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Diferencia entre revisiones de «Paranthropus»

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Es de advertir que los científicos que rechazan la existencia de ''Paranthropus'' como un género diferenciado designan estas especies como ''Australopithecus robustus'', ''Australopithecus boisei'' y ''Australopithecus aethiopicus''.{{cita requerida}}
Es de advertir que los científicos que rechazan la existencia de ''Paranthropus'' como un género diferenciado designan estas especies como ''Australopithecus robustus'', ''Australopithecus boisei'' y ''Australopithecus aethiopicus''.{{cita requerida}}

==Descripción==
===Cráneo===
El ''Paranthropus'' tenía un cráneo masivo, alto y plano, con una prominente [[gorila]] cresta sagital a lo largo de la línea media que anclaba los enormes [[músculos temporales]] utilizados en la masticación.<ref name=Wood2004/> Al igual que otros australopitecos, el ''Paranthropus'' presentaba dimorfismo sexual, siendo los machos notablemente más grandes que las hembras. <ref name=Wood2000/><ref name=McHenry1991a/><ref name=McHenry1991b/>Tenían grandes [[dientes molares|molares]] con un revestimiento de [[esmalte dental]] relativamente grueso ([[megadoncia postcanina]]),<ref>{cite journal|first1=A. J.|last1=Olejniczak|first2=T. M.|último2=Smith|primero3=M. M.|last3=Skinner|display-authors=et al.|year=2008|title=Distribución tridimensional del esmalte de los molares y su grosor en ''Australopithecus'' y ''Paranthropus'' |journal=Biology Letters|volume=4|issue=4|pages=406-410|doi=10.1098/rsbl.2008 .0223|pmid=18522924|pmc=2610159}}</ref> y [[incisivos]]s comparativamente pequeños (de tamaño similar a los [[humanos]]s modernos),<ref>{cite journal|first1=P. S.|last1=Ungar|first2=F. E.|last2=Grine|year=1991|title=Tamaño y desgaste de los incisivos en ''Australopithecus africanus'' y ''Paranthropus robustus'' |journal=Journal of Human Evolution|volume=20|issue=4|pages=313-340|doi=10.1016/0047-2484(91)90013-L}}</ref> posiblemente adaptaciones para procesar alimentos abrasivos.<ref name=Williams2015>{{cite journal|first=F. L.|last=Williams|year=2015|title=Proclividades dietéticas del ''Paranthropus robustus'' de Swartkrans, Sudáfrica|journal=Anthropological Review|volume=78|issue=1|pages=1-19|doi=10.1515/anre-2015-0001|doi-access=free}}</ref><ref name=Wood2012>{{cite journal|first1=B.|last1=Wood|first2=K. |last2=Schroer|year=2012|title=Reconstruyendo la dieta de un taxón de homínidos extinto: el papel de los modelos de primates actuales|journal=International Journal of Primatology|volume=33|issue=3|pages=716-742|doi=10. 1007/s10764-012-9602-7|s2cid=15983306}</ref> Los dientes de ''P. aethiopicus'' se desarrollaron más rápido que los de ''P. boisei''.<ref>{cite journal|first=F. V.|last=Ramirez-Rozzi|year=1993|title=Desarrollo de los dientes en los ''Paranthropus'' de África Oriental |journal=Journal of Human Evolution|volume=24|issue=6|pages=429-454|doi=10.1006/jhev.1993.1030}}</ref>

''Paranthropus'' tenía adaptaciones en el cráneo para resistir grandes cargas de mordida mientras se alimentaba, a saber, la expansiva [[sutura escamosa]]s.<ref>{{cite journal|first1=C.|last1=Dzialo|first2=S. A.|last2=Wood|first3=M.|last3=Berthaume|display-authors=et al.|year=2013|title=Implicaciones funcionales del tamaño de la sutura escamosa en ''Paranthropus boisei'' |journal=American Journal of Physical Anthropology|volume=153|issue=2|pages=260-268|doi=10.1002/ajpa.22427 |pmid=24242913}}</ref> En su día se pensó que el [[paladar]] notablemente grueso era una adaptación para resistir una elevada fuerza de mordida, pero se explica mejor como un subproducto del alargamiento facial y de la anatomía nasal.<ref>{{cite journal|first=M. A.|last=McCollum|year=1998|title=Engrosamiento palatino y forma facial en ''Paranthropus'': Examen de modelos de desarrollo alternativos|journal=American Journal of Physical Anthropology|volume=103|issue=3|pages=375-392|doi=10.1002/(SICI)1096-8644(199707)103:3<375::AID-AJPA7>3.0.CO;2-P|pmid=9261500}</ref>

