Diferencia entre revisiones de «Microbiota intestinal»

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los mas importantes se estas bacterias es que nos propocionan sangre ya que explotan y asi tenemos mas sangre necesaria para los pulmones y la vena yugular

Revisión del 22:54 3 feb 2010

Escherichia coli, una de las muchas especies de bacterias presentes en el intestino humano.

Denominamos flora intestinal a un conjunto de bacterias que viven en el intestino, en una relación con nosotros que a veces es de comensalismo y otras de simbiosis. La gran mayoría de estas bacterias no son dañinas para nosotros, y muchas son beneficiosas. Se calcula que tenemos en nuestro interior unas 2000 especies bacterianas diferentes, de las cuales 100 solamente pueden llegar a ser perjudiciales.[1]​ Muchas especies animales dependen muy estrechamente de su flora intestinal. Por ejemplo, sin ella, las vacas no serían capaces de digerir la celulosa, ni las termitas de alimentarse de madera, ya que no son ellas mismas, sino su flora intestinal, las que son capaces de procesar este tipo de alimentos. En el ser humano, la dependencia no es tan radical, pero sí es importante. Ayudan en ocasiones a la absorción de nutrientes y forman un ecosistema complejo que se autorregula y se mantiene en equilibrio. En otras ocasiones son imprescindibles para la síntesis de determinados compuestos, como la Vitamina K y algunas del complejo B. También tienen efectos colaterales, como la producción de gases, responsables del olor característico de las heces. Algunas de ellas pueden causar infecciones de cualquier gravedad.

En el intestino de los recién nacidos no hay microorganismos, durante las primeras etapas de la vida se va componiendo un tipo de flora inicial, primeramente a partir de la flora vaginal y gastrointestinal de la madre. Posteriormente, por efecto de la leche materna, se favorece un predominio de bífidobacterias en los lactantes alimentados así, y flora diversa en los que reciben otros alimentos. Y por último, tras el destete, se produce una flora de transición que cambia hasta la flora del adulto.

La flora del adulto está influenciada por una serie de factores intrínsecos (secreciones intestinales) y extrínsecos (envejecimiento, dieta, estrés, antibióticos y alimentos con componentes prebióticos o con organismos probióticos).

Al estar compuesta de microorganismos es muy sensible a los antibióticos, y estos son los principales causantes de su destrucción, cuando ocurre.

Se regenera periódicamente, excretándose los microorganismos muertos a través de los desechos. Evita que se desarrollen enfermedades.

Referencias

  1. McFall-Ngai M. (2007). «Adaptive immunity: care for the community.». Nature 445 (153). ISSN 0028-0836.