Ir al contenido

Diferencia entre revisiones de «Doctrina social de la Iglesia»

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Contenido eliminado Contenido añadido
Kewea (discusión · contribs.)
Sin resumen de edición
Línea 166: Línea 166:


== Principales documentos sociales del Magisterio ==
== Principales documentos sociales del Magisterio ==
{{kYO ESTUBO AKI LALALAL YKIRA AL LADO

'''[[León XIII]]'''
'''[[León XIII]]'''
* [[Rerum Novarum]] (1891) ([http://www.vatican.va/holy_father/leo_xiii/encyclicals/documents/hf_l-xiii_enc_15051891_rerum-novarum_sp.html Ver texto])
* [[Rerum Novarum]] (1891) ([http://www.vatican.va/holy_father/leo_xiii/encyclicals/documents/hf_l-xiii_enc_15051891_rerum-novarum_sp.html Ver texto])

Revisión del 15:57 5 oct 2010

EL SALAS ES LA IGLESIA :D La Doctrina Social de la Iglesia (también, Doctrina Social Cristiana) es un conjunto de normas y principios referentes a la realidad social, política y económica de la humanidad basado en el Evangelio y en el Magisterio de la Iglesia católica. El Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia y el Catecismo católico la definen como un cuerpo doctrinal renovado, que se va articulando a medida que la Iglesia en la plenitud de la Palabra revelada por Jesucristo y mediante la asistencia del Espíritu Santo, lee los hechos según se desenvuelven en el curso de la historia [1]

Tal como afirma el Cardenal Martino en la presentación del Compendio de Doctrina Social de la Iglesia[cita requerida], La doctrina social cristiana es parte integrante de la concepción cristiana de la vida, con la que el beato Papa Juan XXIII, en la encíclica Mater et magistra abría el camino,[cita requerida] hace ya muchos años, a las sucesivas, importantes y profundas precisiones de Juan Pablo II: La enseñanza y la difusión de esta doctrina social forma parte de la misión evangelizadora de la Iglesia[2]​; la doctrina social, instrumento de evangelización(...) anuncia a Dios y su misterio de salvación en Cristo a todo hombre.[3]

No obstante, la primera encíclica social fue la Rerum novarum, escrita por León XIII el 15 de mayo de 1891, en el contexto de los eventos de naturaleza económica y social que se produjeron en el siglo XIX, como la Revolución Industrial y la "Cuestión obrera" dicha inquietud social no da inicio con dicho documento, pues la Iglesia considera que jamás se ha desinteresado de la sociedad.[4]

La Iglesia deja claro que su doctrina social no es una «tercera vía», un camino intermedio entre el capitalismo y el socialismo. No tiene nada que ver con una agenda económica o política, y no es un «sistema». Aunque, por ejemplo, ofrezca una crítica del socialismo y el capitalismo, no propone un sistema alternativo. No es una propuesta técnica para solucionar los problemas prácticos, sino más bien una doctrina moral, que surge del concepto cristiano de hombre y de su vocación al amor y a la vida eterna. Es una categoría propia.[cita requerida]

La doctrina social, además de dirigirse de forma primaria y específica a los hijos de la Iglesia, tiene un destino universal. La luz del Evangelio, que la doctrina social refleja sobre la sociedad, ilumina a todos los hombres: todas las conciencias e inteligencias son capaces de captar la profundidad humana de los significados y de los valores expresados en esta doctrina, así como la carga de humanidad y humanización de sus normas de acción.

[[Archivo:== =D ==]]

La misma expresión “doctrina social” fue usada por el primera vez por Pío XI en su encíclica Quadragesimo anno[nota 1]​ quien cita a León XIII aun cuando reconoce que la preocupación por los problemas económicos y sociales no nació con la Rerum novarum.

Los grandes cambios del siglo XIX como la revolución industrial y el consiguiente crecimiento de las ciudades habían producido graves desigualdades sociales y económicas. Se debatía y se luchaba por establecer una justa relación entre trabajo y capital y de ahí el problema conocido como cuestión obrera. El Papa León XIII afrontó este tema y el de la propiedad privada en su encíclica que se constituyó en documento de referencia y de inspiración para todas las acciones cristianas en el campo social.

Cuando en 1931 se cumplen 40 años de la publicación de la Rerum novarum, el Papa Pío XI publica la Quadragesimo anno donde además de repasar la doctrina anterior y aplicarla a la situación del momento, afrontó los nuevos problemas ligados al crecimiento de empresas y grupos cuyo poder pasaba fuera de las fronteras nacionales. Recuerda además la condena del socialismo así como la insuficiencia del liberalismo. [cita requerida]

Pío XII vivió los años de la posguerra con otro orden internacional al que dedicó sus intervenciones. Aun cuando no publicó encíclicas sobre temas sociales, no dejó de recordar a todos a través de sus radiomensajes, la relación que corre entre la moral y el derecho positivo así como los deberes de las personas en las distintas profesiones. [cita requerida]

Juan XXIII deja dos contribuciones: la encíclica Mater et magistra y Pacem in terris. En la primera habla de la misión de la Iglesia por construir comunión que permita tutelar y promover la dignidad del hombre. En la segunda además de afrontar el tema de la guerra (en tiempos de proliferación de armamento nuclear) sino que afronta el tema de los derechos humanos desde un punto de vista cristiano.

