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Bonsái[editar]

Bonsái
de Alejandro Zambra
Portada libro bonsai Alejandro Zambra
Género Narración
Sub-género: Novela
Idioma Español
Editorial Editorial Anagrama
País  Chile
Fecha de publicación 2006
Formato Impreso
Páginas 94
Serie
Mudanza
Bonsái
La vida privada de los árboles

Bonsái es la primera novela corta del escritor, poeta y crítico literario chileno Alejandro Zambra, ganador de diversos premios como el Premio de la Crítica (2007), Premio Altazor (2012), entre otras distinciones. Publicada en 2006 por la editorial española Anagrama, ganó el Premio Mejores Obras Literarias Publicadas en 2007 por el Consejo Nacional del Libro y la Lectura, junto al Premio de la Crítica a la mejor novela, siendo este otorgado por el Círculo de Críticos de Arte de Chile en el año 2007.

La novela fue adaptada al cine por el director Cristián Jiménez, la cual se presentó en el Festival de Cannes del 2011.

Contexto[editar]

La novela Bonsái de Alejandro Zambra tiene su origen en 1998 cuando era un recién licenciado en Literatura Hispánica de la Universidad de Chile, y como él mismo relata al periódico chileno La Tercera [1]​​:

“Vivía solo, en un departamento en Plaza Italia, en el piso subterráneo, es decir más o menos donde vive Julio. Trabajaba como telefonista y también hacía ayudantías en la universidad. Y buscaba trabajo en preuniversitarios y en colegios. La novela sucede más o menos en ese tiempo” Alejandro Zambra

En uno de esos días, en Eulogia Sánchez con Vicuña Mackenna, se encontró con una imagen en el periódico que le quedo dando vueltas. Era un árbol cubierto con una tela transparente, el cual era parte de una intervención artística realizada por los artistas Christo & Jeanne-Claude, una pareja búlgaro-marroquí que se dedicaban a envolver paisajes y monumentos nacionales por el mundo[1]​.​ En ese momento, es cuando decide tomarla como referente para comenzar a escribir un poema sobre árboles, específicamente árboles encerrados, el cual a su juicio no quedó muy bueno​[1]​. Desde ese punto, llegó a la imagen del bonsái comenzando un camino exploratorio​[1]​ hacia lo que sería, años después, su brillante debut narrativo[2]​​, al cual se refiere en un comienzo como:

“Durante muchos años fue un libro de poesía que no resultaba. Ni el libro ni los poemas que lo componían. En realidad, al principio investigaba los bonsáis o trataba de precisar por qué me interesaban. Pensaba en manipulación, en represión, en miniaturas, mutaciones, artificios” Alejandro Zambra

"Leía, miraba, ensayaba. Y avanzaba, pero en direcciones que luego desandaba. Hubo un tiempo en que coleccionaba citas sobre árboles y mi idea era simplemente publicarlas juntas en un libro que se llamara Bonsái. Es decir, miniaturizar esos textos ajenos a través del título” Alejandro Zambra

Pero antes de publicar Bonsái, llegó Mudanza, un poemario que publicó en 2003, el cual el mismo cataloga como: «no era ése el libro que entonces yo buscaba o rebuscaba, que seguía siendo Bonsái, pero ahora pienso que sí era el libro que necesitaba»​[1]​. De este mismo libro se pueden extraer trazos de lo que sería después Bonsái, tal como:

si el café sigiloso se empoza / y los ojos sobre todo / los ojos se limitan / a observar / a las plantas que crecen / estoica anónima-/ mente / mientras cae / no la noche pero / algo Alejandro Zambra, Mudanza

Lo primero que supo Zambra de la novela, fue el título, refiriéndose a esto como: «puede sonar absurdo, porque el título suele surgir en mitad de la escritura o al final. Pero me gustaba la idea de un libro que se llamara así»[1]​​. Al final de la novela aparece una fecha: «25 de abril del 2005» la cual corresponde al momento en que la consideró como terminada. Sobre los comienzos de la obra, Zambra escribió dos cuentos en los cuales hay citas que terminaron en Bonsái, uno se llamaba Bonsái o Manual de Bonsái en el cual se relata una ruptura amorosa en primera persona, y Macedonio donde una pareja lee Tantalia, el cuento de Macedonio Fernández. Es en el segundo cuento donde se ve la novela futura y se encuentran frases o primeras versiones que estarían luego en Bonsái[1]​, pero Zambra cuenta: «el relato mismo no me gustaba, en especial el tono me sonaba falso»​.[1]​ Una anécdota relevante es cuando dos amigos del escritor le regalan un pequeño olmo "para que escribas tu libro", le dijeron. Sobre esto, Zambra menciona: «el origen de Julio es autobiográfico, pero en la medida en que escribía se fue convirtiendo en personaje, alejándose de mí. Me parezco más al narrador, tal vez»​.[1]​ Hacia 2005, la vida del escritor había cambiado mucho, ahora residía en La Reina, hacia clases en la Universidad Diego Portales y escribía para Las Últimas Noticias. Fue por esos días donde la novela comenzó a ser lo que se conoce, como él dice: «tengo claro es que la novela la ‘vi’ o la entendí durante el verano del 2005»​[1]​. Respecto a su cambio de la poesía a la narrativa, el mismo menciona su desconfianza como: «desconfiaba de la ficción; desconfiaba, en especial, de que fuera capaz de contar una historia, de que hubiera, para mí, una historia que contar»[1]​​, y si hay algo que tenía claro, era que quería hacer una miniatura de novela por lo que siguió lo que aconsejaba Jorge Luis Borges desde ese momento, el escribir como si se tratara de un resumen de un texto ya escrito. Como dice en No leer:

