Iglesia de Santa María de Uríbarri

Iglesia de Santa María de Uríbarri
Tipo basílica, iglesia y monumento
Estilo arquitectura gótica
Catalogación patrimonio construido vasco destacado y bien de interés cultural
Parte de Conjunto monumental de Durango
Localización Durango (España)
Coordenadas 43°10′05″N 2°37′53″O / 43.167963, -2.631298
Culto catolicismo
Mapa

La iglesia basílica de Santa María de Uríbarri[a]​ es un templo católico situado en el municipio vizcaíno de Durango en el País Vasco en España.[1][3]

La iglesia de Santa María de Uríbarri es uno de los más monumentales del País Vasco, de estilo gótico y barroco severo, el edificio actual data de finales del XV, la parte gótica y primera mitad del XVI la barroca. La nave mayor destaca sobre la laterales y en el ábside se abren, entre contrafuertes, se abren sendas capillas. El coro, realizado entre 1490 y 1510, es uno de los mejores del estilo "Reyes Católicos" de Vizcaya. El templo está caracterizado por un gran pórtico de madera sin columnas de estilo barroco realizado en 1678 considerado como el mayor de Europa. La torre se sustenta en la casa torre de Arandoño y acaba en pináculos y crestería.

En el interior destaca el retablo mayor de estilo renacentista romanista realizado en 1578 dedicado a la avocación de la Virgen María, obra del maese Martín Ruíz de Zubiate. [4]

El templo resultó muy dañado en el bombardeo del 31 de marzo de 1937 y fue reconstruido en 1945 manteniendo el cuerpo gótico.[5]​ Junto al casco histórico de Durango, del que forma parte, está categorizado como o Bien Cultural Calificado, con la categoría de Conjunto Monumental.[6]

Historia[editar]

La construcción de la iglesia de Santa María de Uríbarri se debió al deseo de Munio López, también conocido como Manso López, hijo del segundo Señor de Vizcaya Jaun Zuria y se Belasquita Sánchez hija de Sancho I Garcés rey de Pamplona, a de levantar un templo a la advocación de Santa María delegando en su prima Menina de Arandoño el encargo de realizarlo anexo a la casa torre de Arandoño. Gonzalo de Otalor en su obra Micrología del assiento de la noble merindad de Durango publicada en Sevilla en 1634 lo relata de la siguiente forma

...que López Zuría tuvo de Dalda un hijo, que se llamó Manso López y fue bautizado en la iglesia de San Pedro de Tavira, y muerta su madre y enterrada en ella, vino con deseos de edificar una iglesia suntuosa bajo la advocación de Sta. María, cuya efigie hermosa y devota tenía en su oratorio. Pero al morir dejó a su prima Menina de Arandoño, señora del mismo solar, el cuidado de dicha edificación con palabra de cumplirlo, como lo hizo...[7]

Las primeras noticias documentadas sobre la iglesia de Santa María de Uríbarri se remontan a la visita que la reina Isabel I de Castilla realizó a la villa el 19 de septiembre de 1483. En el actual edificio se aprecian dos etapas constructivas diferentes, la primera gótico-renacentista realizada a partir de 1498 y que se atribuye a Miguel de Albiz y la segunda fase clásica-barroca, que se desarrolló a partir 1622 y en la que trabajó del tracista durangués San Juan de Urizarzabala y en ella trabajó en 1622 el cantero de Fórua Sebastián de Zárraga y en 1645 el eibarrés Juan de Ansola. Está fase constituyó una reforma profunda del templo.[4]

En 1592 se detectan problemas estructurales, debidas a los efectos de los incendios que se habían producido y a la inestabilidad del subsuelo. En 1607 se encarga a a Ibáñez de Zalbidea un estudio de reparación de los daños existentes del cual emana la decisión de rehacer la capilla mayor que se encarga a Martín de Ormaechea asociado con Juan González de Matategui, los cuales comienzan la obra en 1609 pero deben ser detenidas al como tiempo al no tener estabilidad la construcción. Se encarga un estudio a los arquitectos Miguel de Aranburu, que era fraile franciscano y al vitoriano Juan Vélez de Huerta que determinan los problemas de la traza y realizan un nuevo proyecto que encargan para su construcción a los canteros Bernabé Pérez de Solano y Martín de Arriluceaga. Se actúa en la zona de la cabecera, pilares y capillas y se levanta, con el objetivo de reforzar las bóvedas del coro, un pórtico a los pies del templo, función que no cumpliría.[8]

