Legio VII Gemina
La Legio VII Gemina Felix fue una legión romana creada por el emperador Galba en Clunia cuando fue proclamado emperador por sus tropas en contra de Nerón en el año 68.
Esta legión, nacida como Legio VII Galbiana, le sirvió para completar los efectivos de la Legio VI Victrix y obtener así un ejército que le permitiera convertirse en emperador.
Historia
La unidad viajó con Galba hasta Roma, y, tras su asesinato, se declaró partidaria del emperador Otón, participando junto a él en su enfrentamiento con Vitelio, contra cuyo ejército combatió en la primera batalla de Bedriacum, en la que fue vencida.
Vitelio, una vez obtenida la púrpura, mantuvo la Legión en Italia, donde, como muchas otras unidades que habían apoyado a Otón, se declaró partidaria de Vespasiano, quien, una vez derrotado Vitelio y asegurado en el trono, procedió a refundir los mermados efectivos de la VII Galbiana con los restos de otra legión, posiblemente los de la disuelta Legio I Germanica, que se había pasado al Imperio Gálico durante la revueltas de Civilis, para formar la Legio VII Gemina Felix, enviándola a Pannonia, para reforzar una frontera que había sido debilitada por las pérdidas sufridas por sus unidades de guarnición durante la segunda batalla de Bedríaco.
Hispania: 74–192
En el año 74, el emperador Vespasiano decidió el traslado de la Legio VII Gemina Felix a la provincia Hispania Tarraconensis, asentándola en el antiguo campamento de la Legio VI Victrix en Legio, la actual León, donde permanecería hasta el final de la presencia romana en Hispania, de manera que la única guarnición de toda la Península Ibérica, situada en la mencionada provincia Tarraconensis, la formaba esta legión junto con sus unidades auxiliares.
En el año 89, bajo Domiciano, cuando la unidad estaba dirigida por el futuro emperador Trajano, se trasladó hasta Germania para colaborar en la represión de la revuelta de L. Antonio Saturnino, aunque, pese a realizar una marcha forzada de tan sólo un mes, llegó tarde y no pudo participar en la supresión de esta revuelta, por lo que no obtuvo los epítetos de Pia Fidelis Domitiana, asignados a las legiones y unidades auxiliares que si participaron efectivamente en esta operación.
Poco después, por orden de Domiciano, envió una vexillatio a los Agri Decumates, recién incorporados al Imperio, colaborando en la construcción del sistema defensivo del nuevo limes y de las vías de comunicación locales.
Ya bajo Trajano, la Legión pudo enviar un destacamento al Danubio para participar en las Guerras Dácicas de Trajano. Con Adriano, envió una vexillatio a Britania, colaborando en la construcción del Muro de Adriano. Por orden de Antonino Pío, una vexillatio de la unidad fue transferida al África Proconsular, al campamento de la Legio III Augusta en Lambaesis para combatir contra los Mauri, que amenazaban la estabilidad de las provincias romanas del Magreb.
Bajo Marco Aurelio, combatió contra esos Mauri en la Bética en los años 171, asentando sus reales en Itálica, y nuevamente en 174–175, aunque su participación en esta campaña, dirigida de la Mauretania Tingitana, no es segura.
Sin embargo, su labor fundamental fue la de colaborar con la administración imperial de Hispania, para lo cual mantuvo destacamentos en las zonas de minas de oro de El Bierzo, Lugo, Salamanca y el Norte de Portugal, facilitó escolta y burócratas a los gobernadores provinciales y los procuradores ecuestres, y, en general, se encargó de mantener el orden en las tres provincias hispanas. Así, proporcionó personal al portorium de Tritium magallum (Tricio, La Rioja), al de Lucus Augusti (Lugo), y a la statio de Segisama (Sasamón, Burgos).
También colaboró en la construcción del puente sobre el Río Támega en Aqua Flaviae (Chaves, Portugal). También colaboró con el Ala II Flavia Hispanorum civium romanorum en la construcción de su campamento en Petavonium (Rosinos de Vidriales, Zamora).
Hispania: 192–406
A finales del siglo II, nuestra legión se proclamó partidaria de Clodio Albino y después de Septimio Severo, que le otorgó el epíteto de Pia en 196, pasando a llamarse Legio VII Gemina Felix Pia.
Las figlinae en materiales de construcción del castra de Legio inidcan que la legión fue fiel a Carracalla —Leg VII Gem F.P. Antoninianae—, a Severo Alejandro —Leg VII Gem F.P. Severiana—, y Gordiano III —Leg VII Gem F.P. Gordianae—.
Bajo Aureliano, un destacamento de la unidad fue enviado a Oriente para aplastar el Imperio de Palmira, permaneciendo desde ese momento en la zona.
En el siglo IV, el mencionado destacamento fue integrado en el ejército de maniobra de oriente y fue destruido en la batalla de Adrianópolis, mientras que la unidad de Hispania fue transformada en unidad limitanei, y desapareció a principios del siglo V, en los turbulentos años de la usurpación de Constantino III y Geroncio contra Honorio.
El castra legionis
La excavaciones arqueológicas en la ciudad de León, cuyo casco histórico mantiene las líneas esenciales del castra legionis, han permitido descubrir restos de la muralla campamental, de su foso, de la puerta Principalis Sinistra, del Pretorio y del Principia, de algunos barracones, y de las termas —debajo de la actual Catedral—, junto con monedas, armas, restos de armaduras, y material de construcción sellado con la figlina de la Legión.
Alrededor de este campamento, como era normal con todas las bases militares del Imperio Romano, fue creándose una ciudad civil paralela, la cannaba, en la que se asentaban los comerciantes, prostitutas, magos y todas las personas que se encargaban de cubrir las necesidades de los soldados; en esta ciudad civil, los soldados terminaban por adquirir parejas estables, que se transformaban en madres de sus hijos, y estas uniones, en principio prohibidas pero toleradas por las autoridades romanas, se regularizaban cuando los soldados se transformaban en veteranos. Los restos encontrados indican que esta comunidad civil fue construida en la zona del actual barrio húmedo, al sur del campamento de la legión.
Bibliografía
- Palao Vicente, J. J., Legio VII Gemina (Pia) Felix. estudio de una legión romana, Ed. Universidad de Salamanca, Salamanca, 2006, ISBN 978-847800-546-8.
- Rodríguez González, J., Historia de las legiones romanas, Almena Ediciones, Madrid, 2003, ISBN 84-96170-02-0.
- Rodríguez González, J., Diccionario de batallas de la historia de Roma (733 a.c. – 476 d.c.), Signifer libros, Madrid, 2005, ISBN 84-933267-4-7.
Véase también
- Anexo:Legiones romanas
- Ala II Flavia Hispanorum civium romanorum
- Ala Parthorum
- Cohors I Celtiberorum Equitata civium romanorum
- Cohors I Galica Equitata civium romanorum
- Cohors II Galica
- Cohors III Lucensium
Enlaces externos
- Descubren al menos diez santuarios en el campamento de la Legio VII Noticia del 16 de enero de 2008, Diario de León