Ciberadicción
La ciberadicción, también conocido como trastorno de adicción a internet (internet addiction disorder, IAD) es un término que se refiere a una supuesta patología que supone un uso abusivo de Internet, a través de diversos dispositivos (ordenadores, teléfonos, tabletas, etc.), que interfiere con la vida diaria. Sin embargo, a pesar de los intentos de los defensores de sus existencia, la comunidad médica y las fuentes oficiales han rechazado en repetidas ocasiones que dicha patología exista. Oficialmente sólo se puede hablar de un uso excesivo de internet que, si afectara a la vida diaria, sería por otras causas y el uso excesivo sería una consecuencia y no una causa de patología.
Distintas posturas sobre la existencia o no del trastorno
Contra la existencia
Según la catedrática de psicología de la Universidad de Deusto Helena Matute[1] no existe la llamada "ciberadicción". La teoría se basa en:
- El término "adicción a Internet" fue originalmente una broma de correo electrónico.[1]
- La adicción a Internet no figura en el DSM V (editado el 18 de mayo de 2013), el manual más utilizado para el diagnóstico de desórdenes mentales, editado por la Asociación Americana de Psiquiatría, y tampoco ha sido aceptada por la Asociación Americana de Psicología. Los defensores de su existencia se escudan en que la red Internet es aún muy nueva y por eso no ha sido aún aceptada la existencia de esta adicción por las principales asociaciones profesionales. Su inclusión en el DSM V (el DSM IV data del año 2000) se encontraba a debate.[2] Al parecer fue rechazada de nuevo, incluyéndose, que tenga que ver con Internet, sólo la adicción al juego por Internet, como variante de la adicción al juego y desestimando así de nuevo que exista algo llamado "ciberadicción" o "adicción a Internet".
A favor de la existencia
A pesar de que su rechazo por la comunidad internacional, varías clínicas y una minoría de expertos insisten en su existencia como adicción y/u ofrecen una terapia para curar la supuesta patología. Oficialmente se considera que pueda existir un "uso excesivo", pero nunca una "adicción", y que sus causas vendrán motivadas no por Internet en sí, si no por causas externas que llevan al usuario a buscar una vía de escape en Internet y sus posibilidades. Una de las causas más valoradas son los problemas para establecer relaciones sociales, algo más sencillo de conseguir por Internet gracias al anonimato y desinhibición, aunque puedan resultar más efímeras.
De acuerdo a Aguilar y Octavio [3] los factores estresantes están relacionados en gran medida con las adicciones. Comenta Michael Kunar [4] que todas las drogas, el uso del Internet, y el chocolate afectan de forma similar al cerebro, por esta razón se puede decir que aunque el abuso del Internet no es considerado como una adicción tiene características similares a las de una persona adicta.
Véase también
- Adicción a los videojuegos
- Workahólico
- Juego compulsivo
- Cibersexo
- Phubbing
- Nomofobia
- Procrastinación
- Cyber Seduction: His Secret Life
- Detox digital
Notas y referencias
- ↑ a b Helena Matute (ed.). «La adicción a Internet no existe». La adicción a Internet no existe.
- ↑ «La inclusión de la ciberadicción en el DSM V a debate». La inclusión de la ciberadicción en el DSM V a debate. Archivado desde el original el 26 de febrero de 2012.
- ↑ «Algunos factores relacionados con las adicciones».
- ↑ «Cerebro Adicto».
Enlaces externos
- http://www.oocities.org/HotSprings/6416/ciberadiccion.htm
- http://revistas.uap.edu.pe/ojs/index.php/HAMUT/article/viewFile/1309/1287