En 1619 se decide realizar una gran reforma, literalmente "hacer la iglesia deshaciéndola de nuevo". Participan los arquitectos Juan de la Vega, Pedro de Bengoechea, que diseñaría la portada del lado de la Epístola, y Juan de Albiz. Finalmente el cantero San Juan de Urizarzabala redacta las condiciones de la nueva obra en 1622.

Se decide transformar el templo de una nave en otro de tres naves pero que se alzarían sobre los viejos cimientos y se perforarían los estribos que separaban las capillas hornacinas bajas del edificio antiguo, dando lugar a una iglesia de tres naves y cinco tramos de planta rectangular con una cabecesa en ábside poligonal flanqueada por dos pequeños ambientes absidiales. La nave central resulta ser mucho mayor que las laterales, dando al conjunto una desproporción evidente. Los tramos se definen con pilastras toscanas rematadas por capiteles corintios y las dovelas resaltadas de los arcos de medio punto que la comunican con las naves laterales. Se desmontó la bóveda original que se volvió a poner sobre la nave central una vez finalizada esta, resultando la mezcla de dos lenguajes diferentes, el clasicista de la parte inferior (traza severa, en donde prima la decoración lineal apanelada, con referencias a Herrera en el fino cajeado de arcos y pilastras) y el superior netamente gótico.[8]

El maestro cantero Sebastián de Zarraga realiza la labor de desmontar la bóveda de la nave mayor y volverla a montar tras la construcción de la nave del lado de la Epístola y la portada del acceso desde ese lado a la que modificó la traza realizada por el maestro cantero Bengoechea y añadió algunos elementos ornamentales, finalizaría en 1629.[8]

En 1631 muere Zárraga y el proyecto se sigue ejecutando bajo la responsabilidad de su viuda, María José de Elespeitia, quien contrató como oficial director a Juan Sáenz de Ormaechea que seguiría la obra hasta que en 1643 muere la viuda de Zárraga. En 1636 maestro cantero Martín de Recalde pide hacer un nuevo estribo al lado del mediodía para poder soportar la bóveda, evidenciando la existencia de inestabilidades que no s eresolverían hasta tiempo después. Tras la muerte de María José de Elespeitia la dirección de la obra pasa a Juan Ortiz de Olaeta quién la traspasar al guipuzcoano Juan de Ansola que se encargaría de el abovedamiento del templo, y el macizado de paredes y ventanas.[8]

La recolocación de la bóveda de crucería de terceletes de la nave mayor contó con programa decorativo concreto, en la capilla mayor y el primer tramo presentan al centro un Cristo en Magestad flanqueado por cuatro claves con el tetramorfos y otras dos con el cordero pascual y un ángel. En el fajón entre el primero y segundo tramo acoge una cruz de la Orden de Santiago. En el segundo tramo, al centro obispo con su tiara. El resto de las claves son estrelladas de ocho y seis puntas, salvo el fajón que separa el segundo tramo que lleva una cruz patada. Las naves laterales se cubren con bóveda de crucería simple con clave central de florón. Las obras quedaron terminadas en 1669. En 1667 se decidió realizar un refuerzo de la estructura por el lado norte, el lado del Evangelio, para ello se le encargó al cantero Roque de Larrea la construcción de cinco estribos para que soportaran las presiones de las bóvedas por ese lado.[8]

En 1691 se contrata al arquitecto José de La Incera y Vega para la inspección de las grietas que existían en los tres pilastrones de la entrada de la Iglesia determinándose que ponían en riesgo la integridad del lienzo de pared del Mediodía y sus bóvedas, por lo que realiza el proyecto de reparación de los muros del mediodía y de la parte Norte del templo que ejecuta Juan de Aguirre Azcuenaga y finaliza en el año 1713.[8]

En el año 1678 se decide la construcción de un gran pórtico de madera en el lado de la Epístola, fachada sur, en el que se abre el acceso que mira al casco urbano. Se realizó, entre 1679-1687, bajo las trazas del maestro carpintero Domingo de Barraincua y el cantero Martín de Gabiria. La ejecución la realizaron el carpintero Vicente Arrien y el cantero Martín de Olaguiben. La construcción finalizó el 11 de enero de 1687.

