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Arquitectura Minimalista[editar]

El minimalismo es una corriente artística que utiliza elementos mínimos y básicos con colores puros, formas geométricas simples, tejidos naturales y un lenguaje simple. Dicha corriente y sus parámetros se ven reflejados en su aplicación a diversos ámbitos como la música, la pintura, la escultura y la arquitectura. [1]

El término «minimal» (mínimo en español) apareció por primera vez en el año 1965, en un artículo titulado como “Minimal Art” de la revista Arts Magazine 13 escrito por el crítico británico Richard Wollheim[2]​, para referirse a los objetos de muy bajo contenido artístico como los «ready-made» del artista francés Marcel Duchamp.[3]

Posteriormente, nace el término minimalismo, el cual comenzó a ser utilizado en el ámbito del arte como una expresión que se opone al «pop art» (arte pop en español), el cual, en términos generales engloba el colorismo, la importancia de los medios de comunicación de masas, lo comercial y un arte basado en la apariencia, frente a lo cual, los artistas minimalistas buscaban minimizar lo artístico de las obras con el objetivo de eliminar toda significación y contenido emocional en ellas, para en su lugar poner un mayor énfasis en el interés por el proceso creativo y las hipótesis que se utilizan en su concepción.[3]

La arquitectura minimalista es un estilo arquitectónico iniciado por el arquitecto Ludwig Mies van der Rohe en 1930, y es definida como una composición espacial con pocos elementos, escasas texturas y dos o tres colores.[1]

Este tipo de arquitectura es el resultado de la omisión de la ornamentación innecesaria y el alejamiento del afán materialista, ejerciendo su influencia en el concepto del espacio doméstico y la búsqueda de un estilo de vida basado en la simplicidad. Es un estilo que intenta mostrar una liberación de todo aquello que es inútil, reducido a los elementos básicos que además pretende crear una atmósfera apegada hacia la experiencia sensorial. La arquitectura minimalista responde entonces a los conceptos de simplicidad, de identidad de los materiales y de la abstinencia de decoración.[4]

Origen[editar]

Las primeras expresiones de esta corriente se remontan a finales de los años ochenta, cuando los grandes diseñadores occidentales al querer mostrar al público sus prendas decidieron que entre menos cosas contuviera la vitrina se podría llegar de una manera más impactante y directa a los posibles compradores, pues no se saturaba con información visual a quienes miraban.[1]

Por otra parte, para que los parámetros del minimalismo comenzarán a expandirse de una manera más formal en el terreno de la arquitectura fue influyente la figura del arquitecto austriaco Adolf Loos durante las primeras décadas del siglo XX con sus juicios contra el ornamento en su libro Ornamento y delito (1908); texto en el que no solo se manifiesta en contra del ornamento, el historicismo y el interior burgués, sino que también introduce el principio de racionalidad en la arquitectura y plantea la creación de una nueva distribución para interiores en los que se preserve la intimidad.[5]

Además de los aportes de Loos, los enfoques de los movimientos De Stijl, la Bauhaus y los de la arquitectura tradicional japonesa también jugaron un papel importante en el nacimiento del minimalismo en la arquitectura.

De Stijl[editar]

Artículo principal: De Stijl

El Neoplasticismo o movimiento De Stijl (El Estilo en español) surgió en Holanda en 1917. Fue un movimiento que integró distintas artes como arquitectura, diseño industrial y artes plásticas que perseguía el objetivo de una renovación estética total basada en valores plásticos nuevos, universales y más puros.[3]

Los neerlandeses Theo van Doesburg y Piet Mondrian formularon los conceptos teóricos de la nueva estética que regiría el movimiento: la depuración de la forma hasta llegar a sus componentes fundamentales (líneas, planos y cubos); un planteamiento totalmente racionalista; la creación de ritmos asimétricos con un gran sentido del equilibrio y el empleo de fondos claros (como base de sus tonos principales: los colores primarios del círculo cromático).[3]

