Federica Guillermina de Prusia

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Pintura de Johann Friedrich August Tischbein, 1789.
Archivo:Wilhelmina of Prussia (.jpg)
Retrato ecuestre de Tethart Philipp Christian Haag, en Rijksmuseum, Ámsterdam.
Pintura de Johann Georg Ziesenis.

Federica Guillermina de Prusia (Berlín, 7 de agosto de 1751-Palacio Het Loo, 9 de junio de 1820) fue una princesa alemana de la Casa de Hohenzollern. Era la consorte de Guillermo V de Orange-Nassau y también el líder de facto del partido dinástico y contra revolución en los Países Bajos. Ella fue la que más tiempo duró como princesa consorte de Orange.

Biografía

Era hija del príncipe Augusto Guillermo de Prusia (1722-1758) y de Luisa Amalia de Brunswick-Wolfenbüttel (1722-1780). A una edad muy joven por razones dinásticas, fue alejada de sus padres. Ella se crió con su abuela Sofía Dorotea de Hannover, desde 1740 la Reina Madre. Luego fue criada por su tía, Isabel Cristina de Brunswick-Bevern, la esposa incolora de Federico II el Grande, que vivía separada de su marido.

Matrimonio

El 4 de octubre de 1767 en Berlín contrajo matrimonio con Guillermo V de Orange-Nassau (1748-1806), último estatúder de las Provincias Unidas.

Recibió su tío, Federico II el Grande, en el Palacio Het Loo en 1768. Para este honorable huésped se organizaron un concierto y una ópera. Federico escribió a su hermana Guillermina que había sido horrible.[1]

Era una persona orgullosa y políticamente ambiciosa. Federica Guillermina dominaba a su esposo y ejerció influencia en la política del estado.

Revolución

Ella estaba profundamente involucrada en los conflictos políticos revolucionarios en los Países Bajos desde 1781 y no era sólo una partidaria y socia, sino que el poder detrás del partido de su esposo. Ella fue reconocida abiertamente como la verdadera líder del dinástico partido estatúder, y sus seguidores la animaron a tomar el papel principal. Mantuvo una gran correspondencia con las potencias extranjeras y utilizó partidarios extranjeros para influir en la política holandesa. En 1785, su esposo se vio obligado a abandonar Den Haag y sometido a una petición para abdicar. Ella lo convenció de no rendirse. Viajó con sus hijos en barco a Friesland, oficialmente a estar en la celebración del 200 aniversario de la Universidad de Franeker, pero en realidad a ganar adeptos en el conflicto político en curso. En 1786, la familia se trasladó a Nijmegen. Cuando estalló la revolución en los Países Bajos y Guillermo trasladó su corte a Guelders, intentó viajar a la capital de La Haya en 1787, el 28 de junio fue detenida, esperando en Goejanverwellesluis una decisión y al final del día enviada de vuelta a Guillermo en Nijmegen.

Líder de la contrarrevolución

Después de haber vuelto a Nijmegen, le preguntó a su hermano por una intervención militar. Ella y su hermano real, el rey Federico Guillermo II de Prusia, sólo con un año en el poder, perciben esto como un insulto, y Federico atacó a la República de Holanda el 13 de septiembre de 1787. Muchos rebeldes tuvieron que huir a Francia, y Guillermo fue restaurado al poder. Ella regresó a La Haya con el apoyo de las tropas extranjeras, y fue celebrada por sus seguidores como la verdadera gobernante de los Países Bajos.

Exilio y vida posterior

Sin embargo, los patriotas holandeses regresaron en 1795 con el apoyo de los franceses, y Guillermo huyó donde su aliado, su primo Jorge III de Inglaterra. La pareja vivió alternativamente en Kew, Nassau y Brunswick, donde Guillermo murió.

Entre 1802-1805 vivían en Alemania. Cuando Federica Guillermina y su hija fueron dos viudas en 1806, vivieron juntas en varios lugares de la Confederación del Rin. Su hijo se fue con su padre al exilio, pero regresó en 1813 para eventualmente convertirse en el rey Guillermo I de los Países Bajos, el fundador de la actual monarquía holandesa. Federica Guillermina y su hija regresaron a los Países Bajos el 10 de enero de 1814. Recibió al zar Alejandro I de Rusia en Haarlem en 1815.

Guillermina falleció en 1820 en el Het Loo y fue enterrada en Apeldoorn. Dos años más tarde, ella fue enterrada en el sótano de la nueva cripta de la Casa de Orange en Delft.

Hijos

Federica Guillermina y Guillermo V tuvieron cinco hijos:

Referencias

  1. Kranenburg-Vos, A.C. (1986) Het Loo. Bouw, bewoning en restauratie, p. 58.

Enlaces externos