En ''P. boisei'', la [[articulación temporomandibular|bisagra de la mandíbula]] estaba adaptada para triturar los alimentos de lado a lado (en lugar de arriba y abajo en los humanos modernos), lo que es mejor para procesar los alimentos abrasivos [[almidón]] que probablemente constituían la mayor parte de su dieta. El ''P. robustus'' puede haber masticado en dirección de adelante hacia atrás, y tenía rasgos anatómicos menos exagerados (menos [[sinapomorfía y apomorfía|derivada]]) que el ''P. boisei'', ya que quizás no los necesitaba con este tipo de estrategia de masticación. Esto también puede haber permitido a ''P. robustus'' procesar mejor alimentos más duros.<ref>{{cite journal|first1=K.|last1=Kupczik|first2=V.|last2=Toro-Ibacache|first3=G. A. |last3=Macho|year=2018|title=Sobre la relación entre la forma de la raíz del molar maxilar y la cinemática de la mandíbula en ''Australopithecus africanus'' y ''Paranthropus robustus'' |journal=Royal Society Open Science|volume=5|issue=8|page=180825|doi=10.1098/rsos.180825 |pmc=6124107|pmid=30225074|bibcode=2018RSOS....580825K}}</ref>

El volumen de la caja torácica era, en promedio, de unos {{cvt|500|cm3}}, comparable al de los australopitecinos gráciles, pero menor que el del ''Homo''.<ref name=Du2018>{{cite journal|first1=A.|last1=Du|first2=A. M.|last2=Zipkin|first3=K. G.|last3=Hatala|display-authors=et al.|year=2018|title=El patrón y el proceso en la evolución del tamaño del cerebro de los homínidos dependen de la escala|journal=Proceedings of the Royal Society B|volume=285|issue=1873|pages=20172738|doi=10.1098/rspb.2017 .2738|pmc=5832710|pmid=29467267}</ref> El volumen del cerebro humano moderno tiene una media de {{cvt|1270|cm3}} para los hombres y de {{cvt|1130|cm3}} para las mujeres.<ref>{{cite journal|first1=J. S.|last1=Allen|first2=H.|last2=Damasio|first3=T. J.|last3=Grabowski|year=2002|title=Variación neuroanatómica normal en el cerebro humano: un estudio de resonancia magnética-volumétrica|journal=American Journal of Physical Anthropology|volume=118|issue=4|pages=341-358|doi=10.1002/ajpa.10092|pmid=12124914|s2cid=21705705|url=https://semanticscholar.org/paper/97ba80fc802f5e29b06959700c9905d1e17a00da}</ref>>

===Limbos y locomoción===
A diferencia de ''P. robustus'', los antebrazos de ''P. boisei'' estaban fuertemente construidos, lo que podría sugerir un [[comportamiento suspensivo]] habitual como en [[orangutanes]]s y [[gibones]]s. <ref name=McHenry2007/><ref name=Dominguez2013/><ref name=Lague2019/>Un [[omóplato]] de ''P. boisei'' indica [[músculo infraespinoso]] largo, que también se asocia con el comportamiento suspensivo.<ref>{{cite journal|first1=D. J.|last1=Green|first2=H.|last2=Chirchir|first3=E.|last3=Mbua|year=2018|title=Anatomía escapular de ''Paranthropus boisei'' de Ileret, Kenia|journal=Journal of Human Evolution|volume=125|pages=181-192|doi=10.1016/j.jhevol.2017 .06.013|pmid=30502893|doi-access=free}}</ref> Un cúbito de ''P. aethiopicus'', en cambio, muestra más similitudes con el ''Homo'' que con ''P. boisei''.<ref name=Lague2019>{cite journal|first1=M. R.|last1=Lague|first2=H.|last2=Chirchir|first3=D. J.|last3=Green|first4=E.|last4=Mbua|year=2019|title=Anatomía de las extremidades superiores del esqueleto KNM-ER 47000 de Ileret, Kenia: Implicaciones para la identificación taxonómica|journal=Journal of Human Evolution|volume=126|pages=24-38|doi=10.1016/j.jhevol.2018.06.011|pmid=30583842|s2cid=58607106|url=https://www.researchgate.net/publication/329486548}}<ref>

