Diferencia entre revisiones de «Fuerza Aérea de Chile»
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Las diversas fotografías dan cuenta de los cambios experimentados en el material de vuelo y en el vestuario de los aviadores chilenos a lo largo de la segunda mitad del siglo XX. De ha tratado de ordenar cronológicamente estas imágenes, que constituyen una parte muy pequeña de la memoria visual de la Fuerza Aérea de Chile. Se pueden apreciar en las fotografías los viejos uniformes de cuello cerrado del cuadro permanente, que se utilizaron hasta mediados de los años 50, y las gorras blancas de los oficiales de antaño. Asimismo se observan los Fairchild PT 19 B, los versátiles ''Catalina'', los antiguos uniformes de campaña, el recordado y entrañable T-37 ''Tweety Bird'', la antigua torre de control de la Base Aérea El Bosque, hoy reconstruida, algunos objetos, piochas y otros distintivos que se utilizaron en el período señalado. |
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Revisión del 19:05 5 nov 2009
| Fuerza Aérea de Chile | ||
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| Activa | 21 de marzo de 1930 - presente | |
| País |
 Chile | |
| Rama/s | Aérea | |
| Tipo | fuerza aérea | |
| Parte de | Fuerzas Armadas de Chile | |
| Insignias | ||
| Símbolo de identificación |
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| Cultura e historia | ||
| Lema | «quam celerrime ad astra» (Cuan raudo hacia las estrellas) | |
| http://www.fach.cl/ | ||
La Fuerza Aérea de Chile (FACh) es la rama aérea de las Fuerzas Armadas de Chile. Desarrolla labores de control, seguridad y defensa en uno de los espacios aéreos más grandes (31,9 millones de km²) del mundo. Su actual Comandante en Jefe es el General del Aire Ricardo Ortega Perrier.
Misión
Su misión es defender a la República de Chile por medio del control y explotación del espacio aéreo, participar en la batalla de superficie apoyando a fuerzas propias y amigas, con el propósito de contribuir al logro de los objetivos estratégicos que la política nacional le fija a las Fuerzas Armadas.
Historia
La Fuerza Aérea fue creada como rama independiente de la defensa volar como aweonaovisionario de su fundador, el Comodoro Arturo Merino Benítez, quien en 1928 se había hecho cargo de la Escuela de Aviación Militar. Se convirtió en el primer Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea (1930 -1931 y 1932) y primer Subsecretario de Aviación. El Comodoro del Aire Merino Benítez se preocupó de organizar diversos aeródromos a lo largo de Chile, particularmente hacia el norte del país para servir las necesidades de la aviación civil y de la propia Fuerza Aérea.
En su desarrollo histórico se marcan dos grandes etapas: la influencia alemana, desde 1930 a 1940 aproximadamente y la estadounidense desde la Segunda Guerra Mundial hasta fines de la segunda mitad del siglo XX. Hoy en día, la influencia alemana sólo se ve reflejada en el uso de algunos uniformes, sables y marchas utilizadas en desfiles y ceremonias. La influencia estadounidense ha sido de mayor importancia para la formación de los aviadores chilenos. Ella es notoria en diversos ámbitos, tácticas, entrenamiento, aspectos organizativos y otros.
Acciones bélicas
La Fuerza Aérea chilena sólo ha participado, a lo largo de su historia, en dos acciones bélicas. Concretamente, en dos bombardeos relacionados con situaciones políticas internas del país.
