Usuario:PalomaPeña/Taller

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Cristo en casa de sus padres (1849-1850). Es una pintura realizada por John Everett Millais entre 1849 y 1850. Se trata del primer tema religioso importante de Millais. El título se relaciona con la cita de un pasaje bíblico.[1]

“Y uno le dirá: ¿Cuáles son esas heridas en tus manos? Entonces él responderá: "Aquellos con los que fui herido en la casa de mis amigos". (Zac. 13: 6)”[2]

Dimensión; 86.4 cm × 139.7 cm (34.0 in × 55.0 in). Artista: John Everett Millais. año:1849-1850

Contexto de la obra[editar]

Es una de las obras artísticas más polémicas del siglo XIX puesto que se representa a la sagrada familia como una familia de clase baja y porque la mano de Jesús se encuentra lastimada por un accidente laboral. Este representación se relaciona con la crucifixión y los estigmas de las manos del mesías. Millais, quien se inspiró en un sermón de la Alta Anglicana en Oxford para realizar esta pintura.

Las obras de Millais se caracterizaban por tener muchos detalles en ellas sus pinturas. Buscando en si su belleza y su complejidad, sobre el mundo pictórico y perfecto. Sí no lo era, el hacía que lo pareciera. Y convierte la pintura en un hecho espiritual. esta obra se caracterizó por los simbolismos ocultos en ella. La carpintería que tiene como fondo se baso en una carpintería real en Oxford Street, por eso lo desordenado y todos los detalles plasmados en ella. Las ovejas plasmadas al fondo quieren, para poder pintarlas fue a una carnicería haciendo que las extrajeran de sus cuerpos. La imagen de José es el retrato de su padre, pero su cuerpo estaba basado en un verdadero carpintero, asimismo se muestra sus brazos delgados, pero se puede apreciar perfectamente los músculos por el esfuerzo y el trabajo. María fue representada a partir de una prima del mismo pintor. Juan el Bautista es un retrato del primo de Millais y Cristo era el hijo de un amigo del pintor.[2]

Claramente las caras nos muestran que no parecen ser la gente que vivió en Tierra santa cuando nació Cristo, los rasgos no corresponden. En el cuadro central aparece la Virgen María y el niño Jesús. Pero este niño de entre ocho y diez años que al estar en el lugar de trabajo de su padre se lastima. Previamente se observa que José deja de hacer su trabajo y suelta las herramientas para ver que le había pasado a Jesús y consolarlo. Pero la generalidad de la artista proyecta en la herida como mencionamos varias veces lo que es la crucifixión y cae una gota de sangre a su pie a si mismo da el mismo mensaje. Son varios factores y atrevimientos del autor.[3]

La obra tuvo tanta controversia entre la gente que se pidió que se llevara al palacio de Buckingham para poder idolatrarla. “Cristo en casa de sus padres” que a pesar de las controversias previamente saltó a la fama de la hermandad. El artista representó este contexto en obras posteriores. Esta obra también queda una complejidad entre el realismo y la modernidad por eso causo un carácter crítico ante varias referencias. Parece ser que el beso que le da su madre es el beso de la muerte. También se dice que es la prisión y la muerte de Cristo. En la pintura María ve a Cristo como objeto de veneración. También se hace una apreciación científica. La composición se separa a lo que realmente es la sagrada familia. Teniendo como base un esquema compositivo del renacimiento que se derivan en varios cuadros. Hace alusión al cuadro: “El hallazgo del salvador en el templo de hunt”  puesto que en ella sé que también rodea a Jesús y de varios elementos simbólicos ya que se inspiró nuevamente en ello.[2]

La actitud de María adquiere y se toma como triste por ver a su hijo herido. Y toma el lugar que otros no pudieron tomar nuevamente al sufrir por él, y sentir lo que él siente. Millais se basa en el entorno de la vida cotidiana de Jesús y, así, quiere transformar escenas usuales en imágenes religiosas; quiere hacer esta conjugación perfecta para rodear una imagen central con símbolos de las escrituras bíblicas que sirvan para ubicarla en un tiempo y espacio privilegiado y sagrado. La tipología del cuadro es en sí misma un realismo iconográfico e iconológico muy complejo y lleno de grandeza imaginativa, tomando en cuenta el contexto posterior del misterio. Donde se desarrollan y se establecen eventos tradicionales que nos permite asimilar lo que quiere decir dicha pintura. La academia real muestra que hubo ataques de creatividad hacia esta pintura ya que es muy notable para su época.[2]

Descripción  [editar]

En la pintura se puede observar a Santa Ana, Juan el bautista y un aprendiz de carpintero en el taller de San José. En el centro de composición de la obra se muestra al niño Jesús y a María vestidos con una túnica blanca larga. Parece que Jesús le ayuda a san José a las tareas de la carpintería. Pero se muestra la pequeña mano lastimada. Su mamá ve la herida y trata de curarlo con un beso.[4]

beso de María a Jesús.

El pintor recrea la futura pasión de cristo por los estigmas en las manos. Posteriormente se encuentra a la derecha un niño más grande que Jesús, que trae un cazo al parecer de barro lleno de agua, para lavar la herida; es el agua que cura y el agua que hace renacer. Se encuentra con un pantalón corto al parecer muy viejo y amarrado con una cuerda. Sin camisa y con la mirada hacia abajo. Esto nos permite ver que es Juan el Bautista.[4]

El artista vuelve a jugar con los símbolos donde conecta la figura de Jesús con su futuro bautismo y se representa el agua como el bautismo. Del otro lado de la mesa, San José deja de hacer su trabajo para atender la herida de su hijo. Se muestra un hombre claramente mayor, el cual posee una camisa roja con las mangas hacia arriba. Al fondo del taller sobre una escalera se muestra una paloma que simboliza al espíritu santo que hace acto de presencia desde el principio. Paralelamente se encuentra lo que parece ser José y la abuela de Jesús, por su aspecto de una persona mayor. Su cabeza está cubierta con lo que parece ser un pañuelo. Se muestra agachada viendo el clavo que le hizo la herida a Jesús; a la espalda de ella se muestra un rebaño de ovejas. Otro de los símbolos que se puede apreciar que es el creyente. El cordero de dios que quita el pecado del mundo. Posteriormente se encuentra el aprendiz, esa figura lo que nos representa al espectador. Los pies de Jesús se muestran descalzos y con una pequeña cortada. Esto muestra o quiere dar a entender que son unos estigmas.  debe haber parecido una desviación seria de las imágenes religiosas.[4]

Referencias[editar]

  1. Nicolau Castro, Juan (30 de septiembre de 2003). «Los sepulcros del Cardenal Fray García de Loaysa y sus padres en el Monasterio dominico de Talayera de la Reina». Archivo Español de Arte 76 (303): 267-276. ISSN 1988-8511. doi:10.3989/aearte.2003.v76.i303.275. Consultado el 6 de diciembre de 2019. 
  2. a b c d Tate. «‘Christ in the House of His Parents (‘The Carpenter’s Shop’)’, Sir John Everett Millais, Bt, 1849-50». Tate (en inglés británico). Consultado el 6 de diciembre de 2019. 
  3. Salvalc82 (13 de mayo de 2014). «La Memoria del Arte: Cristo en casa de sus padres, de John Everett Millais». La Memoria del Arte. Consultado el 6 de diciembre de 2019. 
  4. a b c «Millais's “Christ in the House of His Parents”». www.victorianweb.org. Consultado el 6 de diciembre de 2019.