Los ''Paranthropus'' eran [[bípedos]]s, y sus caderas, piernas y pies se asemejan a los de ''A. afarensis'' y los humanos modernos. <ref>{cite journal |vauthors=Wood B, Richmond BG |title=Evolución humana: taxonomía y paleobiología |journal=Journal of Anatomy |volume=197 |issue=1 |pages=19-60 |date=July 2000 |pmid=10999270 |pmc=1468107 |doi=10.1046/j.1469-7580 .2000.19710019.x}}</ref><ref>{{cite journal|first1=T. M.|last1=Ryan|first2=K. J.|last2=Carlson|first3=A. D.|last3=Gordon|display-authors=et al.|year=2018|title=Carga de la articulación de la cadera similar a la humana en ''Australopithecus africanus'' y ''Paranthropus robustus'' |journal=Journal of Human Anthropology|volume=121|pages=12-24|doi=10.1016/j.jhevol.2018 .03.008|pmid=29706230|s2cid=14060188|url=https://www.repository.cam.ac.uk/handle/1810/277557}}</ref> La pelvis es similar a la de ''A. afarensis'', pero las articulaciones de la cadera son más pequeñas en ''P. robustus''. La similitud física implica una marcha similar. <ref>{cite journal |vauthors=Macchiarelli R, Bondioli L, Galichon V, Tobias PV |title=La arquitectura trabecular del hueso de la cadera muestra un comportamiento locomotor singularmente distintivo en los australopitecos sudafricanos |journal=Journal of Human Evolution |volume=36 |issue=2 |pages=211-32 |date=February 1999 |pmid=10068067 |doi=10.1006/jhev.1998 .0267}}</ref> Su dedo gordo, similar al de los humanos modernos, indica una postura del pie y un rango de movimiento similares a los de los humanos modernos, pero la articulación más distal del tobillo habría inhibido el [[ciclo de marcha bípeda|ciclo de marcha]] de los humanos modernos. Hacia 1,8 mya, ''Paranthropus'' y ''[[H. habilis]]''' pueden haber alcanzado aproximadamente el mismo grado de bipedismo.<ref>{{cite journal|first1=R. L.|último1=Susman|primero2=T. M.|last2=Brain|year=1988|title=Nuevo primer metatarsiano (SKX 5017) de Swartkrans y la marcha del ''Paranthropus robustus''|journal=American Journal of Physical Anthropology|volume=77|issue=1|pages=7-15|doi=10.1002/ajpa.1330770103|pmid=3189526}</ref>