El primer bombardeo, ocurrido en 1931, fue un ataque contra la escuadra chilena estacionada en el puerto de Coquimbo. Las naves de la Armada se encontraba bajo el control de la marinería sublevada, que reclamaba por la rebaja de sueldos y la grave situación económica del país. El gobierno concentró casi todos sus aviones en la vecina ciudad de Ovalle: 2 bombarderos pesados Junkers R-42, 14 bombarderos livianos Curtiss Falcon y Vickers Type 116 Vixen, 2 aviones de ataque Vickers-Wibault Type 121 y 2 transportes Ford 5-AT-C, estos últimos alistados como improvisados bombarderos. Anteriormente el gobierno había comisionado a la FAN la misión de impedir que se reuniera la flotilla que operaba en las costas del sur (que no contaba con artillería antiaérea), con el grueso de la escuadra. La FAN, no ubicó a sus blancos en el mar, por lo que se puso en duda su efectividad. Aun así, se le ordenó atacar a la escuadra en su fondeadero, lo que realizó el 6 de septiembre a las 17.00, con la intención de concentrar sus bombas sobre el acorazado Latorre. El resultado material del bombardeo fue únicamente un impacto en el submarino Quidora, que dejó un muerto y un herido. Cinco aviones fueron alcanzados por fuegos de la escuadra, pero pudieron volver a su base, mientras que un Curtiss Falcon fue seriamente alcanzado, capotando en La Serena. Sus dos tripulantes salvaron con vida.
La segunda acción ocurrió durante el golpe militar del 11 de septiembre de 1973, en contra del presidente Salvador Allende. Desde el aeropuerto Carriel Sur de la ciudad de Concepción -500 km al sur de Santiago- despegaron cuatro cazas Hawker Hunter, armados cada uno con 32 cohetes Sura. El objetivo principal fue el bombardeo del palacio presidencial de La Moneda, donde se encontraban el presidente y un grupo de resistencia. El edificio fue atacado con precisión por dos de los aviones y comenzó a arder. El vuelo se completó con incursiones en contra de seis antenas de radio, propiedad de emisoras partidarias del gobierno, y un ataque a la casa particular de Allende en calle Tomás Moro, en la comuna de Las Condes, durante el cual uno de los pilotos confundió el blanco y disparó cuatro cohetes sobre el hospital de la propia Fuerza Aérea, sin causar víctimas.[cita requerida]
Desde 1973 a 1990, la FACh desarrolló tecnología propia para autobastecerse, lo que trae como resultado la fabricación, de aviones de entrenamiento tales como los T-35 Pillán.
Operaciones destacadas
Como hitos en materia operaciones logísticas, la Fuerza Aérea destaca la llamada Operación Atlante (1974): el traslado de seis cazas Hawker Hunter (en dos bandadas de a tres) desde el Reino Unido a Chile por sus propios medios. El vuelo requirió de hacer una media docena de escalas, repartidas entre Europa, África, la Isla Ascensión y Brasil.
Otra operación destacada fue la llamada Manu Tama’I' (1998), que consistió en un vuelo a la Isla de Pascua por parte de aviones F-5. Para realizar la travesía, los cazas debieron ser reabastecidos de combustible en aire, con la ayuda de un Boeing KC 707.
La FACh también tiene amplia experiencia en vuelos sobre la Antártica. Allí mantiene, desde 1969, una base permanente (Base Presidente Eduardo Frei Montalva).
Atlante
Uno de los sucesos más notables en la historia de la Fuerza Aérea de Chile, fue la “Operación Atlante”. Ésta permitió traer en vuelo desde el Reino Unido a Chile, seis aviones Hawker Hunter, sin reabastecimiento de combustible en el aire, demostrando la alta capacidad profesional del personal de la Institución.
Tras la compra de aeronaves al Reino Unido, en 1974, y debido a que ese gobierno había ordenado embargar el armamento adquirido por Chile, el Alto mando institucional estimó que la única posibilidad de adelantarse a esa orden, era trayendo los aviones en vuelo. Por esto se asignó al Grupo de Aviación Nº7, apoyado por el Grupo de Aviación Nº10, la misión de traer en vuelo desde el reino Unido, seis de estos aviones, en dos bandadas de tres, sin reabastecimiento en el aire.
El histórico crucero comenzó en la Base Lyncham, en Londres y las primeras etapas comprendieron el espacio aéreo de Reino Unido, Francia, Canal de la Mancha, España (Sevilla y las Islas Canarias).
La travesía continuó con escalas técnicas en Dakar y Monrovia, con el objetivo de aterrizar en la Isla Ascensión, en mitad del Atlántico. El arribo a esta isla se produjo de noche y en aviones que no tienen luces para tales efectos, por lo que los pilotos demostraron su destreza y permitieron que los 500 habitantes de la isla vieran posarse, por primera vez, un reactor monomotor. Desde ahí vino el gran salto a Recife, Brasil.
