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A pesar de que era un texto brevísimo en tres artículos, que prácticamente no podía dar lugar a discusiones, el Senado recién dio media sanción al proyecto el 21 de agosto de 1946, y hubo que esperar más de un año para que la Cámara de Diputados sancionara el 9 de septiembre de 1947 —por unanimidad— la Ley 13.010, estableciendo la igualdad de derechos políticos entre hombres y mujeres y el sufragio universal en la Argentina.[3]

[4]

  1. Resolución 26/99 del COMFER (hoy AFSCA)
  2. Resolución 1765/06 del COMFER (hoy AFSCA)
  3. La Ley 13.010 dice:
    Artículo 1.º: Las mujeres argentinas tendrán los mismos derechos políticos y estarán sujetas a las mismas obligaciones que les acuerdan o imponen las leyes a los varones argentinos.
    Artículo 2.º: Las mujeres extranjeras residentes en el país tendrán los mismos derechos políticos y estarán sujetas a las mismas obligaciones que les acuerdan o imponen las leyes a los varones extranjeros, en caso de que éstos tuvieren tales derechos políticos.
    Artículo 3.º: Para la mujer regirá la misma ley electoral que para el hombre, debiéndosele dar su libreta cívica correspondiente como un documento de identidad indispensable para todos los actos civiles y electorales.
    Véase: Historia electoral Argentina, 1912-2007. Ministerio del Interior, Subsecretaria de Asuntos Políticos y Electorales. 2008. p. 95. 
  4. Los abogados de Cristina Fernández de Kirchner pidieron la copia del expediente en el que Nisman afirmaba que el juez Claudio Bonadío, Carlos Corach y el Fino Palacios creían que él [Nisman] los había traicionado, lo seguían y planeaban amenazar a sus hijas.
    Se realiza una reseña de las relaciones que vinculan a Jorge Palacios con [el juez] Claudio Bonadío y con Carlos y Maximiliano Corach. Asimismo, se resalta la particular inquina que Jorge Palacios y [el juez] Claudio Bonadío tendrían para con mi accionar como fiscal en la investigación contra el atentado a la sede de la AMIA y las distintas irregularidades que de allí se derivaron.
    Luego de un profuso relato, se alude a una planificación de los cuatro nombrados que dataría desde fines del año 2009, que tiene por objetivo apartarme de las aludidas investigaciones y hasta terminar con mi carrera como integrante del Ministerio Público Fiscal. En particular, se hace referencia a intervenciones ilegales de mis abonados telefónicos, y seguimientos y distintas tareas de inteligencia clandestinas respecto tanto de mi persona como de mi familia. [...]
    Ante la gravedad de los hechos que han sido puestos en mi conocimiento ―donde inclusive se menciona la posibilidad de realizar actos violentos o intimidatorios contra mis hijas― solicito una amplia y profunda investigación sobre cada uno de los pormenores y personas mencionados.
    ...el juez era investigado por una amenaza contra Nisman y tiene una causa por irregularidades durante la instrucción de un expediente por el encubrimiento del atentado.
    Nisman, con el auxilio del exespía Stiuso, había denunciado hacía tiempo a Bonadío por supuestas amenazas.
    El fiscal llevaba a la justicia todo tipo de mensaje mafioso que llegaba sus manos. Entre los sospechosos se encuentran un juez [Claudio Bonadío], un dirigente judío [Agustín Zbar] y un comisario [Jorge Fino Palacios].