===Altura y peso===
En comparación con la cabeza grande y robusta, el cuerpo era más bien pequeño. El peso medio de ''P. robustus'' puede haber sido {{cvt|40|kg}} para los machos y {{cvt|32|kg}} para las hembras;<ref name=Wood2000/> y para ''P. boisei'' {{cvt|50|kg}} para los machos y {{cvt|34|kg}} para las hembras. <ref name=Wood2000/>En los miembros 1 y 2 de la cueva de Swartkrans, se estima que alrededor del 35% de los individuos de ''P. robustus'' pesaban {{cvt|28|kg}}, el 22% alrededor de {{cvt|43|kg}}, y el 43% restante más que los anteriores pero menos de {{cvt|54|kg}}. En el Miembro 3, todos los individuos eran aproximadamente {{cvt|45|kg}}.<ref name=McHenry1991a/> El peso de las hembras era más o menos el mismo en los ''H. erectus'' contemporáneos, pero los machos de ''H. erectus'' eran en promedio {{cvt|13|kg|1}} más pesados que los machos de ''P. robustus''.<ref name=Susman2001>{{cite journal|first1=R. L.|last1=Susman|first2=D.|last2=de Ruiter|first3=C. K.|last3=Brain|year=2001|title=Restos postcraneales recientemente identificados de ''Paranthropus'' y del ''Homo'' temprano de la cueva de Swartkrans, Sudáfrica|journal=Journal of Human Evolution|volume=41|issue=6|pages=607-629|doi=10.1006/jhev.2001 .0510|pmid=11782111|s2cid=26326715|url=https://semanticscholar.org/paper/659ea6c4d640d1afd6e903dc9613d6f47b7a3ba0}}</ref> Los sitios de ''P. robustus'' están extrañamente dominados por adultos pequeños, lo que podría explicarse como una mayor depredación o mortalidad de los machos más grandes de un grupo.<ref name=Braga2017>{{cite journal|first1=J.|last1=Braga|first2=J. F.|last2=Thackeray|first3=L.|last3=Bruxelles|first4=J.|last4=Dumoncel|first5=J.-P.|last5=Fourvel|year=2017|title=Extendiendo el lapso de tiempo de la evolución de los homininos en Kromdraai (Gauteng, Sudáfrica): Descubrimientos recientes|journal=Comptes Rendus Palevol|volume=16|issue=1|pages=58-70|doi=10.1016/j.crpv.2016.03.003|doi-access=free}}</ref> El mayor individuo de ''Paranthropus'' conocido se estimó en {{cvt|54|kg}}.<ref name=McHenry1991a>{cite journal|first=H. M.|last=McHenry|author-link=Henry McHenry|year=1991|title=Cuerpos delgados de los australopitecos "robustos"|journal=American Journal of Physical Anthropology|volume=86|issue=4|pages=445-454|doi=10.1002/ajpa.1330860402}}</ref>

Según un estudio de 1991, basado en la longitud del [[fémur]] y utilizando las dimensiones de los humanos modernos, se estima que los machos y las hembras de ''P. robustus'' medían una media de {{cvt|132|y|110|cm|ftin|0}}, respectivamente, y los de ''P. boisei'' {{cvt|137|y|124|cm|ftin|0}}. Sin embargo, estas últimas estimaciones son problemáticas, ya que no había fémures masculinos de ''P. boisei'' identificados positivamente en ese momento.<ref name=McHenry1991b>{{cite journal|first=H. M.|last=McHenry|author-link=Henry McHenry|year=1991|title=Longitudes femorales y estatura en homínidos del Plio-Pleistoceno|journal=American Journal of Physical Anthropology|volume=85|issue=2|pages=149-158|doi=10.1002/ajpa.1330850204 |pmid=1882979}}</ref> En 2013, se estimó que un esqueleto parcial de un macho de 1,34 Ma de ''P. boisei'' tenía al menos {{cvt|156|cm|ftin|0}} y {{cvt|50|kg}}.<ref name=Dominguez2013>{{cite journal|first1=M.|last1=Domínguez-Rodrigo|first2=T. R.|last2=Rayne|first3=E.|last3=Baquedano|display-authors=et al.|year=2013|title=Primer esqueleto parcial de una especie de 1. 34 millones de años ''Paranthropus boisei'' del Lecho II, Garganta de Olduvai, Tanzania|journal=PLOS ONE|volume=8|issue=12|page=e80347|pmc=3855051|pmid=24339873|doi=10.1371/journal.pone.0080347 |bibcode=2013PLoSO...880347D|doi-access=free}}</ref>

