Diferencia entre revisiones de «Caridad (virtud)»
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La '''caridad''' (del griego [[Agapē|''agapë'']] y del latín ''caritas''), es una de las tres [[virtudes teologales]], junto con la [[esperanza (virtud)|esperanza]] y la [[fe (virtud)|fe]]. Tanto el ''[[DRAE]]'' en su primera acepción como la [[Iglesia católica]] consideran que la caridad es aquella virtud teologal por la cual se ama a Dios sobre todas las cosas por Él mismo y al prójimo como a nosotros mismos por amor de Dios.<ref name="DRAE">{{Cita DRAE|caridad}}</ref><ref name="Caridad">{{cita libro|autor= Estepa Llaurens, José Manuel, y equipo |título=Catecismo de la Iglesia católica |año=1992 |ubicación=República Dominicana |editorial=Ed. Juan Pablo II |páginas=413-414 |url=http://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p3s1c1a7_sp.html |fechaacceso=7 de septiembre de 2013}}</ref> La caridad tiene por frutos el gozo, la paz y la misericordia. Exige la práctica del bien y la corrección fraterna; es benevolencia; suscita la reciprocidad; es siempre desinteresada y generosa; es amistad y comunión. <ref>Catecismo de la Iglesia católica'', 1829.</ref><ref name="Caridad"/> |
La '''caridad''' (del griego [[Agapē|''agapë'']] y del latín ''caritas''), es una de las tres [[virtudes teologales]], junto con la [[esperanza (virtud)|esperanza]] y la [[fe (virtud)|fe]]. Tanto el ''[[DRAE]]'' hello Herrera en su primera acepción como la [[Iglesia católica]] consideran que la caridad es aquella virtud teologal por la cual se ama a Dios sobre todas las cosas por Él mismo y al prójimo como a nosotros mismos por amor de Dios.<ref name="DRAE">{{Cita DRAE|caridad}}</ref><ref name="Caridad">{{cita libro|autor= Estepa Llaurens, José Manuel, y equipo |título=Catecismo de la Iglesia católica |año=1992 |ubicación=República Dominicana |editorial=Ed. Juan Pablo II |páginas=413-414 |url=http://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p3s1c1a7_sp.html |fechaacceso=7 de septiembre de 2013}}</ref> La caridad tiene por frutos el gozo, la paz y la misericordia. Exige la práctica del bien y la corrección fraterna; es benevolencia; suscita la reciprocidad; es siempre desinteresada y generosa; es amistad y comunión. <ref>Catecismo de la Iglesia católica'', 1829.</ref><ref name="Caridad"/> |
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== En las Escrituras == |
== En las Escrituras == |
Revisión del 19:33 9 nov 2016
La caridad (del griego agapë y del latín caritas), es una de las tres virtudes teologales, junto con la esperanza y la fe. Tanto el DRAE hello Herrera en su primera acepción como la Iglesia católica consideran que la caridad es aquella virtud teologal por la cual se ama a Dios sobre todas las cosas por Él mismo y al prójimo como a nosotros mismos por amor de Dios.[1][2] La caridad tiene por frutos el gozo, la paz y la misericordia. Exige la práctica del bien y la corrección fraterna; es benevolencia; suscita la reciprocidad; es siempre desinteresada y generosa; es amistad y comunión. [3][2]
En las Escrituras
La caridad nace del amor de Dios a los hombres, y de la respuesta del hombre a ese amor.[4] De hecho, constituye el mandamiento principal de Jesús a los apóstoles y discípulos: «Amaos los unos a los otros». [5]
La virtud de la caridad toma en cuenta los mandamientos de la ley de Dios, que expresan el núcleo de la moral cristiana.[6][7][8] Sin embargo, Dios mismo se coloca como único y perfecto ejemplo de amor, que salva a los que todavía no creen en él, muriendo por quienes son todavía sus enemigos. [9][10] San Pablo, cuando habla del amor de Dios, describe cómo es la caridad: [11]
La caridad es paciente, es amable, la caridad no es envidiosa, no es jactanciosa, no se engríe; es decorosa; no busca su interés; no se irrita; no toma en cuenta el mal; no se alegra de la injusticia; se alegra con la verdad. Todo lo excusa. Todo lo cree. Todo lo espera. Todo lo soporta.1 Corintios 13, 4-7.