Este espacio fue utilizado como cementerio y luego como mercado. Siempre ha sido un espacio asociado a la actividad social de Durango.[9]

En 1578 se realiza el retablo mayor, obra del retablista Martín Ruíz de Zubiate de estilo romanista y posteriormente se van construyendo los retablos laterales, todos ellos de tipo barroco, que se adornan con imágenes de diferentes épocas. El retablo fue restaurado en 1914.

El 31 de marzo de 1937, en el transcurso del bombardeo de Durango realizado por Aviación Legionaria italiana en la ofensiva del Frente Norte que realizaron las tropas del bando franquista en la Guerra Civil Española bajo las órdenes del general Emilio Mola, la templo sufrió grandes daños, derrumbándose las bóvedas, el pórtico y destruyéndose las cristaleras y el órgano. La torre de la iglesia fue uno de los puntos referenciales para la definición de los ejes el bombardeo. Estaba en el eje que desde Kurutziaga llegaba a la estación del ferrocarril.

En 1940 se realiza la reconstrucción del templo impulsada por Wenceslao Mayora, arcipreste de la iglesia tras la entrada de los franquista a la villa, resteándose la traza gótica y se realizó la pavimentación del pórtico. En ese trabajo participó un batallón de trabajadores formado por prisioneros de guerra y políticos. En 1942 se instaló un nuevo órgano construido por la empresa alemana Walker & Ludwigsburg. Se construyó una "Capilla de los Mártires" con los nombres de los vecinos de Durango que cayeron luchando con los fascistas. La capilla fue retirada el el 31 de marzo de 1978 tras la muerte del dictador Francisco Franco.

En los año 60 del siglo XX se realizan reformas en el presbiterio para adaptarse a los cambios requeridos por el Concilio Vaticano II modificando el Aspecto del mismo.[10]

En 1986 Santa María de Uríbarri fue declarada como basílica y por tal motivo se construyó e instaló en la torre una campana conmemorativa y se restauraron todas las demás. También se cambió el reloj, cuya maquinaria quedó expuesta a pies de la torre, instalándose un sistema electrónico telecontrolado.[11]

En enero de 2023 se comienza la restauración y remodelación del gran pórtico de madera que se inaugura en diciembre de ese mismo año. El proyecto lo realizó el arquitecto Oier Bizkarra y la dirección de obra fue a cargo de la arquitecta Cristina Zarrabeitia. Se realizó una limpieza a profundidad de la estructura y se eliminaron piezas deterioradas y que no cumplían con su función tradicional y sustituyeron los ensamblajes. Se realizó una nueva instalación de iluminación que se integra en la estructura de madera y permite diferentes escenas en función del uso diario, de feria o de eventos que se puedan realizar en el pórtico.[12]

Pórtico de la iglesia de Santa Maria de Uribarri.

Descripción[editar]

Santa María de Uríbarri ocupa un punto focal dentro de la puebla medieval, en un extremo de la población. Forma "pendent" con el templo barroco de Santa Ana, que junto con el Arco de su mismo nombre, se ubican en el lado opuesto del casco histórico. Resulta hoy, después de las diversas reformas y añadimientos, un edificio de pretensiones monumentales. En primer lugar es un edificio grande, uno de los mayores de Bizkaia, y después, es un templo rico, cuya riqueza proveniente de sus propias rentas y de donaciones particulares.