===Patología===
El ''Paranthropus'' parece haber tenido tasas notablemente altas de [[hipoplasia del esmalte con picaduras]] (PEH), donde la formación del [[esmalte dental]] es irregular en lugar de mayormente uniforme. En ''P. robustus'', alrededor del 47% de los [[dientes de leche]] y el 14% de los dientes adultos estaban afectados, en comparación con alrededor del 6,7% y el 4,3%, respectivamente, en cualquier otra especie de homínido analizada. La condición de estos agujeros que cubren todo el diente es consistente con la dolencia humana moderna [[amelogénesis imperfecta]]. Sin embargo, dado que los agujeros circulares que cubren el esmalte son de tamaño uniforme, sólo están presentes en los [[dientes molares]], y tienen la misma gravedad en todos los individuos, la PEH puede haber sido una condición genética. Es posible que la [[región de codificación|ADN codificante]] relacionada con el engrosamiento del esmalte también los hiciera más vulnerables a la PEH.<ref>{{cite journal|first1=I.|last1=Towle|first2=J. D.|last2=Irish|year=2019|title=Un probable origen genético de la hipoplasia del esmalte con fóvea en los molares del ''Paranthropus robustus'' |journal=Journal of Human Evolution|volume=129|pages=54-61|doi=10.1016/j.jhevol.2019.01.002|pmid=30904040|s2cid=85502058|url=http://researchonline.ljmu.ac.uk/id/eprint/10289/1/Towle_Irish_JHE%202019.pdf}</ref>

Se han identificado 10 casos de [[caries dental|cavidades]] en el ''P. robustus'', lo que indica una tasa similar a la de los humanos modernos. Un molar de [[Drimolen]], en Sudáfrica, presentaba una caries en la [[raíz del diente]], algo poco frecuente en los grandes simios fósiles. Para que las bacterias creadoras de caries llegaran a esta zona, el individuo tendría que haber presentado también [[proceso alveolar#Pérdida de hueso alveolar|resorción alveolar]], que se asocia comúnmente con la [[enfermedad de las encías]]; o supererupción de los dientes, que se produce cuando los dientes se desgastan y tienen que salir un poco más para mantener una mordida adecuada, y esto expuso la raíz. Esto último es lo más probable, y la raíz expuesta parece haber causado [[hipercementosis]] para anclar el diente en su sitio. La cavidad parece haber estado cicatrizando, lo que puede haber sido causado por un cambio en la dieta o [[microbiología oral|microbioma bucal]], o la pérdida del molar adyacente.<ref name=Towle2019>{{cite journal|first1=I.|last1=Towle|first2=A.|last2=Riga|first3=J. D.|last3=Irish|display-authors=et al.|year=2019|title=Caries de raíz en un tercer molar de ''Paranthropus robustus'' de Drimolen|journal=American Journal of Physical Anthropology|volume=170|issue=2|pages=319-323|doi=10.1002/ajpa.23891|pmid=31265762|s2cid=195786562|url=https://www.biorxiv.org/content/biorxiv/early/2019/04/11/573964.full.pdf}}</ref>


== Véase también ==
== Véase también ==

Revisión del 03:49 7 ago 2022

 
Paranthropus
Rango temporal: Gelasiense-Calabriense (Pleistoceno temprano - medio)

Reconstrucción de un Paranthropus boisei (Museo de Arqueología de Westfalia)
Taxonomía
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Mammalia
Orden: Primates
Familia: Hominidae
Subfamilia: Homininae
Tribu: Hominini
Subtribu: Hominina
Género: Paranthropus
Broom, 1938
Especies

Paranthropus es un género extinto de homínidos bípedos, propios de África Oriental y meridional caracterizado por una gran robustez de la mandíbula y los molares. Los Paranthropus (parántropos o australopitecinos robustos) descienden probablemente del género Australopithecus (australopitecos o australopitecinos gráciles). Algunos paleontólogos consideran, sin embargo, que los australopitecinos robustos pertenecen a Australopithecus.

Los fósiles encontrados corresponden a especies que vivieron entre 2,6 y 1,1 millones de años antes del presente, en el Gelasiense y el Calabriense (Pleistoceno temprano a medio). Se caracterizan por un aparato masticador especializado, constituido por grandes mandíbulas y molares con capa de esmalte muy gruesa, unos incisivos y caninos muy pequeños y unos premolares que se desarrollan como si se tratase de molares, y músculos faciales poderosos que se insertaban en una cresta sagital similar a la del gorila.[1]​ Sus cerebros tenían entre 410 cm³, los más tempranos y 530 cm³ el resto, eran por tanto de un tamaño inferior al de los cerebros del género Homo.

