El costo real del pasaje fue de 81,67$ por pasajero, sin embargo, el Gobierno subsidiaba las rutas por medio de TAME y el pasajero de estos pueblos remotos pagaba únicamente 15$, rebajándolo un 50% para niños, mayores y discapacitados.[1] El resto de ecuatorianos y extranjeros pagaban 60$.[2]
Las deudas de la empresa matriz, TAME, y el impacto de la pandemia del Covid-19 hicieron que la aerolínea acumulase un déficit por valor de 400 millones de dólares, por lo que el gobierno de Lenín Moreno cerró la empresa el 8 de julio de 2020.[3]