“En lugar de sumar, restaba; completaba diez líneas y borraba ocho; escribía diez páginas y borraba nueve. Operando por sustracción, sumando poco y nada, di con la forma de Bonsái” Alejandro Zambra, No leer

Composición[editar]

El libro se compone de 5 capítulos titulados:

·        I. Bulto

·        II. Tantalia

·        III. Préstamos

·        IV. Sobras

·        V. Dos dibujos

Cada capítulo nos narra acontecimientos entre ambos personajes principales que son Julio y Emilia, al igual que historias de Emilia en específico narradas por Julio.

Argumento[editar]

La novela nos narra la historia de Julio y Emilia, dos estudiantes de Literatura de la Universidad de Chile, los que comparten una relación entre libros y experiencias literarias, figurando Proust, Flaubert y específicamente el cuento Tantalia de Macedonio Fernández en el cual se narra la historia de dos enamorados que deciden conseguir una planta que represente su vínculo. Ambos se sienten muy ligados con esta historia en específico, pero esta les genera problemas en la relación. Ambientada en la ciudad de Santiago de Chile, la obra nos narra lo que ocurre antes del suicidio inesperado de Emilia, a través de una serie de historias de ella y la relación entre ambos personajes, narradas desde el punto de vista de Julio.

La historia comienza cuando los protagonistas duermen juntos por accidente, esto a causa de una noche de estudio previa al examen de Sintaxis Española II, la cual ninguno dominaba con éxito. Este encuentro se realiza en la casa de las mellizas Vergara, y resulta convertirse en una fiesta íntima con música y vodka-naranja, es aquí cuando como consecuencia inesperada Julio y Emilia se conocen.

A Julio no le gustaba que Emilia hiciera tantas preguntas en clases, mientras que a Emilia le desagradaba que Julio aprobara los cursos, aunque casi no fuera a la universidad, pero aquella noche ambos descubrieron las afinidades emotivas que con algo de voluntad cualquier pareja es capaz de descubrir[3]​. Hacia su segundo encuentro, Julio se convertiría en el segundo compañero sexual de Emilia, y esta a su vez la primera relación seria de Julio ya que este siempre escapaba de la seriedad y las relaciones por terror, incluso las consideraba tanto o más peligrosas que las mujeres.

Luego de conocerse y mantener relaciones sexuales por un año, descubrieron entre sus múltiples rarezas sexuales y emocionales, las rarezas literarias. Aquí es cuando comienzan a leer cada noche antes de intimidar sexualmente, pasando por obras como El libro de Monelle de Marcel Schwob, El pabellón de oro de Yukio Mishima, poemas de Ted Hughes, fragmentos de Nietzsche, entre otros. Hasta que un día llegaron a Tantalia de Macedonio Fernández, el cual les afectó de sobremanera. Después de eso intentaron seguir leyendo, pero ahora con clásicos hasta llegar a En busca del tiempo perdido de Proust, al cual llegaron hasta la página 373 y su historia terminó, de alguna forma.

Julio continuó y Emilia también, por un tiempo al menos. Aquí es cuando se nos cuenta la historia de amistad entre Emilia y Anita, en base a los préstamos que se hacían desde su niñez, hasta llegar al último préstamo entre ambas. Después se nos presenta la actualidad de Julio, que es editor, y su conversación junto a Gazmuri, a quién conoce por un empleo de transcribir su libro de papel a computador. Una vez termina esta cita de trabajo, Julio se encuentra con María, su vecina que cree lesbiana, con la cual luego de tomarse un café y conversar sobre el libro de Gazmuri, tienen relaciones sexuales.

Cuando Gazmuri le cancela la transcripción, Julio se vuelve loco. Comienza a escribir la novela que no era suya y la transcribe, hasta terminarla llamándola Bonsái. Finalmente, se informa sobre los bonsáis y tiene uno, el cual cuida con mucha dedicación y observa por horas. Cuando está por terminar la novela, Julio se entera del suicidio de Emilia que había ocurrido hace como un año atrás y este le deja muy afectado y sin rumbo.

Premios y reconocimientos[editar]

Referencias[editar]

  1. a b c d e f g h i j k N, Pablo Retamal (1 de febrero de 2021). «Bonsái: Alejandro Zambra y la historia larga de una novela corta». La Tercera. Consultado el 20 de mayo de 2022. 
  2. «Bonsái - Zambra, Alejandro - 978-84-339-9955-9». Editorial Anagrama. Consultado el 20 de mayo de 2022. 
  3. Zambra, Alejandro (2006). «I. Bulto». Bonsái. España: Editorial Anagrama. p. 14. ISBN 978-84-339-9955-9. Consultado el 20 de mayo, 2022..