Etimología

La palabra Paranthropus fue acuñada por Robert Broom en 1938, que encontró fósiles y los clasificó en una nueva especie. Significa "al lado del hombre", y efectivamente, convivió con los Homo durante 1,5 millones de años.[2]

Especies

Se han descrito tres especies:

  • Paranthropus aethiopicus. Es la primera especie de este género (aparece hace aproximadamente 2,5 m.a). Poseía una cara especialmente maciza. Se considera que pudo dar origen paralelamente a las dos especies posteriores. Habitó en África Oriental.
  • Paranthropus boisei. Tenía una apariencia más robusta. Sus características craneales están especializadas para el consumo de vegetales duros. Presentaban un gran dimorfismo sexual, siendo mucho más grande el cuerpo del macho que de la hembra. Situado entre 2,3 y 1,2 m.a. Habitó en África Oriental.
  • Paranthropus robustus. Se caracterizaba por unos huesos especialmente gruesos. Volumen craneano de entre 500 y 530 cm³, cara alta y alargada. Piezas dentarias macizas. Situado entre 1,8 y 1,5 m.a. El Paranthropus robustus coexistió con los Homo durante un millón de años, hasta que se extinguió. Habitó en Sudáfrica.

Es de advertir que los científicos que rechazan la existencia de Paranthropus como un género diferenciado designan estas especies como Australopithecus robustus, Australopithecus boisei y Australopithecus aethiopicus.[cita requerida]

Descripción

Cráneo

El Paranthropus tenía un cráneo masivo, alto y plano, con una prominente gorila cresta sagital a lo largo de la línea media que anclaba los enormes músculos temporales utilizados en la masticación.[3]​ Al igual que otros australopitecos, el Paranthropus presentaba dimorfismo sexual, siendo los machos notablemente más grandes que las hembras. [4][5][6]​Tenían grandes molares con un revestimiento de esmalte dental relativamente grueso (megadoncia postcanina),[7]​ y incisivoss comparativamente pequeños (de tamaño similar a los humanoss modernos),[8]​ posiblemente adaptaciones para procesar alimentos abrasivos.[9][10]​ Los dientes de P. aethiopicus se desarrollaron más rápido que los de P. boisei.[11]

Paranthropus tenía adaptaciones en el cráneo para resistir grandes cargas de mordida mientras se alimentaba, a saber, la expansiva sutura escamosas.[12]​ En su día se pensó que el paladar notablemente grueso era una adaptación para resistir una elevada fuerza de mordida, pero se explica mejor como un subproducto del alargamiento facial y de la anatomía nasal.[13]

En P. boisei, la bisagra de la mandíbula estaba adaptada para triturar los alimentos de lado a lado (en lugar de arriba y abajo en los humanos modernos), lo que es mejor para procesar los alimentos abrasivos almidón que probablemente constituían la mayor parte de su dieta. El P. robustus puede haber masticado en dirección de adelante hacia atrás, y tenía rasgos anatómicos menos exagerados (menos derivada) que el P. boisei, ya que quizás no los necesitaba con este tipo de estrategia de masticación. Esto también puede haber permitido a P. robustus procesar mejor alimentos más duros.[14]

El volumen de la caja torácica era, en promedio, de unos 500 centímetros cúbicos (0,5 L), comparable al de los australopitecinos gráciles, pero menor que el del Homo.[15]​ El volumen del cerebro humano moderno tiene una media de 1270 centímetros cúbicos (1,3 L) para los hombres y de 1130 centímetros cúbicos (1,1 L) para las mujeres.[16]​>

Limbos y locomoción

A diferencia de P. robustus, los antebrazos de P. boisei estaban fuertemente construidos, lo que podría sugerir un comportamiento suspensivo habitual como en orangutaness y giboness. [17][18][19]​Un omóplato de P. boisei indica músculo infraespinoso largo, que también se asocia con el comportamiento suspensivo.[20]​ Un cúbito de P. aethiopicus, en cambio, muestra más similitudes con el Homo que con P. boisei.Error en la cita: Error en la cita: existe un código de apertura <ref> sin su código de cierre </ref>[21]​ La pelvis es similar a la de A. afarensis, pero las articulaciones de la cadera son más pequeñas en P. robustus. La similitud física implica una marcha similar. [22]​ Su dedo gordo, similar al de los humanos modernos, indica una postura del pie y un rango de movimiento similares a los de los humanos modernos, pero la articulación más distal del tobillo habría inhibido el ciclo de marcha de los humanos modernos. Hacia 1,8 mya, Paranthropus y H. habilis' pueden haber alcanzado aproximadamente el mismo grado de bipedismo.[23]