Las últimas etapas de este viaje lo constituyeron Río de Janeiro, Asunción y Antofagasta, llegando a la Base Aérea “Los Cerrillos” el 26 de enero, siendo recibidos en una sobria pero muy emotiva ceremonia.
Un mes más tarde se repitió la experiencia. El éxito de esta misión, fue destacable como la primera, dejando de manifiesto el sobresaliente trabajo en equipo de pilotos y mecánicos chilenos.
Estrella Polar
La Operación “Estrella Polar”, llevada a efecto en noviembre de 1984, tenía como objetivo principal efectuar el primer vuelo de la Fuerza Aérea de Chile con aterrizaje en el Polo Sur, el que debería realizarse con medios propios y apoyo logístico institucional.
En esos años, la política del Gobierno consideraba aumentar el grado de penetración en todo el Continente Antártico. Por esto, durante 1984 la institución trabajó con mucho esfuerzo para alcanzar las metas fijadas y aumentar las capacidades que permitieran evidenciar la presencia de la Fuerza Aérea en las tareas de soberanía y desarrollo de la Antártica Chilena.
El punto culmine se produjo con esta misión, en la que dos aviones Twin Otter llegaron al Polo Sur. Para concretar el ambicioso proyecto, la institución se preparó, desde el punto de vista operativo, instalando en los aviones, sensores para trabajos en la nieve y efectuando un mantenimiento especial y completo a los aviones Twin Otter designados a volar hacia el Polo Sur. Además se entrenaron las tripulaciones y se adquirió y perfeccionó el equipo terrestre, especialmente de comunicaciones, radioayudas y meteorológico. Junto con esto, se efectuaron prácticas de navegación estelar en rutas polares, una de las más difíciles, por la cercanía del Polo magnético.
El éxito de la operación “Estrella Polar” colocó al país en un honroso sitial de vanguardia ante la opinión pública mundial.
Hielo Azul
Desde los años 90, la Fuerza Aérea de Chile ha tenido como objetivo el estar presente en cada rincón del territorio chileno. Es así como, con la idea de profundizar el conocimiento en la zona de Campos de Hielo Sur y Norte, establecer un campamento, operar y hacer soberanía, se materializó la Operación Hielo Azul.
Para esto, comandos del Regimiento de Artillería Antiaérea prepararon el terreno y habilitaron el campamento y el 11 de enero de 1996, en Campos de Hielo Sur aterrizaban los Twin Otter de la FACh. Durante 10 días, personal institucional realizó una serie de trabajos científicos, así como vuelos sobre el sector, afianzando la presencia chilena en ese sector. Nueve meses más tarde se efectuó la Operación “Hielo Azul II” se efectuó, con las mismas características de la anterior.
El logro de estas operaciones llevó a la realización en octubre de 1997 de una tercera misión, denominada “Hielo Azul III”. En ella, junto al personal institucional, viajó un grupo de científicos y periodistas, quienes vivieron en terreno el trabajo de la FACh en la zona. Durante cuatro días permanecieron en Campos de Hielo Sur, tiempo durante el cual fueron sobrevolados por aviones de combate de la IVª Brigada Aérea.
Un año más tarde, en septiembre de 1998, se efectuó la operación “Hielo Azul IV”, la que, a diferencia de las anteriores, consideró actividades científicas y de soberanía simultáneas en la zona de Campos de Hielo Sur y Norte. Esta vez más de 200 personas, además de científicos y periodistas, permanecieron en la zona durante cuatro días.
La realización de las operaciones Hielo Azul, no sólo permitió dar a conocer este territorio prácticamente inexplorado, entrenando y profundizando la investigación científica; sino que además fue clave para consolidar la integración cívico militar.
Manu Tara
Dentro de las operaciones que la Fuerza Aérea de Chile ha realizado, la «Manu Tara» -que consistió en el primer vuelo de aviones de combate a Isla de Pascua-, se ha convertido en una de las más importantes, tanto por lo inédito de la operación, como por la exigente preparación que requirió para sus participantes.
