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Venerable Madre Humilde del Niño Jesús

Humilde Patlán Sánchez, (Rancho de la Concepción, Guanajuato, el 17 de marzo de 1895) religiosa de vida activo contemplativa, fue bautizada el 27 de mayo del mismo año con el nombre de María Patricia Magdalena. Sus padres Eleno Patlán y Cruz Sánchez. Tuvo una infancia llena de buenos ejemplos. Sus primeros años de estudio los realizó en el internado de las Hermanas Carmelitas Misioneras de Santa Teresa. Ingresó a la Congregación de Hermanas Franciscanas de la Inmaculada Concepción, el 17 de febrero de 1912. Al recibir el hábito, el día 18 de mayo de ese mismo año recibió el nombre de Sor Humilde Patlán del Niño Jesús de Praga. El 25 de mayo de 1913 hizo sus votos de pobreza, castidad y obediencia y el 26 de febrero de 1920 hizo su consagración perpetua.

Biografía

Nacimiento

Nació en La Concepción del Mineral de la Luz, Guanajuato, el 17 de marzo de 1895. Sus padres fueron Eleno Patlán y  Cruz Sánchez. Tuvo dos hermanos: Cipriana y Ceferino.

Recibió las aguas del bautismo en la Parroquia “Santa Ana”, Guanajuato, el 27 de mayo del mismo año, de manos del presbítero Refugio Murillo. En el bautismo recibió el nombre de María Patricia Magdalena. Fueron sus padrinos don Telésforo Herrera y doña Josefa Vargas.[1]

El Sacramento de la Confirmación lo recibió en la Basílica Colegiata de “Nuestra Señora de Guanajuato”, Guanajuato, el 17 de marzo de 1900; de manos del  Obispo Santiago de la Garza​ y Zambrano. Fue su madrina las señorita Juana Pérez.

Infancia

Al morir Eleno Patlán, Cruz Sánchez recogió a María Patricia Magdalena  de casa de sus suegros, quienes se oponían a entregarla, pues la tenían ocupada como pastorcita ayudando a cuidar el rebaño de la familia. Posteriormente recogió también a Cipriana  juntamente con el hermano pequeño, los llevó a la Ciudad de México, en donde buscó y encontró trabajo. Instalada en el Barrio de Peralvillo, con sus tres hijos, a  María Patricia Magdalena la internó con las madres Carmelitas de Santa Teresa.

Educación

María Patricia Magdalena estudió en el internado con las madres Carmelitas de Santa Teresa, donde se distinguió por su aplicación, inteligencia, orden y piedad, así lo escribe quien fuera hija adoptiva de la señora Cruz Sánchez, siendo su maestra la madre Margarita Diéguez, posteriormente Superiora General de su Congregación. Con las mencionadas hermanas estudió durante los años de 1904 a 1910, los primeros años de Educación Primaria.

Al cumplir los trece años María Patricia Magdalena, es invitada por las Carmelitas a ingresar en su congregación, pero, tanto ella como su mamá declinaron la invitación; por lo cual María Patricia Magdalena se vio en la necesidad  de abandonar el internado y dedicarse a trabajar en una fábrica de corchos, juntamente con su madre y hermanos.

Ingreso a la Congregación -  etapas de Formación

• El 17 de febrero de 1912, a los 16 años y 11 meses de edad, ingresó a la Congregación de Terciarias Franciscanas, ​actualmente su título oficial es de Hermanas Franciscanas de la Inmaculada Concepción​, en la 4a Calle de La Constancia N° 78, en la Colonia Peralvillo, donde también vivía la familia Patlán Sánchez; siendo aceptada por la madre general de ese entonces la madre  Clara del Carmen Aguilera.
• El 18 de mayo de 1912, ingresó al noviciado y vistió el hábito de manos de la madre general sor Clara del Carmen Aguilera y, como delegado del Arzobispo de México, el padre fray Leonardo Martínez, OFM​., recibiendo el nombre de sor Humilde del Niño Jesús de Praga.​
• El 25 de mayo de 1913, hizo la profesión religiosa. La ceremonia tuvo lugar a las 7:00 a.m. en el Oratorio de la 4ª Calle de La Constancia N° 18, celebrando el Vicario de Monjas el canónigo Pedro Benavides.​
• El día 26 de febrero de 1920, fue admitida a los votos perpetuos después de seis años cinco meses de votos simples.