La caridad es considerada la virtud teologal más importante, y superior a cualquier otra virtud.[12]
En la Tradición
Para san Basilio, la condición de hijos del Padre era adquirida cuando entendida como la búsqueda del bien:
O nos apartamos del mal por temor del castigo y estamos en la disposición del esclavo, o buscamos el incentivo de la recompensa y nos parecemos a mercenarios, o finalmente obedecemos por el bien mismo del amor del que manda... y entonces estamos en la disposición de hijos.S. Basilio, reg. fus. prol. 3
En Teología moral, se considera a la caridad para con el prójimo una virtud cristiana opuesta a una serie de pecados: al odio, como deseo del mal del prójimo; a la envidia, como especie de tristeza ante el bien ajeno al que se considera como mal para uno; a la discordia, como disensión de las voluntades ajenas; a la contienda, como altercado o discusión violenta; a la guerra, como lucha de una multitud contra otra entablada con intervención de la autoridad pública; y al escándalo, como aquellos dichos o hechos que proporcionan al otro ocasión de cometer el mal, entre otros.[13] El DRAE la define además en su acepción tercera como «limosna que se da o auxilio que se presta a los necesitados».[1] La Iglesia católica considera la limosna hecha a los pobres como uno de los principales testimonios de la caridad fraterna, pero también una práctica de justicia (Catecismo de la Iglesia católica, 2447).[14] La caridad tiene por frutos el gozo, la paz y la misericordia:
La culminación de todas nuestras obras es el amor. Ese es el fin; para conseguirlo, corremos; hacia él corremos; una vez llegados, en él reposamos.San Agustín, In epistulam Ioannis tractatus, 10, 4
La encíclica Deus caritas est, del papa Benedicto XVI, profundiza más en la virtud de la caridad cristiana.[15]
(...) « agapé », el cual, como hemos visto, se convirtió en la expresión característica para la concepción bíblica del amor. En oposición al amor indeterminado y aún en búsqueda, este vocablo expresa la experiencia del amor que ahora ha llegado a ser verdaderamente descubrimiento del otro, superando el carácter egoísta que predominaba claramente en la fase anterior. Ahora el amor es ocuparse del otro y preocuparse por el otro. Ya no se busca a sí mismo, sumirse en la embriaguez de la felicidad, sino que ansía más bien el bien del amado: se convierte en renuncia, está dispuesto al sacrificio, más aún, lo busca.
Referencias
- ↑ a b Real Academia Española. «caridad». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).
- ↑ a b Estepa Llaurens, José Manuel, y equipo (1992). Catecismo de la Iglesia católica. República Dominicana: Ed. Juan Pablo II. pp. 413-414. Consultado el 7 de septiembre de 2013.
- ↑ Catecismo de la Iglesia católica, 1829.
- ↑ 1 Jn 4, 19.
- ↑ Jn 13, 34.
- ↑ Jn 15, 9-10.
- ↑ Mt 22, 40.
- ↑ Rm 13, 8-10.
- ↑ Rm 5, 10.
- ↑ Mt 5, 44.
- ↑ 1 Co 13, 4-7.
- ↑ 1 Co 13,13.
- ↑ Royo Marín, Antonio (1979). Teología moral para seglares. Tomo 1: Moral fundamental y especial (5ª edición). Madrid: Biblioteca de Autores Cristianos. pp. 404-419. ISBN 84-220-0441-0.
- ↑ Estepa Llaurens, José Manuel, y equipo (1992). Catecismo de la Iglesia católica. República Dominicana: Ed. Juan Pablo II. p. 534. Consultado el 11 de julio de 2014.
- ↑ «Deus caritas est (25 de diciembre de 2005) | Benedicto XVI». w2.vatican.va. Consultado el 3 de noviembre de 2016.
Véase también
- Fe, Esperanza, Caridad y su madre Sofía
- Deus Caritas Est (Dios es Amor), encíclica de Benedicto XVI
Enlaces externos
- Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobre Caridad.
- Wikiquote alberga frases célebres de o sobre Caridad (virtud).
- Sacramentum Caritatis (El Sacramento de la Caridad), exhortación apostólica de Benedicto XVI
- Instituto Internacional de Caridad y Voluntariado Juan Pablo II (IICV)