Diferencia entre revisiones de «Signos de puntuación»
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Los principales signos de puntuación son: el punto, la coma, el punto y coma, las comillas, los paréntesis, los signos de interrogación, los puntos suspensivos y la raya. |
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Revisión del 22:11 24 sep 2009
Los signos de puntuación indican pausas obligatorias, delimitan las frases y los párrafos y establecen la jerarquía sintáctica de las proposiciones, consiguiendo así estructurar el texto, ordenar las ideas y jerarquizarlas en principales y secundarias, y eliminar ambigüedades.
Por eso requieren un empleo muy preciso; si se ponen en el lugar equivocado, las palabras y las frases dejan de decir lo que el autor quería decir.
La puntuación varía según el estilo de escritura; sin embargo, las diferencias de estilo que se puedan presentar no eximen a nadie de cumplir con ciertas normas mínimas y de evitar errores generalmente considerados como inaceptables. De ahí la importancia de conocer y aplicar las normas básicas de la puntuación.
No obstante, hay que advertir que más allá de cualquier norma establecida, los signos de puntuación componen también la arquitectura del pensamiento escrito. En este sentido, y tal y como sucede en poesía desde hace más de un siglo, no existen normas exactas para reglamentar el correcto uso de los signos en las partituras, tanto narrativas como poéticas. En términos de principios y parámetros, los signos de puntuación entrarían a formar parte de los parámetros del lenguaje, y en consecuencia se sitúan en un proceso de constante evolución y son variables que pueden depender de otros factores.
Si la finalidad última es la comunicación, podría resultar paradójico encontrarnos con licencias ortográficas que no respetan el modo convencional de escritura y que, sin embargo, expresan a la perfección los conceptos y los ritmos internos, invisibles de otra manera. Como ejemplo de variable «en el extremo» se situarían los cambios en las formas de escritura que están imponiendo los nuevos medios de comunicación, chat, blog, SMS... que más que atacar a las viejas estructuras del lenguaje realizan de él un uso específico, adecuado a la velocidad y otras características del medio en cuestión; aun cuando lo correcto es respetar el uso de los signos de puntuación y evitar la degradación de la lengua castellana por modismos y anglicismos.
Signos principales
Los principales signos de puntuación son: el punto, la coma, el punto y coma, las comillas, los paréntesis, los signos de interrogación, los puntos suspensivos y la raya.
El punto
El punto (.) es el signo de puntuación que se coloca al final de los enunciados y las oraciones gramaticales en el español, además de en la mayoría de los lenguajes con el alfabeto latino. Se escriben sin dejar espacio de separación con el carácter que precede, pero dejando un espacio con el carácter que sigue a continuación, a no ser que dicho carácter sea de cierre. Existen tres clases de punto: el punto y seguido, el punto y aparte y el punto final.
- Punto y seguido. Separa enunciados dentro de un párrafo. Quiere decir que se continúa escribiendo a continuación del punto; la primera palabra escrita en este caso irá en mayúsculas. Por ejemplo: «Historia de España. El descubrimiento de América». Se denomina punto y seguido, nombre más lógico y recomendable que el también usual de punto seguido.
- Punto y aparte. Separa dos párrafos de contenido diferente dentro del texto. A continuación hay que comenzar a escribir en línea distinta. Para seguir las normas se debe colocar sangría a la primera línea de texto del nuevo párrafo. Se denomina punto y aparte, aunque en algunas zonas de América se dice punto aparte.
- Punto final. Siempre se coloca al final, cerrando un texto o enunciado. No es correcta la denominación punto y final, creada por analogía de las correctas punto y seguido y punto y aparte.[1]
También se usa el punto para indicar que la palabra anterior es una abreviatura. En este caso se escribe la abreviatura seguida del punto y se continúa escribiendo de forma usual. Esta última clase de punto no se aplica en determinadas abreviaturas como puntos cardinales, acrónimos o medidas, que se consideran símbolos.
La coma
La coma (,) es un signo de puntuación que señala una breve pausa dentro del enunciado. Se emplea para separar los miembros de una enumeración, salvo los que vengan precedidos por alguna de las conjunciones y, e, o, u o ni. Por ejemplo:
—Tengo perros, gatos, conejos y ratones. —María volvió a casa, hizo los deberes, cenó y se fue a la cama. —Mi casa tiene muebles, mesas y cuatro camas.