Durante un año se estudió la factibilidad de concretar esta iniciativa, la cual permitiría a la FACh llegar en el menor tiempo posible a lugares muy distantes, a través de una nueva capacidad incorporada en los aviones F-5 “Tigre III”, el reabastecimiento en vuelo.
Así, el 12 de enero de 1998 se concretaba esta idea, cuando una bandada de estos aviones de combate, reabastecidos en el aire a través de un Boeing KC 707 «Águila», volaban por primera vez hacia la lejana Isla de Pascua, desde Antofagasta, cubriendo una distancia de casi 4 mil kilómetros en aproximadamente cinco horas y media de viaje.
En términos generales, el reabastecimiento es un procedimiento que consiste en que dos mangueras de unos 15 metros de largo se extienden desde cada una de las puntas de las alas del avión tanquero. Dichas mangas tienen en sus extremos dos «canastos» los que actúan como embudos. De esta forma, a una velocidad de aproximadamente 800 km/h, los F-5 se acercaron a estos canastillos e introdujeron en ellos una toma de combustible que sobresale del fuselaje, a un costado de la cabina.
El esfuerzo que significó la planificación y realización de la Operación Manu Tama'I dio una gran satisfacción no sólo en la Fuerza Aérea sino al país entero, al contar con una institución capaz de realizar con éxito operaciones de gran magnitud.
Misiones de Paz
UNIKOM
Misión de Observación de las Naciones Unidas para Irak y Kuwait
En 1991 la humanidad fue testigo del Conflicto del Golfo. Finalizada la guerra, la Organización de Naciones Unidas, ONU, asumió el control de la zona desmilitarizada y decidió enviar contingente para garantizar la paz en la región.
Para materializar esta actividad, conocida como «Tarea Paz Chile I», NU solicitó a Chile la participación de tripulaciones y helicópteros de la Fuerza Aérea de Chile. Durante el periodo que duró la misión, cerca de 200 miembros de la institución, con helicópteros UH-1H, efectuaron misiones de reconocimiento, observación, enlace, transporte y evacuaciones aeromédicas.
UNSCOM
Comisión Especial de las Naciones Unidas
La enriquecedora experiencia adquirida en 1991 sentó las bases para que, cinco años más tarde, Naciones Unidas formulara una nueva petición, esta vez para relevar al destacamento alemán que operaba en la ciudad de Bagdad. El despliegue fue hacia la República de Irak con una participación total de alrededor de 250 hombres y 5 helicópteros Bell UH-1H.
La agrupación «Tarea Paz Chile II» tuvo la misión de apoyar con sus aeronaves el trabajo de ubicación y eliminación de la totalidad del armamento de destrucción masiva de tipo químico, bacteriológico y nuclear como también la destrucción de misiles de alcance superior a los 150 km y efectuar evacuaciones aeromédicas.
UNMOGIP
Grupo de Observadores Militares de las Naciones Unidas en India y Pakistán
Creado en 1949, el UNMOGIP fue desplegado en enero de ese año para supervisar el alto el fuego acordado entre India y Pakistán en el Estado de Jammu y Kashmir. Luego del acuerdo entre ambos países, alcanzado en 1972, India postula que la labor de la ONU ya terminó, cosa que Pakistán no aceptó.
Por su parte, el Secretario General de dicho organismo señaló que esta misión no puede cesar hasta que haya una determinación del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, el que no se ha producido y la misión continúa. Actualmente, la Fuerza Aérea de Chile participa en esta misión con un oficial que se desempeña como observador militar.
MOMEP
Misión de Observadores Militares Ecuador-Perú
Tras la guerra del cenepa entre Ecuador y Perú ocurrido el año 1995, los países que habían sido garantes del Tratado de Río de Janeiro de 1942, instaron a la partes a firmar el “Acuerdo de Itamaray” en el que se formalizó el alto al fuego y donde ambos países aceptaban una misión de observadores militares.
La MOMEP tuvo como objetivo desarrollar actividades de observación y supervisión del cese del fuego, la separación de las fuerzas, la desmilitarización y la desmovilización en el área del conflicto. Chile, al igual que los demás países garantes, envío efectivos de las tres instituciones de la Defensa Nacional -entre ellas la Fuerza Aérea-, quienes cumplieron las tareas de mantener la paz en la zona de la Cordillera del Cóndor. Esta Misión, culminó en 1999, tras poco más de cuatro años de actividad ininterrumpida.
