque las riendas del poder estaban en manos de un hombre que trabajaba para los pobres. Los pobres de los años de Balaguer, dejaron de ser pobres y se convirtieron en indigentes, en huérfanos, en desamparados.

Los estudiantes, profesionales, intelectuales y ciudadanos en sentido general que tienen el privilegio de leer uno de los libros de Balaguer, no vacilan en afirmar que el mayor legado que el tribuno de Navarrete les dejó al pueblo dominicano, fueron sus libros. A diferencia de otros políticos e intelectuales dominicanos, Balaguer utilizó su pluma para aportar a la construcción de una mejor sociedad. No incentivó los conflictos de clases, ni tampoco desperdició el tiempo escribiendo para dañar reputaciones personales. Como intelectual, Balaguer rindió apasionado culto a las ciencias y a las letras. Aunque hizo estudios universitarios, era un auténtico genio, era una fuente inagotable de conocimientos que brotaron de su propio interior. Al leer sus escritos nos damos cuenta que en una sola persona encontramos al profesional del derecho, de la economía, del periodismo, de la política, de la gramática y de la historia. Pero cuando evaluamos su accionar, vemos, que es al mismo tiempo escritor, poeta, historiador, periodista, novelista, orador, diplomático, catedrático universitario, ensayista y crítico literario.

A continuación presentamos el listado de libros escritos y publicados por el doctor Balaguer, durante su dilatada carrera política y académica. Algunos de estos títulos fueron conferencias pronunciadas durante la Era de Trujillo, las cuales fueron impresas, y constituyen una rica fuente de consulta sobre el pasado histórico dominicano.

Salmos Paganos (1920); Claro de Luna (1920); Tebaida Lírica (1924); Estudio de la Labor Literaria de Federico García Godoy (1927); Nociones de Métrica Castellana (1930); Trujillo y Su Obra (1934); Heredia, Verbo de la Libertad (1939); El Tratado Trujillo-Hull (1941); Azul en los Charcos (1941); La Liberación Financiera Dominicana (1941); La política Internacional de Trujillo (1944); En torno a un Pretendido Vicio Prosódico de los Poetas Latinoamericanos(1944); Guía Emocional de la Ciudad Romántica (1964); Letras Dominicanas (1944); La Realidad Dominicana (1947); Los Próceres Escritores (1947); Semblanzas Literarias (1948); El Cristo de la Libertad (1950); Federico García Godoy (1951); Dominicana (1952); Apuntes para la Historia Prosódica de la Métrica Castellana (1954); Historia de la Literatura Dominicana (1954); Discursos (1957); Recuerdos de Santo Domingo (1958); La Palabra al Servicio de la Libertad Política (1958); Colón, Precursor Literario (1958); El Centinela de la Frontera (1962); Apuntes para la Historia de Los Trinitarios (1966); Artículos, Discursos y Otros Escritos (1966); El Magisterio es Abnegación y Sacrificio (1972); Estudio para la Colonización de la Zona Histórica y Monumental de Santo Domingo (1973); La Marcha hacia el Capitolio (1973); Temas Educativos y Actividades Diplomáticas (1973); Temas Históricos y Literarios (1974); La Palabra Encadenada (1975); Cruces Iluminadas (1975); La Cruz de Cristal (1976); Mensajes Presidenciales (1976); Pedestales (1978); El Huerto Sellado (1981); Los Carpinteros (1983); Mensajes al Pueblo Dominicano (1983) Entre la Sangre del 30 de Mayo y la del 24 de Abril (1983); La Isla al Revés (1984); La Voz del Capitolio (1984); Galería Heroica (1984); La Venda Transparente (1987); Memorias de un Cortesano de la Era de Trujillo (1988); España Infinita (1988); De vuelta al capitolio (1993); Voz Silente (1995); Yo y mis Condiscípulos (1996); Grecia Eterna (1999); La Raza Inglesa (2000)

Enlaces externos

• Wikiquote alberga frases célebres de o sobre Joaquín Balaguer.
• wwww.joaquinbalaguer.com - Sitio oficial (póstumo)
• www.escritoresdominicanos.com
• [1] Dossier sobre Joaquín Balaguer
• Balaguer

Bibliografía

• "Diccionario Enciclopédico Dominicano", Volumen I.
• "Sociedad 4, La República Dominicana hoy," Secretaria de Estado de Educación
• "El día que Balaguer muera", Eloy Alberto Tejera.]]]]