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Usuario:Yeseniazarate/Taller

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Fauna silvestre en zonas urbanas[editar]

La fauna silvestre en zonas urbanas se caracteriza por la interacción con en el hombre en todos los aspectos, disponibilidad de espacio, de alimento, depredadores entre otros aspectos. La fauna silvestre urbana incluye diversos grupos de animales como los son las aves, mamíferos pequeños, anfibios, reptiles, entre otros. El grupo de los insectos tienen una función muy importante en la cadena alimentaria, estos son presas para las aves y otros grupos de animales.

La mancha urbana ha tenido un crecimiento tanto territorial como demográficamente, causando impactos ambientales que afecta la fauna silvestre urbana que se ha adaptado a estos hábitats. Una de las limitantes con las que se encuentra la fauna silvestre para sobrevivir y/o expandirse son: el ruido de la ciudad, la contaminación, el tránsito de personas y vehículos, entre otras. Un factor de los cuales entra en conflicto para la expansión de la fauna urbana, es el desarrollo socio-económico que ejerce grandes presiones y procesos de fragmentación sobre los ecosistemas, limitando los espacios que necesita la fauna. La fauna que habita en las zonas urbanas ha tenido un proceso de adaptación que ha conllevado grandes retos que les impone constantemente la transformación de sus hábitats.

FAUNA SILVESTRE[editar]

La fauna silvestre son todas las especies de animales incluyendo vertebrados e invertebrados que habitan de forma libre y fuera de control del hombre. Por lo tanto, fauna urbana está compuesta por animales que se encuentran dentro de un hábitat urbanizado, pero aún no están domesticados o son asilvestrados y se encuentran sujetos al proceso de selección natural.[1]

Los animales que sobreviven en la ciudad han tenido que adaptarse a determinados cambios en sus hábitos, y dependen de sus estrategias u oportunidades para conseguir su alimento, e incluso terminan modificando radicalmente sus hábitos alimenticios.

Un grupo de animales que son de los mejor adaptados en el medio urbano son las aves, por medio de su movilidad les permite no sufrir tan directamente los efectos de la urbanización. Los grupos de animales que son relativamente pequeños dentro de las zonas urbanas son los mamíferos y reptiles.

IMPORTANCIA DE LA FAUNA URBANA[editar]

Se ha extinto muchas especies de animales, algunas otras se encuentran en la categoría de amenazada y otras en peligro de extinción. Debido a la intensa persecución que el hombre les ha dado con fines diversos, para comida, como fuente de comercio y, de manera notable, por la destrucción de sus hábitats. Sin embargo, el criterio de recurso natural inagotable ha cambiado y afortunadamente en la actualidad sabemos que la fauna debe de ser explotada en forma racional y se le está dando la importancia debida, al menos reconocemos en nuestros días que los animales silvestres tienen valor desde muchos puntos de vista como el estético, económico, comercial y cinegético entre otros. [2]

Valor estético. Este valor satisface a la vista de las personas que observan la belleza de lo que nos provee la naturaleza. La espiritualidad y el sentimiento que genera.

Valor comercial. Este se refiere al valor de las especies más bonitas o diferentes que son del agrado de las personas y se pueden vender, aunque la mayoría de los casos es ilegal.

Valor económico. Este valor es el que los animales que pueden afectar la economía del país.

Función de la fauna urbana

Se define por función la capacidad del ecosistema de llevar a cabo los procesos básicos de transferencia de energía, nutrientes, agua y CO2. Las funciones se desglosan en procesos secundarios del ecosistema: producción primaria, producción secundaria, descomposición, ciclo de nutrientes, hidrología, desarrollo y fertilidad del suelo y perturbación.

Todas las especies de animales cumplen con una función en cada hábitat, aunque también esto depende del tipo de grupo de animal o del tipo de especie que este sea y si no están cumpliendo una función que les beneficien ellos emigran del lugar.


LA CIUDAD COMO ECOSISTEMA Y HÁBITAT ANIMAL[editar]

Las ciudades afectan a las especies autóctonas, a las que a veces despoja completamente de su hábitat natural. El progreso urbanístico estimula la completa transformación del ambiente a través del impacto de la vegetación natural, la hidrología, la producción primaria y el clima. La mancha urbana a escala global es grande, las ya que las áreas urbanas cubren más de 4,7 millones de km2, lo que supone un 4% de la superficie de la Tierra . Cada día va en aumento la urbanización territorial en todo el mundo, principalmente las personas prefieren las áreas donde existe mayor biodiversidad, lo que causa reducir sus impactos sobre la naturaleza.

Las consecuencias del desarrollo urbanístico son los cambios de la riqueza de especies en estas áreas, la abundancia de individuos de especies y la composición biótica. En general, la proliferación reduce la riqueza de especies de muchos taxones diferentes, aunque algunas especies son favorecidas de nuevos hábitats. Esto tiende a aumentar la proporción del número de especies invasoras.

Disponibilidad de alimento para la fauna en la ciudad

Alimento[editar]

La vegetación con la que cuentan las ciudades provee de muchos alimentos para diferentes especies de animales silvestres. Cada tipo de árboles, arbustos y plantas pioneras nos benefician de muchos tipos de semillas y diferentes frutos para alimentarse la fauna silvestre urbana.

