Asesinato de Alejandro Calderón

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Asesinato de Alejandro Calderón
Parte de Época del terrorismo en el Perú
Lugar Perú
Fecha 8 de diciembre de 1989
Tipo de ataque Asesinato
Perpetrador MRTA

El asesinato de Alejandro Calderón fue un acto realizado por el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) el 8 de diciembre de 1989 contra el líder asháninka. El asesinato provocó que la población asháninka se organizara en contra del MRTA hasta lograr su expulsión de la región.[1]

Acontecimientos[editar]

Alejandro Calderón era el líder de la comunidad asháninka y presidente del ANAP, una organización que agrupaba 52 comunidades asháninkas. El 8 de diciembre de 1989, miembros del MRTA bajo el liderazgo del "Camarada Ricardo"[2]​ asaltaron la localidad de Kirichari donde se realizaba celebraciones por el aniversario de la comunidad buscando a Calderón. Una vez localizado, Calderón fue trasladado a Puerto Bermúdez y a Palcazu, sin que se supiera algo de él.[3]​ Calderón fue trasladado al campamento de El Chaparral donde fue ejecutado por el MRTA tras un juicio realizado por un "tribunal revolucionario".[4]​ En un comunicado a través de Cambio, los emerretistas detallaron que:[3]

En los primeros días del mes de diciembre un destacamento guerrillero del MRTA ubicó y capturó a Alejandro Calderón Espinoza y dos de sus cómplices. Estos elementos fueron quienes, en 1965, entregaron al ejército al Comandante Máximo Velando, uno de los jefes guerrilleros del MIR. Además de su antiguo crimen, Calderón y uno de sus lugartenientes se habían convertido en la actualidad en piezas claves de las Fuerzas Armadas y sus planes para formar bandas paramilitares en la zona. Por estos delitos, un Tribunal Revolucionario del MRTA procedió a juzgar y ejecutar después a estos sujetos reaccionarios.

Debido al secuestro de Calderón, las comunidades asháninkas decidieron levantarse en contra de MRTA iniciando acciones de autodefensa bajo el liderazgo de Alcides Calderón, hijo del secuestrado.[3]​ Por su parte, la ANAP sacó un comunicado que decía:[4]

Sólo su pueblo puede juzgar a sus dirigentes y Alejandro Calderón ha sido nuestro máximo líder durante muchos años porque defendió como nadie los derechos de nuestro pueblo contra todas las injusticias y para ser libres y respetados. El organizó a nuestro pueblo contra los explotadores. Por ser hombre valiente, de posición lo han matado...

Debido a la insurrección de los asháninkas contra el MRTA, a través de Cambio la organización subversiva reconoció que el secuestro y asesinato de Calderón fue un "error táctico".[3]

Véase también[editar]

Referencias[editar]