MINUSTAH
Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití.
Tras los conflictos políticos y sociales vividos en Haití y a solicitud de la Organización de las Naciones Unidas, el gobierno de Chile dispuso el envío de un contingente y aeronaves de la Fuerza Aérea de Chile a la convulsionada isla caribeña en junio de 2004.
Actualmente (2009), personal y 4 helicópteros UH-1H de la Institución se encuentran efectuando misiones de enlace, traslado de tropas y evacuaciones aeromédicas en Haití, ubicando su base de operaciones en la capital, Puerto Príncipe, a un costado del Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture.
Actualidad
En el 2008 la Fuerza Aérea de Chile acordó la compra de aeronaves EMB-314 Súper Tucano, las cuales llegarán en 2009, y otra partida más de F-16 para reemplazar al F-5 Tigre III. Según informaciones confirmadas por la institución, la FACh adquirirá KC-135 Stratotanker como avión cisterna, ya que el Boeing 767 que adquirió hace pocos meses, será usado solo como transporte.
Actividades
La Fuerza Aérea de Chile ha desarrollado desde su creación actividades de apoyo a la comunidad y de integración del territorio nacional. Por ejemplo, es una de las primeras ramas de la defensa nacional en establecer bases en el Territorio Chileno Antártico (Base Presidente Gabriel González Videla, 1952 y Base Presidente Pedro Aguirre Cerde,1955). Asimismo, es memorable el desempeño de FACh en las catástrofes naturales que son recurrentes en la larga geografía chilena. Un ejemplo de lo anterior es el puente aéreo que tendió la FACh con motivo del terremoto de 1960. Por otra parte, la fuerza aérea chilena ha sido pionera en abrir nuevas rutas aéreas sobre el Pacífico sur. En este ámbito destaca el vuelo llevado a cabo por Roberto Parragué y su tripulación entre La Serena e Isla de Pascua en 1951. Durante los gobiernos del presidente Ricardo Lagos y de la presidente Michelle Bachelet, la FACh ha participado con su personal y material de vuelo, en misiones de paz de la ONU, como la de Haití.
La rama aérea de la defensa nacional chilena desarrolla diversas actividades de difusión, por ejemplo, son frecuentes en los cielos de Chile las presentaciones de su actual escuadrilla de alta acrobacia «Halcones» y su escuadrilla de paracaidismo «Boinas Azules».
Otros organismos y actividades:
Himno
La marcha Camaradas fue compuesta por quien fuera Comandante en Jefe de la institución entre los años 1955 y 1961, Diego Barros Ortiz, y el músico chileno Angel Cerutti.
Wikisource contiene obras originales de o sobre Fuerza Aérea de Chile.
Material aéreo
El material aéreo utilizado por la Fuerza Aérea de Chile a lo largo de su vida institucional refleja las diversas influencias que Latinoamérica ha sufrido desde los primeros años del siglo XX en adelante. En los años previos a la Segunda Guerra Mundial, Chile adquirió material de aéreo en Alemania e Italia. Por ejemplo, llegaron al país aviones FockeWulf F-44, bimotores Junkers JU-86 K y aeronaves Breda Ba-65 y Nardi. Durante los años de la guerra y los años de la Guerra Fría, el alto mando institucional dispuso la adquisición de material de vuelo en Estados Unidos (influenciado por la presencia de este en la región y las facilidades de adquisición) como el AT-6 North American, el C-45 Beechcraft y el Catalina PBY-5 entre otros. Durante la comandancia en jefe del General del Aire Armando Ortiz Ramírez (1952-1959) se integran los aviones jet DH-115 Vampire, material aéreo de origen inglés, y los primeros helicópteros Bell 47D de fabricación estadounidense. A fines de la década de 1950, Chile recibió de Estados Unidos los aviones de reacción F-80 Shooting Star y T-33. Más tarde, hacia 1964, se integró el cazabombardero Hawker Hunter MK 71. Material de vuelo que fue asignado al Grupo de Aviación Nº7. A principios de la década de 1980 se integran al inventario de la FACh aviones Mirage 50 de origen francés. Un hito en la historia aeronáutica de Chile es la incorporación del monomotor T-35 Pillán. Esta aeronave de instrucción básica fue diseñada y construida íntegramente en Chile por la Empresa Nacional de Aeronáutica (ENAER). En dicho proyecto esta factoría recibió la cooperación de la Piper Aircraft Corporation.
