Usuario:Ernalve/Taller

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Desfile de "Añoranzas Negras" en 1951 en el carnaval de Montevideo.

Añoranzas Negras fue una comparsa uruguaya de candombe, dirigida por José Antonio Lungo, que se destacó entre las “sociedades de negros y lubolos” en las décadas de 1950 y 1960. La comparsa generó numerosas innovaciones en esta categoría del carnaval uruguayo, creando nuevos personajes (vedette y partenaire) y trayendo novedades estéticas en vestuario y otros rubros. Añoranzas Negras contó entre sus integrantes a figuras destacadas de la cultura afrouruguaya como Martha Gularte, Carlos "Pirulo" Albín, Lágrima Ríos y Ruben Rada, entre otros.

Dolores "Lola" Candales (Montevideo, 1880-?) fue una bailarina y cantante de tango y músicas rioplateneses. Es reconocida por haber cantado una de las primeras canciones de tango que adquirieron fama internacional: "La Morocha", compuesta por Ángel Villoldo y Enrique Saborido.

"La Morocha" Candales era una artista multifacética, que se destacaba como intérprete de sainetes y zarzuelas criollas, los principales géneros del teatro popular de principios del siglo XX en el Río de la Plata. En un contexto étnicamente muy diverso (que incluía a inmigrantes de Europa, personas afroargentinas, indígenas y criollas) surgieron arquetipos de género y etnia como el tano, el gallego, el guapo, la percanta y la milonguita. Al respecto,



Puede decirse, en efecto, que Villoldo creó la letra del tango, pero debe agregarse también que la creó sobre el modelo de los cuplés en boga. Los cuplés entonados por las cupletistas y las tonadilleras, ya fueran españolas o criollas, comenzaban casi siempre con la frase “Yo soy”. “Soy un rayo de mi tierra”, cantaba La Goya; “Yo soy la flor y nata de los Madriles”, declaraba Pastora Imperio. La Morocha comienza “Yo soy la morocha”, y otras letras de Villoldo, “Soy el rubio más compadre”, “Soy el criollo apasionado”, etc. El modelo del cuplé fue adoptado también por diversos letristas: “Soy el taita de Barracas” escribió Silverio Manco en 1907; “Soy la pebeta apo­dada la paisana”, versificaba Julio P. Escobar, todavía en 1916. Casi todos los temas eran rufianescos: los protagonistas siempre se jacta­ban de ser óptimos bailarines, infatigables juerguistas y en algunos casos explotadores de mujeres más o menos inocentes. Los tangos cantables de Villoldo son, en su mayoría, por su letra, verdaderos cuplés malevos o cuplés de canfinfleros.

fuentes