Altura y peso

En comparación con la cabeza grande y robusta, el cuerpo era más bien pequeño. El peso medio de P. robustus puede haber sido 40 kilogramos (88,2 lb) para los machos y 32 kilogramos (70,5 lb) para las hembras;[4]​ y para P. boisei 50 kilogramos (110,2 lb) para los machos y 34 kilogramos (75,0 lb) para las hembras. [4]​En los miembros 1 y 2 de la cueva de Swartkrans, se estima que alrededor del 35% de los individuos de P. robustus pesaban 28 kilogramos (61,7 lb), el 22% alrededor de 43 kilogramos (94,8 lb), y el 43% restante más que los anteriores pero menos de 54 kilogramos (119 lb). En el Miembro 3, todos los individuos eran aproximadamente 45 kilogramos (99,2 lb).[5]​ El peso de las hembras era más o menos el mismo en los H. erectus contemporáneos, pero los machos de H. erectus eran en promedio 13 kilogramos (28,7 lb) más pesados que los machos de P. robustus.[24]​ Los sitios de P. robustus están extrañamente dominados por adultos pequeños, lo que podría explicarse como una mayor depredación o mortalidad de los machos más grandes de un grupo.[25]​ El mayor individuo de Paranthropus conocido se estimó en 54 kilogramos (119 lb).[5]

Según un estudio de 1991, basado en la longitud del fémur y utilizando las dimensiones de los humanos modernos, se estima que los machos y las hembras de P. robustus medían una media de 132 y 110 centímetros (4' 4" y 3' 7,30"), respectivamente, y los de P. boisei 137 y 124 centímetros (4' 529/32" y 4'4/5"). Sin embargo, estas últimas estimaciones son problemáticas, ya que no había fémures masculinos de P. boisei identificados positivamente en ese momento.[6]​ En 2013, se estimó que un esqueleto parcial de un macho de 1,34 Ma de P. boisei tenía al menos 156 centímetros (5' 12/5") y 50 kilogramos (110,2 lb).[18]

Patología

El Paranthropus parece haber tenido tasas notablemente altas de hipoplasia del esmalte con picaduras (PEH), donde la formación del esmalte dental es irregular en lugar de mayormente uniforme. En P. robustus, alrededor del 47% de los dientes de leche y el 14% de los dientes adultos estaban afectados, en comparación con alrededor del 6,7% y el 4,3%, respectivamente, en cualquier otra especie de homínido analizada. La condición de estos agujeros que cubren todo el diente es consistente con la dolencia humana moderna amelogénesis imperfecta. Sin embargo, dado que los agujeros circulares que cubren el esmalte son de tamaño uniforme, sólo están presentes en los dientes molares, y tienen la misma gravedad en todos los individuos, la PEH puede haber sido una condición genética. Es posible que la ADN codificante relacionada con el engrosamiento del esmalte también los hiciera más vulnerables a la PEH.[26]

Se han identificado 10 casos de cavidades en el P. robustus, lo que indica una tasa similar a la de los humanos modernos. Un molar de Drimolen, en Sudáfrica, presentaba una caries en la raíz del diente, algo poco frecuente en los grandes simios fósiles. Para que las bacterias creadoras de caries llegaran a esta zona, el individuo tendría que haber presentado también resorción alveolar, que se asocia comúnmente con la enfermedad de las encías; o supererupción de los dientes, que se produce cuando los dientes se desgastan y tienen que salir un poco más para mantener una mordida adecuada, y esto expuso la raíz. Esto último es lo más probable, y la raíz expuesta parece haber causado hipercementosis para anclar el diente en su sitio. La cavidad parece haber estado cicatrizando, lo que puede haber sido causado por un cambio en la dieta o microbioma bucal, o la pérdida del molar adyacente.[27]

Véase también

Referencias

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Bibliografía

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