Diferencia entre revisiones de «Crónica (género periodístico)»

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→‎Grandes cronistas y grandes crónicas: La crónica radial. Calamari, Andrea: Periodismo narrativo (pero en radio) en https://audiocreativa.files.wordpress.com/2017/03/periodismo-narrativo-pero-en-radio.pdf
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En la crónica sonora no se necesita buscar las palabras precisas para describir la voz de un personaje tal y como es, “sus inflexiones, su timbre, su acento, sus modismos, sus pausas y silencios”. Lo mismo sucede con la descripción de ambientes o situaciones, ya que, utilizando los cuatro elementos del lenguaje radiofónico (voz, efectos de sonido, música y silencio) se puede retratar cada momento de una manera más fiel.
En la crónica sonora no se necesita buscar las palabras precisas para describir la voz de un personaje tal y como es, “sus inflexiones, su timbre, su acento, sus modismos, sus pausas y silencios”. Lo mismo sucede con la descripción de ambientes o situaciones, ya que, utilizando los cuatro elementos del lenguaje radiofónico (voz, efectos de sonido, música y silencio) se puede retratar cada momento de una manera más fiel.
Mladen Dolar expone tres aspectos fundamentales que logran desplazar el eje a la materialidad de la voz: el acento, la entonación y el timbre.
Mladen Dolar expone tres aspectos fundamentales que logran desplazar el eje a la materialidad de la voz: el acento, la entonación y el timbre.
“¿En todas partes hay historias? Sí, pero hay que saber encontrarlas; no cualquier hecho, no cualquier persona, no cualquier lugar sino aquellos que llaman a ser contados. Por supuesto hay recetas. Hay intuición y trabajo: una buena mirada, muchas horas de paciencia para ver y escuchar. En eso coinciden todos los cronistas”.<ref>Calamari, Andrea. Periodismo narrativo (pero en radio), artículo en preparación.</ref>
“¿En todas partes hay historias? Sí, pero hay que saber encontrarlas; no cualquier hecho, no cualquier persona, no cualquier lugar sino aquellos que llaman a ser contados. Por supuesto hay recetas. Hay intuición y trabajo: una buena mirada, muchas horas de paciencia para ver y escuchar. En eso coinciden todos los cronistas”.<ref>Calamari, Andrea. Periodismo narrativo (pero en radio), artículo en preparación. [https://audiocreativa.files.wordpress.com/2017/03/periodismo-narrativo-pero-en-radio.pdf]</ref>


== Grandes cronistas y grandes crónicas ==
== Grandes cronistas y grandes crónicas ==
“Una crónica pide serlo, ya en la escritura o desde antes de nacer. Una crónica además pide ritmos, voces y sonidos que le den una identidad. Si la escuchas, está ahí.” Ana Teresa Toro
“Una crónica pide serlo, ya en la escritura o desde antes de nacer. Una crónica además pide ritmos, voces y sonidos que le den una identidad. Si la escuchas, está ahí.” Ana Teresa Toro

“No hay mundos fáciles para ser contados. No hay temas menores. Siempre se debe hacer una investigación. Un buen periodista es el que es capaz de mirar la realidad como si fuera la primera vez.” Leila Guerriero
“Para mí no hay temas grandes ni temas chicos, si un cronista quedó impresionado con una pelea entre vecinas de su barrio, si sabe por qué esos gritos histéricos no han salido de su cabeza, seguramente podrá hacer una gran crónica con ellos.” Juan Fernando Andrade
“No hay mundos fáciles para ser contados. No hay temas menores. Siempre se debe hacer una investigación. Un buen periodista es el que es capaz de mirar la realidad como si fuera la primera vez.” Leila Guerriero

“Para mí no hay temas grandes ni temas chicos, si un cronista quedó impresionado con una pelea entre vecinas de su barrio, si sabe por qué esos gritos histéricos no han salido de su cabeza, seguramente podrá hacer una gran crónica con ellos.” Juan Fernando Andrade

“Tengo en cuenta la condición universal del tema: que no sea un relato que se cierra sobre sí mismo, sino que pueda plantearse como una ventana hacia un estado de cosas más amplio”. Josefina Licitra
“Tengo en cuenta la condición universal del tema: que no sea un relato que se cierra sobre sí mismo, sino que pueda plantearse como una ventana hacia un estado de cosas más amplio”. Josefina Licitra

Revisión del 23:42 8 nov 2017

La crónica es un género periodístico híbrido que participa a la vez de los rasgos de los géneros informativos e interpretativos, con predominio de los primeros sobre los segundos.[1]

