Usuario:Ale25rj/Taller

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Ale25rj/Taller descrita en el Códice Borgia.[1]

Nombre y significado[editar]

Itzpapálotl o Itzpapalotlcihuatl que denota “mariposa de obsidiana”, una de las principales y más importantes diosas de la cultura chichimeca . Con apariencia de esqueleto y porte tenebroso, su aspecto hace referencia a una mariposa y en sus alas portaba navajas de obsidiana, lo cual hace que la diosa adquiera un símbolo de renacimiento y regeneración.[2]


Diosa madre de la guerra, de los sacrificios humanos, patrona de la muerte y regidora del Paraíso Tamoanchan (lugar mítico, paraíso terrenal). Quien naciera bajo el día de la Diosa gozaría de una perfecta salud y tendría una larga y próspera vida.


Ya que la Diosa presentaba alas de mariposa, se le atribuye que era su nahualli, “ser en el que se transforma”. El numen representa que la fuerza y gran poder que ésta posee se encuentra en la magia. Sus manos y pies están reemplazados por garras de jaguar, esto hace que se defina como Tzitzimitl “ser terrible mítico”. El poder de Itzpapálotl se dirige hacia la mujer sabia y de edad avanzada, así mismo se exterioriza como un arquetipo divino de la bruja, maga o hechicera que ha venido a través del aprendizaje, experiencia y maestría adquirida en el transcurso de su infinita existencia.[2]

Historia[editar]

La leyenda cuenta que Itzpapálotl al ser enviada a la tierra portaba una capa que le otorgaba el ser invisible para que no fuera vista. Se suponía que la diosa se maquillaba con polvo blanco y distintos coloretes, como si fuese una dama de la Corte Mexicana.


El pectoral de la diosa Itzpapálotl representa poder y fuego, ya que es ubicada como la primer mujer en ser sacrificada ritualmente, siendo incinerada.[3]


La muerte de la Diosa se debió a la guerra, en los Anales de Cuauhtitlan se narra que, cuando los chichimecas vinieron, fueron guiados por cuatrocientos mixcoas hasta que en su travesía cayeron en poder de Itzpapálotl y ésta se comió a los cuatrocientos mixcoas. A los chichimecas que se encontraban ahí les ordenó flechar un águila roja, un tigre rojo, una culebra roja, un conejo rojo y un venado rojo; y cuando terminaran con lo ordenado les habló sobre ponerlos en manos de Xiuhtecuhtli “ el señor del año”, Huehuetéotl “dios antiguo”. Pero Iztac Mixcóatl escapó de sus manos y se escondió dentro de una biznaga.

Itzpapálotl embistió la biznaga pero Iztac Mixcóatl salió velozmente, luego la flechó repetidamente y evocó a los cuatrocientos mixcoas que habían muerto. Éstos se manifestaron y por consiguiente la flecharon una y otra vez. Itzpapálotl murió y fue quemada y con sus cenizas los guerreros se empolvaron y pintaron ojeras. La mataron para luego adorarla como Diosa. (Anales de Cuauhtitlan, 1992, p. 3).[3]


A su muerte, Itzpapálotl pasó a ser una mocihuaquetzqui, una de las estrellas que eran acompañantes del sol e hija de los dioses que regían la Vía Láctea, creadores de las estrellas, los dioses y los hombres (Histoire du Mechique, 2002, pp. 148-149).[3]

Escultura mexica en honor a Itzpapálotl[editar]

En el Museo Nacional de Antropología e Historia de la Ciudad de México, en el corredor de la Sala Mexica; existe un monumento representando a esta deidad, llamado “Piedra de Itzpapálotl”.

María de los Ángeles Ojeda Díaz es una investigadora del INAH, autora del libro “Estudio iconográfico de un monumento mexica dedicado a Itzpapálotl”, donde habla de la importancia del monumento al tratarse de una diosa sobresaliente del panteón mesoamericano. La escultura tiene forma de paralelepípedo, donde cinco de los lados representan miembros humanos relacionados con Itzpapálotl y el último, la imagen de un personaje sacrificado. Está hecha de roca andesita y mide 85 cm de altura, 43 cm de ancho y 100 cm de largo. No se sabe a ciencia cierta el lugar de origen del monumento, pero lo más probable es que se encontrara en el Templo de Cihuacóatl, ya que se sabe que los mexicas tenían a sus dioses dentro de este templo sagrado. [4]

Para analizar la escultura se utilizaron los códices de origen náhuatl, representaciones del códice Borgia y los relieves de la Sala Mexica en el Museo de Antropología e Historia. Algo de suma importancia en esta investigación fue la relación que tenía la deidad con el desmembramiento humano y otras dos nuevas representaciones que se le encontraron a Itzpapálotl, la primera es que desciende de la cultura tolteca; ya que en Hidalgo se encuentra una lápida que la presenta como una diosa de la tierra tzitzímitl y la segunda, la presenta como mocihuaquezqui en un relieve de una caja de piedra en la Sala Mexica. [4]