Hay tendencias que admiten su uso para separar dos miembros independientes de una oración, haya o no conjunción entre ellos, siempre y cuando sean realmente independientes; pues, si no, estaríamos en el caso anterior:
—Los soldados saludaban, la gente aplaudía y los niños no paraban de cantar.
También se utiliza para delimitar una aclaración o inciso:
—Nacho, mi primo, acaba de conseguir su primer empleo.
Las locuciones conjuntivas o adverbiales, sea cual sea su posición, van precedidas y seguidas de coma, tales como: en efecto, es decir, en fin, por consiguiente, no obstante y otras de la misma clase.
El punto y coma
El punto y coma (;) es un signo de puntuación; gramaticalmente, se utiliza para unir dos oraciones relacionadas en una sola frase (yuxtaposición):
—María estaba apenada por el examen. + María tendrá que estudiar más. = María estaba apenada por el examen; tendrá que estudiar más. —Está lloviendo mucho. + No podremos ir caminando. = Está lloviendo mucho; no podremos ir caminando.
Generalmente se puede sustituir por construcciones del tipo:
—María estaba apenada por el examen y tendrá que estudiar más. —No podremos ir caminando porque está lloviendo mucho.
También sirve para separar los elementos de una enumeración cuando se trata de expresiones que incluyen comas:
—Había que estar en contacto con la naturaleza; dejar entrar el cielo, el mar y el viento; dormir sobre tablones, sobre el suelo; sentarse en sillas medio rotas.
En adición, se usa delante de las conjunciones o locuciones como pero, más, aunque, sin embargo, por tanto, y por consiguiente cuando los períodos tienen cierta longitud:
—Creemos en la creatividad y la ruptura de los opresores cánones antiguos como medio de vida; no obstante, somos conscientes de que es necesario mantener un mínimo de tradición en nuestros trabajos.
Las comillas
Las comillas (« », " ", ' ') son signos de puntuación que se ponen al principio y al final de las frases o palabras escritas como citas o ejemplos, o de aquellas que se quiere destacar, ya sea por importancia que le dé el autor o por su carácter irónico, vulgar o extranjero e impropio de la lengua que se está usando. A pesar de que está verdaderamente extendido el uso de las comillas inglesas (" ") es preferible emplear antes las angulares o españolas (« ») y reservar aquéllas, y finalmente las simples (' '), para cuando deban entrecomillarse partes de un texto ya entrecomillado. Se utilizan, por ejemplo:
- Para citar textualmente algo: p. ej., «Me dijo que "supuestamente llegaría hoy"».
- Para señalar palabras usadas en un sentido distinto del normal, con el fin de indicar que se han seleccionado intencionalmente y no por error.
- Para indicar la intención irónica o sarcástica del empleo de una palabra.
- Para indicar algo sobre una palabra o expresión.
- Para presentar el significado de una palabra o expresión.
- Para destacar que una palabra o expresión es extranjera, se trata de un apodo o de un seudónimo.
En español se utilizan tres tipos de comillas:
- Comillas castellanas, latinas, españolas, angulares dobles o guillemot (« »).
- Comillas dobles o inglesas (" ").
- Comillas simples (' ').
Asimismo, se distingue entre comillas de apertura («, ", ') y comillas de cierre (», ", ').
Cada uno de estos signos tiene su propio uso. Como norma general, se utilizan las comillas castellanas. Si dentro de lo entrecomillado apareciera una segunda cita, se utilizarían otras comillas. Lo más frecuente es entrecomillar desde fuera hacia dentro, en el orden: «..."...'...'..."...»
Las comillas simples se utilizan para marcar ejemplos en casos en que no resulta apropiado el uso de la cursiva. También se prefiere su uso para presentar el significado de una palabra:
—El autor dijo: «las comillas ('signos de puntuación utilizados para demarcar niveles distintos en una oración') se usan profundamente en mi obra».
Dice la norma que los signos de puntuación de una oración que contiene un texto entrecomillado deben colocarse después de las comillas de cierre (sirva de ejemplo el anterior), excepto cuando esa texto no pertenece a ninguna otra oración, es decir, la frase u oración entrecomillada es individual.
En español no se deja espacio alguno entre las comillas y su contenido. Cada idioma tiene sus propias normas de aplicación de las comillas.