Construida en el siglo XVI, está protegida bajo la categoría de «zona de presunción arqueológica».[1]​ En el Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar de Pascual Madoz se menciona como segunda parroquia de Durango, y se dicen las siguientes palabras acerca de ella:

es de hermosa fábrica de 140 pies de long y 88 de lat. con tres naves, 11 altares y buen órgano; tiene al costado del S. un espacioso cementerio de 175 pies de largo y 47 de ancho, enlosado el año de 1775».[13]

Décadas después, ya en el siglo XX, se describe en el tomo de la Geografía general del País Vasco-Navarro dedicado a Vizcaya y coordinado por Carmelo de Echegaray Corta, con las siguientes palabras:[3]

La principal iglesia de Durango es la de Santa María de Uríbarri, reedificada á fines del siglo XVI, y que conserva vestigios de su construcción anterior. La forman tres naves góticas; son sus altares de gusto plateresco, y del retablo del altar mayor se dice que recuerda á Guiot de Beaugrant, célebre estatuario que construyó el de Santiago de Bilbao, desaparecido á mitad del siglo XIX. El coro está formado por un atrevido arco escarzano, en bóveda, sostenido por cuatro lindísimas columnas empotradas en las primeras pilastras de la iglesia, todo recamado de una rica ornamentación, cuyo frontis representa el firmamento tachonado de estrellas y el sol y la luna en sus extremos. La sillería del coro, de madera de cedro, es de buena talla, y en el vano principal de la pared frontera al altar mayor, hay un cuadro representando á Nuestra Señora de Guadalupe de México, regalado á la iglesia en 1764 desde aquella ciudad por don Antonio de Meabe, natural de Durango, cuyo grandioso marco, tallado y dorado, es una verdadera obra artística. La sacristía de esta iglesia es cómoda y espaciosa, y recorre todas sus paredes un alto friso de madera tallado con gusto y delicadeza, y una hilera de armarios donde se guardan los ornamentos y las alhajas. El pórtico de esta iglesia merece también una mención especial. Está formado de atrevidos árcos de madera, cuya ensambladura es notable para la época en que se ejecutaron. En el anchísimo espacio que cubren, embaldosado perfectamente, pueden cobijarse más de dos mil personas. Sirve de paseo en los días lluviosos, y es el punto de reunión de los durangueses acomodados.

El templo consta de tres naves, siendo la central más alta y amplia que las laterales, en las que se abren algunas capillas. La cabecera está conformada por un ábside octogonal tras el cual se alza la torre campanil, sobre el vestigio de una antigua casa torre. La nave central se alza sobre columnas clasicistas que se completan con pilastras cruciformes y corintias compuestas sobre los que apoyan arcos de medio punto y se abre un Ándito descubierto con antepecho de forja que recorre todo el perímetro del templo. Las naves están abovedadas en crucería destacando la central donde es más compleja con bóveda de terceletes. A los pies se levanta el coro apoyado en un amplio arco escarzano ricamente decorado con enjutas tachonadas de estrellas, imaginería y bóveda de crucería, con claves labradas.

El exterior está dominado por los contrafuertes y arbotantes lateares y a los pies un porche con elegante friso de triglifos y metopas que cobija una de las entradas. Este porche es un templete de planta cuadrangular cubierto con armadura de madera. En dos de los lados se abren dos grandes arcos de medio punto con intradós casetonado que se apoyan en pilastras cajeadas con capitel dórico. Se cobre con un tejado con un alero poco volado con canes de perfil zapata-cartón con cordoncillo central. La portada, que se inscribe dentro del programa de una portada en arco de triunfo, fue diseñada por Domingo de Anitua y construida por Martín de Arriluceaga. Esta conformada por dos pisos sobre alto zócalo. En el piso inferior se ubica un cuerpo de seis pilastras lisas sobre las que se apoya una cornisa toscana. En el centro se abre un arco de medio punto dovelado con lave resaltada que está flanqueado por los cuatro de los soportes de forma pareada. Sobre este arco hay una hornacina de medio punto avenerada en la que se halla una imagen de Santa María. El cuerpo superior es una prolongación del inferior mediante las cuatro columnas centrales. Se forman dos nichos arquitrabados en el que el inferior alberga un escudo de armas de Durango fechado en 1636 quedando el nicho superior vacío. El conjunto culmina en un frontón en cuyo tímpano de decora con un tondo de placa.