Concepto

Narra una serie de hechos secuenciales que constituyen una noticia en un ámbito concreto de la vida social durante un periodo cronológico breve o dilatado, que puede llegar a ser de una semana, una quincena, un mes e incluso un año. Esos hechos están en forma ordenada y detallada y pueden ser de distintas temáticas: crónica deportiva, política, de sociedad... Es un escrito de no ficción que se emplea mucho en la prensa periódica impresa o electrónica. Se diferencia de la noticia en que su carácter es menos puntual: intenta dar visiones completas y ordenadas de acontecimientos que tienen un desarrollo, desde su principio hasta el final; es más de carácter narrativo que descriptivo, y se pretende equidistante entre la información y la interpretación.[2]

Características de la crónica

La crónica, como una narración propia del periodismo literario, se encuentra entre la información y la interpretación. Este género cuenta con ciertas características:

-El autor es testigo presencial de los hechos. Leila Guerriero plantea que la crónica se construye más sobre el arte de mirar y permanecer que en hacer preguntas. Además, hace hincapié en la necesidad del “reporteo” o “trabajo de campo” por parte del cronista con la idea de que “para ver no solo hay que estar; para ver hay que hacerse invisible”. Por su parte, Tomás Eloy Martínez[3]​ también plantea la necesidad de la presencia del autor en el escenario o situación donde transcurren los hechos, pero considera que el arte de interrogar y verificar los datos constantemente es fundamental en la labor del cronista.

-Sobre la forma de narrar. Guerriero apunta a que cada descripción o recurso propio de un texto literario dentro de la crónica tiene un sentido en sí mismo y no está allí como adorno literario con fines meramente estéticos. Yanes Mesa[4]​ plantea que la crónica se distingue por el sello de su autor y que ello forma la esencia misma del texto. En ese sentido, se destaca la libertad expresiva en el estilo o la forma de narrar y el estilo creativo del autor. Se informa literariamente pero sin perder las características de claridad, sencillez y precisión.

-El cruce entre información e interpretación. Para Yanes Mesa[5]​, la crónica presenta una inequívoca faceta informativa pero es algo más que pura información ya que su identidad está determinada por la función interpretativa y la valoración de lo narrado. Por ello puede considerarse un género ambivalente o un género mixto entre el periodismo informativo y el periodismo de opinión. Para Martínez Albertos[6]​, la crónica es la narración de una noticia con ciertos elementos valorativos que siempre deben ser secundarios respecto al relato del hecho que la origina. En la equidistancia entre la información y la interpretación, Guerriero plantea, además, la necesidad de trascender lo meramente subjetivo y conectarse con un interés colectivo.

-Temporalidad. Para Yanes Mesa[7]​ hay un elemento esencial que marca la estructura de la crónica: la secuencia temporal. Se trata de un texto que intenta reflejar lo acaecido entre dos fechas, de ahí le viene su origen etimológico.

-Estructura. Debido a la libertad expresiva y estílistica que posibilita el género de la crónica, su estructura no se ciñe a la estructura formal de la pirámide invertida. Según Yanes Mesa[8]​, en la crónica se distinguen claramente sólo dos partes: la titulación y el cuerpo. Como componentes de la primera se pueden contemplar el título -que puede tener antetítulo y subtítulo-, y el lead -que en su defecto hace su función el primer párrafo. El cuerpo de la crónica tiene un estilo libre. La conclusión no está siempre al final del relato, pues muchos cronistas prefieren hacer la valoración al principio, e incluso en los titulares, mientras que la argumentación normalmente va a lo largo de todo el texto. Es un género con una estructura formal libre.

-Límites éticos. En la crónica se plasma la visión personal pero se man debe mantener la objetividad de lo acontecido. Guerriero, por su parte, apunta a la necesidad de ser exacto, lo que diferencia a la crónica de la ficción, en la que hay lugar para la invención.

Clases de crónicas

Según su contenido o tema

  • Crónicas de sucesos o Crónica negra. Narran hechos delictivos o violentos, accidentes y catástrofes.
  • Crónicas políticas. Narran acontecimientos del mundo político nacional o internacional: por ejemplo, la noticia de la asunción del poder por un nuevo presidente puede ser convertida en una crónica si se narra todos los pormenores, curiosidades y otros datos relacionados a dicho evento político.
  • Crónicas deportivas. Se encargan de narrar cuidadosamente cómo se llevó a cabo un evento deportivo, un mundial de fútbol, un campeonato de tenis, incluso un partido de tenis, etcétera.
  • Crónica de sociedad, también llamada ecos de sociedad. Relata secuencialmente cómo se produjo un determinado evento social: una boda real, el homenaje a la bandera, etcétera.
  • Crónica de viajes. Cuentan en forma pormenorizada lo que significó el viaje a un lugar determinado y las experiencias que supuso, etc.