La importancia de la forma en cómo es representada no sólo varía en lo antes mencionado, en las representaciones de los códigos varían los elementos iconográficos, como por ejemplo; en el Códice Borbónico donde se le presenta con disfraz de águila o en el Códice Vaticano B 3773 que habla de ella como un monstruo de la Tierra o cipactli con cola larga. Todas estas características sobre Itzpapálotl convergen en la Leyenda de los Soles, donde abundan las composiciones anónimas de carácter lírico y épico. [5]

Chichimecas[editar]

Asimismo esta deidad está fuertemente asociada a las raíces de las tradiciones chichimecas, en los Anales de Cuauhtitlán, la primer parte del códice Chimalpopoca, podemos encontrarla en una actuación divina lanzando flechas hacia los cuatro rumbos del universo [6]​, como instructora de los chichimecas cuauhtitlecas para fundar Necuameyocan y como deidad adorada por Mixcóatl. El culto hacia Itzpapálotl llegó a extenderse a diferentes lugares de Mesoamérica y a lugares tan remotos como a Pochutla, Oaxaca. [4]

Mexicas[editar]

Para los mexicas esta deidad también tuvo un papel importante, ya que es posible que la hicieran su primer Tlatoani de origen culhua nombrada como “Acamapichtli Itzpapálotl”. Es representada en dos aspectos muy diferentes entres sí, uno como Tamoanchan, que la muestra sin su disfraz de mariposa y el otro que la asocia con la guerra. Existe un canto mexica que habla sobre ella en el campo de guerra:

«¿Dónde váis? ¿Dónde váis?

¡A la guerra el agua divina

allí tiñe a los hombres

Nuestra Madre Itzpapálotl,

en el campo de batalla!»

En esta cultura, también fue insignia de algunos capitanes mexicas, los cuales portaban una mariposa hecha con plumas de oro. [4]

Otomíes[editar]

Finalmente, se le asocia con el dios de los otomíes Otontecuhtli, deidad que lleva en la cabeza un ornamento sobrepuesto que representa a Itzpapálotl por tener un aspecto mortuorio.

De todas estas representaciones, específicamente en la escultura mexica del Museo de Antropología, se le identifica como diosa de la tierra por tener ojos con cejas y grandes colmillos que la relacionan con Tlaltecuhtli, deidad de la tierra; además del cuerpo de mariposa adornado con pedernales representando la muerte y la tierra, Itzpapálotl tiene brazos y manos humanos para poder permitirle sostener dos corazones, que representa el hecho de que las diosas terrestres se alimentan de éstos. El que sea representada de esta manera, destaca que es un insecto nocturno, que en estados como Chiapas, se les llama mariposas del “pu kuj”, sinónimo de destrucción y maldad. [4]

Importancia Tzitzímitl[editar]

Otro punto importante son las líneas onduladas que se perciben al fondo de la escultura haciendo alusión a Itzpapálotl, que al ser una tzitzímitl, desciende del inframundo para hacer daño al hombre. Esta diosa rige los desmembramientos humanos, ya que es un sacrificio agrícola relacionado a la tierra y en algunos mitos ella es uno de los seres que despedazan dioses y seres humanos, dedicando por estas razones el monumento mexica a esta deidad. [4]

Por último, esta deidad adquiere características agrícolas, desde que tuvo contacto con el grupo tolteca-chichimeca con el área mesoamericana, adquiriendo particularidades de otros dioses provenientes de La Huasteca.

En comparación con otras deidades, son pocos los autores que han investigado sobre Itzpapálotl, el primero fue Francisco del Paso y Troncoso que la describe como una diosa de mal agüero, sin embargo; el estudio más completo lo realizó Eduard Seler, un apasionado investigador del México antiguo que analizó iconográficamente las láminas de los códices donde aparece. Gracias a este autor se sabe de la vinculación de esta deidad con las tzitzimine. [4]

Referencias[editar código · editar]

Véase también[editar código · editar][editar]

  • Cihuacóatl
  • Tonantzin

Enlaces externos[editar código · editar][editar]

  • Una imagen de la polilla identificada con la diosa(Inglés)
  • Imágenes de otros miembros de la familia de las polillas(Inglés)

Categorías: 

  • Diosas de la muerte
  • Deidades mexicas

Referencias[editar código · editar][editar]

  1. Bodo Spranz (1975). Fondo de Cultura Económica México, ed. Los Dioses en los Códices Mexicanos del Grupo Borgia: Una Investigación Iconográfica. María Martínez Peñaloza (Traducción). México. ISBN 968-16-1029-6. 
  2. a b Ojeda Díaz, María de los Ángeles. «Las Diosa en los códices del Grupo Borgia». Las Diosa en los códices del Grupo Borgia. Consultado el 22/11/15. 
  3. a b c Aguilera, Carmen. «La lápida de Itzpapálotl». La lápida de Itzpapálotl. Consultado el 22/11/15. 
  4. a b c d e f g Ojeda Díaz, de los Ángeles María (1986). Estudio iconográfico de un monumento mexica dedicado a Itzpapálotl. INAH. 
  5. León-Portilla, Miguel (1994). Quince poetas del mundo náhuatl. Diana. 
  6. Fernández, Adela (1985). Dioses prehispánicos de México: Mitos y deidades del panteón náhuatl. Panorama.