Dichos fundamentos asentarían la base para el Racionalismo y más tarde para el Minimalismo en su planteamiento de simplicidad, geometría y orden racional, aunque desechando el intento de crear “valores universales” a comparación de los racionalistas, quienes sí lo adoptaron.[3]

La Bauhaus[editar]

Artículo principal: Escuela de la Bauhaus

La Bauhaus fue la escuela de diseño, arte y arquitectura más importante de principios hasta mediados del siglo XX; aunque en la actualidad aún sigue muy presente. Fundada en 1919 por Walter Gropius en Weimar, Alemania y cerrada en 1933, supuso una renovación completa en la forma de enseñanza de las artes y sus oficios, pues estableció las bases normativas y los patrones de lo que actualmente conocemos como diseño industrial y arquitectura, ya que antes de la existencia de la Bauhaus, estas dos profesiones no tenían la relevancia que hoy tienen para la sociedad.[6]

En el campo de la arquitectura, la Bauhaus incorporó una nueva estética que desechó el “ornamentalismo vacuo” que predominaba en la época, aprovechando los descubrimientos de la Segunda Revolución Industrial, cuyo objetivo era encontrar un camino intermedio entre la renuncia a la imitación de lo antiguo y a un excesivo tecnicismo estandarizador, al conjugar todos los propósitos racionalizadores y funcionalistas de la arquitectura de la Revolución Industrial.[3]

El resultado de este nuevo planteamiento por parte de la escuela alemana fue la formulación de premisas arquitectónicas de un estilo internacional con repertorio formal en constantes relaciones con las vanguardias pictóricas, especialmente con el cubismo, basadas en los siguientes principios: esqueleto estructural del edificio en lugar de simetría axial, preferencia por las formas geométricas simples y ortogonales, empleo del color y del detalle constructivo en lugar de la decoración sobrepuesta, dinamismo del espacio y el uso limitado de materiales como el acero, el hormigón o el vidrio, considerados en ese momento como nuevos materiales.[3]

Características[editar]

La virtud y la riqueza de la arquitectura minimalista recae en el hecho de que en ella, la alegoría no está distribuida en la ornamentación que pudiera ser añadida, sino que por su propia composición formal y significado cultural es capaz de aludir a su época a través de la totalidad de su expresión[7]​, es decir, el diseño arquitectónico minimalista no necesita obligatoriamente de muchos elementos para llegar a una obra de calidad, ya que de ese modo resalta su elegancia y la formalidad de sus espacios. Sus características más destacables son las siguientes:[8]

  • La abstracción.
  • La economía del lenguaje y medios.
  • La producción y estandarización industrial.
  • El uso literal de los materiales.
  • La austeridad con ausencia de ornamentos.
  • El purismo estructural y funcional
  • El orden.

Materiales utilizados[editar]

Los elementos protagonistas en la arquitectura minimalista son el cemento, la madera, el cristal, el mármol, el aluminio y el acero, logrando evitar los "excesos" en las construcciones.

En lo referente al mobiliario, el material predominante es la madera natural.[1]

Colores utilizados[editar]

El uso de los colores en la arquitectura minimalista es esencial, ya que esta tendencia se resguarda en una combinación de colores que no salen de la armonía. Para que la arquitectura sea minimalista es importante lograr una monocromía entre suelos, paredes y techos (no debe de haber estampados, sino, colores lisos), siendo el color blanco el predominante en esta tendencia, combinado casi siempre con el negro, mientras que los contrastes serán generados por los muebles y objetos agregados, cuyos colores a tener en cuenta son los crudos como el gris claro, el hueso, el marfil, el arena o el crema.[9]

El espacio[editar]

Hay implícito un concepto dimensional en cuanto al espacio contenedor de las expresiones minimalistas: es grande, dado por la limpieza y la pureza de los pocos elementos que siempre componen este estilo arquitectónico.[1]

