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Hebreos 12

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Epístola a los Hebreos 2:14-5:5; 10:8-22; 10:29-11:13; 11:28-12:17 en el Papiro 13 (225-250 d.C.).

Hebreos 11 es el decimoprimer capítulo de la Epístola a los Hebreos del Nuevo Testamento de la Biblia cristiana. El autor es anónimo, aunque la referencia interna a «nuestro hermano Timoteo» (Hebreos 13:23) provoca una atribución tradicional a Pablo, pero esta atribución se discute desde el siglo II y no hay pruebas decisivas de la autoría.[1][2]​ Este capítulo contiene la llamada a responder con gratitud y nobleza a la invitación de Dios.[3][4]

Texto

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El texto original fue escrito en griego koiné. Este capítulo está dividido en 29 versículos.

Testigos textuales

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Algunos manuscritos antiguos que contienen el texto de este capítulo son:

Referencias del Antiguo Testamento

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Jesús, pionero y perfeccionador de la fe (12:1-3)

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Versículos 1-2

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Por tanto, nosotros también, ya que estamos rodeados de una nube tan grande de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que tan fácilmente nos atrapa, y corramos con denuedo la carrera que tenemos por delante, 2 fijándonos en Jesús, el autor y consumador de nuestra fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios. [6]

Comentarios a los versículos 1-3

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Los ejemplos de fe de los justos del Antiguo Testamento exigen a los cristianos vivir con igual o mayor fidelidad. Si ellos perseveraron sin recibir la plenitud de las promesas, los cristianos, que ya han recibido la gracia en Cristo, no pueden ser inferiores en su compromiso y confianza en Dios.[7]

La nube de testigos (v. 1) y Cristo como iniciador y consumador vinculan este pasaje con el anterior. Cristo es el modelo y fundamento de la perseverancia mencionada en 10,36. Él encarna la obediencia perfecta, fidelidad total a su misión, unión con el Padre y paciencia en el sufrimiento. Se le compara con un atleta que corre su carrera con fuerza, generosidad y determinación, logrando la victoria sin desfallecer. Los cristianos, inspirados por su ejemplo, deben vivir con esa misma actitud. Su testimonio nos anima a soportar humillaciones y hostilidad, recordando que seguirle implica enfrentar las mismas pruebas que Él sufrió. (cf. Mt 10,24-25; Jn 15,20).[8]

¿Qué te enseña Cristo desde lo alto de la Cruz, de la que no quiso bajar, sino que te armes de valor ante los que te insultan y seas fuerte con la fuerza de Dios?.[9]

Perseverancia en las tribulaciones. Versículos 4-12

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Versículos 4-12

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4-No habéis resistido todavía hasta la sangre al combatir contra el pecado
5-y habéis olvidado la exhortación dirigida a vosotros como a hijos:
Hijo mío, no desprecies la corrección del Señor,
ni te desanimes cuando Él te reprenda;
6-porque el Señor corrige al que ama y
azota a todo aquel que reconoce como hijo.
7-Lo que sufrís sirve para vuestra corrección. Dios os trata como a hijos, ¿y qué hijo hay a quien su padre no corrija?
8-Si se os privase de la corrección, que todos han recibido, seríais bastardos y no hijos.
9-A nuestros padres según la carne los teníamos como educadores y los respetábamos. ¿Y no estaremos sujetos con mayor razón al Padre de los espíritus para alcanzar la vida?
10-Ellos nos educaban para un tiempo breve y nos castigaban según su parecer, pero Él lo hace con vistas a nuestro bien, para que participemos de su santidad.
11-Toda corrección, al momento, no parece agradable sino penosa, pero luego produce fruto apacible de justicia en los que en ella se ejercitan.
12-Por lo tanto, levantad las manos caídas y las rodillas debilitadas,
13-y dad pasos derechos con vuestros pies, para que los miembros cojos no se tuerzan, sino más bien se curen.[10]

Comentarios a los versículos 4-12

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Jesús entregó su vida por nuestros pecados, y su ejemplo nos invita a luchar contra el pecado y a perseverar en medio de pruebas y persecuciones. Las dificultades que enfrentamos son permitidas por Dios para nuestro bien, como parte de su amorosa corrección. Él, como un padre bueno, utiliza estas pruebas para educarnos, purificarnos y hacernos más santos (v. 10). Incluso una enfermedad o desgracia puede ser un medio divino para expiar pecados o asemejarnos más a Cristo. Los sufrimientos, entonces, son expresión de su amor paternal y prueba de nuestra condición de hijos, lo que nos impulsa a aceptarlos con confianza.[11]

Dios es mi Padre, aunque me envíe sufrimiento. Me ama con ternura, aun hiriéndome. (…) Y yo, que quiero también cumplir la Santísima Voluntad de Dios, siguiendo los pasos del Maestro, ¿podré quejarme, si encuentro por compañero de camino al sufrimiento? Constituirá una señal cierta de mi filiación, porque me trata como a su Divino Hijo.[12]

Búsqueda de la paz, la pureza y la piedad en el culto. Versículos 13-29

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14-Buscad la paz con todos y la santificación, sin la cual nadie puede ver a Dios.
15-Vigilad para que a nadie le falte la gracia de Dios, no sea que brote alguna raíz amarga y os perturbe y llegue a contagiar a muchos;
16-para que no surja ningún fornicario o impío como Esaú, que vendió su primogenitura por una comida.
17-Sabéis bien que más tarde, cuando quiso heredar la bendición, a pesar de pedirla con lágrimas, fue rechazado y no logró cambiar la decisión.

............

20-Porque no podían soportar la orden de que si alguien tocara el monte, aunque fuera un animal, se le apedrease.
21-El espectáculo era tan sobrecogedor, que Moisés llegó a exclamar: Estoy aterrorizado y temblando.