El Concilio Vaticano II trató en la constitución pastoral Gaudium et spes temas de actualidad social y económica como el matrimonio y la familia, la paz y concordia entre los pueblos, etc.

Con Pablo VI hace su entrada en los documentos del Magisterio el tema del desarrollo en la encíclica Populorum progressio haciendo hincapié en la necesidad de que ese desarrollo sea de toda la persona y de todos los hombres.

Juan Pablo II, fuertemente marcado por su experiencia en Polonia, publicó diversas encíclicas sobre temas sociales. La Laborem exercens que presenta una espiritualidad y una moral propias del trabajo que realiza el cristiano. La Sollicitudo rei socialis que retoma el tema del progreso y el desarrollo íntegros de las personas (publicada con motivo de los veinte años de la publicación de la Populorum progressio). Finalmente la Centesimus annus -con motivo del centenario de la publicación de la Rerum novarum- se detiene en la noción de solidaridad que permite encontrar un hilo conductor a través de toda la enseñanza social de la Iglesia. Aun cuando sus predecesores habían tratado temas sociales como orientaciones para la ética social o para la filosofía, Juan Pablo II planteó la Doctrina social de la Iglesia como una rama de la teología moral y dio orientaciones sobre el modo en que esta disciplina debía ser enseñada en los seminarios.Hasta que esto no se hizo.Y luego de esto se cumplió.

Principios de la Doctrina Social de la Iglesia

* Dignidad de la persona humana

Según la Doctrina Social de la Iglesia la persona por estar hecha a imagen y semejanza de Dios, posee una dignidad que la hace superior a los demás seres creados. He aquí alguans citas de la Doctrina Social de la Iglesia al respecto:

"La dignidad de la persona manifiesta todo su fulgor cuando se consideran su origen y su destino. Creado por Dios a su imagen y semejanza, y redimido por la preciosísima sangre de Cristo, el hombre está llamado a ser "hijo en el Hijo" y templo vivo del Espíritu; y está destinado a esa eterna vida de comunión con Dios, que le llena de gozo. Por eso toda violación de la dignidad personal del ser humano grita venganza delante de Dios, y se configura como ofensa al Creador del hombre." (Christifidelis Laici, n. 37)

"La justicia social sólo puede obtenerse respetando la dignidad trascendente del hombre. Pero éste no es el único ni el principal motivo. Lo que está en juego es la dignidad de la persona humana, cuya defensa y promoción nos han sido confiadas por el Creador, y de las que son rigurosas y responsablemente deudores los hombres y mujeres en cada coyuntura de la historia." (Sollicitudo Rei Socialis, n. 47)

"Quien desea que la estrella de la paz aparezca y se detenga sobre la sociedad, contribuya por su parte a devolver a la persona humana la dignidad que Dios le concedió desde el principio" (Radiomensaje de Pío XII "Con sempre", nº 35)

* Bien común:

Un sentido de pensar en el bien de todos los individuos, sin quitar ni el sentido de sociedad, ni de unicidad.

“El Bien Común está siempre orientado hacia el progreso de las personas: ‘el orden social y su progreso deben subordinarse al bien de las personas y no al contrario’ [...]. Este orden tiene por base la verdad, se edifica en la justicia, es vivificado por el amor” (CIC, n. 1906-9 y 1912).

* Destino universal de los bienes, solidaridad, y respeto a la propiedad privada:

"Dios ha destinado la tierra y sus bienes en beneficio de todos. Esto significa que cada persona debería tener acceso al nivel de bienestar necesario para su pleno desarrollo. Este principio tiene que ser puesto en práctica según los diferentes contextos sociales y culturales y no significa que todo está a disposición de todos. El derecho de uso de los bienes de la tierra es necesario que se ejercite de una forma equitativa y ordenada, según un específico orden jurídico. Este principio tampoco excluye el derecho a la propiedad privada. No obstante, es importante no perder de vista el hecho de que la propiedad sólo es un medio, no un fin en sí misma." (Compendio de DSI, 171-84)

«El principio del destino universal de los bienes es una invitación a desarrollar una visión económica inspirada por valores morales que permitan a las personas no perder de vista el origen o propósito de estos bienes, de manera que se logre un mundo de justicia y solidaridad, en el que la creación de riqueza pueda tener una función positiva» (Compendio de DSI, 174).

El respeto a la propiedad privada nace principalmente de 2 Mandamientos del Decálogo: "No robar" y "No codiciar los bienes ajenos". Condena las formas de: comunismo, socialismo, socialismo democrático, y libre mercado en forma desmedida.