Los paréntesis
Los paréntesis (en singular paréntesis) son signos de puntuación. Se usan en pares para separar o intercalar un texto dentro de otro o para hacer una aclaración. Los distintos tipos son:
- Los paréntesis propiamente dichos ( ).
- Los corchetes [ ].
- Las llaves { }.
Para distinguir ambos paréntesis se usa decir:
- Paréntesis que abre o paréntesis izquierdo al símbolo (.
- Paréntesis que cierra o paréntesis derecho al símbolo ).
Igual que las comillas, cuando se han de emplear varias veces en un mismo fragmento se utilizan de esta manera: (...[...{...}...]...)
Signos de interrogación
El signo de interrogación es un signo de puntuación que denota una pregunta. Su origen se encuentra en el latín. La palabra «cuestión» viene del latín questio, o 'pregunta', abreviado como «Qo». Esta abreviación se transformó en el signo de interrogación.
En la mayoría de los idiomas se utiliza un único signo de interrogación al final de la frase interrogativa: How old are you? (inglés; en español «¿Cuántos años tienes?»). Este fue el uso habitual también en español, hasta mucho después de que la segunda edición de la Ortografía de la Real Academia, en 1754, declarase preceptivo iniciar las preguntas con el signo de apertura de interrogación invertido (¿), y terminarlas con el signo de interrogación ya existente (?) («¿Cuántos años tienes?») al tiempo que se ordenaba lo mismo para los signos de exclamación (¡) y (!). La adopción fue lenta, y se encuentran libros, incluso del siglo XIX, que no utilizan tales signos de apertura. Finalmente se generalizó, seguramente debido a que la sintaxis del español no ayuda en muchos casos a deducir en qué momento se inicia la frase interrogativa, como pasa en otros idiomas.
Una variante que no llegó a generalizarse fue la de utilizar la apertura sólo cuando el enunciado fuera largo, o con riesgo de ambigüedad, pero no para las frases breves y claramente interrogativas, como «Quién vive?». La influencia del inglés está haciendo retornar este viejo criterio. Incluso es común que en las salas de chat o conversaciones en línea en español se use solamente el signo (?) para preguntar, ya que ahorra tiempo al momento de presionar las teclas. Esto podría no tener gran importancia debido a que se está utilizando en conversaciones informales.
Puntos suspensivos
Los puntos suspensivos (…), que son únicamente tres, son un único signo de puntuación que se utiliza al final de una palabra, frase u oración en lugar del punto u otro signo. Se utilizan para dejar en duda o en suspense una acción y se representan por tres puntos consecutivos y alineados horizontalmente al nivel de la línea base de escritura. Es totalmente incorrecto escribir más de tres puntos para expresar este signo: no hacen falta más para dar sensación de suspense.
Raya
La raya (—) —que no debe confundirse con el guión bajo (_), especialmente en contextos informáticos, como en correos electrónicos—, que es más larga que el guión (-), se usa para introducir un inciso dentro de un período más extenso y para señalar en los diálogos la intervención de cada locutor. Se escriben dos, una para abrir y otra para cerrar, excepto cuando el diálogo no prosigue, que es recomendable suprimir la última y sustituirla por el obligatorio punto; además, se escriben separadas del resto de la frase con un espacio, y se pegan al propio inciso.
Puede sustituir, en según qué casos, a la coma y el punto y coma para mayor aislamiento; y también a los paréntesis, pero para expresar uno menor.
Usos de la raya:
- Para encerrar los elementos intercalados en lugar de la coma.
- «Las prendas del espíritu joven —el entusiasmo y la esperanza— corresponden, en las armonías de la historia y la naturaleza, al movimiento y a la luz.»
- «Para lograr una buena imagen —que impacte— cuida tus modales.»
- «No iré sino mañana —dijo el niño.»
- En los diálogos, para separar las palabras de cada personaje sin mencionar su nombre.
- «—Luis, la primera impresión en una entrevista es definitiva.»
- «—Lo sé y me estoy preparando.»
- «—Te deseo mucho éxito.»
Para escribir la raya con el teclado informático se debe mantener presionada la tecla «Alt» y pulsar «0151» (en el sistema operativo Microsoft Windows).
Referencias
- Morral, C. Por los senderos de la ortografía. 1996, edita. Universitaria, quinta edición.
Enlaces externos
- Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobre Signos de puntuación.