También es fácil encontrarla en las aceras, parques y jardines: como pueden ser restos de comida. Los basureros constituyen una fuente importante de alimento para la fauna. Sin embargo, a ellos acuden mayoritariamente especies oportunistas.



Refugio[editar]

El hábitat de vegetación es un refugio muy importante para la fauna urbana, que gracias a cada uno de los recursos que nos provee la naturaleza es aprovechada para anidar o poder cuidarse de los depredadores, para dormir, para alimentarse y muchas cosas más que cada uno de las especies llaman refugio u hogar.  La fauna también usa algunos lugares como los espacios abandonados, áreas inacabadas, o simplemente jardines, parques y áreas verdes.

Clima[editar]

En las zonas urbanas varían en algunas áreas el clima por la presencia de la urbanización. Los elementos importantes que determinan el clima son: la temperatura, humedad y vientos.[3]

La temperatura es el primero de sus elementos. La diferencia de temperatura entre la ciudad y sus alrededores aumenta 1 C° cada vez que la población se multiplica por 10, Oke (1973). Este aumento es debido principalmente a la alta proporción de energía secundaria, la modificación de las características de absorción de las superficies urbanas, y el menor efecto refrigerador. [4]

El grado de humedad en las ciudades es menor por la disminución de la evapotranspiración, al ser menores las superficies de zonas verdes. Se ve favorecida la formación de nubes por la condensación provocada por la contaminación atmosférica. Michel Hough en su libro Naturaleza y ciudad la evapotranspiración en el campo corresponde, como media, al 40% del agua precipitada, mientras que en la ciudad sólo al 25%. En el campo el 50% de la precipitación va a los freáticos subterráneos, mientras que en la ciudad sólo el 32%. Respecto a la escorrentía, en el campo, como media es un 10% mientras que las conducciones se encargan de encauzar el 30% del agua precipitada en las ciudades (a lo que hay que añadir un 13% de aguas sucias). [5]

Las condiciones del régimen general de vientos se ven completamente modificadas por la presencia del tejido urbano, con zonas de densidades variables, posibles canalizaciones de vientos a lo largo de las calles, espacios libres y zonas verdes diseminados y edificaciones en altura que pueden hacer variar tanto la dirección como la velocidad de las corrientes de aire.[6]

Suelo[editar]

El suelo es un espacio vivo que sirve para el desarrollo de la vida animal y vegetal en zonas no urbanizadas y que en la ciudad constituye el soporte físico sobre el que se asientan todos los usos urbanos. A lo largo de la historia de las ciudades, éstas han ido modificando su relación con las características iniciales del suelo, pasando de la necesidad originaria para la alimentación de los ciudadanos, al concepto actual con un equilibrio acuífero y ambiental diferente.[7]

La gran contaminación de las ciudades provoca tales desajustes en la actividad del suelo que sus características de amortiguación y filtrado no son suficientes para evitar la concentración de metales pesados, cloro, nitratos, y la presencia de otros contaminantes que van a parar a las aguas subterráneas. El estrato cultural, formado por los escombros y residuos de las actividades humanas, es completamente improductivo y afecta a grandes áreas circundantes de las zonas urbanizadas.

Por otra parte, las ciudades se caracterizan por grandes modificaciones en la topografía del terreno, con terraplenados y desmontes ajenos al sistema de evacuación superficial de las aguas, y que sólo atienden a la necesidad de conseguir plataformas horizontales, o con pendientes muy pequeñas aptas para los usos urbanos. Incluso la creación de colinas y elevaciones con materiales de derribo y desechos procedentes de la construcción, así como vertederos de basuras, modifican a veces de forma sustancial el paisaje topográfico de las ciudades y sus alrededores.[8]

PROTECCIÓN Y CONSERVACIÓN DE LA FAUNA URBANA[editar]

Existen iniciativas para la protección y la conservación de la fauna urbana. Una de las iniciativas es la realización de campañas de educación ambiental con el objetivo de la salvaguardia de especies de animales que viven en las zonas urbanas. Se realizan campañas de divulgación sobre la importancia del funcionamiento ecosistémicos que cumplen las aves, los murciélagos, iguanas, lagartijas, entre otras más.

En algunas ciudades los ayuntamientos cuentan con instalaciones como parques, aviarios, acuarios, zoológicos y otros sitios similares, que además de sus objetivos turísticos también cuentan con nuevas tareas para la recuperación y crianza de las especies amenazadas, que después de haber concluido el proceso se re-introduce al medio natural. De igual manera, las instalaciones son utilizadas como recursos de investigación y para la investigación ambiental de las personas.

  1. «Fauna silvestre en México: uso, manejo y legislación.». 
  2. «Fauna silvestre en México: uso, manejo y legislación». 
  3. «Naturaleza Urbana». 
  4. «Naturaleza Urbana». 
  5. «Naturaleza Urbana». 
  6. «Naturaleza Urbana». 
  7. «Naturaleza Urbana». 
  8. «Naturaleza Urbana».