* Principio de subsidiariedad: protección a los núcleos, especialmente a la familia en su sentido cristiano.

"Cuán grande sea la dignidad del casto matrimonio, principalmente puede colegirse, Venerables Hermanos, de que habiendo Cristo, Señor nuestro e Hijo del Eterno Padre, tomado la carne del hombre caído, no solamente quiso incluir de un modo peculiar este principio y fundamento de la sociedad doméstica y hasta del humano consorcio en aquel su amantísimo designio de redimir, como lo hizo, a nuestro linaje, sino que también lo elevó a verdadero y gran [1] sacramento de la Nueva Ley, restituyéndolo antes a la primitiva pureza de la divina institución y encomendando toda su disciplina y cuidado a su Esposa la Iglesia..." (Casti Connubii, nº 1)

"La Iglesia, iluminada por la fe, que le da a conocer toda la verdad acerca del bien precioso del matrimonio y de la familia y acerca de sus significados más profundos, siente una vez más el deber de anunciar el Evangelio, esto es, la «buena nueva», a todos indistintamente, en particular a aquellos que son llamados al matrimonio y se preparan para él, a todos los esposos y padres del mundo..." (Familiaris Consortio, nº3)

* Participación social: consiste principalmente en un compromiso del cristiano, en promover una sociedad más conforme con los designios de Cristo.

"Habrá que proclamar con más firmeza las verdades transmitidas por la Iglesia, toda su doctrina sobre la santidad del matrimonio. la educación doctrinal de los niños, la propiedad de bienes y su uso, los deberes para y con quienes administran el Estado; en fin, deberá restablecerse el equilibrio entre los distintos órdenes de la sociedad, la ley y las costumbres cristianas." (San Pío XII)

* Cultura de la vida y de la Calidad de vida: condena a toda forma de atentado contra la vida humana: aborto-incluso en caso terpéutico-, eutanasia, genocidio, homicidio, suicidio, etc. Y promueve que la persona tenga todas las condiciones necesarias para vivir: educación, trabajo, alimentación, salud, etc.

"El hombre está llamado a una plenitud de vida que va más allá de las dimensiones de su existencia terrena, ya que consiste en la participación de la vida misma de Dios. Lo sublime de esta vocación sobrenatural manifiesta la grandeza y el valor de la vida humana incluso en su fase temporal. En efecto, la vida en el tiempo es condición básica, momento inicial y parte integrante de todo el proceso unitario de la vida humana. Un proceso que, inesperada e inmerecidamente, es iluminado por la promesa y renovado por el don de la vida divina, que alcanzará su plena realización en la eternidad (cf. 1 Jn 3, 1-2). Al mismo tiempo, esta llamada sobrenatural subraya precisamente el carácter relativo de la vida terrena del hombre y de la mujer. En verdad, esa no es realidad « última », sino « penúltima »; es realidad sagrada, que se nos confía para que la custodiemos con sentido de responsabilidad y la llevemos a perfección en el amor y en el don de nosotros mismos a Dios y a los hermanos..." (Evangelium vitae, nº 2)

* La existencia de una ley moral: La ley moral se deriva de 3 fuentes: la Revelación, el Magisterio Social, y la conciencia. Las personas, por su misma dignidad, debe conservarla, cumpliendo con sus deberes, amando a Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como a sí mismo.

“Si no existe una verdad última, la cual guía y orienta la acción política, entonces las ideas y las convicciones humanas pueden ser instrumentalizadas fácilmente para fines de poder. Una democracia sin valores se convierte con facilidad en un totalitarismo visible o encubierto, como demuestra la historia” (Juan Pablo II, carta encíclica “Centesimus Annus”, n. 46).

Principales documentos sociales del Magisterio

{{kYO ESTUBO AKI LALALAL YKIRA AL LADO León XIII

Pío XI

Pío XII

Juan XXIII

Concilio Vaticano II

Pablo VI

Juan Pablo II

Benedicto XVI

Notas

  1. Se lee en el número 20:
    De este modo, mostrando el camino y llevando la luz que trajo la encíclica de León XIII, surgió una verdadera doctrina social de la Iglesia [...]

Referencias

  1. Pontificio consejo « Justicia y paz ». «Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, Cap. III, 104».  Parámetro desconocido |url DOCTRINA SOCIAL= ignorado (ayuda);
  2. Ioannes Paulus PP. II. «[[Sollicitudo rei socialis]], cap. VI, 41».  Wikienlace dentro del título de la URL (ayuda)
  3. Ioannes Paulus PP. II. «[[Centesimus annus]], cap. VI; 54».  Wikienlace dentro del título de la URL (ayuda)
  4. Pontificio consejo « Justicia y paz ». «Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, Cap. III, 87».  Parámetro desconocido |url DOCTRINA SOCIAL= ignorado (ayuda);

Bibliografía

Enlaces externos