F-16, un hito en la institución
F-16, un hito en la institución F-16 en FIDAE 2006 En 2005, la Fuerza aérea de Chile incorpora a su línea de vuelo 10 unidades de combate multirol modelo F-16 C/D Block 50/52 Plus fabricados por la Lockheed Martin. Estas unidades fueron adquiridas de fábrica, y tienen incorporada la más reciente tecnología de defensa aérea y ataque en profundidad especializado, siendo unidades de combate modernas y poderosas. El modelo Block 50 Plus tiene una serie de mejoras respecto a otros bloques más antiguos como los A/B. Para complementar a los modernos F-16 C/D Block 50 Plus se decide la incorporación de 18 unidades de F-16 MLU de segunda mano desde Holanda, como una forma de estandarizar la flota y reemplazar las plataformas de combate Mirage V «Elkan». Estos F-16 han sido llevados al estándar MLU (Mid Life Upgrade) en los Países Bajos, sometidos al programa de actualización Pacer Amstel. Además de éste y el MLU, serán sometidos por ENAER al programa de actualización Falcon Star, modernización que le permitirá a estos cazabombarderos alargar su vida útil como también mejorar sus prestaciones de combate dejándoles a un estándar similar al Block 40, lo que le permite operar armamento sofisticado y sin problemas. Los Fighting Falcon Block 50+ (comprados bajo el acuerdo Peace Puma, nombre del programa en el cual se realizó el contrato de gobierno a gobierno para la adquisición de tecnologías nuevas para Chile por parte de EE.UU.), vienen con la última tecnología de punta, fabricados bajo las especificaciones hechas por la Fuerza aérea de Chile; por parte de la Lockheed Martin se ha incorporando a pedido de la FACH modernos sistemas de combate como los misiles BVR AIM-120C5 AMRAAM, los cuales le dan un rango de combate más allá del alcance visual, cualidad que comparten con los F-16 MLU.[1] También es importante mencionar la incorporación de armamento de ataque terrestre y naval de precisión , como las bombas SPICE y los misiles Harpoon. Chile ha expresado su intención de adquirir un tercer paquete de F-16, esta vez de 18 aeronaves, procedentes de los Países Bajos. Con esta compra se dará de baja a los F-5E Tigre III, que serán retirados a fines de 2009 de la base norteña de Cerro Moreno. Esta adquisición sumaría 16 aviones a la partida inicial de 10 f-16 C/D Block 50, que fueron comprados a Estados Unidos en más de 660 millones de dólares en el 2002. Y a la compra el año 2005 de 18 naves de segunda mano de la variante A/B MLU de los Países Bajos, a un costo de 180 millones de dólares, los cuales reemplazaron a los Mirage 5 Elkan y Mirage 50/Pantera, dados de baja hace unos años.[2] Así, con esta segunda partida de 18 F16 MLU de la versión más moderna, de los excedentes de la Real Fuerza Aérea Holandesa, por un valor aproximado de 270 millones de dólares,la Fuerza Aérea de Chile contará con 46 aviones F16 , según el gobierno con esto se permitirá una economía de costo en aspectos relacionados con la instrucción, el mantenimiento y la logística. Las aeronaves no tendrán una base fija, pero es probable que como los 28 aviones existentes están en el norte de Chile, los que se compren a los Países bajos se destinen a la zona austral del país. la Fuerza Aérea de Chile con 46 aviones F16, pasará a tener la flota aérea más poderosa de sudamérica.
