Cicreo
En la mitología griega, Cicreo (en griego antiguo: υχρεύς) era hijo del dios Poseidón y de la ninfa Salamina, hija del oceánida Asopo.[1]
Dio muerte a una serpiente que asolaba la isla de Salamina y los habitantes le proclamaron rey. Según Ferécides de Leros, Telamón era hijo de Acteo y Glauce, hija de Cicreo.[2] Después de asesinar a su hermano Foco y de que Éaco le expulsara de Egina con su hermano y cómplice Peleo, se refugió en la corte de su suegro. Al morir Cicreo sin descendencia heredó el trono de Salamina. [3] Otra tradición llama Cariclo a la hija de Cicreo.[4]
Según otra versión, la serpiente, llamada Cicreida, había sido criada por Cicreo y, por causar daños en Salamina, fue expulsada no por él sino por Euríloco.[5]
Según el geógrafo griego Pausanias en la isla hubo un santuario dedicado a Cicreo, construído en agradecimiento por la ayuda prestada a los griegos en la Batalla de Salamina, apareciendo en forma de serpiente entre las naves.[6]