Diferencia entre revisiones de «Libro de los estados»

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Contenido eliminado Contenido añadido
Sin resumen de edición
m Revertidos los cambios de 66.45.240.66 (disc.) a la última edición de PaintBot
Línea 1: Línea 1:
{{PA|copyedit|wikificar|literatura|t=20090417180228}}
El '''''Libro de los estados''''' es una obra de la [[literatura medieval española]], que escribió [[Don Juan Manuel]] y se redactó entre [[1327]] y [[1332]]. Su argumento se resumen en el segundo capítulo:
El ''Libro de los estados'' se redactó entre 1327 y 1332.


Su argumento aparece ya en el capítulo II:
{{cita|(...) Conpus este libro en manera de preguntas et respuestas que fazÍan entre sí un rey et un infante su fijo, et un cavallero que crió al infante et un philósofo. Et pus nonbre al rey, Morabán, e! al infante, Johas, et al cavallero, Turín, et [al] philósofo, Julio.}}


'' (...) Conpus este libro en manera de preguntas et respuestas que fazÍan entre sí un rey et un infante su fijo, et un cavallero que crió al infante et un philósofo. Et pus nonbre al rey, Morabán, e! al infante, Johas, et al cavallero, Turín, et [al] philósofo, Julio.''
Tiene una estructura complicada de determinar, debido a los heterogéneos materiales utilizados para su composición. En principio se le concibió como ''[[espejo de príncipes]]'', aunque después se le añadió tal cantidad de materiales que se consiguió una obra más amplia. Otro factor que contribuye a esta situación es la desmañada estructura de los capítulos, probablemente hecha por un [[amanuense]].


Y unas líneas después, su tesis:
Don Juan Manuel dividió esta obra en dos libros, como se puede apreciar en el texto:


''(...) la salvación de las almas a de ser en ley e en estado.''
{{cita|Señor infante -dixo Julio-, yo tenía que pues vós sodes en estado de lego, que vos cunplía asaz lo que vos avía dicho, mas pues queredes que vos fable en los estados de la clerezía, fazerlo he segund el mío entendimiento. Mas por[que] segund lo que es escripto fasta aquí, si todo lo que pertenesçe en los estados de la clerizía se scriviese en este libro et fuese todo uno, seríe muy grant libro, et tengo que, si por bien toviéredes, que sería mejor partirlo en dos partes: la primera, que fable en los estados de los legos, pues vós sodes lego, et la [segunda, que fable en la] fazienda de los estados de la clerizía.|''Libro de los estados'', Libro I, capítulo XCIX.}}


Por lo que respecta a la estructura, es difícil de determinar por:
Los personajes tiene poca o nula participación en la trama, además de que carecen de perfil psicológico.


# La heterogeneidad de los materiales compositivos (posiblemente, el libro fuera ideado en un principio como un ''regimen principis'' al que después se le fue añadiendo nuevos materiales hasta conseguir una obra más amplia). De hecho, hay una evidente desigualdad en la ejecución de la obra, pues nos encontramos asuntos plenamente elaborados frente a otros sólo esbozados. Prueba de esto es, por ejemplo, el que en no pocas ocasiones Julio llame libro a lo que, desde su punto de vista, debe ser un diálogo.
Influenciada fuertemente por el ''[[Barlaam e Josafat]]'', esta obra incluye numerosos proverbios coloquiales, algunos ''[[exempla]]'' y referencias a la [[literatura de Alfonso X el Sabio]]''.
# La desmañada capitulación, obra, quizá, de algún copista.

Lo único que parece cierto es que Don Juan Manuel dividió su obra en dos libros y que esta decisión la tomara sobre la marcha:

''Señor infante -dixo Julio-, yo tenía que pues vós sodes en estado de lego, que vos cunplía asaz lo que vos avía dicho, mas pues queredes que vos fable en los estados de la clerezía, fazerlo he segund el mío entendimiento. Mas por[que] segund lo que es escripto fasta aquí, si todo lo que pertenesçe en los estados de la clerizía se scriviese en este libro et fuese todo uno, seríe muy grant libro, et tengo que, si por bien toviéredes, que sería mejor partirlo en dos partes: la primera, que fable en los estados de los legos, pues vós sodes lego, et la [segunda, que fable en la] fazienda de los estados de la clerizía.'' (Libro I, capítulo XCIX)

En cuanto a sus personajes, debemos notar que si bien hay diálogo a veces de hasta cuatro interlocutores, no existe la menor acción en toda la obra, pues sus actantes no tienen otro objeto que el de dar vida al pensamiento del autor. Además, carecen de desarrollo psicológico, no expresan mentalidades distintas y aun en sus preguntas y respuestas se ponen fácilmente de acuerdo para no entorpecer la línea de pensamiento.