La luz[editar]

La luz natural es un elemento esencial en la arquitectura minimalista, ya que ésta tiene la capacidad de ampliar sensorialmente los espacios, además de aportar calidez y comodidad al ambiente. Si hay algún espacio en el que no se pueda incluir la luz natural o en las horas nocturnas, se deberán de utilizar lámparas discretas con formas geométricas y simples.[10]

Elementos arquitectónicos [1][editar]

  • Uso de grandes ventanales y puertas de cristal.
  • Áreas comunes abiertas, que le permitan al usuario una circulación libre.
  • Las fachadas destacan por su simplicidad, serenidad, sobriedad y líneas geométricas rectas.
  • Pisos planos muy lisos, sin molduras ni bastidores.
  • Las puertas y vanos de comunicación son elementos esbeltos, de líneas puras y rectangulares; no se ven arcos simples ni de medio punto, ni formas "caprichosas" o floridas.
  • En los enchapes en pisos y paredes, el formato se agranda al máximo para disminuir las juntas que dan un efecto visual fraccionado.
  • Los muros son uno de los protagonistas del espacio: sólidos y la mayoría de las veces blancos.

Ventajas y desventajas[11][12][13][editar]

Ventajas[editar]

  • Dado que el minimalismo consiste en quedarse solo con lo que aporta, la ausencia de elementos que generan distracción y las líneas sencillas generan estética al espacio y una sensación de orden, pues el poseer menos otorga la capacidad de tener menos presión, estrés y ansiedad en el día a día.
  • Existe una facilidad al elegir los colores del espacio, ya que normalmente se utilizan colores blancos, grises o negros.
  • Al predominar el blanco; un color que no absorbe la luz, genera espacios con bastante iluminación natural.
  • Se gana financieramente por la baja necesidad de gastar en demasiadas cosas.

Desventajas[editar]

  • No permite expresar tanta personalidad por el estilo homogéneo.
  • El proceso de sacar todo lo que no sirve o lo que uno no necesita puede ser agotador y desgastante por dejar ir cosas del pasado.
  • Es un estilo que se piensa principalmente para personas adultas debido a que es formal y monótono.

Arquitectos destacados[14][editar]

Principales obras[editar]

Pabellón Alemán por Ludwing Mies van der Rohe en Barcelona, España (1929).

Artículo principal: Pabellón alemán

Diseñado para otorgar voz al espíritu de una nueva era en Alemania, el pabellón está caracterizado por su elegante composición minimalista, así como por la carencia de función programática específica (destinada únicamente a recepciones y ceremonias) que se refleja en el uso de superficies horizontales y verticales.[7]

Vista exterior del Pabellón Alemán en Barcelona, España.


Casa Estudio de Luis Barragán por Luis Barragán en Ciudad de México, México (1948).

Artículo principal: Casa Luis Barragán.

La fachada exterior se presenta con un diseño sobrio y una apariencia simple y austera. Presta principal atención a la funcionalidad y optimización de espacios. La casa está iluminada por un conjunto de acentos luminosos precisos tales como volúmenes rectangulares y cilindros.[15]

Fachada Casa Estudio Luis Barragán en Ciudad de México, México.
Terraza Casa Estudio de Luis Barragán en Ciudad de México, México.


Capilla de la Luz por Tadao Ando en Oska, Japón (1989).

Artículo princal: Iglesia de la Luz

El volumen de la capilla es austero y destaca por la simpleza con la que se resuelven los distintos elementos compositivos como lo es la luz que ingresa de forma libre a través de extensas ranuras[16]​ y la resolución  del edificio bajo la concepción espacial japonesa.

Maqueta de la Capilla de la Luz en Osaka, Japón.

Casa Gaspar por Alberto Campo Baeza en Zahora, España (1992).