La entrada por el lado de la Epístola, realizada por el cantero Sebastián de Zarraga sobre un diseño del maestro cantero Bengoechea que modificó, se distribuye en dos niveles, el inferior esta formado por un cuerpo de pilastras pareadas toscanas que sostienen un entablamento liso, mientras que el superior es una hornacina avenerada en la que hay una figura del Sagrado Corazón de Jesús (de traza reciente). El conjunto se remata con un frontón recto rematado en pináculos bulbosos. El ingreso se hace con un un arco de medio punto, sobre pilastras cajeadas con capiteles toscanos.[8]

El elemento más representativo y espectacular de todo el conjunto es el gran pórtico del lado sur. Es un espacio de grandes dimensiones de planta rectangular, con las esquinas achaflanadas, abierto a la calle por una arquería de doce arcos de medio punto, con intradós cajeado. La cubierta está resuelta con una gran estructura de madera de diez tirantes en arco carpanel grapados con otros rectos que descansan en apeos verticales recibidos por pilastras en el muro del templo.


https://www.retablosdebizkaia.com/durango-retablo-mayor-de-santa-maria-de-uribarri/

Notas[editar]

  1. Referida indistintamente como iglesia[1]​ o como basílica.[2]

Referencias[editar]

  1. a b c «Iglesia de Santa María de Uríbarri». Gobierno Vasco. Consultado el 23 de diciembre de 2022. 
  2. «Basílica de Santa María de Uríbarri». Gobierno Vasco. Consultado el 23 de diciembre de 2022. 
  3. a b Echegaray Corta, 1915-1921, pp. 702-703.
  4. a b PATRIMONIO HISTÓRICO DE BIZKAIA Iglesia de Santa María de Uribarri (Durango) Medio: Diputación Foral de Bizkaia autor: Iñaki Madariaga. Fecha de la consulta: 31 de marzo de 2024
  5. Santa María de Uribarri (Durango) Medio: Iglesias de Bizkaia Autor: Redacción Fecha: 2018
  6. Boletín oficial del País Vasco nº 20 BOPV 30-01-1997 Medio: Boletín oficial del País Vasco Autor: Redacción Fecha: 30 de enero de 1997
  7. [https://ojs.ehu.eus/index.php/ASJU/article/download/18814/17763 Diego Lorenzo Urkizuren 1740ko zortzikoak A critical edition of Diego Lorenzo Urkizu’s verses (1740) (Una edición crítica de los versos de Diego Lorenzo Urkizu (1740) Medio: Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea UPV/EHU Autor: Eneko Zuloaga ISSN: 0582-6152 — e-ISSN: 2444-2992 ASJU 49-1/2 (2015 [2018]), 179-201]
  8. a b c d e f g Arquitectura religiosa clasicista en el duranguesado Medio: Eusko Ikaskuntza. Autores: Iñaki Madariaga Varela y Ana Isabel Leis Alava Fecha: 10 de marzo de 20003 Ref: BIBLID (1137-4403 (2003), 22; 203-222)
  9. IGLESIA DE SANTA MARIA DE URIBARRI Medio: Gobierno Vasco departamento de cultura y política lingüística Patrimonio Cultural Onderrea Autor: Redacción Fecha de la consulta: 31 de marzo de 2024
  10. Durango Arte Medio: Enciclopedia Auñamendi Eusko Ikaskuntza Autor: Redacción Fecha de la consulta: 31 de marzo de 2024
  11. [https://www.elcorreo.com/bizkaia/duranguesado/201703/01/arranca-restauracionde-casa-torre-20170228233856.html Arranca la restauración de la casa torre de Arandoño en Durango La construcción, ubicada junto a la basílica, presenta grietas y elementos sueltos que «podrían desprenderse» Medio: El correo. Autor: M. D. Fecha: 1 de marzo de 2017]
  12. Durango culmina la reforma del pórtico de Santa María. Con 900.000 euros de presupuesto, la estructura ha quedado consolidada. Medio: Deia Autor: K. Doyle Fecha: 1 de diciembre de 2023
  13. Madoz, 1847, p. 422.

Bibliografía[editar]

Enlaces externos[editar]