Cargos

• Siendo novicia asumió el encargó de dirigir todas las ceremonias del oficio, actividad que desempeñó con gran acierto, modestia y rectitud;

• Desempeñó también el apostolado de la enseñanza con las niñas del asilo, que estaban en la misma casa.​
• Con motivo de la persecución religiosa de 1914, la superiora general Clara del Carmen Aguilera dispuso que la Madre Humilde Patlán Sánchez, pasara a la hacienda de Santo Domingo, a dar clases a unos niños.

• El 10 de octubre de 1916, la madre general María del Refugio de la Pasión Urbina, tuvo a bien nombrar el Discretorio de las religiosas Terceras Franciscanas del personal de esa fraternidad y la venerable madre fue nombrada celadora​, cuya función era ayudar a que se cumpliera la disciplina religiosa, anotando las faltas públicas.
• A principios de 1917, la madre superiora general interina Refugio de la Pasión Urbina nombró a la venerable Sierva de Dios maestra de postulantes. ​
• El 14 de noviembre de 1917, la recién elegida superiora general Refugio de la Pasión Urbina delegada por el Vicario General de Religiosas nombró a la Venerable Sierva de Dios  cuarta Consejera General. ​
• En 1921, la madre general Refugio de la Pasión Urbina nombró a la venerable madre maestra de novicias, estando anexo el noviciado a la casa general de las hermanas franciscanas.
• Ejerciendo el apostolado sin cargos de gobierno (1934-1945) El 25 de enero de 1942, la madre general Coleta Hernández,  trasladó a la Venerable Sierva de Dios de Los Ángeles, California, a la población de Guadalupe Victoria, Durango.​

Superiora General de las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada Concepción.

• Primer período 1922 - 1928

Este primer período de gobierno de la venerable madre especialmente en los últimos años (1926 – 1928), coincidieron con la fuerte persecución religiosa que vivía México conocida como Cristiada,

• Superiora General interina 1929
• Segundo Periodo 1929 - 1933
• Tercer Periodo 1945 - 1951

El tercer período de gobierno de la Venerable Sierva de Dios iniciado en 1945, se caracterizó por dos acontecimientos muy importantes para la Congregación. Primero la obtención del Decreto Laudatorio y el segundo, el Papa Pío XII, nombró  protector de la Congregación al Cardenal Nicolás Canali.  

• Cuarto Periodo 1951 - 1957

Muerte

La madre Humilde murió como vivió, una santa. Concluyó su camino de santidad con la enfermedad de la diabetes. Al desprenderse de la tierra para ir al paraíso muchas personas pensaron en esa pascua feliz y dichosa de la santa eternidad. Murió el 17 de junio de 1970 con la sencillez y serenidad con la que había vivido. Sus restos reposan en la Basílica de Nuestra señora de Guadalupe desde​ 1980.

Fama de Santidad

El ejercicio heroico de las virtudes puso en evidencia la huella de la gracia de Dios en su vida. No se puede negar que el Señor Dios miró en ella la humildad de su sierva (Lc. 1.18)​ obrando en su persona cosas grandes al estilo divino. Las vicisitudes, afortunadas y desafortunadas de la aventura terrena que ella vivió le consolidaron su camino de santidad. Fue un alma de oración, observante siempre del camino de perfección y atenta a la voluntad de Dios, tan próxima a Dios y tan manifiestamente iluminada por El para enseñar y guiar a los demás por el camino de la virtud que conduce a la santidad. Supo encontrar a Dios en el cumplimiento de sus deberes, y en las cosas pequeñas; ante las dificultades supo sacar lo mejor de ella misma, pues sabía que “la escalera al cielo se sube bajando”. Se distinguió por su generosa donación al servicio de Dios y de sus hermanas, llevando una vida virtuosa en especial la humildad y obediencia. El rumor de los favores que se recibían por su intercesión, así como al contacto de sus reliquias, las gracias que se experimentaban en ellas, la fama de su virtuosa vida, crucificada en Cristo hasta el momento de su piadosa muerte, movieron a las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada Concepción​ a pedir al señor Obispo de la Diócesis de México la introducción de la causa de canonización y recoger testimonios de los que aún vivían y que habían sido testigos oculares de sus heroicas virtudes.