Organización
Comandancia en Jefe de la Fuerza Aérea de Chile con cuartel General en Santiago
- Secretaría General con cuartel General en Santiago
- Auditoría General con cuartel General en Santiago
- Comandos de Aviación
- Comando de Combate con cuartel General en Santiago
- I Brigada Aérea con cuartel General en Iquique
- Grupo de Aviación N° 1 (24 A/T.36)
- Grupo de Aviación N° 2
- Grupo de Aviación N° 3 (F-16)
- Grupo de Defensa Antiaérea N° 24
- Grupo de Detección y Electrónica N° 31
- II Brigada Aérea con cuartel General en Santiago
- Grupo de Aviación N° 9 (1 UH-60, 10 UH-1H)
- Grupo de Aviación Nº10 (3 C-130, 1 B-767, 2 B-737, 1 KC.135)
- Regimiento de Artillería Antiaérea
- Servicio Aéreo Fotogamétrico SAF
- Escuadrilla de Alta Acrobacia "Halcones" (6 Extra.300)
- III Brigada Aérea con cuartel General en Puerto Montt
- Grupo de Aviación N° 5 (4 Citation)
- Grupo de Defensa Antiaérea N° 25
- Grupo de Detección y Electrónica N° 35
- IV Brigada Aérea con cuartel General en Punta Arenas
- Grupo de Aviación N° 6
- Grupo de Aviación N° 12 (24 A-37)
- Grupo de Defensa Antiaérea N° 23
- Grupo de Detección y Electrónica N° 33
- Grupo de Exploración Antártica N° 19
- V Brigada Aérea con cuartel General en Antofagasta
- Grupo de Aviación N° 7 (15 F-5 E/F)
- Grupo de Aviación N° 8 (F-16 MLU)
- Grupo de Defensa Antiaérea N° 21
- Grupo de Detección y Electrónica N° 34
- I Brigada Aérea con cuartel General en Iquique
- Comando Logístico con cuartel General en Santiago
- División de Mantenimiento con cuartel General en Santiago
- División de Abastecimiento con cuartel General en Santiago
- División de Infraestructura con cuartel General en Santiago
- Comando de Personal con cuartel General en Santiago
- División de Educación con cuartel General en Santiago
- Escuela de Aviación del Capitán Manuel Ávalos Prado
- Escuela de Especialidades
- Academia de Guerra Aérea
- Academia Politécnica Aeronáutica
- Escuela de Perfeccionamiento de SSOO
- División de Sanidad con cuartel General en Santiago
- Hospital Institucional General de Brigada Aérea Doctor Raúl Yazigi Jauregui.
- División de Bienestar con cuartel General en Santiago
- División de Recursos Humanos con cuartel General en Santiago
- División de Educación con cuartel General en Santiago
- Jefatura de Estado Mayor de la Fuerza Aérea de Chile con cuartel General en Santiago
- Dirección de Inteligencia con cuartel General en Santiago
- Dirección de Operaciones con cuartel General en Santiago
- Dirección de Logística con cuartel General en Santiago
- Dirección de Defensa Antiaérea y Fuerzas Especiales con cuartel General en Santiago
- Dirección de Telecomunicaciones con cuartel General en Santiago
- Dirección de Finanzas con cuartel General en Santiago
- Comando de Combate con cuartel General en Santiago
- Comandos de Aviación
Grados jerárquicos
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Memoria visual
Las diversas fotografías dan cuenta de los cambios experimentados en el material de vuelo y en el vestuario de los aviadores chilenos a lo largo de la segunda mitad del siglo XX. De ha tratado de ordenar cronológicamente estas imágenes, que constituyen una parte muy pequeña de la memoria visual de la Fuerza Aérea de Chile. Se pueden apreciar en las fotografías los viejos uniformes de cuello cerrado del cuadro permanente, que se utilizaron hasta mediados de los años 50, y las gorras blancas de los oficiales de antaño. Asimismo se observan los Fairchild PT 19 B, los versátiles Catalina, los antiguos uniformes de campaña, el recordado y entrañable T-37 Tweety Bird, la antigua torre de control de la Base Aérea El Bosque, hoy reconstruida, algunos objetos, piochas y otros distintivos que se utilizaron en el período señalado.
ReferenciasVéase también
Enlaces externos |
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