Destaquemos como principales recursos estilísticos:

# Las constantes referencias a partes del texto ya redactadas, rasgo que debió aprender de la [http://portales.educared.net/wikiEducared/index.php?title=La_prosa_medieval#Obras_hist.C3.B3ricas historiografía alfonsí].
# La inserción de frases coloquiales (proverbios sobre todo).
# Las pinceladas de humor, que debe ser una influencia de las ''artes praedicandi''.
# El uso, aunque muy escaso, del ''exempla''.

En lo que toca a las fuentes, es conocido que la más importante -pues le presta el marco narrativo- es el ''[[Barlaam e Josafat]]''; sin embargo, hay diferencias:

# En la leyenda oriental, el joven príncipe desconoce la vejez, la enfermedad y la muerte, mientras que aquí ignora sólo la muerte, pues los otros dos símbolos no le hacen falta a Don Juan Manuel para conseguir despertar la curiosidad del joven príncipe y porque no encaja con la mentalidad del Infante la ignorancia del dolor.
# En la obra original, el flósofo y el ayo son la misma persona, hecho que va en contra de los usos medievales.


== Fuentes ==
== Fuentes ==

{{wikillerato}}
*ALVAR EZQUERRA, Carlos, y José Manuel Megías, ''La literatura en la época de Sancho IV: Actas del Congreso Internacional...'', Alcalá de Henares, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Alcalá, 1996. ISBN 84-8138-980-3.
*ALVAR EZQUERRA, Carlos, y José Manuel Megías, ''La literatura en la época de Sancho IV: Actas del Congreso Internacional...'', Alcalá de Henares, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Alcalá, 1996. ISBN 84-8138-980-3.
*DEYERMOND, Alan D., ''Historia de la literatura española, vol. 1: La Edad Media'', Barcelona, Ariel, 2001 (1ª ed. 1973). ISBN 84-344-8305-X
*DEYERMOND, Alan D., ''Historia de la literatura española, vol. 1: La Edad Media'', Barcelona, Ariel, 2001 (1ª ed. 1973). ISBN 84-344-8305-X
Línea 24: Línea 44:
*LÓPEZ ESTRADA, Francisco, y María Jesús Lacarra, ''Orígenes de la prosa'', Madrid, Júcar, 1993. ISBN 84-334-8405-2.
*LÓPEZ ESTRADA, Francisco, y María Jesús Lacarra, ''Orígenes de la prosa'', Madrid, Júcar, 1993. ISBN 84-334-8405-2.
*RUBIO TOVAR, Joaquín. ''La prosa medieval'', Madrid, Playor, 1982. ISBN 84-359-0301-X.
*RUBIO TOVAR, Joaquín. ''La prosa medieval'', Madrid, Playor, 1982. ISBN 84-359-0301-X.
{{wikillerato}}

[[Categoría:Literatura medieval de España]]
[[Categoría:Literatura medieval de España]]
[[Categoría:Libros del siglo XIV]]
[[Categoría:Libros del siglo XIV]]

Revisión del 23:06 5 jul 2009

El Libro de los estados se redactó entre 1327 y 1332.

Su argumento aparece ya en el capítulo II:

(...) Conpus este libro en manera de preguntas et respuestas que fazÍan entre sí un rey et un infante su fijo, et un cavallero que crió al infante et un philósofo. Et pus nonbre al rey, Morabán, e! al infante, Johas, et al cavallero, Turín, et [al] philósofo, Julio.

Y unas líneas después, su tesis:

(...) la salvación de las almas a de ser en ley e en estado.

Por lo que respecta a la estructura, es difícil de determinar por:

  1. La heterogeneidad de los materiales compositivos (posiblemente, el libro fuera ideado en un principio como un regimen principis al que después se le fue añadiendo nuevos materiales hasta conseguir una obra más amplia). De hecho, hay una evidente desigualdad en la ejecución de la obra, pues nos encontramos asuntos plenamente elaborados frente a otros sólo esbozados. Prueba de esto es, por ejemplo, el que en no pocas ocasiones Julio llame libro a lo que, desde su punto de vista, debe ser un diálogo.
  2. La desmañada capitulación, obra, quizá, de algún copista.

