Literatura en calmuco
La literatura en calmuco es la literatura realizada en calmuco en Kalmukia, una república de la Federación Rusa.
Con respecto a su tradición oral, con historias, leyendas, dichos y proverbios, iorels (buenos deseos), magtals (panegíricos), kharals (sortilegios) y cuentos, todos ellos cantados por los dzhangarchi (historiadores) y tulchis. En el siglo XV se compuso su canto épico, el Dzhangar calificado hoy de «monumento de la literatura mundial», de aire poético.
En 1648 el intelectual calmuco Zaya Pandit (1599-1662) creó un sistema de escritura nuevo, el todo bichig (escritura clara), habiénsose empleado anteriormente el sistema común a los mongoles, con quienes tenían una literatura común. Más tarde aparecerán nuevas obras como La luz de la luna (siglo XVII), Una historia sobre los Derben-oirats (1739) de Gaban Sharab y Viaje al Tibet (1794), entre otras.
Durante el siglo XIX destacó el autor de versos libres Ontxkhan Dzhirgal, que canta contra los invasors extranjeros y los opresores nativos. A la vez, aparecen los primeros estudios occidentales sobre la lengua y la literatura calmucas, como Grammatika kalmyckago jazyka (Gramática de la lengua calmuca, 1847) publicada por Popov en Kazán, Handwört ... Kalmuckischen sprache (1853) de H. A. Zwick, Grammatika mongolsko-kalmyckago jazyka (1849) de A. Bobordnikov en Kazán, y la Kalmycko-russkij slovar (1911) de Podznejev. En 1864 se publicó en San Petersburgo la versión rusa del Dzhangar y en 1866 la compilación de cuentos Siddi-jurt. El siguiente autor importante fue Boovan Badma (1880-1917) con el poema narrativo El placer del rumor (1916) quien criticaba los vicios de los religiosos lamaistas.
Con la sovietitzación, aparecieron numerosos autores como Kh. Kanurov (1883-1933) y N. Mandzhiev (1905-1936), autor de la crónica novelada El hijo de Mudresh (1925), que se consideran los fundadores de la literatura calmuca soviética. La tarea fue continuada por Sandzhi Kaliajev (1905); Aksen Susejev (1905) con La estepa nativa (1941); Khasyr Sian-Belgin (1909) con La estepa insurgente (1968) y las traducciones de Shevshenko y Gorkij al calmuco; Anton Amur-Sanan (1888-1939) con las novelas Aramzal (1932) y A las estepes (1935) historia de la lucha por el comunismo en la república; B. Basangov (1911-1944) con La verdad de los años pasados (1930) y Bulgun (1934); G. Davan (1913-1937), Ts. Lezhinov (1910-1942) y Konstantin Erendzhenov (1912).
En los años 30 y 40 destacaron L. Indzhiev (1913), N. Narmaev (1915), E. Kektejev (1918-1965), B. Dordzhiev (1918-1969), B. Dzhimbinov (1914), Badma Erdniev (1906-1979), autor de Siaiakala (1941); D. Kugultinov (1922), I. Matsakov (1907), P. Dzhileev (1913-1940), el dzhaigarchi M. Mukebenov (1878-1944), A. Balakaev (1928) y D. Xavaleev (1884-1959).
Durante los años 50 se inauguró una nueva etapa en la literatura calmuca, con temática centrada en el heroísmo, el trabajo y los problemas éticos. En torno a la revista Teegin Gerl (Luz de las estepas) aparecieron nuevos autores como B. Sangadzhieva (1921), M. Khoninov (1919), A. Badmajev (1924); A. Dzhimbiev (1924), T. Bembejev (1930) y David Kulgutinov (1922) con Sar-gerel (1963).