Según el enfoque o intención del cronista

  • Crónica informativa o blanca

Puede llegar a confundirse con la noticia, sin embargo, como toda crónica conserva sus características que lo distinguen de una simple noticia (es un relato secuenciado y pormenorizado, no una mera y esquemática recopilación de datos). Es de estilo objetivo e imparcial y su intención es meramente informativa.

  • Crónica interpretativa u opinativa

A la mera narración de los hechos el cronista añade un juicio valorativo sobre los mismos y utiliza su estilo para dar su personal punto de vista u opinión al respecto. Es a la vez información y opinión. Como se señala en el Manual del periodismo de Vicente Leñero y Carlos Marín, "La crónica se ocupa del cómo suceden los hechos y, en el caso de la interpretativa, también del por qué". Cuando predomina la interpretación muy sesgada de los datos y muy cargada del llamado sensacionalismo, con un punto de vista ceñido al del ciudadano común, se habla entonces dentro de este mismo tipo de crónica amarilla.[9]

Referencias

  1. Vid. Luis Alberto Hernando Cuadrado, El discurso periodístico, Verbum, 2000.
  2. Cf. Rafael Yanes Mesa, "La crónica, un género del periodismo literario equidistante entre la información y la interpretación", en Espéculo núm. 32: https://pendientedemigracion.ucm.es/info/especulo/numero32/cronica.html
  3. Martínez, Tomás Eloy (21 de noviembre de 2001). «El periodismo vuelve a contar historias». 
  4. «Rafael Yanes Mesa: La crónica, un género del periodismo literario equidistante entre la información y la interpretación -nº 32 Espéculo (UCM)». webs.ucm.es. Consultado el 7 de noviembre de 2017. 
  5. «Rafael Yanes Mesa: La crónica, un género del periodismo literario equidistante entre la información y la interpretación -nº 32 Espéculo (UCM)». webs.ucm.es. Consultado el 7 de noviembre de 2017. 
  6. Martínez Albertos, José Luis (1983). Curso General de Redacción Periodística. Mitre. 
  7. «Rafael Yanes Mesa: La crónica, un género del periodismo literario equidistante entre la información y la interpretación -nº 32 Espéculo (UCM)». webs.ucm.es. Consultado el 7 de noviembre de 2017. 
  8. «Rafael Yanes Mesa: La crónica, un género del periodismo literario equidistante entre la información y la interpretación -nº 32 Espéculo (UCM)». webs.ucm.es. Consultado el 7 de noviembre de 2017. 
  9. Cf. Orlando Cáceres Ramírez, "Crónica periodística. Concepto y ejemplos", en About.com, http://reglasespanol.about.com/od/tiposderedaccion/a/tipos-de-cronica.htm

La crónica radial

La crónica en radio tiene una ventaja adicional: “Es mucho más sencillo mostrar un personaje con su voz que con palabras impresas que lo describan. La naturaleza fuertemente indicial de la voz humana tiene un valor inestimable a la hora de elegir mostrar, antes que explicar". En la crónica sonora no se necesita buscar las palabras precisas para describir la voz de un personaje tal y como es, “sus inflexiones, su timbre, su acento, sus modismos, sus pausas y silencios”. Lo mismo sucede con la descripción de ambientes o situaciones, ya que, utilizando los cuatro elementos del lenguaje radiofónico (voz, efectos de sonido, música y silencio) se puede retratar cada momento de una manera más fiel. Mladen Dolar expone tres aspectos fundamentales que logran desplazar el eje a la materialidad de la voz: el acento, la entonación y el timbre. “¿En todas partes hay historias? Sí, pero hay que saber encontrarlas; no cualquier hecho, no cualquier persona, no cualquier lugar sino aquellos que llaman a ser contados. Por supuesto hay recetas. Hay intuición y trabajo: una buena mirada, muchas horas de paciencia para ver y escuchar. En eso coinciden todos los cronistas”.[1]

Grandes cronistas y grandes crónicas

“Una crónica pide serlo, ya en la escritura o desde antes de nacer. Una crónica además pide ritmos, voces y sonidos que le den una identidad. Si la escuchas, está ahí.” Ana Teresa Toro


“No hay mundos fáciles para ser contados. No hay temas menores. Siempre se debe hacer una investigación. Un buen periodista es el que es capaz de mirar la realidad como si fuera la primera vez.” Leila Guerriero 
“Para mí no hay temas grandes ni temas chicos, si un cronista quedó impresionado con una pelea entre vecinas de su barrio, si sabe por qué esos gritos histéricos no han salido de su cabeza, seguramente podrá hacer una gran crónica con ellos.” Juan Fernando Andrade
“Tengo en cuenta la condición universal del tema: que no sea un relato que se cierra sobre sí mismo, sino que pueda plantearse como una ventana hacia un estado de cosas más amplio”. Josefina Licitra
  1. Calamari, Andrea. Periodismo narrativo (pero en radio), artículo en preparación. [1]