Lo único que parece cierto es que Don Juan Manuel dividió su obra en dos libros y que esta decisión la tomara sobre la marcha:

Señor infante -dixo Julio-, yo tenía que pues vós sodes en estado de lego, que vos cunplía asaz lo que vos avía dicho, mas pues queredes que vos fable en los estados de la clerezía, fazerlo he segund el mío entendimiento. Mas por[que] segund lo que es escripto fasta aquí, si todo lo que pertenesçe en los estados de la clerizía se scriviese en este libro et fuese todo uno, seríe muy grant libro, et tengo que, si por bien toviéredes, que sería mejor partirlo en dos partes: la primera, que fable en los estados de los legos, pues vós sodes lego, et la [segunda, que fable en la] fazienda de los estados de la clerizía. (Libro I, capítulo XCIX)

En cuanto a sus personajes, debemos notar que si bien hay diálogo a veces de hasta cuatro interlocutores, no existe la menor acción en toda la obra, pues sus actantes no tienen otro objeto que el de dar vida al pensamiento del autor. Además, carecen de desarrollo psicológico, no expresan mentalidades distintas y aun en sus preguntas y respuestas se ponen fácilmente de acuerdo para no entorpecer la línea de pensamiento.

Destaquemos como principales recursos estilísticos:

  1. Las constantes referencias a partes del texto ya redactadas, rasgo que debió aprender de la historiografía alfonsí.
  2. La inserción de frases coloquiales (proverbios sobre todo).
  3. Las pinceladas de humor, que debe ser una influencia de las artes praedicandi.
  4. El uso, aunque muy escaso, del exempla.

En lo que toca a las fuentes, es conocido que la más importante -pues le presta el marco narrativo- es el Barlaam e Josafat; sin embargo, hay diferencias:

  1. En la leyenda oriental, el joven príncipe desconoce la vejez, la enfermedad y la muerte, mientras que aquí ignora sólo la muerte, pues los otros dos símbolos no le hacen falta a Don Juan Manuel para conseguir despertar la curiosidad del joven príncipe y porque no encaja con la mentalidad del Infante la ignorancia del dolor.
  2. En la obra original, el flósofo y el ayo son la misma persona, hecho que va en contra de los usos medievales.

Fuentes

  • ALVAR EZQUERRA, Carlos, y José Manuel Megías, La literatura en la época de Sancho IV: Actas del Congreso Internacional..., Alcalá de Henares, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Alcalá, 1996. ISBN 84-8138-980-3.
  • DEYERMOND, Alan D., Historia de la literatura española, vol. 1: La Edad Media, Barcelona, Ariel, 2001 (1ª ed. 1973). ISBN 84-344-8305-X
  • GUILLÓN, Ricardo et al., Diccionario de literatura española e hispanoamericana, Madrid, Alianza Editorial, 1993.
  • GÓMEZ REDONDO, Fernando, Historia de la prosa medieval castellana, vol. I: La creación del discurso prosístico: el entramado cortesano, Madrid, Cátedra, 1998. ISBN 9788437616384.
  • —, Historia de la prosa medieval castellana. vol. II: El desarrollo de los géneros. La ficción caballeresca y el orden religioso, Madrid, Cátedra, 1999. ISBN 9788437617305.
  • —, Historia de la prosa medieval castellana. vol. III: Los orígenes del humanismo. El marco cultural de Enrique III y Juan II, Madrid, Cátedra, 2002. ISBN 9788437620022.
  • HARO CORTÉS, Marta, Los compendios de castigos del siglo XIII: técnicas narrativas y contenido ético, Valencia, Universitat de València, 1995. ISBN 84-370-2061-1.
  • LÓPEZ ESTRADA, Francisco, y María Jesús Lacarra, Orígenes de la prosa, Madrid, Júcar, 1993. ISBN 84-334-8405-2.
  • RUBIO TOVAR, Joaquín. La prosa medieval, Madrid, Playor, 1982. ISBN 84-359-0301-X.
El contenido de este artículo incorpora material de una entrada de Wikillerato, publicada en castellano bajo la licencia Creative Commons.