Está caracterizada por el uso del color blanco en todos los parámetros, el cual contribuye a la claridad y continuidad de esta arquitectura. Destaca la sobriedad en los muros y el uso de formas simples. La doble simetría de la composición queda patente, así como la luz que ingresa a la vivienda de manera horizontal y continua reflejada en las tapias de los patios.[17]

Fachada de la Casa Gaspar en Zahora, España.
Patio de la Casa Gaspar en Zahora, España.

Actualidad[editar]

El estilo minimalista es uno de los más utilizados en la actualidad en las construcciones. El éxito de este tipo de arquitectura en nuestros tiempos se debe principalmente a que sintoniza en la misma frecuencia de la modernidad, donde toda conceptualización debe estar muy cerca de lo funcional, de la síntesis y de la sencillez.[1]

Referencias[editar]

  1. a b c d e f g Delgado Pazos, Edgar (mayo, 2008). «Arquitectura Minimalista». Menos es más (Universidad de Antioquia) (143): pp. 2-5. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  2. Concha Freire, Isadora Beatriz (2022). «MINIMAL MYKONOS: fotografía arquitectónica y sus influencias». UNIVERSIDAD FINIS TERRAE. Consultado el 29 de mayo de 2022.
  3. a b c d e f g Che-Hui, Lin (noviembre, 2009). «El ZEN y el minimalismo (arquitectura y diseño del interior) ¿semejanza morfológica superficial o conexión ideológica causal?». En Las tesinas de Belgrano. Universidad de Belgrano-Facultad de Arquitectura y Urbanismo-Licenciatura en Diseño de Interiores. Consultado el 29 de mayo de 2022.
  4. Kannangara, Suranga Sanjeeweni (2004). «Minimalism in Architecture with special reference to Contemporary Domestic Spaces». University of Moratuwa. pp. 1-97. Consultado el 29 de mayo de 2022.
  5. Rodríguez Machado, Virginia. (2021). «Minimal Art». Universidad de La Laguna. Consultado el 29 de mayo de 2022.
  6. Solano Meneses, Eska Elena (marzo-junio 2021). «La Bauhaus y la racionalización». La Bauhaus y el proceso de racionalización del diseño: una mirada retrospectiva y prospectiva (Revista de estudios interdisciplinarios del arte, diseño y la cultura) (2): pp. 30. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  7. a b Aguilar Reyes, Emilio (18 de diciembre de 2019). «Sobre el minimalismo: el carácter prototípico de Mies». Los prototipos (VAD. Veredes, Arquitectura Y divulgación) (2): pp. 70-81. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  8. Acuña, B. (2016). DISEÑO ARQUITECTÓNICO MINIMALISTA. ACADEMIA. Consultado el 29 de mayo de 2022, de
  9. Fernández, M (29 de julio de 2014). «Los colores del estilo minimalista». Pisos.com. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  10. «La arquitectura minimalista, sus características, diseños y colores». Enciclopedias.com. 6 de agosto de 2020. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  11. Abascal, María. «Pros y contras de la decoración minimalista». Indima Home. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  12. Hidalgo, Susana (12 de mayo de 2021). «Los beneficios del minimalismo». Forbes España. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  13. Riestra, Carlos (13 de enero de 2020). «Minimalismo…Beneficios y desventajas como estilo de vida.». Histoias de Éxito. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  14. Arqhys Construcciones (2012). «Arquitectos Minimalistas». Portal de arquitectura ARQHYS.com. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  15. García Casillas, Elisa Marcela (noviembre, 2011). «Reflexiones: Interioridad de la casa estudio de Luis Barragán». Universidad Autónoma de Aguascalientes. Consultado el 29 de mayo de 2022.
  16. «Clásicos de la arquitectura: Iglesia de la Luz / Tadao Ando Architect & Associates». ArchDaily México. 18 de enero de 2011. Consultado el 29 de mayo de 2022. 
  17. «Casa Gaspar / Alberto Campo Baeza». ArchDaily México. 13 de agosto de 2015. Consultado el 29 de mayo de 2022.