............

27-Las palabras una vez más indican el cambio de las cosas inestables, pues son criaturas, para que permanezcan las estables.
28-Por eso, nosotros, que estamos recibiendo un reino inconmovible, mantengamos la gracia y a través de ella ofrezcamos a Dios un culto que le sea grato, con reverencia y temor,
29-porque nuestro Dios es fuego devorador.[13]

¡Atiende a la voz de Dios! (12:25-29)

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Versículo 28

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Por lo tanto, ya que estamos recibiendo un reino que no puede ser sacudido, tengamos gracia, mediante la cual podamos servir a Dios aceptablemente con reverencia y temor piadoso. [14][15]

Comentarios a los versículos 12-29

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Se exhorta a vivir una vida fiel y ejemplar como verdadero culto a Dios (v. 28). Para reforzar esta enseñanza, se contrasta el ejemplo negativo de Esaú (vv. 14-17) con dos escenas simbólicas: la imponente revelación de la Alianza en el Sinaí y la visión gloriosa de la Ciudad celestial en el monte Sión, hogar de los ángeles y los santos (vv. 18-24). El centro del argumento es el nuevo pacto sellado con la sangre de Cristo, que purifica a toda la humanidad (v. 24).[16]

Esta sangre «habla mejor que la de Abel» , porque «éste exigía venganza mientras que la sangre de Cristo exige el perdón.[17]
Pecadores, dice esta Epístola, ¡felices de vosotros, que después de pecar acudís a Jesús crucificado, que derramó toda su sangre para ponerse como mediador de paz entre Dios y los que pecan, y recabar de Él vuestro perdón! Si contra vosotros claman vuestras iniquidades, a favor vuestro clama la sangre del Redentor, y la divina justicia no puede menos de aplacarse a la voz de esta sangre.[18]

La responsabilidad de los creyentes es inmensa. Pablo, citando a Hageo (v. 26), establece un paralelo entre el temblor de la tierra en el Sinaí, al instaurarse la «Antigua Alianza», y el temblor tanto de la tierra como del cielo en la Nueva Alianza (cf. Mt 27,51-52). Mientras que la Antigua Alianza requería obediencia y temor (vv. 20-21), la Nueva demanda una unión más profunda con el Señor (v. 25) y una vida en la gracia que sea un verdadero culto a Dios (v. 28).[19]

Usos

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Música

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Bobby McFerrin basó la letra de la canción «Discipline» de su álbum de 1990 Medicine Music' en varios Versículos de este capítulo. [20][21]

Véase también

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Referencias

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  1. Attridge, 2007, p. 1236.
  2. deSilva, 2005, p. 201.
  3. Attridge, 2007, pp. 1253-4.
  4. deSilva, 2005, p. 203.
  5. a b deSilva, 2005, p. 202.
  6. Hebreos 12:1-2 Nueva Biblia del rey Jacobo
  7. Facultad de Teología. Comentarios a la Sagrada Biblia: Universidad de Navarra (p. 10405). EUNSA Ediciones Universidad de Navarra
  8. Facultad de Teología. Comentarios a la Sagrada Biblia: Universidad de Navarra (p. 10406). EUNSA Ediciones Universidad de Navarra
  9. Agustín de Hipona, Enarrationes in Psalmos 70,1
  10. Facultad de Teología. Sagrada Biblia: Universidad de Navarra (pp. 3720-3721). EUNSA Ediciones Universidad de Navarra.
  11. Facultad de Teología. Comentarios a la Sagrada Biblia: Universidad de Navarra (p. 10407). EUNSA Ediciones Universidad de Navarra.
  12. Josemaría Escrivá, Via Crucis 1,1
  13. Facultad de Teología. Sagrada Biblia: Universidad de Navarra (p. 3722). EUNSA Ediciones Universidad de Navarra.
  14. Hebreos 12:28 RVR
  15. Gill, John. Exposición de toda la Biblia - Hebreos 12:28
  16. Facultad de Teología. Comentarios a la Sagrada Biblia: Universidad de Navarra (p. 10408). EUNSA Ediciones Universidad de Navarra.
  17. Tomás de Aquino, Super Hebraeos, ad loc.
  18. Alfonso María de Ligorio, Práctica del Amor a Jesucristo 3
  19. Facultad de Teología. Comentarios a la Sagrada Biblia: Universidad de Navarra (p. 10409). EUNSA Ediciones Universidad de Navarra.
  20. Bentoff, Jeff (23 de noviembre de 1990). «Buena `Medicina' El cantante McFerrin está contento con su nueva dirección». Milwaukee Sentinel (Feature). p. 16. 
  21. Swedin, Karen Boren (30 de enero de 1991). deseret.com/1991/1/30/18903313/mcferrin-shines-forth-by-dancing-to-music-within «McFerrin brilla bailando con la música que lleva dentro». Deseret News. 

Bibliography

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  • Attridge, Harold W. (2007). «75. Hebrews». En Barton, John; Muddiman, John, eds. The Oxford Bible Commentary (first (paperback) edición). Oxford University Press. pp. 1236-1254. ISBN 978-0199277186. Consultado el February 6, 2019. 
  • deSilva, David A. (2005). «Hebrews». En Evans, Craig A., ed. Bible Knowledge Background Commentary: John's Gospel, Hebrews-Revelation. The Bible Knowledge Series (illustrated edición). Colorado Springs, Colo.: Victor. pp. 199-256. ISBN 9780781442282. 

Public Domain Este artículo incorpora texto de esta fuente, que es de dominio público: Gill, John. Exposition of the Entire Bible (1746-1763). 

Enlaces externos

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